Un cementerio singular para seguir siendo celebridad post-mortem

No solo reposa para siempre ahí la más grande diva norteamericana sino al menos un centenar de celebridades que dieron años de esplendor a Hollywood, así como algunos episodios oscuros. Un repaso al Westwood Memorial ubicado en pleno centro de Los Ángeles, un oasis de silencio a mitad de una ciudad emproblemada

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AGOSTO, 2021. Aparte de los innumerables problemas con los que carga encima, Los Ángeles es una de las urbes más ruidosas del mundo. Sin embargo en cuanto se cruzan las puertas de un recinto, llamado Westwood Memorial, el silencio impone su propio respeto. Y por una buena razón: hay quienes llaman a este sitio, "el Piere Lachaise" de Estados Unidos, esto en relación al cementerio parisino que concentra un altísimo número de figuras de la literatura, las ciencias y el entretenimiento en general, con Óscar Wilde y Jim Morrison como sus "huéspedes" más celebres.

Pareciera una exageración pero no lo es tanto si asumimos que el Westwood Memorial concentra una cantidad de celebridades por metro cuadrado que no ostenta ningún otro sitio en la tierra, situación que comenzó a darse casi desde su apertura cuando lo único que había alrededor era un enorme terreno semidesértico con las letras de HOLLYWOOD muy, muy al fondo.

Quien abrió la pauta para que el Westwood Memorial terminara siendo el preferido de muchas celebridades para cuando llegara el final, fue sin duda Marilyn Monroe, cuya lápida se estima, es visitada anualmente por unas 2 millones de personas que suelen dejarla roja por tanto lápiz labial (suerte que también corre, por cierto, la última morada de Wilde, en Pere Lachaise... bueno, antes que la aislaran con un cristal que solo permite arrojar flores). A partir de entonces, decenas de actores, actrices, cantantes, productores, directores, guionistas y demás figuras del espectáculo han ido ocupando espacios en el Westwood Memorial el cual, aunque pequeño, aún tiene capacidad para unos 2 mil inquilinos más, aunque se sabe que el 95 por ciento de los lotes ya están apartados.

Como puede uno imaginarse, el privilegio de reposar para siempre en el Westwood no es precisamente barato. Hugh Hefner, el legendario fundador de Playboy, pagó 70 mil dólares para hacerse de un espacio junto a la Monroe, más como un simbolismo dado que Marilyn fue la primera mujer que apareció desnuda en las páginas de esa revista. La página web del Westwood Memorial no incluye costos; hasta donde se sabe, para recibir esa información hay que llegar a las oficinas en calidad de recomendado por alguien que ya haya hecho un trámite similar.

Hay otras razones por las que muchas celebridades han escogido al Westwood como su lugar de reposo eterno: no hay lápidas lujosas ni extravagantes, buena parte de ellas son nichés, es decir, solo contienen las cenizas, es fácil llegar y, sobre todo, los visitantes no pierden la paciencia buscando nombres y lápidas, a diferencia de otros cementerios angelinos tan grandes que son ciudades en sí mismos y se puede pasar el día entero --más bien, el horario de oficina-- buscando a una celebridad con todo y que se disponga de localizador GPS. Y algo más: el Westwood Memorial es el preferido por los miembros de la vieja guardia de Hollywood, o lo que es lo mismo, la más talentosa y recordada de todas.

¿Y quiénes reposan para siempre en el Westwood Memorial? La lista es larguísima y contiene muchas celebridades poco conocidas fuera de Estados Unidos, como es el caso del batería prodigio Buddy Rich, o Audrey Korthoff, la madre de Brian Wilson, el vocalista de The Beach Boys. Pero un repaso rápido a sus "huéspedes" es igualmente un vistazo histórico, no siempre con un final feliz, de lo que ha sido Hollywood las últimas ocho décadas. Venga el repaso.

Además de Marilyn Monroe y Hugh Hefner, ahí también reposan Jonathan Harris, el Doctor Smith de la serie sesentera Perdidos en el Espacio. Otra figura de la TV de esos años que reposa en el Westwood es Richard Basehart, el almirante Nelson de Viaje al Fondo del Mar al igual que Jim Backus, quien encarnó al millonario Thurston Howell de La Isla de Gilligan, y fue el padre de James Dean en Rebelde sin Causa así como la voz en inglés de Mr. Magoo. También reposa en ese cementerio Bob Crane, protagonista de los Héroes de Hogan y quien muriera trágicamente en 1978 (Crane yace al lado de su esposa, quien la hacía de secretaria en esa serie).

Otros actores que hoy descansan en el Westwood y que destacaron en la televisión: Pete Falk, el aparentemente despistado pero brillante detective Columbo; Karl Malden, compañero de Michael Douglas en Las Calles de San Francisco; Robert Stack, conocido mundialmente por encarnar a Elliot Ness en Los Intocables; la bella Farrah Fawcett, sex symbol de los 70 y protagonista en Los Ángeles de Charlie, Florence Henderson, la mamá de la Familia Brady, y Carroll O'Connor, el gruñón ultraconservador de la serie Archie Bunker.

El mundo literario también tiene sus figuras en el Westwood: Jackie Collins, escritora de novelas de escándalo y hermana, por si faltara recalcarlo, de la no menos escandalosa actriz Joan Collins, y Truman Capote, aunque sus restos fueron retirados hace años y solo queda la pura lápida. Pero el autor más impresionante con que cuenta el Westwood es, sin duda, Ray Bradbury, quien escribió Fahrenheit 451 y una veintena de libros de altísima calidad.

Además del ya referido Rich, la música cuenta con otro célebre "huésped" en este peculiar cementerio: Dean Martin, miembro de los Rat Pack  y quien se ufanaba que entre más tomaba en una presentación mejor cantaba, aunque también hizo varios pininos en la actuación, entre ellos una cinta de Aeropuerto. Igualmente ahí reposa Carl Wilson, miembro de los Beach Boys y hermano del ya referido Brian Wilson, y qué decir de Roy Orbison y Frank Zappa, aunque éstos carecen de lápida y no se sabe exactamente del sitio donde están inhumados (ambos fueron cremados). Otra figura es Minnie Ripperton, quien tuvo un hit en los 70 llamado "Loving You", donde su voz alcanza timbres de soprano. Sin embargo y si hablamos de leyendas, en el Westwood Memorial también reposa ni más ni menos que Ray Conniff, el soberano de la música de supermercado de los años 60 y 70.

Además de la tragedia de Bob "Hogan" Crane, en ese cementerio también yace para siempre la bella ex Playmate Dorothy Stratten, brutalmente asesinada por su novio, un tal Paul Snyder, un tipo con serios problemas mentales y quien luego del asesinato se descerrajó un escopetazo que lo mandó al infierno. También ahí, y no muy lejos de Stratten, se encuentra Natalie Wood, cuya causa de su deceso sigue entre brumas.

Pero los actores siguen llevando la vara alta en el Westwood como inquilinos eternos: George C Scott, quien encarnó a Patton en el cine y luego rechazaría el Óscar, Walter Matthau, Kirk Douglas, inhumado apenas el año pasado, Heather O'Rourke, la niña que aparece en Poltergeist, así como Dominique Dunne, la cual hizo el papel de su hermana en esa misma cinta y quien fuera asesinada por su celoso exnovio; Richard Anderson, siempre recordado como Óscar Goldman en la serie el Hombre Nuclear; Louis Jordan, quien fuera el villano Kamal Kahn en la película Octopussy de la saga James Bond; James Coburn, protagonista de infinidad de westerns; Richard Dawson, quien también apareció en Los Héroes de Hogan; Paul Gleason, más identificable como el pedante jefe de policía en Duro de Matar a quien John McLane (Bruce Willis) le revira con un insulto impublicable; Jack Klugman, el doctor en medicina forense de la serie Quincy...

La lista sigue: Sydney Sheldon, escritor y creador de la serie Mi Bella Genio, los directores John Casavettes y Billy Wilder; Alvin Toffler, el autor del libro La Tercera Ola, el productor Geoff  Emerick, que participó en discos como Rubber Soul, de los Beatles, Jack Lemmon, el comediante Rodney Dangerfield, el de "no hay respeto, no hay respeto"...

Hay celebridades que han manifestado su intención de reposar para la eternidad en el Westwood Memorial cuando llegue el momento, entre ellas Herp Alpert, trompetista y fundador de A&M Records, lo mismo que su esposa, la talentosa Lani Hall; Michael Douglas; Quincy Jones, uno de los productores del disco Thriller de Michael Jackson; Sylvester Stallone, seguramente al lado de su hijo Sage Stallone, con quien apareció en Rocky V y falleció en el 2012, y se rumora que la misma intención tiene el actor William Shatner, el capitán Kirk de la serie Viaje a las Estrellas, aunque también se afirma que el actor tiene la intención de hacerlo cerca de su coestelar y amigo Leonard "Doctor Spock" Nimoy, cuya morada final se encuentra en el Hillside Memorial de Los Ángeles, algo muy posible dado que se trata de un cementerio judío y a que ambos nacieron dentro de esa religión.

En suma, además de encerrar infinitas memorias de lo que ha sido Hollywood, el Westwood Memorial es ideal para esas celebridades que desean seguir siéndolo aun cuando ya hayan pasado a mejor vida o, en algunas casos, a una peor de la que tuvieron en su paso por este mundo.

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