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Styx, la leyenda y la misión de su nuevo álbum

Como exponentes del mejor rock norteamericano en los setenta, tuvieron varios hits hasta que las desavenencias personales los dividieron. Con la aparición de su disco más reciente, Styx vive los mejores tiempos, aunque la ausencia de su vocalista original siempre será echada en menos

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SEPTIEMBRE, 2017. La mayoría de los grupos legendarios de los años setenta se separaron hace tiempo, otros siguen activos en el llamado oldies circuit, los hay que producen pena cuando debieron detenerse hace tiempo y los hay que siguen en activo, produciendo nuevo material. Es el caso de Styx, que apenas el mes de junio pasado lanzó a la venta The Mission, el disco 17 de su carrera, un álbum que contiene material totalmente nuevo. Al respecto dijo el líder y vocalista Tommy Shaw en una entrevista: "El hecho de que hace rato hayamos dejado de ser mainstream no significa que hayamos desaparecido. No hemos dejado de trabajar desde nuestros primeros hits. Y como bien lo han mostrado los Rolling Stones, en este negocio no existe una edad límite para jubilarse".

Si agregamos que Styx suele presentar alrededor de 100 conciertos al año, la mayoría con el boletaje totalmente vendido, muestran que la música rock está lejos de escribir su epitafio. "Alguna vez dijo Dave Grohl (ex bajista de Nirvana y quien hoy está al frente de los Foo Fighters) que escuchar a Styx fue decisivo para que comenzara a rasgar las cuerdas de una guitarra", dijo James "JY" Young, quien aparte del requinto también es tecladista del grupo. "El trabajo que hace Dave es excelente... con gente como él habrá música rock por mucho tiempo".

Al respecto dijo Garth Brooks, un cantante de country quien de adolescente también compraba discos de rock: "Grupos como Kansas, Boston, REO Speedwagon y Styx demostrarían tener una tremenda influencia en muchos de nosotros. Aún sigo preguntándome porqué ninguno de ellos está en el Salón de la Fama del Rock and Roll. Lo único que se me ocurre es pensar en el prejuicio que los miembros del jurado tienen hacia ellos..."

"Las críticas devastadoras hacia nuestros discos en realidad nunca nos afectaron en ventas entonces, y mucho menos ahora cuando ya no estamos en el candelabro", refirió Shaw. "Por otro lado, es inevitable preguntarnos si alguna vez nos llamarán al Salón de la Fama del Rock and Roll. Ciertamente es algo en lo que hemos pensado, estoy seguro".

El "hemos" tiene dedicatoria, por supuesto. "Es obvio que Dennis también sería invitado y que nos tendremos que ver las caras sobre el escenario", dijo Shaw en relación a Dennis de Young, el vocalista y principal compositor de Styx y quien salió de la organización en términos no muy amigables en 1997. "Ni 'JY' ni yo tendríamos problema alguno en tocar juntos esa noche y nada más. ¿Reunirnos otra vez para una gira u otro álbum? La verdad no me interesa. Pero bueno, primero habrá que esperar que algún día nos digan que ya somos miembros de ese salón".

Parece raro, pero los orígenes de Styx se remontan a 1961 cuando un adolescente Dennis de Young decide formar un grupo con los hermanos Panozzo, vecinos de un suburbio de Chicago. De Young había estudiado piano clásico y durante buena parte de esa década se ganó la vida como maestro de música. "Sin dificultad aprendí a tocar el teclado y el acordeón gracias a que en la familia había uno de esos instrumentos arrumbado en el ático y que perteneció a mi abuelo, quien era de origen alemán", dijo De Young al periodista de rock Gary James. El grupo interpretaba covers de los Rolling Stones y los Beatles pero durante casi una década no llegaron a nada, con excepción de la inclusión de James Young y John Kurulewski, quienes también poseían capacidades vocales.

De Young recordó como a fines de 1972 la inspiración le llegó súbitamente cuando pensaba componer una canción como regalo de cumpleaños para su esposa. La composición, llamada "Lady", pudo grabarse gracias a la firma de Styx con la disquera local Wooden Nickel. "En ese tiempo era amigo de un disc jockey de la WLS de Chicago quien se comprometió a tocarla cada noche hasta que se convirtiera en hit local, algo que sucedió a los pocos meses", dijo De Young en otra entrevista con la desaparecida publicación Song Hits. Para la grabación de Serpent, su tercer disco, Kurulewski abandonó Styx, el cual finalmente plasmó su firma con A&M, que desde hace rato había coqueteado con ellos, de manera tal que ahí lanzarían Equinox en 1975 donde Shaw se integraría formalmente. Una vez que éste comenzó a colaborar con De Young la conexión fue instantánea: "Cuando compones con otra persona debes desarrollar una intuición sobrenatural", dijo De Young al periodista James, "en aquellos años no sentía esa presión con Tommy, las cosas se iban dando como si ambos acudiéramos a la misma fuente de inspiración".

Del Equinox saldría "Lorelei", su primer hit importante al que seguiría el disco Crystal Ball, donde el grupo se inclinó más decisivamente al hard rock. "Siempre me atrajo la idea de utilizar el piano como instrumento del modo que lo había hecho Jerry Lewis y en ese tiempo lo hacía Elton John, sobre todo cuando el teclado va en la introducción, es la manera ideal de captar la atención de alguien que escucha tu canción y se pregunta qué sigue de esas notas de piano...", dijo De Young a Song Hits.

The Grand Illusion, Mr. Roboto y caída libre

Sin embargo el momento de mayor gloria de Styx se dio con The Grand Illusion, lanzado originalmente en 1977. De éste se desprendieron "(Angry Young Man) Fooling Yourself", escrita por Shaw cuando su relación con De Young estaba en su punto más tenso, cerca del rompimiento, así como el tema que da nombre al disco en cual, según De Young, "daba cuenta de cómo los medios creaban un mundo alterno muy diferente al real" así como "Come Sail Away", considerada por muchos la magnum opus de Styx. "Siempre me ha gustado escribir letras que no sean tan obvias y que obliguen a la gente a preguntarse '¿pero de qué diablos está hablando este tipo?'", dijo De Young a Song Hits en 1984.

Se ha dicho que "Come Sail Away" refiere un encuentro extraterrestre secreto, un sitio oculto donde los integrantes de reunían a fumar cosas raras --"rara vez consumíamos drogas aunque sí nos gustaba juntarnos a tomar algunas copas", dijo Shaw-- y hasta se le han atribuido el contener los infaltables mensajes satánicos. "Lo que escribo no necesariamente son experiencias personales, en ocasiones son metáforas o cosas que se me ocurren, pero mucha gente gusta de tomar las letras literalmente, supongo que no se puede evitar", dijo De Young.

Styx en los setenta (der. a izq.) De Young, John Panozzo, JY Young, Tommy Shaw, Chuck Panozzo

Su siguiente disco, llamado Pieces of Eight, siguió la misma pauta de un hard rock con inclinaciones comerciales. "Renegade" y "Blue Collar Man" fueron sus dos hits más importantes, lo que llevó a Styx a realizar una gira aunque en Europa el recibimiento, a excepción de Italia, fue más bien frío; en Canadá, en cambio, siempre se les recibió como héroes. "Uno de nuestros mejores conciertos lo tuvimos en Toronto en 1978", recordó "JY" Young, "Me sentía como en el A Hard's Day Night de los Beatles. Pero a la siguiente semana, en Paris, prácticamente nadie nos reconoció y durante el concierto no pudimos conectar con el público".

 

A principios de 1981 aparece Paradise Theatre, en el cual De Young, Shaw y "JY" Young coinciden que marcó el punto más alto de Styx. "Ese disco lo tenía todo, vodevil, cosas bohemias, clásicas, segmentos acústicos y algo de melancolía", dijo el primero mientras el segundo señaló: "Fue un excelente trabajo de cooperación". El disco arrojó los singles "Too Much Time on My Hands", "Rockin' the Paradise", "The Best of Times" y "Snowblind", coescrita por JY, el único miembro que llegó a tener serios problemas de adicción a la cocaína. Pero aún estaban enfriando los reflectores de su gira de conciertos cuando el grupo regresó al estudio de grabación para elaborar Kilroy Was Here, en parte para aprovechar el éxito monumental que MTV tenía en ese momento. Después de todo, el tercer video que apareció en la primera hora de transmisiones de MTV en 1981 fue "The Best of Times".

"La prisa por sacar ese disco al mercado resultó en que muchas de las canciones no cuajaron o no eran tan buenas", reconoció Shaw, sin embargo ese disco tuvo un tremendo éxito comercial, sin duda gracias a la promoción por MTV.

Y si a una canción mala como "Mr. Roboto" se le agrega un video igualmente malo, el resultado es desastroso. Tanto Shaw como "JY" tuvieron encontronazos con De Young para evitar que esa canción fuera incluida en el Kilroy Was Here, y de hecho han evitado presentarla en vivo. Sin embargo De Young tiene una perspectiva distinta: "Es un trabajo de rock opera, la historia de un robot que cobra vida; si esa canción fuera realmente mala, no habría sido un hit en las listas", dijo en una entrevista, con todo y que los fans más veteranos prefieren olvidar que Styx alguna vez haya grabado "Mr Roboto".

Asimismo la balada "Don't Let It End" pasó a ser el hit más importante de Styx en las listas --Kilroy Was Here incluye dos versiones distintas, por cierto-- con lo que empezó a perfilarse el temor de los otros miembros de la banda, esto es, que De Young cayera irremediablemente en el terreno de las baladas.

"Quiero dejar en claro que yo no estoy en contra de las baladas", dijo Shaw en cierta ocasión (él escribió "Boat on the River", incluida en el Cornerstone), "pero nosotros éramos un grupo de rock, y los fans nos exigían seguir siéndolo".

Tras una gira en 1984 las diferencias artísticas y personales se agudizaron de modo que cuando el tema "Party Time" aún estaba en las listas, De Young anunció que había finalizado su primer disco solista el cual apareció a principios de ese año. Medio año después Shaw hizo lo mismo, algo que oficializaba la separación de Styx.

En 1989 Shaw salió de Styx para crear Damn Yankees junto con su viejo amigo Ted Nugent. Luego de un disco que tuvo su mayor hit con "High Enough", De Young hacía lo mismo con "Show me The Way" de la cual escribió sarcásticamente el crítico Jon Pareless de The New York Times, "a (Dennis de Young) le queda tan poca imaginación que tiene que reciclar el nombre de una vieja canción de Peter Frampton..."

Ese mismo año A&M Records fue adquirida por Polygram y lo que parecía una transición suave terminó en desbandada de varios artistas, entre ellos Styx. "Anteriormente íbamos a A&M a platicar con Herp (Alpert) y John (Moss) como grandes amigos pero con los nuevos dueños había que hacer cita hasta que ellos quisieran recibirnos", recordó "JY" Young. Tales actos de insubordinación recibieron una respuesta seca por parte de Polygram, la cual anunció a Styx que "en definitiva" quedaban fuera de los planes en esa disquera (A&M cerró a los pocos años a consecuencia de malos manejos administrativos).

Otra reunión y la separación final

Pero por más exitosas que fueran las carreras solistas de Shaw y De Young, lo cierto es que estaban ganando mucho menos dinero que si trabajaran juntos en Styx. Edge of the Century marcó el retorno del segundo al grupo con lo que se reestablecía el lineup original. En 1996 se lanzaron a una exitosa gira de conciertos donde el batería Chuck Panozzo tuvo que retirarse alegando "cansancio" aunque al final se reveló que padecía cirrosis, producto de sus muchos años de alcoholismo y falleció unos meses más tarde. Poco después su hermano gemelo, el bajista Chuck Panozzo, anunció ser seropositivo. El sitio del batería para la gira fue tomado por Glen Burtnik.

La serie de conciertos fue exitosa pero al interior del grupo las tensiones fueron creciendo. "Al final de la última gira las cosas ya no eran divertidas", recordó Shaw, "no tanto durante los conciertos sino antes y después cuando la relación entre todos volvía a la realidad". En 1998 De Young ya no pudo más y abandonó Styx por segunda ocasión. "Por supuesto que a Dennis le deseamos lo mejor, es un gran talento y con él creamos música fantástica, pero ya no podríamos trabajar juntos otra vez por largo tiempo sin que empiecen a salir chispas", dijo "JY" Young.

Desde entonces Styx ha grabado varios álbumes en vivo --el bajista Panozzo los acompaña cuando puede; su salud se ha deteriorado enormemente-- producidos por diversas compañías disqueras pequeñas; asimismo hoy militan en sus filas Lawrence Gowan, Todd Sucherman y Ricky Phillips, quien realiza la labor vocal que correspondía a De Young. "En mis años de adolescente en Escocia y Canadá admiraba y escuchaba obsesivamente a Styx", dijo Phillips en una entrevista, "ni en mis sueños más descabellados habría pensado que alguna vez sería miembro de este grupo".

Por lo pronto, las expectativas en torno a The Mission, su más reciente álbum, son enormes. "Tiene el estilo característico de Styx, no dejará defraudado a nadie", señaló Shaw, algo que queda claro en temas como "The Radio Good" y "Gone Gone Gone". "Respetamos y admiramos lo que hicimos en el pasado, pero el futuro, como escribí en una de mis canciones, me parece absolutamente brillante".

 

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