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Phil Collins, Genesis, solista, filántropo y quién sabe qué más

Obligado al retiro hace algunos años, Phil Collins regresa a los escenarios, pero antes que lo haga repasemos su historial, su comportamiento y otros detalles. No se requiere chaqueta para asomarse a este texto

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SEPTIEMBRE, 2018. Aunque en su punto de máxima popularidad como solista a mediados de los 80, la imagen que se tenía de Phil Collins era la de un tipo chusco que bien pudo haberse parado sobre un escenario de stand-up, pero lo cierto es que desde entonces Collins padecía de fuertes depresiones y de un carácter sumamente inestable así como de unos brotes de mal humor que lo han llevado a terminar sus relaciones sentimentales en forma brusca.

Por si fuera poco varios fans --y algunos que dejaron de serlo-- se han quejado de que el cantante se porta áspero con ellos al momento de solicitarle un autógrafo. "En realidad lo siento. Sé que suena como una excusa pero la realidad es que pese a todos estos años aún encuentro muy difícil asimilarme a la fama", dijo Collins hace algunos años. En otras ocasiones Collins ha sido una especie de animador, poseedor de una energía imparable, como recordó Bob Geldof, el organizador de los conciertos Live Aid, efectuados en 1985. Como se sabe, Collins participó en las sedes de Londres y Nueva York: tras presentarse en la primera ciudad, de inmediato abordó un Concorde y aproximadamente 6 horas después se encontraba frente a 60 mil espectadores en Filadelfia. "Phil fue quizá el más entusiasta de todos", dijo Geldof con orgullo.

A estas alturas la carrera de quien en realidad se llama Phillip David Charles Collins lleva con justeza el título de impresionante; siete números uno en las listas, una marca que nadie más igualó en los 80; también ha producido discos para, entre otros, la ex Abba Frida Lyngstad, sus propios álbumes y el Invisible Touch, el álbum comercialmente más exitoso de Genesis. "Lo mío es solo cuestión de mucho trabajo y de estar ganando diariamente la guerra a la pereza", dijo Collins hace años, "pero eso en ocasiones trae mucha presión. Me agradaría mucho que los fans comprendieran eso".

Nacido en 1951 en la capital británica, Collins ya tocaba los tambores desde la infancia y poco después aprendió a ejecutar varios instrumentos con un método musical para leer las notas que diseñó por su cuenta También hizo pininos en la actuación siendo la más recordada una escena en A Hard Day's Night de los Beatles donde Collins aparece brevemente. El cantante también ha realizado otras incursiones en el cine, entre ellas como el asaltante de un tren, cinta inspirada en hechos reales.

Sin embargo su pasión siempre ha sido la música, en especial los Beatles: "Al igual que muchos otros chicos que alcanzaron la adolescencia en los 60 en Inglaterra, yo quedé profundamente impresionado por su música", en especial de Ringo Starr, quien le sirvió de inspiración para seguir sentando detrás de los tambores. Sin embargo Collins también domina el piano, el trombón y los sintetizadores con destreza y ni se diga su voz, inconfundible y privilegiada.

Durante la segunda mitad de lo sesenta cientos de músicos de sesión a lo largo de toda Gran Bretaña sopesaron seriamente la posibilidad de crear sus propios grupos. Eso hicieron Jimmy Page y John Paul Jones, por ejemplo, quien luego de haber trabajado con gente tan disímbola como Herman's Hermits y Donovan optaron por crear Led Zeppelin. Collins no fue la excepción y muy pronto fue convocado como baterista de varios grupos, entre ellos Flaming Youth. Finalmente en 1971 Collins se integró en forma a Genesis, un grupo cuyo principal objetivo era explotar el rock progresivo, el cual en ese entonces parecía marcar el rumbo definitivo del rock.

Uno de los miembros de Genesis era Peter Gabriel, quien gustaba de maquillarse la cara y llevar estrafalarios peinados. "Peter parecía identificarse más con la corriente glam-rock... ciertamente era un tipo bastante peculiar", recordó Collins años después. Junto con Mike Rutherford y Tony Banks, Genesis tuvo algunos hits de mediana escala en Gran Bretaña aunque el mercado norteamericano seguía siendo reacio.

Un día Peter Gabriel anunció su salida y Collins quedó en posición de asumir el liderazgo de Genesis. "Lo cierto es que el rock progresivo ya estaba perdiendo fuera y hacía falta dar un giro hacia otras cosas", recordó Rutherford mucho después. "Las cosas experimentales como las que hacían Fleetwood May, Emerson Lake and Palmer y nosotros ya no estaban funcionando y Phil tenía el perfil ideal para brincar hacia ese cambio".

Efectivamente, aunque era al batería, Collins impulsó notablemente a Genesis hacia otros derroteros los cuales finalmente les permitieron entrar a Norteamérica y ofrecer su primera gira importante. Sin embargo en 1981 Collins lanzó su primer disco solista, llamado Face Value y las cosas cambiaron radicalmente pues el éxito que tuvo con hits como "I Miss Again" y "Misunderstanding" lo convirtieron en un artista solista importante, cosa que su disquera Atlantic aplacó rápidamente, eso es, que Collins compaginaría su trayectoria solista con Genesis, grupo que entró en la congeladora durante algunos años. (Esa propuesta también la aplicaron Steve Nick y Lindsey Buckingham en Fleetwood Mac).

Por supuesto el asunto se complicó cuando salió a la venta No Jacket Required en 1984. El disco era una magnífica mezcla de géneros que incluía la irresistible "Sussudio", la suave balada "One More Night" y el single "Take Me Home". Con ese paso Collins prácticamente estaba dejando atrás a sus compañeros aunque Rutherford respondió rápidamente al reto y creó Mike + The Mechanics donde la voz principal la llevaba el ya fallecido Paul Carrack.

"Ciertamente el No Jacket Required cambió la perspectiva de las cosas", dijo Collins a Rolling Stone, "sin embargo también yo sabía que existía un compromiso con Genesis. Ya había dejado al grupo en alguna ocasión pero no pensaba hacer lo mismo nuevamente, por lo menos no a corto plazo. Mi relación con los otros tres miembros siempre ha sido de altas y bajas, pero todos disfrutamos que así sea, por más extraño que parezca..."

Live Aid, o cómo a nadie se le da gusto

Aunque llevaban una relación distante, incluso áspera ("nos habíamos tratado muy poco, y ese poco había sido suficiente", dijo Collins a Rolling Stone), cuando Bob Geldof, vocalista de The Boomtown Rats, se comunicó a su número particular para invitarlo a participar en un megaconcierto de beneficencia, Collins no lo dudó ni un segundo. "Lo que estaba sucediendo en Etiopia era una tragedia, y todos nosotros teníamos la oportunidad y la responsabilidad de ayudar a toda esa gente", dijo Collins. Y dado que al efectuarse Live Aid el cantante se encontraba en la cúspide de su popularidad, la idea de asistir a los dos conciertos más importantes comenzó a darle vueltas por la cabeza semanas antes. "¿Por qué no si yo tenía la posibilidad de hacerlo? Poco después reservé mi boleto de Concorde", agregó Collins en esa entrevista.

"Mi relación con los otros miembros de Genesis es de altas y bajas. Pudiera sonar extraño, pero los tres disfrutamos que así sea", dijo Collins

Al terminar su presentación en Londres, un helicóptero lo llevó al aeropuerto de Heathrow y veinte minutos después despegó el Concorde rumbo a Nueva York, un viaje cercano a las 6 horas y que Collins aprovechó, dijo, "para dormir con tal de llegar bien adaptado al nuevo horario"; de hecho el cantante aterrizó en Nueva York antes de la hora de su despegue en la capital inglesa. De ahí otro helicóptero lo trasladó a Filadelfia, ya en las últimas horas. "Esa fue una jornada que recordaré el resto de mi vida", refirió Collins con orgullo.

Sin embargo hubo críticas, entre ellas que el músico hubiera participado en un concierto para combatir la pobreza comprando un boleto carísimo con el fin de viajar de un continente a otro. "Siempre, siempre habrá alguien dispuesto a criticar cualquier cosa que hagas", dijo Collins con cierto enojo hace años. "Cuando se estrenó el video de 'Take Me Home' y donde aparezco recorriendo varias ciudades del mundo, se me acusó de millonario presuntuoso. Cuando los músicos nos mantenemos al margen de casos como la hambruna en Etiopía, se nos llama insensibles, y si nos involucramos somos unos snobs ansiosos de protagonismo. ¿Cómo quieren entonces que la gente vaya a vernos sobre un escenario si no nos anunciamos? Cuando entré a Genesis se me criticó, igual cuando salí, cuando me hice artista solista... Este es un lado de la fama que detesto profundamente, más aún porque esa gente que dice odiarte realmente no te conoce. Entiendo si no le simpatizas a alguien que llega a conocerte en persona, pero me desconcierta y enfurece que esa gente te odie sin saber cómo eres en realidad".

Es frecuente que, cuando se convierten en megaestrellas, muchas figuras del pop sientan la urgencia, la necesidad de convertirse en voceros y denunciantes de causas sociales, como ocurrió con Sting. Collins no resistió la tentación y grabó ...But Seriously de la cual destacó "Another Day in Paradise" y donde Collins describe con sarcasmo la vida de quienes poseen poco o nada en las grandes ciudades, un mensaje, por cierto, poco original. Varios fans criticaron esa postura, y aun colegas suyos, como Joe Jackson: "Entiendo el trabajo que ha hecho Phil. Pero seamos francos: la gente que compra discos quiere distraerse y divertirse, no quiere sermoneos".

Antithatcherista hasta el tuétano, Collins también realizó el video "Land of Confusion". Ese disco, que musicalmente es de calidad inferior al No Jacket Required, igualmente tuvo menos ventas, aunque de cualquier manera fue un éxito comercial. Lo que sí fue más que exitoso fue el disco Invisible Touch que Collins grabó con sus compañeros de Genesis, una manera ideal de cerrar un ciclo con el grupo de modo que la venta de boletos se agotó prácticamente en todas partes donde el grupo se presentó en Norteamérica.

Al llegar los noventa Collins siguió activo pero su fórmula ya parecía cansada, caracterizada en su disco Into The Light, que el fondo era un frecuente reciclado de "Sussudio". Vendrían otros duetos, colaboraciones y producciones de discos, pero quedaba claro que el momento de Phil Collins estaba por terminar. Entonces los estudios Disney lo llamaron para que grabara el tema principal del soundtrack de la cinta Tarzan. "Fue una experiencia distinta pero al mismo tiempo emocionante porque volvía a acercarme con el cine, que fue mi principal pasión cuando entré a este negocio". Esa interpretación le valió el quinto Grammy ganado en su carrera.

Otra de las pasiones de Collins ha sido la batería. Sin embargo en el 2012 mientras se encotnraba en un concierto se lastimó ambas manos y se resintió de una vértebra por lo que su médico le recomendó reposo absoluto, algo que implicaba el retiro que Collins anunció a mediados de ese año (poco después también se supo de su divorcio).

Pero recientemente el cantante anunció su retorno que incluirá un nuevo disco y una gira. Visiblemente avejentado y sin la energía que le caracterizaba en otros años, Phil Collins se encuentra ante un formidable reto. Veremos --y esperemos, dado su enorme talento-- que logre sortearlo.
 

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