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Cine/Obituario

Lo extrañaremos, Blake Edwards

Dirigió muchas películas que aun hoy se recuerdan, y fue copartícipe en la creación de la pantera más célebre de la animación mundial. y dejó de existir mientras preparaba una puesta teatral en Broadway. A su modo, fue un rebelde a la estatura de Kubrick y Altman, con quienes hoy comparte créditos en otra dimensión

DICIEMBRE, 2010. Cuando hablamos de esos rebeldes que se niegan a ajustarse a las reglas de Hollywood nos vienen a la memoria genios como Stanley Kubrick. Sin embargo Blake Edwards también entraba en esa categoría aunque los críticos siempre menospreciaron su trabajo. Edwards fue un cineasta que llevaba activo más de medio siglo gracias a filmes que siempre marcaban una pauta distinta a lo que imperaba en el cine hollywoodense. Cuando finalmente la Academia lo reconoció en el 2004 con un Óscar honorario, quedaba claro que Edwards había ganado el duelo. Es verdad que hubo algunas pifias en su carrera peor, en lo general, Blake Edwards hizo las cosas a su modo y acertó en la diana.

!Ah! ¿Y olvidamos acaso que él fue quien popularizó a nivel mundial a La Pantera Rosa, tanto en las películas estelarizadas por Peter Sellers, así como la serie animada, una de las más célebres en la historia de la animación? Al respecto hay una anécdota: Edwards buscaba un tema para musicalizar las cintas del deteftive Closeau cuando le pidió el favor a Henry Mancini, autor de "Moon River", la canción que es escucha en Breakfastat Tiffany's. Mancini había compuesto un tema de jazz progresivo que originalmente había sido pensado en Hugh Hefner y su revista Playboy. Finalmente Edwards lo convenció para que cediera el tema a su película, que por cierto no habla sobre una pantera sino de un diamante. Más tarde la canción también fue tema de la caricatura. Edwards llgó a admitir que la Pantera está basada en Mr. Hefner. ¿Sabía el lector que el fundador de Playboy durante muchos años fumó cigarrillos con boquilla?

Uno de los éxitos más grandes de Edwards fue Breakfast at Tiffany's, versión del libro escrito por Truman Capote quien salió fúrico de la sala cuando vio la cinta ya que, aseguró, se había alterado el final de una manera escandalosa, algo que Edwards no preocupó gran cosa, según declaró después. Más tarde vendrían las aventuras del inspector Closeau y otras películas como Days of Wine and Roses The Party (1968), una comedia que estrlerizada por Sellers que no fue valorada en su momento. Cuando puso a descansar al felino rosa Edwards dio un nuevo giro a su carrera como director; durante los ochenta realizó un tándem con su esposa Julie Andrews que empezó cuando escribió el guión de 10 la Mujer Pefecta, donde participaron Dudley Moore y Bo Derek. Pero cuando filmaba Curse of the Pink Panther en 1983 Sellers falleció a medio rodaje por lo que tuvo que cambiar todo la historia. Y aunque los resultados fueron mediocres, Edwards insistió en mantener viva la memoria de Closeau aunque con poco éxito (Roberto Benigni caracterizó a un hijo del despistado policía).

Con S.O.B. Edrwards se burlaba abiertamente del sistema hollywoodense, con una película donde su esposa Andrew, la María de La Novicia Rebelde, mostraba sus senos. Luego vino Victor/Victoria, también con Andrews en el papel central, un musical que luego sería llevado a Broadway y posteriormente dirigió The Man Who Loved Women, donde el protagonista, Burt Reynolds es un donjuán incontrolable que seduce, entre otras, a Kim Basinger y a la misma Andrews, quien hace el papel de su terapista. "Fueron todas ellas películas donde quería echar ideas que tenía en mi cabeza (...) no todas fueron buenas, pero tampoco malas, tanto así que con ellas saldé muchas deudas y pude remodelar mi casa", dijo Edwards en una entrevista.

Por lo que toca a su relación con la llegada del felino rosa al mundo animado, Edwards lo resumió así: "Quería retomar a esos actores del cine mudo como Buster Keaton, Chaplin y Harold Lloyd --su padrastro había sido director de muchas cintas en los años 20-- pues ése es un arte, el del chiste sin diálogo, que es todo un reto, más aun si le quitas esos letreritos que caracterizaban al cine mudo". Sólo en una ocasión habló la Pantera, un episodio donde un cazador construye una nueva arca de Noé. ¿La frase? "¿Por qué no serán los hombres como los animales?" Junto con John DePatié y Fritz Freleng, Blake Edwards dio vida a una de las caricaturas más célebres de la historia. 

Nunca dejó de ser un alma rebelde. Cuando se le avisó que se le pensaba otorgar un Óscar honorario, en un principio se rehusó a asistir, no precisamente por desprecio sino porque no quería interrumpir un proyecto que tenía en aquellos años. Son legendarios los desencuentros y diferencias que tuvo con la MGM, que produjo todas las películas de la Pantera Rosa, incluidas aquellas donde participó Steve Martin. "Todas mis películas sobre la Pantera Rosa fueron objetadas, que el acento de Closeau no lo iban a entender en Estados Unidos, que su humor era muy europeo.... al final tuve razón pues todas esas películas fueron financiables, de hecho la mayoría de mis películas lo han sido (basicamente, agregaríamos, aquellas donde Sellers y su esposa Julie Andrews eran los protagonistas... exceptuando, claro, The Man Who Loved Women, donde el espectador no quedó convencido con el giro que se le dio a Burt Reynolds).

Descanse en paz Blake Edwards, quien para este momento ya debe de haber estrechado las manos de Kubrick, Altman, Peckinpah y demás directores que habitan el olimpo de quienes no se dejaron doblegar por los prejuicios de Hollywood y jugaron dentro de sus propias reglas. Blake Edwards será enormemente extrañado.

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