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El Hermano:
La Paz del Señor está con todos vosotros.
Público: Y
con tu Espíritu Hermano.
El Hermano:
Ave María Purísima.
Público:
Sin pecado concebida.
El Hermano:
Ya estoy aquí hermano, a tu lado como
siempre; al lado de ellos, y a la vez, al dado de
Aquél que dió vida a mi ser y al vuestro: al lado del
Dios-Yahvé.
También al lado de Aquél que darramó y
derrama su sangre por vosotros:
Jesús de Nazaret.
También
al lado de Aquélla que se desgarró delante de un madero, viendo cómo
expiraba su Hijo:
Maria de Galilea.
También
al lado de tantos Angeles, y al lado de aquéllos que no permiten el mal,
que sólo saben dar el bien y amar. Yo también estoy entre ellos, y
también entre vosotros, entre vosotros para ayudaros. Y entre ellos, porque Yo vivo allí, junto a ellos:
Yo soy Valit Manet,
el Angel del Bien.
Para muchos lo que digo no tiene
significado, para tí sí lo tiene hermano. Para muchos también, pero para
otros les da igual lo que Yo diga. Pues aquí me tienes, dispuesto a
hablarte a tí y a ellos.
No voy a adelantar nada sobre el día diez de Febrero puesto que ya está
cerca, puesto que sólo quedan veinte días para llegar a ese día.
No voy a
adelantar nada, ni a contar nada sobre ese día; sólo te diré hermano, que
al principio será un día muy triste para tí, cuando empiece a hablar
el Angel Luchador
(1).
Pero cuando acabe empezará a saltar tu alegría dentro de tu corazón, porque las malas lenguas en una parte ignorada... (2)
Padre Eterno:
...Serán derrotadas.
El Hermano:
En otra parte seguirán, pero muchas serán derrotadas. He aquí a uno de vuestros hermanos, a un Guerrero
vencedor, no
un Guerrero vencido:
¡Un Guerrero vencedor!
Este Guerrero
tiene muchos enemigos, pero no porque él los señale, ni
porque él diga
"éste es mi enemigo",
sino porque muchos se dicen así
mismos:
”Yo soy enemigo del Guerrero...”
Eso es triste para alguien que intenta
la salvación de todos. El sabe sufrirlo, él es todo
amor. Sabes que nunca te hemos fallado
hermano, ahora tampoco, ni a tí ni a nadie. Quien han fallado han sido
ellos; tú no nos has fallado, y nosotros tampoco a tí; ellos han fallado,
pecando y burlándose.
Por
eso ellos mismos se han perdido. Nosotros hemos
seguido igual, y no hemos cambiado. He aquí a un verdadero Guerrero. Cuanto
odio te tienen, todo eso acabará.
Mis amados hermanos, espero para
deciros, y ya os digo, que en la Iglesia Católica, Apostólica y Romana, va
a haber grandes cambios. Hay muchos que sienten alegría al oirlo, pero que
sepan, que esos cambios, no son para bién. Como
bien muchos ya habéis oido y Yo os adelanto:
«Van a cambiar las
Leyes que
Dios puso, por las que ellos creen más convenientes. Y os digo que la
Iglesia se va a derrumbar sobre sí misma. Y todo porque no saben escuchar
a aquéllos que vienen de Dios.
El maligno Satán, será el causante de tan
terrible destrozo y aniquilación, puesto que muchas almas consagradas,
así mismo, serán dirigidas hasta el abismo, porque muchas almas
consagradas, en vida, no han trabajado al servicio de Dios, sino al servicio
del maligno.»
Sólo puedo deciros,
que ya está aquí el final. No
quiero asustar a nadie, ni tampoco que nadie se asuste, sólo digo esto
para adelantaros lo que ya están haciendo. Ya lo veréis por vuestros
propios ojos, y veréis, que no estamos aquí porque nosotros queremos, sino,
porque hemos de ayudaros, porque sois nuestros hermanos. Sois...,
sus hijos y no quieren vuestra perdición.
Y
nosotros tampoco. Y ya he dicho todo lo que tenía que
decir. Nunca, nos equivocamos, nunca. Pero el día diez de Febrero van a
caer muchas malas lenguas. ¿Deseas tú algo de nosotros hermano?
Jose-Luis:
Sois muy
buenos conmigo.
El Hermano:
Acaso tú, ¿eres malo con nosotros? ¿Verdad que no? Pues tú sigue así. No escuches las lenguas humanas, sólo escucha lo que
nosotros, tus Protectores, te decimos, y verás como todo sigue así.
Ahí tienes..., a tus hermanos carnales, tus padres, tus familiares, y más
cosas ¿verdad? Amigos, hermanos espirituales. Muchos te apoyarán, otros te van a sonreir, pero detrás de
esa sonrisa está la falsedad.
Tú sabes quién te quiere de corazón y
quién te odia y te guarda rencor. Sigue así, y bien sabes que tú no
rechazas a nadie, porque tú eres grande, y alabas a Dios. Y nosotros, te
alabamos a tí. No sufras ese día que llegará, nosotros estaremos contigo. Adiós hermanos.
Público:
Adiós Hermano.
El Hermano:
Adiós hermanos.
Público:
Adiós Hermano.
El Hermano:
Adiós hermanos.
Público:
Adiós
Hermano.
Padre Eterno:
Adiós hijos.
Público:
Adiós Padre.
La Madre:
Adiós hijos.
Público:
Adiós Madre.
El Maestro:
Adiós
hijos.
Público:
Adiós Maestro.
El Hermano:
Adiós hermanos.
Público: Adiós Hermano.__
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(1) El Angel Luchador es el Arcángel San Miguel.
(2) El Guerrero,
se refiere a Jose-Luis Manzano.
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