Otros textos de
Internacional
Es
increíble cómo Donald Trump se pasa de güey
La deplorable en
esta historia del ridículo es Hillary Clinton, una mala perdedora
Estatuafobia
mi conveniencia
Políticos y
multiculturalistas, coludidos en el suicidio asistido de Europa
Ante los desatinos del
Papa Francisco, el legado de Juan Pablo II crece todavía más
El patético tour
de la señora Clinton, pobrecita ella
Archivo
|
|
INTERNACIONAL
¿Prohibir la
venta de armas = menos asesinatos? Un comparativo Las Vegas -
Chicago
Cuando el
manoseado argumento del supremacista blanco quedó desechada,
la izquierda volvió a exigir se prohíba la venta de ramas de fuego,
como si éstas se dispararan solas. Pero en realidad restringir
que se adquieran es la solución? La evidencia indica que no
Versión impresión
OCTUBRE, 2017. Luego de la
masacre en las Vegas durante un concierto de música country
comenzaron los tuits a circular por la red y en los cuales no podía
faltar (¿quién más?) el de Hillary
Clinton quien culpó del hecho a la Asociación Nacional del Rifle
la cual, aseguró, "le hubiera encantado que se usaran armas con
silenciador" (sic). Así, sin evidencias ni nada, la fallida
candidata presidencial no tardó ni tantito en politizar el asunto.
Hubo otros tuits
igualmente insensatos, como el de la cantante Ariana Grande quien,
recordamos, se presentaba en Manchester cuando ocurrió un atentado
terrorista que mató a varios de sus fans. Grande tuiteó: "¡Hay que
prohibir la venta de armas ya!" En aquella ocasión los atacantes no
usaron armas de fuego sino bombas, las cuales se encuentran
prohibidas pero eso no impidió para nada que fueran usadas para
consumar ese atentado.
Pareciera inútil pero hay que recalcarlo: si el conductor de un
automóvil atropella deliberadamente a una persona, ¿por qué nadie
exige que se prohíba la venta de más vehículos si después de todo en
Estados Unidos cada año muere mucho más gente en accidentes viales
que por el uso de armas de fuego?
Después de todo, agregamos, durante los dos últimos años la cantidad
de atentados con autos y camiones que se convierten en armas
mortales en atentados terroristas han sido cada vez más comunes,
desde Niza en Francia hasta el más reciente en Barcelona. ¿Hemos
escuchado que se exija restringir y sacar del mercado a la Ford, a
la General Motors o a la Chrysler?
Al igual que los autos, las armas no se disparan solas; alguien
apunta hacia un objetivo específico y aprieta el gatillo del mismo
modo en que alguien maniobra su volante hacia un sitio y enseguida
oprime el acelerador.
Con todo y este atentado, Estados Unidos sigue siendo un sitio donde
la posibilidad de morir por herida de bala es mucho menor que en
Honduras, Brasil y, por supuesto, México, donde existe un control
estricto de armas y, en consecuencia, también se da un floreciente
mercado negro.
Excepto por una ciudad: Chicago, Illinois.
De acuerdo a la página
DNAinfo.com, tan solo en el mes de septiembre se
registraron 56 muertes en la ciudad del viento, para un total de 519
en lo que va de este 2017, es decir, casi la misma cantidad de
muertes en Las Vegas en una noche se tuvo en un mes en Chicago. La
diferencia, por supuesto, es que en el resto del 2017 ha habido
menos de 80 muertes violentas en la ciudad del pecado, según reporta
un recuento del diario Las Vegas Sun.
Dicho de otro modo: en Las Vegas hasta el domingo había habido 79
muertes violentas durante este año; en comparación, en Chicago se
han cometido 482 por ciento más asesinatos en ese mismo lapso.
¿Y cuál es la cerecita en este pastel? !Que en Chicago existe un
estricto control de armas y los particulares tienen prohibido
adquirirlas!
Bueno, hay otra cerecita: el alcalde que implantó este estricto
control de armas es un tal Rahm Emmanuel, íntimo amigo de Barack
Obama.
Todas las cifras coinciden en que el control de armas en esa urbe no
ha traído la paz social que tanto alegan los demócratas llegaría si
se prohíbe la venta de armas, coro al que se le suene unir Hollywood
(al cual, con la mayor de las hipocresías, en sus películas le
encanta glorificar las armas de fuego) y los medios, principales
perritos farderos de ese partido político.
Y de nuevo ¿por qué Chicago se ha vuelto a ser una ciudad igual o
más violenta que en los tiempos de Al Capone? Porque las armas no se
disparan solas, porque existe una brutal lucha territorial entre
pandillas y vendedores de droga y, tercero, porque la ciudadanía no
tiene manera de defenderse ante esas agresiones.
Es curioso cómo Hillary tiene tan corta memoria excepto para aquello
que le conviene. ¿Cuál fue la razón por la cual los terroristas
musulmanes asesinaron a casi 150 personas en Paris en noviembre del
2015? ¡Porque los policías parisinos no portaban armas! De hecho, en
los atentados donde se impidió que el agresor cometiera más daños,
entre ellos los de la disco de Orlando y el ataque contra un
legislador se debió a que alguien que se encontraba cerca del
lugar portaba un arma de fuego.
Cuando ocurre un atentado la izquierda rápidamente desempolva el
mismo, manoseado guión: primero se pregunta si el responsable es un
"supremacista blanco", pese a que de los últimos 30 ataques,
solamente en uno de ellos hubo un "supremacista blanco" (cuyos
padres, por cierto, eran simpatizantes de Hillary Clinton). Pero
como en el caso de este ataque se efectuó contra gente en su mayoría
caucásica que asistía a un concierto de música country, quedaba
claro para los progres que no podía utilizarse esa baraja.
¿Cuál es la cantaleta, entonces? Naturalmente: prohibir la venta de
armas, y colorín colorado, estas masacres se han acabado.
El asunto va por otro lado. Detrás de esa exigencia para prohibir la
venta de armas (¿no es curioso cómo ninguna celebridad ha expresado
su simpatía hacia las víctimas? ¿no se deberá a que la mayoría eran
blancas?) y es abolir la segunda enmienda que da a los
norteamericanos derecho a portar armas.
Esta enmienda señala específicamente que si los ciudadanos no están
conformes con su gobierno, ostentan el derecho a defender su
libertad mediante el uso de armas. Si se eliminara esta enmienda,
como bien señala el analista Victor Davis Hanson, "el gobierno
norteamericano podría ir despojando a la población de otras
libertades", además que, agrega, "alcanzar la paz mediante el
control de armas es ilusorio y solo estimula el mercado negro", que
es, justamente, lo que está pasando en Chicago.
Hasta el momento la hipótesis de que se trata de un Lone Wolf,
o asesino solitario, es la más viable en torno a este multiasesino.
Habrá que ver cómo consiguió las armas, si de forma legal o ilegal.
Lo seguro es que, de estar prohibida su venta, Stephen Paddock las
habría conseguido de cualquier modo, al igual que los delincuentes
roban un automóvil para cometer una fechoría.
Los demócratas que ya han empezado a culpar a Trump también
"olvidaron" mencionar que Nevada fue un estado ganado por ese
partido en las pasadas elecciones de noviembre y que en esa misma
fecha se aprobó una ley que despenaliza el uso de la mariguana en el
estado.
¿Que pasará si se llega a saber que el asesino era habitual fumador
de la "yerba"? Seguramente, nada. Igual que se insistirá en la
prohibición de vender armas porque, como ya dijimos, se trata de una
exigencia política con aspiraciones totalitarias.
La restricción en la venta de armas no detendrá a esos sujetos, como
ni de lejos ha sucedido en Chicago, actualmente la ciudad más
violenta de los Estados Unidos.
Textos relacionados
Control
de armas, la verdad y la hipocresía [Enero, 2015]
De locos,
restricciones y Hollywood [Agosto, 2012]
¿Desea opinar sobre este
texto?
[email protected]
[email protected]
0
comentarios |