Otros textos de Y Demás
Brian Johnson, ni la sordera
detuvo su talento
Los que se fueron
este 2020
Ray Parker Jr. no caza fantasmas,
pero sí dividendos
Eddie Van Halen, adiós al mejor de
su generación
Tan discreto como indispensable:
John Paul Jones
Objetivo
real de cambiar nombres: destruir al deporte profesional
Archivo
|
|
Y DEMÁS/Música
Tom
Jones, la longevidad de un talento excepcional
Suena increíble , pero
este figurón galés de la música ya pasa de los ochenta
años y sigue activo. Con sus días de gloria en Las Vegas
y una impresionante carrera detrás suyo, Tom Jones sigue
grabando y causando suspiros a muchas chicas cuyas
madres aún no nacían cuando ya era famoso
Versión impresión
MARZO, 2021. Ser cantante profesional a una edad avanzada ya
sorprende poco. Tony Bennett, nacido en 1926, dejó de cantar hace
poco menos de un lustro mientras
Frank
Sinatra siguió haciéndolo pasadas sus ocho décadas
de vida, y otro tanto hace
Paul Anka,
quien aún se sigue presentando con regularidad.
Hace poco un galés de fama mundial se acaba de integrar a ese club,
y continúa haciéndolo increíblemente bien, como cuando inició su
carrera cuando aún despuntaban los sesenta y los
Beatles
todavía participaban en audiciones. Nos referimos, claro, a un tal
Thomas John Woodward, pero no nos dejemos engañar por ese nombre que
más bien parece el de un periodista. Se trata de un Mr.
Entertainment a quien todo mundo conoce como Tom Jones.
Ya desde entonces este cantante cuyo nombre artístico es sinónimo de
una novela de Henry Fielding, no ha parado, incluso como juez del
programa American Idol (no es uno de sus mejores blasones,
pero ni hablar). Lo importante es que Tom Jones ha evitado
congelarse en el circuito de las oldies y ha grabado sus
propias versiones de canciones de
Prince
y Lenny Kravitz, además de ser respetado por la mayoría de sus
colegas.
Asimismo, Tom Jones tampoco ha perdido su originalidad, algo que
provoca cierta paradoja: buena parte de sus imitadores (incluidos en
América Latina ¿recuerdan a Sandro de América?) terminaron por
apagarse, como se dice, a las primeras de cambio.
Quizá las damas ya no arrojan su ropa interior sobre el escenario
cuando se presenta, es seguro que Tom Jones sigue causando suspiros,
incluso entre muchas chicas que bien podrían ser sus nietas.
Este hijo de minero creó su primer grupo aún adolescente como manera
de hacerse de algo de dinero. El grupo, llamado Tommy Scoot and the
Senators se presentó en varios pubs y lugares de baile hasta
que Jones fue descubierto por Gordon Mills, un compositor que luego
se convertiría en su representante. El primer brinco fue a Londres
--ya con su nuevo nombre artístico-- y luego la grabación de los
temas "Delilah" y "It´s Not Unusual", que combinaba la
instrumentación de Sinatra aunque a ritmo más veloz.
Eso fue suficiente para que Jones despegara y su fama llegara a
Norteamérica donde se le acogió como uno de los suyos. (Y algo que
hoy nos parece increíble: en esos tiempos Jones actuó como telonero
de los
Rolling
Stones).
Luego de convertirse en solista, Tom Jones tuvo su propio programa
de TV en Estados Unidos y era visitante frecuente en la Mansión
Graceland de
Elvis
Presley. Poco después firmó un contrato para
presentarse en Las Vegas que duraría bastantes años y compró una
residencia en la ciudad del pecado, harto de los altísimos impuestos
que el gobierno inglés aplicó a principios de los 70.
Jones también realizó una gira de
conciertos por América latina, incluido México, donde se presentó en
la capital y en el programa Siempre en Domingo de Raúl Velasco.
Entre sus megahits de aquellos años destacan "She's
a Lady" y "I'll
Never Fall in Love Again".
A fines de los 70 Jones tuvo un hit llamado "Say
You´ll Stay Until Tomorrow", que también entró a
las listas de música country, dado que su popularidad en las listas
pop iba a la baja. El cantante firmó con una disquera que no le
permitía grabar canciones fuera de ese género, aunque siguió
presentando sus hits de siempre en Las Vegas.
Pero llegó un momento en que el cantante se cansó de ambas
situaciones: canceló su contrato en la capital de los casinos y
salió en cuanto pudo de su asfixiante contrato discográfico.
Y aunque duró casado 52 años con la misma mujer, hace algunos años
se acusó de paternidad al cantante, producto de una relación
ocasional que por cierto, se negó a reconocer. Jones también ha
aparecido en varias películas, incluso como él mismo cuando
participó en Mars Attacks, dirigida por Tim Burton.
Por lo demás, es un deleite escuchar la enorme discografía de este
galés. Póngale oído en cuanto pueda. No se arrepentirá.
Textos relacionados
¿Desea opinar sobre este
texto?
[email protected]
[email protected]
0 opiniones
© copyright, Derechos Reservados, 2020 |