Medios/Insensateces
Platanito, un resbalón en tiempos de Twitter
Un video difundido
en Youtube donde contaba un chiste cruel y de pésimo gusto mantienen a
este payaso malhablado en un sitio de descrédito que nunca imaginó. El
papel que tuvieron en ello las redes sociales fue claro. Detrás de la
furia, sin embargo, estalló la frustración ante una tragedia que sigue
irresuelta
FEBRERO, 2012. Los chistes sobre las tragedias están lejos de ser algo nuevo en México. En 1984 se registró una terrible explosión en San Juanico, una región pobre del D.F., y menos de un año después ocurrió en la capital uno de los peores terremotos de su historia. Bien pronto comenzaron a circular los chistes, el más conocido refería que los de San Juanico "estaban enojados con los chilangos pues había estado mejor la movida que el reventón". El chiste fue incluso contado en algunos programas de radio y televisión y circuló tanto en oficinas como calles y escuelas. Luego de algunas carcajadas el chascarrillo se olvidó sin que nadie pidiera que se persiguiera al responsable ni se le adjetivó con mentadas de madre. La reacción
fue mayormente de indiferencia cuando salieron chistes sobre Colosio, aunque de esos nos abstendremos de repetir aquí.
Eran, claro, otros tiempos: en los ochenta no teníamos el Internet ni Twitter, y quién sabe cómo se habría manejado la reacción entonces de haberlos tenido. Ya han sido casi dos semanas que se difundió el chiste y el comediante conocido como Platanito no sabe cómo zafarse del escándalo; su representante ha dicho que el payaso, cuyo nombre real es Sergio Verduzco, "colabora en varias organizaciones para el tratamiento de las quemaduras, entre ellas la de Virginia Sendel Lemaitre" (ex periodista de Televisa y quien se dedica de lleno al cuidado de su
nieta, quien sufrió graves daños al 90 por ciento de su piel cuando su hogar entró en llamas).Telehit, el canal donde Platanito tiene un programa, lo sacó del aire y muchas de sus
presentaciones fueron canceladas, todo ello a partir de un video difundido en YouTube y tomado con un celular donde
Platanito hace mofa de Michael Jackson y de los niños de una guardería en Hermosillo que fallecieron en el 2010.
El chiste es de pésimo gusto y el que Platanito lo haya contado merece, sin dudas, todos los calificativos reprobatorios. ¿Pero por qué antes no éramos tan sensibles a este tipo de chascarrillos? Podemos barajar varias razones: una, que en el último decenio nos hemos convertido en una sociedad más dividida, más frustrada y que cualquier incidente basta para mostrar nuestro enojo; dos, las redes sociales se han convertido en sitio ideal para expresar esa furia. Como dijo alguna vez Gonzalo
"Flaquiguapo" Oliveros, comentarista radial, "el ciberespacio está lleno de gente enojada, muy enojada, y deja que cualquier
incidente deje salir esa rabia". Prueba de que en muchos casos el enojo no está ligado con el hecho mismo lo tenemos con la reacción hacia Peña Nieto en la
FIL Guadalajara por gente que tampoco agarra libros o los insultos abiertos que el presidente Calderón recibía en Twitter hasta que optó por bloquear la opción de opiniones. Tercero, seguimos siendo un pueblo de hipócritas: si alguien puso el video en la red se debió a que consideraba que lo dicho por Platanito era gracioso, más que inapropiado. Pero entre el auditorio solo se escuchan carcajadas ni se ve que nadie se levante, indignado por lo que dijo el conocido
carapintada. Poco cabe dudar que entre muchos tuiteros "encabronados" por la "puntada" de Platanito haya quienes han asistido a sus
shows y pagaron por ello.
Cuarto, en el caso del terremoto se entiende que fue un desastre natural y que no hay a quien marcar como culpable. En el caso de la guardería de Hermosillo no ha caído un solo funcionario ni un solo burócrata que autorizaron que ese sitio operara con medidas de seguridad tan deficientes. "La injusticia es el combustible de la ira, y es un combustible peligrosísimo", escribió el fallecido economista Frederik Hayek. Platanito se convirtió en el
pararayos de la frustración ante la corrupción que padecemos, de un sistema de justicia podrido y de un gobierno que gasta recursos inconscientemente sin dedicar un solo peso, excepto en sueldos, a limpiar toda esa porquería. Todo ello, por supuesto, sin querer exculpar a Platanito por la estupideces que dijo esa ocasión. (Según un tuitero, ese chiste era parte del repertorio habitual del payaso por lo menos desde un año y nunca, una sola vez, nadie había protestado sino hasta que fue puesto en Internet).
La indignación creció cuando Platanito quiso enmendar el asunto y puso un video en la red donde ofrecía disculpas, un discurso claramente redactado por un abogado y que se percibía falso. Incluso le tundieron porque solo aparecía sin peluca y no se había quitado el maquillaje. "Sigue sin dar la cara el desagraciado",
escribió alguien que nos sigue por Twitter.
Platanito es parte de esa generación de cómicos que rondan los cuarenta años de edad y que se han convertido en las nuevas figuras del canal musical Telehit, que Televisa
transmite por cable. Como apuntamos en un
texto anterior, su fama se debe a cambios en la Ley General de Radio y Televisión que permiten la difusión de "palabrotas" en los canales de paga pasadas las 10 de la noche. Pero en las emisiones estrella que Televisa tiene en Telehit --particularmente
Platanito Show y Las Lavanderas-- la agresión quiere hacerse pasar como algo gracioso, de ahí que el "chiste" de este payaso constituya una agresión pura. Lo que no esperaban ni él ni sus promotores era que la reacción fuera igual de furiosa.
¿Con esto llegó a su fin la carrera de Platanito? Difícil, somos un pueblo que arde de coraje porque la Malinche se entregó a Cortés hace casi medio milenio pero permitió que Gloria Trevi huyera a Brasil con un "promotor" pederasta y regresara a México ahora como artista dirigida al público infantil (!!!). Todos vimos en televisión a René Bejarano embolsarse fajos de dólares y hoy suena como candidato para jefe delegacional en el D.F. (!!!!) Vamos, varios funcionarios implicados en el incendio de la guardería siguen cobrando puntualmente sis cheques de la Federación, en especial uno de apellido Horcasitas. Las lágrimas de Platanito, que pudieran bien ser de cocodrilo, harán el trabajo en un país donde el rencor es tan grande como su corta memoria.
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