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Y DEMÁS/Ejemplos patéticos

Lo que estamos presenciando, amigos lectores, es el lastimoso, patético derrumbe de una figura pública, alguien que debió haberse retirado hace tiempo. Pero como se sabe, la fama es adictiva pese a la máxima aquélla del hoy fallecido humorista Art Buchwald quien advirtió: "la fama es la amante más desagradecida que pueda existir pues ni siquiera te das cuenta cuando ya te ha abandonado". Ciertísimo, y es ampliamente refrendado con lo que está ocurriendo a la señora Ciccione. Su último hit importante lo tuvo en el 2015, hace ya siete años, y el que haya sacado un single este 2022 es algo que a poca gente, un puñado entre un puñado, se ha siquiera enterado.

Ello no indica, y que quede claro, que Madonna no disfrutó de una carrera impresionante:  marcó 71 hits en las listas de popularidad y durante los 80 se convirtió, junto con Prince y Michael Jackson, en parte de la terceta más importante que influyó decisivamente en la cultura norteamericana de esa década. Pero su abundante carrera no justifica, y que también quede claro, que la señora piense que hoy sigue siendo relevante. Ello ya no ocurre con ningún otro de sus contemporáneos ochenteros, Bruce Sprinsgteen incluido. ¿Por qué Madonna ha de ser la excepción a esta regla que el tiempo nos aplica implacablemente a todos?

Lo hemos dicho en otras ocasiones, cuando un artista comienza a experimentar la decadencia acude al recurso más descarado dentro del showbizz: el escándalo. En realidad, y si somos francos, Madonna ya iba en declive al iniciar los 90; atrás habían  quedado esos hits memorables, desde "Like a Virgin", "Material Girl", "Who's That Girl" y "Vogue", de ahí que en 1991 hubiera grabado un video "controvertido" del tema "Satisfy My Love", una composición chafa que llamó la atención en el momento mismo que el video fue prohibido por MTV (esto cuando el canal todavía tenía algo de pudibundez).

Ese era el efecto deseado: "Justify My Love" se fue al tope de las listas, por lo demás inmerecidamente, situación que Madonna más tarde aderezó con Sex, un lamentable librito lleno de fotos (en Estados Unidos se les da el pedante nombre de portfolio)  donde ¡horror! se le veía dándose besos de lengüita con la modelo Nahomi Campbell.

Y fuera de algunos hits posteriores --entre ellos la bella "My Playground" de 1992 y "Ray of Light" cinco años después-- Madonna ya olía a intrascendencia desde entonces, al punto que volvió a recurrir al escándalo cuando se dio un beso de boca con Britney Spears, otra más que fácilmente podría ser su propia hija, durante uno de los premios MTV. Una de sus  tempraneras, pedorras controversias.

No lo dijo ni cuando se dio de besuques con Nahomi Campbell y luego con Spears, otra que ya huele a intrascendencia tempranera pero ya lo intuimos. ¿Por qué esperó hasta hoy para anunciar que es gay? Elton John, por ejemplo, decidió jugarse su fama aceptando su homosexualidad en un articulo de Rolling Stone, y aunque temía que como reacción el sur norteamericano ardería en piras de sus discos, al final nada pasó. Fue sin duda una jugada valiente, sobre todo porque Elton John se encontraba en el apogeo de su fama y tenía todo qué perder. ¿Por qué hasta hoy, insistimos, Madonna acepta ser gay? Pero eso nada tiene de "atrevido" o "transgresor" en el mundo del espectáculo: de hecho hoy resulta "transgresor" para alguien decir que no lo es. Muy cómoda, como se ve, la postura de la señora Ciccione. Lo admirable hubiera sido hacerlo incluso en los 80 cuando una celebridad que aceptaba su homosexualidad podía ver cancelados sus contratos y su carrera misma. Ahorita ya pa'qué, como diría Capulina.

Por otro lado, no deja de ser paradójico que durante mucho tiempo Madonna, quien hoy se asume como feminista, haya hecho hasta lo indecible por presentar a la mujer como un fetiche y un objeto material; después de todo, se trata de la misma persona que grabó una canción precisamente llamada "Material Girl", con la leyenda tomboy en la portada de su disco Like a Virgin, palabra que se utiliza para describir a una mujer que muestra el comportamiento similar al de un hombre.

¡Por Dios, durante mucho tiempo Madonna fue un producto destinado a la "masculinidad tóxica" y ahora nos sale con que no solo es gay sino que se autoproclama vocera del feminismo! El asunto se parece a otro más, que apesta a mal chiste, donde Gloria Trevi, su versión mexicana, jura que "empodera" a las mujeres con sus canciones pero quien durante mucho tiempo le proporcionaba ingenuas adolescentes aspirantes a artistas al "promotor" Sergio Andrade, quien luego las trataba como esclavas sexuales.

Es triste la intrascendencia, e igualmente difícil reconocer que, como figura pública, ya a nadie le interesas. ¿Qué le cuesta a Madonna --quien no lo olvidemos, ya tiene 65 años de edad-- anunciar su retiro y dejar más o menos intacto su legado musical? Y como muestra tenemos su más reciente, desesperado intento para que se siga hablando de ella al anunciar que se filmará la película de su vida pero, eso sí, como furibunda feminista que aborrece la misoginia, Madonna no permitirá que la dirija un hombre, como si ello salvara a esa producción del fracaso, como si el tener a una directora logrará el mágico efecto de llenar de espectadores una sala de cine.

 Qué raro: cómo Madonna no protestó igual cuando la dirigió su ex Guy Ritchie... ¿por qué entonces no exigió una mujer detrás de las cámaras? Quizá,  y dado que Madonna  tiene un historial como pésima actriz, quizá anhela que ahora la dirija una mujer lo que le llevará, esta vez, una nominación al Óscar... no lo descartemos, después de todo se trata de alguien que se sigue creyendo la fantasía de ser una artista vigente.

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2 opiniones

carlos_ayala escribe 30.10.22

Leí su artículo de madonna y me hizo reir mucho, y me recuerda aquello que las personas ridículas son como los esposos engañados, son las ultimas que se enteran, la verdad es que esta señora ya debería retirarse porque se sigue comportando como si todavia fuera una veinteañera

laluco_arredondo escribe 31.10.22

El único shock que nos podría provocar Madonna en estos momentos es anunciara que se quiere meter de monjita o más precisamente, de madre superiroa dada su edad

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