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Lo extrañaremos, Ray Manzarek

Fue parte de The Doors, grupo que trajo de vuelta al rock norteamericano ante el embate musical proveniente de Gran Bretaña. Un breve reconocimiento a Ray Manzarek, quien, en algún lugar, se ha vuelto a reunir con el Rey Lagarto

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MAYO, 2013. Un cantante con cabellera adónica vestido con olanes y de cuero negro, un baterista que se hace acompañar de un cigarrillo en su boca mientras toca y un guitarrista serio cuya mirada suele estar puesta más allá del público y a la orilla, un organista medio rechoncho, con anteojos, sentado en un sillín giratorio e inclinado sobre su teclado. Este último no parece pertenecer a la escena del rock sesentero... claro, todavía estaban lejos gente como Elton John, pero en más de una ocasión ese tecladista, de nombre Ray Manzarek, recordaba cómo Jerry Lee Lewis le había servido de inspiración. "En realidad no éramos tanto de vanguardia, solo éramos otro grupo de rock como lo fueron Buddy Holly o Bill Haley and the Comets..." se asinceró en su biografía, publicada en 1997.

Con frecuencia olvidamos, o nos negamos a aceptarlo, que estamos frente al ocaso de muchas de las figuras que alimentaron el rock de los sesenta, en opinión de muchos la más importante y más creativa en la historia del género. "Para haberla hecho en los sesenta deberías ser realmente bueno dada la gran competencia y el altísimo nivel de calidad imperante", dijo alguna vez Kurt Loder, crítico de rock que hoy escribe sobre cine. Es inevitable que en los años inminentes nos toparemos con más y más esquelas como la de Ray Manzarek, quien falleció el lunes 21 en Alemania, víctima de cáncer. Tenía 72 años, edad promedio de la mayoría de quienes pertenecen a esa generación como Bob Dylan (73), Paul Simon (71), Ringo Starr (73), Grace Slick (74). De hecho, de seguir vivo, Jim Morrison estaría cumpliendo sus 70 años este 2013.

Cuando escuchamos hoy temas como "Light My Fire" y "Touch Me", en especial el teclado festivalero de Manzarek, apenas cabe pensar que esas composiciones tuvieron cierto efecto subversivo frente a  las buenas conciencias. Pero no era la presentación, sino el contenido, es decir, las letras, lo que preocupaba a quienes escuchaban a Morrison cantar girl, we couldn't get much higher (nena, ya no podríamos llegar más alto) pues evidentemente no se refería a irse a un palco superior en el teatro. Sin embargo, según Manzarek, hacia 1967, cuando fue escrita "Light My Fire", "lo que más consumíamos era alcohol; las drogas vendrían después con el fin de expandir nuestra creatividad..."

Ray Manzarek nació en Chicago, en 1939, en una familia de origen polaco. Viajó a California para estudiar Contaduría en la UCLA, sitio donde conoció a Jim Morrison, quien estudiaba arte cinematográfico. En 1965 decidieron fundar The Doors junto con Joh Densmore y Robbie Krieger. La carrera del grupo se extendió de 1967 hasta 1971, tiempo en que su vocalista pasó a transformarse de estrella de rock a especie de chamán mezclado con Arthur Rimbaud. En el último año Morrison pidió tomarse un tiempo libre para buscar inspiración y viajó a París, donde moriría el 3 de julio de ese año. Los restantes miembros lanzaron un par de discos más, algo que fue visto como oportunismo por muchos fans a lo que Manzarek respondió; "Hicimos un acuerdo con Jim de que seguiríamos en caso que alguno de nosotros se ausentara... él habría sido el primero en exigir que continuáramos", escribe en su biografía. Pero cuando los discos no tuvieron éxito optaron por separarse.

Tras varios intentos por llevar la vida de The Doors al cine, en 1989 Oliver Stone anunció el rodaje de una cinta con Val Kilmer como protagonista. Manzarek fue invitado como consultor pero se retiró dado que el guión lo ponía a Morrison como el centro del grupo y a los otros tres como meros parapetos que, en efecto, apenas aparecían unos minutos en la película. "De hecho The Doors éramos cinco: Jim, Robbie, John, yo y nuestro productor Paul Rotschild. Nos repartíamos equitativamente las ganancias y nunca tuvimos disputas personales mientras existió el grupo. Todas nuestras opiniones eran consideradas democráticamente. Jim Morrison era parte de The Doors y no The Doors parte de Jim Morrison, como sugiere esa película. Jim hubiera, sin duda, secundado mi protesta", refirió Manzarek en otra entrevista.

Para contrarrestar el efecto de la cinta, Manzarek y Krieger intentaron revivir a The Doors, con un nuevo vocalista. El batería Densmore se opuso y los demandó para evitar que utilizaran ese nombre o cualquier otro que aludiera al legendario grupo. Finalmente y con el ex The Cult Ian Atsbury en vocales, Manzarek y Krieger realizaron una gira que incluyó algunas ciudades de México donde no es frecuente tener a figuras del rock internacional.

Manzarek también produjo discos solistas, entre ellos la ópera Carmina Burana, y a artistas como Siouxie and the Banshees. "Ray no podía estarse quieto, necesitaba estar siempre ocupado en algo", recordó Krieger años después.

El consuelo para muchos seguidores de The Doors, los cuales ya conforman dos generaciones, es que en algún lugar, Manzarek se ha vuelto a reunir con el Rey Lagarto. Cada vez que escuchemos su legado, extrañaremos a Ray Manzarek y a sus jinetes en la tormenta.

 

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