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Andy Gibb y cómo se consumió en tres décadas

Respaldado por sus tres famosos hermanos, este cantante anglo-australiano logró tres número uno consecutivas en las listas e incluso se manejó la posibilidad de integrarse con ellos. Al final, las adicciones y una fama cuesta abajo terminaron con Andy Gibb, pieza indispensable en el rompecabezas del pop setentero

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SEPTIEMBRE. 2014. El primer síntoma importante de que las cosas no marchaban bien para Andy Gibb se dio cuando la sesión de grabación del programa Solid Gold, del cual era conductor, tuvo que interrumpirse cuando el cantante sangraba sin parar de la nariz. "Eso era tan preocupante como el humor que Andy mostraba ese día", recordó un miembro del staff del programa. "Generalmente era un chico agradable pero desde semanas atrás había sido un infierno convivir con él pues se asumía como una superestrella y agredía físicamente a quien le criticara su actitud. Todos decíamos en voz baja que su problema de drogas se estaba saliendo peligrosamente de control".

Lo que Andy Gibb, el hermano menor del trío pop The Bee Gess, no podía aceptar, es que en ese momento ya no era una superestrella, y que ya nadie quería estar cerca de él. Para entonces su relación con la actriz Victoria Principal --la esposa de Patrick Ewing en Dallas-- había terminado, lo cual le había afectado emocionalmente. Poco después del incidente y de su salida del programa, Andy estaba decidido a resucitar su carrera, que había incluido también una actuación teatral en The Pirates of Penzance en Broadway. "Se le acabó el tiempo", dijo su hermano Barry en un documental sobre los Bee Gees, "en ese momento Andy no lo sabía, pero su cuerpo estaba a punto de cobrar su factura".

Andy Gibb fue lo que en México conocemos como "el pilón" de la familia, pues llegó al mundo cuando ya no se esperaba que la familia fuera a crecer. Su padre, Hugh Gibb, un trompetista que había tocado en orquestas de la Armada Real, se dio cuenta del embarazo de su esposa mientras tramitaba su cambio de residencia a Australia, que en ese momento estaba ofreciendo facilidades migratorias a los ciudadanos ingleses que quisieran iniciar una nueva vida. El 5 de marzo de 1958 nació Andy y a las dos semanas los Gibb se embarcaron a Australia. "Era una sensación muy extraña el que él fuera un bebé y nosotros ya pisáramos la adolescencia", recordó Barry, "siempre existió era barrera de la edad, por lo que creció más como un chico solitario".

Conforme sus hermanos comenzaban a adquirir fama en Australia, Andy concluyó que la vida en el país-continente era muy aburrida y regresó a Europa: más tarde se asentó en la isla española de Ibiza, dejando atrás a su novia de la secundaria y a la hija que ambos habían engendrado. "La experiencia en Ibiza coincidió con el brinco a la fama de mis hermanos y el filme Saturday Night Fever", dijo Andy a Rolling Stone en 1977, "pero nadie me creía cuando les decía que estaba emparentado con ellos". Desde muy joven Andy tenía facciones de galán, lo que le permitió lograr muchas conquistas en Ibiza hasta que concluyó que su futuro también era el ser cantante. Regresó a Australia y comenzó a preparar su disco cuando Robert Stigwood, el mánager de sus hermanos, se contactó con él y le ofreció producirlo. Stigwood era un empresario que comenzó como guionista y luego se convirtió en el hombre más poderoso de la música en ese país al crear la RSO. Andy escribió algunas canciones y se las presentó al magnate, a quien la parecieron mediocres. "Seamos francos, tienes a unos hermanos talentosos, aprovecha esa coyuntura", le dijo. 

Más tarde los tres Gibb le pasaron una canción que habían compuesto años antes "pero su tono vocal era distinto al nuestro por lo que al escucharlo dijimos casi al unísono '¡esa canción es para Andy!'", recordó Barry. Tras algunas correcciones y cambios en la letra, aquel tema fue grabado y se convirtió en "(I Just) Wanna Be Your Everything", que llegó al primer lugar.

"Andy tenía nuestra marca pero al mismo tiempo logró presentar una imagen propia", recordó Barry Gibb. "(I Just) Wanna Be Your Everything lo convirtió en un teen idol --Leif Garret quiso ser su contraparte norteamericana-- algo que al cantante no le agradaba, según confesó a Rolling Stone en 1977: "Quiero demostrar que soy más que una linda cara para la portada de revistas adolescentes (...) quiero tener una carrera larga como la de mis hermanos..." Y así parecía ser cuando el tema "(Love is) Thicker Than Water" pasó a ser su segundo número uno consecutivo, el cual de pasó desplazó de ese sitio el hit "Night Fever" de sus hermanos. A éste le siguió otro número uno titulado "Shadow Dancing", compuesta por sus hermanos pero desechada al no encontrarle el tono adecuado".

Inevitablemente, los críticos comentaron que para que Andy Gibb tuviera una canción que se convirtiera en hit debería tener paréntesis en el título. "Juro que todo ha sido una coincidencia", dijo el cantante años después, "después de todo tendrían que preguntarle a mis hermanos el porqué de esos paréntesis".

No se sabe el momento exacto en que Andy Gibb comenzó a consumir drogas. Sus tres hermanos tenían sus propios problemas de adicción, Barry a las pastillas y los gemelos Robin y Maurice al alcohol. "Quizá comenzó a usarlas en Ibiza o alguien se las ofreció para mitigar la presión de la fama", recordó Barry. Con todo, en ese momento se consideró que Andy podría integrarse formalmente a los Bee Gees y por primera vez apareció junto a sus hermanos en un concierto a beneficio de la UNICEF. La idea fue muy bien recibida por el público, aunque se dudaba que el trío, que también había proporcionado enormes hits a Samantha Sang, Ivonne Elliman y a Tavares, realmente podría manejarse con un nuevo miembro. "Conforme se hacía más grande la posibilidad por un lado decíamos 'sí, es nuestro hermano, es genial que se nos una', pero por el otro pensábamos 'este es un trabajo en equipo ¿realmente Andy podrá proponer y aceptar las ideas de los demás?' Al primer intento vimos que su personalidad era bastante fuerte e individualista. Tuvimos que decirle 'lo sentimos Andy, no está funcionando, pero siempre apoyaremos tu carrera'. Él aceptó y siguió su camino", recordó años después el ya fallecido Maurice Gibb. Con todo, una colaboración de Andy aparece en el Spirits Having Flown, la siguiente producción de los Bee Gees que siguió al soundtrack de Saturday Night Fever.

Por ese tiempo Andy conoció a Victoria Principal, quien se encontraba en lo más alto de su carrera gracias a la serie Dallas. Comenzaron a salir y pronto fueron pareja, todo al tiempo que los hits pararon en seco y el cantante apareció en la obra The Pirates of Penzance. Y aunque lo hizo bastante bien y recibió elogios de la crítica. Pero su consumo de drogas se estaba saliendo de control y fue despedido antes de terminar la temporada teatral. Fue un duro golpe que le hizo pensar en retomar su carrera pero entonces recibió una invitación para aparecer en Solid Gold, una emisión de la ABC que mezclaba presentaciones en playback, coreografías, mini conteo de hits y segmentos de comedia. En las primeras temporadas condujo el programa junto a Dionne Warmick pero debido a diferencias salariales luego fue suplida por Marylin McCoo, ex integrante de The Fifth Dimension. "En un principio los dos éramos conductores pero Andy comenzó a faltar cada vez con más frecuencia", recordó McCoo, "pero hasta mucho después supe la razón". Poco después lo también lo despidieron del programa.

Cuando su relación con Principal acabó, el cantante terminó por hundirse. "Lo llamábamos por teléfono a su casa y no contestaba pero sabíamos que se encontraba ahí", recordó su hermano Barry. Aceptó someterse a tratamiento y tenía pensado grabar otro disco y regresó a vivir a Inglaterra. Pero la oleada antidisco había golpeado a los Bee Gees quienes a su vez entraron en un pleito legal con su productor Stigwood. "De repente todo lo que hubiera tenido cualquier relación con la música disco era rechazado o ridiculizado... en medio de nuestro pleito legal con RSO buscamos grabar con otras disqueras y siempre nos respondían '¿son ustedes los Bee Gees? No, gracias'", recordó el ya fallecido Maurice Gibb. Y aunque Andy más bien había sido un baladista pop y apenas había rozado el género disco con el sencillo "Shadow Dancing", a él también le tocó lo que Barry Gibb ha llamado "la estigmatización" del grupo.

En el verano del 87 Andy comenzó a preparar su siguiente disco, ya sin la ayuda de sus hermanos. Pero el proyecto no avanzaba debido a su consumo mayor de drogas que ya se antojaba frenético. "Andy nos citaba a determinada hora, llegábamos y nunca se presentaba o lo hacía bastante tarde, y no estaba en condiciones de practicar ni cantar", recordó uno de los ingenieros de sonido. "Su rostro se veía cansado y con los pómulos hundidos". Otros días se mostraba irritado e hipersensible. Un par de ocasiones aceptó someterse a rehabilitación pero duraba poco ahí. "Había caído en la trampa mortal de pensar que por tu cuenta podrás dominar a las drogas", dijo recientemente Barry a Rolling Stone.

Tras pasar el Año Nuevo con sus hermanos, Andy volvió a Gran Bretaña, asegurando que tenía la "intención definitiva" de dejar las drogas, pero a las pocas semanas ya estaba consumiéndolas nuevamente.

El 5 de marzo Andy celebró su cumpleaños y se veía optimista en torno a completar su nuevo disco, que sonaba mucho más contemporáneo; "deliberadamente lo alejó del sonido de los Bee Gees y se parecía más a las cosas que hacían The Cars y U2", dijo el ingeniero de sonido. Pero cinco días después el cuerpo de Andy Gibb fue encontrado en su casa, víctima de un ataque cardiaco. Barry reveló luego que su hermano menor había padecido problemas del corazón desde niño, "y sus excesos indudablemente repercutieron en su salud".

A 27 años de su muerte, Andy Gibb sigue siendo recordado por miles de fans. Nunca fue formalmente un Bee Gee pero sí poseía bastante de su talento. Y en los 21 años siguientes, dos de sus hermanos ya lo han seguido en su camino.



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1 opiniones

marcosagm escribe 30.12.14

Me encanta toda su música. Lastima ke murio tan joven.

 

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