Informe Iceberg, junio de 2001

 

PRESENTACIÓN Y PRINCIPALES CONCLUSIONES

 

1. INTRODUCCION

En España, unos 400 niños al día presencian el divorcio de sus padres, y son, normalmente, alejados de su progenitor masculino. Haber vivido esta realidad de cerca nos sensibiliza hacia el tema de debate y nos sitúa en una perspectiva distinta de la comúnmente adoptada.

No somos técnicos altamente expertos en el manejo de información como la aquí aportada. No disponemos de grandes recursos para su obtención y análisis (no pertenecemos a Asociaciones subvencionadas, ni disponemos de más tiempo que el sobrante de nuestra actividad como trabajadores, padres y responsables del hogar...)

Al realizar este informe, hemos antepuesto el rigor y la sinceridad a cualquier planteamiento políticamente correcto, y en ningún momento hemos rehuido el examen de temas que puedan ser considerados "poco oportunos".

Lo único que podemos garantizar es la buena fe de nuestra labor y el deseo de mejorar las cosas.

 

Violencia doméstica - Conclusiones

No hay ningún estudio en España que permita conocer las causas ni el alcance real de la violencia doméstica.

La legislación al respecto se elabora "a ciegas", más a impulsos de la opinión que de una realidad que no se conoce.

Los datos que se conocen en otros países apuntan a que hay niveles similares de violencia en ambos miembros de la pareja, con independencia del sexo.

Existe un enorme foco de violencia doméstica que está muy desatendido: desde 1980 se han producido aproximadamente 1.314.000 disoluciones matrimoniales, más de la mitad contenciosas.

 

2. NO HAY ESTUDIOS VALIDOS

Los que hay tienen carencias graves que los invalidan:

Optica sexista (centrada en la mujer, ignorando al hombre):

Errores o insuficiencias metodológicas (forma de administrar los cuestionarios, tipo de preguntas empleadas, que no tienen la significación que se les pretende adjudicar...)

Error en el valor que se le da a algunos estudios, cuya información se malinterpreta y sobrevalora sin motivos objetivos.

a) La óptica sexista.

Macroencuesta sobre la violencia contra las mujeres (Ministerio de Asuntos Sociales) - Anexo 1

Su enfoque es exclusivamente hacia la mujer como víctima, y sólo menciona al hombre en tanto que agresor.

Curiosamente, cuando menciona a los padres de la mujer como agresores, el padre es agresor en un 13,5% de los casos, mientras que en un 12.8% de ellos la agresora es... la madre (p. 15 del estudio).

Siendo el sexismo un defecto invalidante, esta macroencuesta adolece además de errores metodológicos graves.

Eurobarómetro de la Comisión Europea - Anexo 1 bis.

Sólo analiza la violencia doméstica contra las mujeres.

Es un mero estudio de opinión, que no aborda lo que de verdad está sucediendo, sino lo que cree la gente, y lo hace de una forma vaga y tangencial

Las preguntas son tautológicas y obvias, y las respuestas son perfectamente previsibles sin necesidad de aplicar 16.200 encuestas.

b) Errores metodológicos.

Estimación de los malos tratos en base a autodeclarativos de malos tratos recibidos no constatados (macroencuesta). Estos autodeclarativos son, naturalmente, subjetivos, e influenciados por el estado de ánimo y la propia sensibilidad natural de quién contesta.

Cualificantes de los malos tratos demasiado amplios o subjetivos (Informe Reno - Anexo 2 Bis: los propios responsables del estudio cuestionan su validez a la vista de las diferencias inexplicables respecto a otros estudios realizados).

Realización de entrevistas CATI (telefónicas, asistidas por ordenador).

En el Anexo 2 se propone un cuestionario tipo a emplear (es el del estudio Dunedin). Debe ser:

Administrado cara a cara,

Con autodeclarativos de malos tratos infligidos constatados con la víctima y filtrando las no coincidencias.

Con metodologías longitudinales a ser posible (seguimientos a largo plazo).

c) Error en el valor concedido a algunos estudios.

En general, las encuestas del CIS y de los institutos de sondeo de opinión sólo pueden obtener opiniones, no realidades. No es posible legislar en base a opiniones, salvo con planteamientos populistas.

Los institutos de estadística (como el INE) ofrecen macro datos cuantitativos (número de denuncias, número de hospitalizaciones...) que sólo pueden ser considerados indicativos, pero no la realidad. No descienden ni a las motivaciones ni al objetivo específico.

Subjetividad al difundir y usar datos de algunos estudios: sólo se presta atención a los que demuestran "nuestras tesis", sobrevalorando su importancia, mientras se oculta o se minimiza el valor de los datos que desmienten "nuestra posición".

Prejuicios (sexistas) de partida. Es difícil probar (ni siquiera con datos concluyentes) un mismo nivel de violencia de mujeres y hombres a quien está convencido de que el hombre es por naturaleza opresor, y que existe una "violencia de género" (todos los hombres son agresores, todas las mujeres son víctimas... Todos los gitanos son ladrones y todos los andaluces son vagos...)

 

3. LEGISLANDO A CIEGAS O DESDE EL PREJUICIO.

Aberraciones Legales (o el Gran Hermano Orwelliano) - Anexo 4.

La subjetividad y el margen de error de la discrecionalidad del juez (que debe ser aplicada restrictivamente cuando pueda afectar a derechos y libertades fundamentales) pueden generar injusticias en base a la nueva Ley orgánica 14/99 de modificación del Código Penal y la LEC:

"La prohibición de comunicarse con la víctima o con aquellos de sus familiares u otras personas que determine el Juez o Tribunal, impide al penado establecer con ellos, por cualquier medio de comunicación o medio informático o telemático, contacto escrito, verbal o visual".

Delito específico de violencia psíquica (¿Qué es, y cómo se mide y prueba?)

La desinformación y la presión popular instigada desde la publicidad puede alterar la ecuanimidad de las instituciones encargadas de velar por el estado de derecho... Ej. En el informe de Enero 2001 del CGPJ:

Tolerancia Cero (Resoluciones de la U.E.) - riesgo de "Caza de Brujas".

Violencias psicológica, económica, estructural y espiritual...- Alto riesgo en su valoración vs. conductas normales en las relaciones humanas del día a día. Alta dosis de subjetividad. Dificultad de la prueba.

Desvirtuación del principio de presunción de inocencia (s. TS 25 abr, 24 jun y 7 jul 2000): "Basta el testimonio de la víctima, aunque no haya otros testigos del hecho... para fundamentar una condena... Nadie ha de sufrir el perjuicio de que el suceso que motiva el procedimiento penal se desarrolle en la intimidad entre la víctima y el inculpado..."

Planteamiento de prisión preventiva (tanto en caso de delito como de falta) de cualquier denunciado por malos tratos vs. denuncias falsas, o su alternativa de reeducación (La Naranja Mecánica).

Los juicios sociales de valor:

La pena suscitada en un menor por los sufrimientos de un padre (varón) ante su situación tras una separación se puede considerar "parentización" (entendida como niños protegiendo y sirviendo de apoyo al padre), lo que se considera un agravante para el padre.

Puede entenderse como parentización que el padre evidencie angustia o abatimiento por su situación en el curso de un divorcio, ya que se interpretaría que está "desarrollando para su hijo un comportamiento que se presenta como "víctima" relativa de la situación..."

Las aberraciones científicas.

Puede suscitarse una auténtica paranoia social que vea por todas partes violencia doméstica, avalada por informes "científicos" como los del anexo 5 (Sivic) que:

Citan datos de violencia de pareja (entendida como "todas las formas de violencia utilizadas contra una mujer") en varios países, sin mencionar la fuente.

Mencionan a vuela pluma que "según la Comisión Europea, en el 98% de los casos, la violencia es imputable al hombre" (sic), sin dar razón de la fuente de esta información...

Hacen una larga lista de indicios comportamentales en la mujer y en el marido (víctima y agresor, naturalmente) y un elenco de síntomas clínicos, que pueden atribuirse a multitud de causas, y que, sin embargo, pueden cualificar con su sola presencia de maltratador a un hombre.

Mencionan que "muchas mujeres se ven expuestas a abusos continuos a raíz de resoluciones judiciales que permiten los contactos entre un cónyuge o excónyuge violento y sus hijos", verbatim que parece reconducir a un exterminio de la relación entre padre e hijos para cauterizar cualquier posibilidad de presuntos posibles "abusos"...

...Y la desvirtuación de la ciencia

Un informe de la comisión episcopal Peruana ("La ideología de género, sus peligros y alcances") menciona verbatims interesantes en la ilustración de este punto:

"Los hombres y las mujeres no sienten atracción por personas del sexo opuesto por naturaleza, sino más bien por un condicionamiento de la sociedad (heterosexualidad obligatoria)".

"Una estrategia apropiada y viable del derecho al aborto es la de informar a toda mujer que la penetración heterosexual es una violación, sea cual fuere su experiencia subjetiva contraria".

"No debería autorizarse a ninguna mujer a quedarse en casa para cuidar a sus hijos. La sociedad debe ser totalmente diferente. Las mujeres no deben tener esa opción, porque si esa opción existe, demasiadas mujeres decidirán por ella".

Las aberraciones políticas

Anexo 6 -

Ley 17/2000 de la presidencia de la Comunidad de Madrid: "Además, la Administración autonómica participará activamente en la persecución de los delitos de violencia doméstica y malos tratos en el ámbito familiar cuando las víctimas sean mujeres, personándose en juicio como acusación particular en ejercicio de la acción popular..."

Publicación de los nombres de los condenados por malos tratos.

 

4.   ESTUDIOS SOBRE LA VIOLENCIA EN LA PAREJA HUMANA

El Informe Fiebert (Anexo 7)

Una muestra agregada de 70.000 entrevistas (Cuestionarios CTS del tipo anexo 2).

Las mujeres son más propensas a expresar violencia física que los hombres, y son en mayor proporción las iniciadoras de la violencia.

El 29% de las mujeres reconocen haber agredido a su pareja en los últimos 5 años.

El estudio Mc Leod (Detroit 1984) añade que las mujeres tienen tres veces más probailidades de usar un arma que un hombre en el curso de conflictos domésticos.

En la Encuesta Nacional sobre Violencia Contra Mujeres 1999 se evidencia que los hombres tienen más probabilidades que las mujeres de experimentar ataques graves en el curso de los cuales sean golpeados con un objeto, amenazados con un cuchillo o acuchillados.

Los abusos sufridos en la infancia son el principal indicador.

Women Offenders (Anexo 8)

Estudio del Departamento de Justicia de USA 1999, consistente en una recopilación de estudios oficiales que se analizan en relación con la agresividad femenina.

No sólo se analiza la violencia de pareja, sino la violencia femenina en el contexto social

Las mujeres son responsable del 14% de todas las agresiones detectadas.

El 25% de las víctimas agredidas son mujeres.

1.3 millones de niños pequeños están a cargo de mujeres bajo la supervisión de agencias judiciales.

Si bien los índices de criminalidad son inferiores para las mujeres que para los hombres, no podemos avalar la tesis de que la violencia es una característica masculina, y por tanto, un problema "de género".

El Informe Dunedin (Anexo 9)

Estudio longitudinal en Nueva Zelanda (tracking durante 21 años) en una muestra agregada de 1.020 indivíduos de ambos sexos al 50%.

El 27% de las mujeres y el 34% de los hombres analizados reportan haber sufrido malos tratos físicos de su pareja. El 37% de las mujeres y el 22% de los hombres han declarado haber infligido malos tratos a su pareja.

Los mayores índices están vinculados no al matrimonio, sino a la convivencia, y en el caso de víctimas mujeres, a la presencia de hijos.

Los factores predictores más relevantes son:

Delincuencia agresiva a la edad de 15 años.

Abusos de drogas a los 15 años.

Abandono prematuro de la educación escolar (sólo hombres).

Vínculos de progenitor e hijo a la edad de 15 años.

Ausencia del padre a la edad de 9 años.

Estudio Murray Strauss – Anexo 10

Universidad N. Hampshire 1999 (muestra 653 estudiantes en su relación de noviazgo, durante el último año).

El 32% de las mujeres fueron agresoras.

El 29% de los hombres fueron agresores.

El vínculo de la violencia de pareja con otro tipo de historial delictivo está más asociado a la mujer que al hombre.

La procedencia social de la muestra es de clase acomodada.

Spouse Murders – Anexo 11

El Departamento de justicia de USA analizó (en 1998) los datos criminales de 75 condados de USA, que representaban la mitad de los uxoricidios del país.

Proporción por sexo de las víctimas: 60% mujer/40% hombre. (En España, en 2000, también se reproduce esta proporción del 60% / 40% - 67 mujeres y 44 hombres).

El informe destaca también la parcialidad de la administración de Justicia en el trato de las mujeres asesinas.

Reena Sommer – Anexo 12

Recopilación de datos en 1994 de los estudios de salud pública de Winnipeg (Canadá), por la Dra. Reena Sommer, abarcando una muestra final de 988 personas en un tracking de 4 años. Las entrevistas fueron cara a cara, a domicilio, estructuradas en base a un cuestionario CTS autoadministrado. Solo se usaron los indicadores de fuerza física (no de abusos psicológicos).

Se analizan tasas de violencia, predictores, perfiles de personalidad (salud mental) y demográficos, antecedentes familiares, contexto labora...

La defensa propia (tradicional justificación feminista de las agresiones por mujeres) motivó el 10% de las agresiones realizadas por mujeres, y el 15% de las realizadas por hombres.

El 16% de los hombres estaban bebidos cuando agredieron, frente al 8% de las mujeres.

El 21% de los hombres necesitaron atención médica, frente al 14% de las mujeres agredidas.

Informe Archer – anexo 13

Análisis de datos procedentes de distintos estudios (100) de USA y UK, con una muestra agregada de 34.000 hombres y mujeres.

Las mujeres son ligeramente más propensas que los hombres (+0.05) a emprender uno o más actos de violencia física.

Los hombres son más propensos (+.15) a infligir lesiones, siendo el 62% de las personas afectadas por lesiones las mujeres, en tanto que algo más de la tercera parte restante eran hombres (60/40).

Un 29% de la muestra reconoce haber iniciado agresiones contra su pareja.

Canadian Journal (Anexo 14)

Autodeclarativos (activos y pasivos confrontados) entre 705 hombres y mujeres (1987) en Alberta.

El nivel de violencia ejercida declarado por los hombres era del 12.8%, reconociendo las mujeres un 9.6% de esa violencia como recibida.

El nivel de violencia ejercida declarado por las mujeres era del 12.3%, reconociendo los hombres un 12.5% de esa violencia como recibida.

La mayoría de los que habían tenido una relación violenta reportaban un patrón de violencia bidireccional, pequeño, infrecuente y no físicamente lesivo.

El tipo de violencia era similar en ambos sexos, menos por lo que respecta a abofetear, patear, morder y pegar, en que era infligido significativamente más por las mujeres.

Las mujeres son significativamente más proclives a reportar violencia femenina (exclusivamente) que los hombres.

El 49% de los hombres que reportaron haber cometido violencia se identificaban como los iniciadores, en tanto el 67% de las mujeres que reportaron haberla cometido se identifican como tales.

British Crime Survey (Anexo 15)

Cuestionario administrado a 16.348 personas en UK en 1996.

4.2% de mujeres y 4.2% de hombres declararon haber sido atacados físicamente por su pareja estable en el último año.

4.9% de hombres y 5.9% de mujeres declaran haber sufrido ataques físicos o amenazas.

El 23% de mujeres y el 15% de hombres declararon haber sufrido ataques físicos de pareja alguna vez, incrementándose estos valores hasta el 26% de mujeres y el 17% de hombres si se incluyen las amenazas.

Las mujeres tendían a sufrir más daño físico (47%) que los hombres (31%), normalmente magulladuras, aunque el 9% eran cortes y el 2% huesos rotos.

Los datos vuelven a reproducir la pauta detectada 60/40.

 

5.  OTRAS FORMAS DE VIOLENCIA.

En esta sección (Anexo 16) se evidencian otras formas de violencia habitualmente ignoradas, y las leyes que esta violencia vulnera frontalmente.

Violencia de separación contra los hijos de separados y contra el padre.

Violencia económica contra el padre separado y la familia extensa paterna.

Violencia judicial y social resultante de falsas acusaciones y campañas de denigración.

Síndrome de alienación parental (PAS) en los hijos.

Violencia Psicológica contra el padre separado (culminando en suicidios –con tasas seis veces superiores a las de hombres casados-, alcoholismo, depresión...

 

6.   DATOS SOBRE MALOS TRATOS A NIÑOS

Child Abuse and Neglect – Anexo 17.

Elaborado por el Departamento de Salud y Servicios Sociales de USA (1996), es el tercer estudio nacional de abuso y negligencias en niños (el primero data de 1979, lo que permite tener una perspectiva de evolución en el tiempo).

Están basados en muestras representativas de 5600 profesionales en 842 agencias de un total de 42 estados de USA, reuniendo 50729 casos.

El perpetrador del abuso es en un 65% de los casos la mujer (receptora del 98% de las custodias en nuestro país).

Cuando el niño es maltratado dentro de la familia biológica, el 75% de las veces lo es por la madre y un 48% por el padre biológico.

Fuera de la familia biológica el niño es maltratado en un 80-85% de los casos por hombres que no son su padre biológico.

Un niño en familia monoparental frente a uno que viva con sus dos padres tiene:

77% más riesgo de sufrir abuso físico.

87% más de sufrir negligencia física.

74% más de sufrir negligencia emocional.

220% más de sufrir negligencia educativa.

80% más de sufrir serios daños físicos como consecuencia de abuso o negligencia.

Women offenders – Anexo 18

Nuevamente se ofrecen datos extraídos de diversas fuentes oficiales, esta vez relacionados con la agresividad de la mujer (y aquí también del hombre) y su impacto en los hijos.

Entre 1976 y 1977, los padres, madres, padrastros y madrastras asesinaron cerca de 11.000 niños.

Las madres y madrastras fueron responsables del asesinato del 52% de los niños. Los padres y padrastros lo fueron del 57%.

Durante la infancia, menos de 8 años de edad, las madres son responsables del mayor número de muertes de niños, siéndolo los padres por encima de esta edad.

Ministerio de Salud del Canadá – Anexo 19

En una muestra de 51 centros públicos de apoyo a niños de Canadá se hizo seguimiento entre octubre y diciembre de 1998 de los casos de malos tratos (7.672 investigaciones en total).

En todas las categorías de malos tratos, las madres biológicas fueron identificadas como las perpetradoras alegadas más frecuentes (60% de casos sustanciados) frente a los padres biológicos (41%)

Los abusos sexuales eran el 10% de los malos tratos registrados, cometidos en un 2.9% por el padre biológico y el resto de las veces por la madre u otras personas del entorno familiar (59%) o por personas ajenas al entorno familiar (16%).

En hogares monoparentales, el riesgo de abuso sexual era del 2.4% si el niño vivía con el padre biológico, y del 3.0% si vivía con la madre biológica, siendo en ambos casos el perpetrador una persona distinta al padre o madre biológicos en un 93% de los casos.

En la familia biológica la madre es 1.59 veces más perpetradora que el padre. En las no biológicas, el padrastro maltrata 3.01 veces más que la madrastra.

Maltrato infantil – Comunidad Valenciana – Anexo 20.

3.565 expedientes abiertos en la comunidad valenciana entre 1997 y 1998 (2.296 agresiones, 1.876 agresores y 1.379 niños víctimas).

Las mujeres son las agresoras en el 60.3% de los casos, y los hombres en el 39.7%.

El perfil de las agresoras es:

3% llegaron a estudios superiores.

31% carece de estudios.

71% están desempleadas o subempleadas.

El 35% consume sustancias tóxicas.

El 48% se asocia con vivienda inadecuada (incluido el chabolismo).

El 54,5% del maltrato lo sufren los niños, (sobre todo el maltrato psíquico y negligencias), en tanto las chicas padecen mayor maltrato emocional y abuso sexual (el 14.1% de todos los malos tratos).

En las familias monoparentales hay 16.9 veces más maltrato a niños. En las familias reconstituidas hay 4.6 veces más maltrato a niños.

Disrupted families & Delinquency Anexo 21

Tracking entre 1960 y 2000 de 411 niños desde que tenían 8 años.

De ellos, las tasas más altas de delincuencia (22%) eran para los que vivían en familias que ya se habían roto cuando ellos tenían 15 años, frente a las familias intactas de alto conflicto (27%) y las intactas normales (22%)

El porcentaje de condenas era mayor en las familias monoparentales con madre sola y después padrastro (38%), con madre sola en que el padre se fue o lo echaron (33%), y menor en las que la madre quedó sola tras morir el padre (38%).

El Síndrome de Alienación Parental (PAS) - Anexo 22

Estado inducido en los hijos de parejas divorciadas en el que se les coloca tras haber malmetido metódicamente contra el miembro no custodio de la pareja divorciada.

En España se lo considera algo sin mayor importancia, frecuente en los casos de divorcio.

En Estados Unidos se tiene cada vez más en cuenta en los procesos de separación, en tanto que daño profundo y grave a los hijos del divorcio, cuyo resultado final es la alienación respecto al padre no custodio.

En 1985 el Dr. Gardner formuló el principio y lo estudió, seguido de otros científicos con posterioridad.

Es una forma muy común de maltrato a niños, que dado el número de divorcios está provocando un considerable número de lavados de cerebro y programaciones psicológicas a niños, aunque sigue siendo obviado y estimado poco importante en nuestro entorno social.

 

7.   LAS CONSECUENCIAS EN LAS VICTIMAS.

Las separaciones y divorcios tienen efectos que exceden lo que socialmente parece creerse:

Más de 400 niños son cada día desvinculados de su padre biológico cada día en nuestro país.

Cada día, 200 hombres abandonan su hogar, sus bienes y sus hijos para siempre por una decisión judicial como consecuencia de un divorcio.

Los suicidios, depresiones e ingreso en la marginalidad suelen ser consecuencias posteriores de un divorcio para los padres.

Aumentan vertiginosamente los riesgos de marginalidad, delincuencia, drogas, bajo rendimiento escolar, problemas emocionales e incluso enfermedades mentales para los hijos que se ven privados de su padre.

Los niños son consecuentemente separados también de sus abuelos y resto de familia paterna, a la que se denigra también como al padre en los casos de PAS.

La importancia de la paternidad (anexo 23)

Basándose en estadísticas del INE de 1999, el número de suicidios es 2.94 veces mayor en hombres que en mujeres casados y con hijos, y 4.06 veces más en hombres divorciados y con hijos vs. mujeres en la misma circunstancia.

Con datos del Instituto de salud y seguridad social de Australia, el divorcio aumenta la tasa de suicidio de hombres 7.5 veces frente a 2.4 veces la mujer, siendo la del hombre divorciado la tasa más alta de suicidio con gran diferencia.

Datos de USA (2000) prueban que el riesgo de suicidio entre hombres divorciados era cerca del doble al de hombres casados, en tanto no había diferencias estadísticamente significativas para la mujer en idénticas circunstancias.

Niños y Abuelos – anexos 24-25

Los efectos de un divorcio en los hijos difieren de un maltrato puntual, o una secuencia de malos tratos en un determinado tiempo, sino que suponen privarle de algo suyo y muy necesario para su formación, crecimiento, seguridad y autoestima POR EL RESTO DE SU VIDA.

Tampoco existen estudios serios en España sobre esta casuística, debiendo recurrir a las estadísticas escalofriantes que obtenemos de USA.

En cuanto a los abuelos, hay estudios que demuestran que en España la tasa de suicidios por encima de los 65 años es en un 83% de hombres, siendo 9 veces más probable en un hombre que en una mujer en caso de estar divorciado. La década de los 80 ha sido la primera en que las tasas han subido desde el final de la guerra.

Los niños que crecen cerca de los abuelos son menos violentos y tienen menos problemas para su inserción social y aprendizaje escolar (estudio realizado por psicólogos italianos).

Las consecuencias para los divorciados – Estudio Anne Mc Murray – anexo 26

Toda la vida nos han enseñado a luchar por lo que es nuestro...

Nuestra casa...

Nuestra vida...

Nuestros hijos...

Una separación te quita todo esto y te deja sin derecho a luchar.

Así lo ven cada día muchos padres, y también algunas madres que se ven separados de sus hijos. En idénticas circunstancias, hombres y mujeres sufrimos por las mismas cosas, como demuestra el estudio de Anne Mc Murray.

¿Qué pediríamos a los Reyes Magos?

Un estudio escrupulosamente equitativo (no sexista) que midiera el auténtico alcance de los malos tratos.

Con un enfoque especial de las situaciones de separación y divorcio.

Con una atención extraordinariamente especial a los niños (también ante las situaciones de divorcio).

Una revisión legislativa que elimine el sexismo y provea medidas igualitarias para ambos sexos.

Un programa de educación social muy profundo, que elimine todo sexismo y todo favoritismo en el tratamiento de estos temas desde arriba (instituciones, jueces...) hasta abajo (administrados, familias, hogar... e hijos).

 

------------------------

 

 

1  1bis 2  2bis 3  4  5  6  7  8  9  10 11 12
27 28 29

30

31 32 33

 <<Anexos>> 
índice

13 14 15 16 17 18 19 20 21 22 23 24 25 26
00

Informe Iceberg, junio de 2001

Hosted by www.Geocities.ws

1