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JULIO, 2010. Era un domingo por la mañana cuando el pequeño planeador despegó de un aeródromo cercano a Pacific Groove, California. 20 minutos después varios testigos vieron como la nave se precipitaba casi horizontalmente hasta que se despedazó al estrellarse sobre el agua. "Desde antes que chocara sabíamos que era imposible que sobreviviera el piloto", refirió uno de ellos. Era el 12 de octubre de 1997 y el piloto de aquel avión era uno de los compositores más famosos de Estados Unidos, conductor de la ceremonia del Grammy en varias ocasiones, activista ecológico y defensor de la libertad de expresión. 

También era fanático de la aviación, y contaba con más de 20 mil horas de vuelo al ocurrir la tragedia. Sin embargo ese día tenía la licencia suspendida y en sus restos se encontraron rastros de alcohol, algo que demeritó la reputación que John Denver tenía entre sus fans. Pero al final la imagen que perdura de él fue de un hombre preocupado por su entorno y autor de varias de las canciones más representativas de los setenta; igual colaboró con temas de corte folk que de country y aun de pop. La crítica, que con frecuencia ve la versatilidad como un defecto, lo detestaba, y aun se burló de sus incursiones en el cine. Como sea, John Denver llegó a vender más de 30 millones de discos a lo largo de su carrera, un mérito lejano, lejanísimo, al de personajes idolatrados por la crítica, como The Sex Pistols.

John Denver nació como Henry John Deutschendorf en Roswell, Nuevo México, el 31 de diciembre de 1943. Su padre era un ingeniero que trabajaba para la Fuerza Aérea y quien, dijo alguna vez el compositor, "prestaba a su familia menos atención que a los aviones". La relación entre ambos rara veces era buena por lo que el púber Henry John empleaba su tiempo en tocar guitarra gracias a su madre, una descendiente de irlandeses donde la música había sido siempre parte de su parentela. Fue precisamente una guitarra que le regaló cuando tenía 12 años en que decidió dedicarse a ser compositor profesional. Entre las primeras cosas que debía hacer era cambiarse el apellido, impronunciable para el público norteamericano. Escogió Denver porque esa era la ciudad en la que vivía en aquel momento.

Deseoso de mantener la esencia del folk dentro de un ambiente mayoritariamente hippie, Denver se integró al Chad Mitchell Trio, inspirado en Peter, Paul and Marie y con el cual tuvo un minihit. Sin embargo a fines de los sesenta optó por independizarse y dedicarse de lleno a la composición. Uno de sus primeros hits fue "Leaving on a Jet Plane" y que luego sería grabada por Peter Paul and Mary, sus ídolos. Esa versión llegó al primer lugar en 1970 con lo cual Denver comenzó a tener reconocimiento no sólo en Estados Unidos sino en Canadá y aun Australia, donde fue siempre bien recibido. Más tarde tuvo un propio hit con "Take Me Home Country Roads", tema que ha sido por varios artistas y que luego serviría como plataforma para despegar la carrera de Olivia Newton John en Norteamérica. "La música de John Denver me transportaba al centro de ese país que ansiaba conocer", refirió la rubia australiana en una entrevista.

Al promediar los setenta Denver dio un giro más pop con temas como "Annie's Song", "Calypso" y "Sunshine on My Shoulders". La guitarra acústica seguía siendo un elemento esencial en su música, algo de lo que se enorgulleció en un artículo de Rolling Stone publicado en 1975: "Siento que el mensaje puede ser mejor recibido con instrumentos simples, sin guitarras eléctricas que distorsionan lo que quiero transmitir". Se declaró contrario a los sintetizadores --"centrar tu sonido en ellos restringe tu creatividad"-- y las letras depresivas: "Uno de los principales objetivos de la música es elevar tu espíritu, y sé que no siempre es fácil conseguirlo. Es muy sencillo escribir canciones agresivas, que sueltan negatividad (...) mi reto es escribir algo con que la gente se identifique, sienta que es parte de sus vidas o lo que quieren ser".

En ese sentido Denver grabó dos canciones aquel año. Una era "Rocky Mountain High", que pasó a convertirse en himno oficial del estado de Colorado. Sin embargo en su tiempo hubo difusoras que se negaron a transmitirla por considerar que aludía al uso de drogas. Años después Denver reconoció que, en efecto, había fumado la "hierba" en su juventud pero que ese tema hablaba de algo completamente distinto. "Si desean alusiones directas escuchen a The Iron Butterly o a The Grateful Dead, aunque no he sabido de alguien que quiera prohibirlos", señaló. (Años más tarde el futuro Eagle Joe Walsh grabó "Rocky Mountain Way", que hacía mofa de aquella controversia).

Otro tema, y que lo hizo por mera diversión, fue "Thanks God I'm a Country Boy", donde abiertamente despliega las influencias de ese género. También ayudó a la popularidad de la canción gracias a una presentación en el Show de los Muppets, Irónicamente, Denver había pasado casi toda su existencia en la ciudad. Ese tema entró a las listas pop y country, con lo que el público del cantante se incrementó notablemente. También fue el anfitrión de varios programas musicales donde tuvo entre sus invitados a Loretta Lynn, Glenn Campbell, B.J. Thomas y Lynda Carter, también conocida como La Mujer Maravilla.

Para horror de muchos críticos, Denver fue invitado como maestro de ceremonias de los Grammys de 1976 a 1979. También actuó en la cinta Oh God! donde personificaba al gerente de un supermercado quien tiene la encomienda de anunciar al mundo la llegada de Dios. También por ese tiempo comenzó a aficionarse al golf y a la aviación. "Cuando tomas el mando de una nave y ves que alrededor tuyo no hay nadie es una experiencia intrigante; creo que querer contestarla es lo que nos hace querer volar el máximo de tiempo posible", dijo a la revista Star Hits en 1984.

Al terminar los setenta el compositor se retiró un tiempo a la vida privada pero regresó cuando un comité encabezado por la ex esposa del senador Al Gore fundó una organización que exigía a las disqueras poner en las portadas anuncios sobre el contenido de las letras. Denver denunció aquello como un intento de censura y fue citado a declarar junto con Ozzy Osbourne y Frank Zappa. Pese a que sus canciones estaban lejos de ser ofensivas Denver defendió la postura opositora. "El derecho a la libre expresión está garantizado en la Constitución de Estados Unidos (...) veo esto como un futuro intento de coartar nuestras libertades", señaló en una audiencia. Al final se acordó que los álbumes serían vendidos con unas etiquetas de advertencia, como los cigarrillos.

A fines de esa década realizó una gira de conciertos por Australia, Nueva Zelanda y Japón donde se le recibió como héroe. También se presentó en la entonces Unión Soviética, con enorme éxito. Sin embargo sus discos habían dejado de tener influencia. "Sé que mi tiempo ya pasó, al menos como escritor de canciones, pero hay muchas cosas en el horizonte", dijo a la revista Songwriter en 1991. Entre ellas estaba una labor ecologista cada vez más activa.

En el ínter hubo varios incidentes. Fue arrestado por conducir alcoholizado y por manejar con exceso de velocidad, aunque su esposa interpuso demanda de divorcio acusándolo de abuso doméstico. Lo cierto es que su desaparición de la escena musical sí le estaba afectando por lo que se refugió en la aviación.

A mediados de 1997 se le suspendió su licencia de piloto por no acatar las órdenes de la torre de control. De hecho esa mañana en que se subió al aeroplano habría sido arrestado en el aterrizaje. Mike Marques, compañero de vuelos de Denver refirió que la nave había presentado algunos desperfectos pero que Denver no quiso llevarla con un mecánico por carecer de la licencia. Quizá ese día le pareció fácil subirse al aeroplano, volar un rato. y olvidarse de sus problemas. 

Tras su muerte hubo varios homenajes. "Uno de los mejores compositores que ha dado este país", dijo Glen Campbell, y aun el ex presidente Clinton apuntó en una conferencia "John Denver será recordado por su invaluable aportación musical que seguro será disfrutada por generaciones venideras". El único que guardó silencio al respecto fue el entonces vicepresidente Al Gore, esposo de Tipper, quien encabezaba la cruzada por poner advertencias en los discos.

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