Señor presidente: pues a veces parece que esa es la intención

Una frase del presidente que pretendía ser reivindicatoria ha terminado por convertirse en enorme sarcasmo una vez que se revisa el historial político y económico del sexenio de Peña Nieto: su gobierno sí despierta cada mañana, pensando como hacerle eso a México

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Por Roberto Rojas P*.

NOVIEMBRE, 2016. El presidente de México tiene ya un sitio asegurado en la historia por sus frases desafortunadas a alturas iguales o superiores al "defenderé al peso como un perro" o "ni los veo ni los oigo". Será su único legado porque en lo demás, su gobierno ha resultado un desastre absoluto. "No te preocupes, Rosario", "la sangre nueva del PRI, entre ellos el gobernador César Duarte". "quiero dejarlo muy en claro: en el 2016 no subirán las gasolinas", son apenas un puñito de este infortunado glosario. Sin embargo es dudoso que la más reciente, "uno no se depierta pensando cómo joder a México", ya ha superado a todas las demás, pues pareciera que el gobierno federal, cada mañana, se despertara con la idea de joder a México.

(Generalmente en fasenlinea procuramos no abusar de las altisonantes, pero como lo hizo el presidente antes de mencionar el verbo J, también nosotros nos disculpamos de antemano con nuestros lectores).

Lo cierto es que si le escarbamos un poquito, veremos que joder ha sido la misión del actual gobierno federal. Entre las acepciones que tiene este verbo están las de "perjudicar", "destruir", "fastidiar" y "aprovecharse" del otro. Difícilmente el presidente Peña Nieto nos dará una excusa convincente para evitar que en estos cuatro años por lo menos tres de esos términos se relacionan directamente con su sexenio. Más aún, joder ha sido la encomienda de un Estado que utiliza a sus gobernados únicamente para solventar su gasto público descontrolado. Cuando se optó por una reforma fiscal ruinosa --cortesía de alguien, por cierro, kármicamente también le jodieron su puesto como secretario de Hacienda-- el sector productivo terminó por joderse más. La intención, se nos dijo, era que los pobres ya no estuvieran tan jodidos y por ellos jodieron a la industria refresquera y a la que vende alimentos chatarra con gravámenes que no han impedido que sigamos teniendo niños gorditos con alta propensión a la diabetes. Sin embargo y con el afán de joder a unos cuantos comerciantes se terminó por joder a todos, incluidas las mascotas, muchas de las cuales hoy comen deshechos en vez de alimentos balanceados una vez que Hacienda incluyó el  IVA a las purinas, wiskas, gatinas y demás.

Asimismo, joder es la palabra que más se acerca al golpe que se le dio a la franja fronteriza cuando el IVA al 10 por ciento desapareció para igualarse al 15 por ciento como en el resto del país. Los economistas federales saben bien que las alzas impositivas terminan por joder y sin embargo siguen proponiéndolas. ¿Nos va a decir el mandatario que estos funcionarios no se han despertado cada mañana con el ánimo claro de seguir jodiendo a México?

Le economía mexicana hoy está más jodida que en el 2012: pregúntele a una ama de casa y a obrero, y todos le darán el mismo veredicto.

El gobierno del presidente Peña Nieto también terminó por joder a la paridad oficial. Debido a las políticas fiscales erradas, a los casos de corrupción y a una estructura financiera cada día más débil, el peso que se había devaluado apenas cuatro pesos en los doce años de gobiernos panistas, hasta hoy se ha deslizado seis pesos y amenaza con seguir profundizando su caída. No han sido precisamente políticas sanas las que nos han llevado a ese precipicio, sino otras que parecen diseñadas para joder al sector productivo.

En este año la inflación acumulada ha sido del 4.5 por ciento, y habrá que creer a los economistas serios cuando nos dicen que la inflación termina por joder al poder adquisitivo y por ende a la población. Miles de proyectos, de planes, de inversiones a largo plazo, se ven jodidas por la decisión del gobierno del presidente por evitar reducir el gasto público y en vez de ello cargarle el déficit a quienes realmente trabajan en este país.

¿Y qué tal políticos como el nefasto dúo Duarte, uno de los cuales incluso se le peló al gobierno federal en sus narizotas. Otro gobernador que jode a su estado con una deuda impagable. ¿Acaso no se busca otra cosa más que joder al país con funcionarios corruptos que incluso fueron defendidos y alabados por el mandatario?

Un análisis a los hechos y deshechos al sexenio de Enrique Peña Nieto lo deja clarísimo: su gobierno sí de despierta cada mañana con la idea en mente de joder a México.

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_{* Ingeniero civil de profesión, libertario confeso, comprometido a enterrar la doble moral y los excesos políticamente correctos, dice tener corazón de hotel que lo mismo proporciona amoroso cobijo a su esposa Tania, a su beba Haydé y a los Indios de Cleveland. Por ello estos días ustedes lo verán así de contento.}