Y DEMÁS: Porque nos gusta tanto La Novicia Rebelde

Al ser estrenada hace medio siglo aún no brotaban los hippies ni la mordaza políticamente correcta pero ese tiempo ha servido para demostrar que se trata de uno de los mejores musicales en la historia de Hollywood. Con canciones que ya nunca abandonan la memoria, La Novicia Rebelde sigue asumiéndose como un clásico absoluto del género

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FEBRERO, 2015. Compare usted al Hollywood actual con las producciones de hace medio siglo y el veredicto es implacable. Sigue siendo el mismo planeta Tierra pero hoy se nos ofrece una visión radicalmente distinta de las cosas al visitar una sala de cine. Hasta los musicales actuales resultan sarcásticos, crueles, una lejana rémora de lo que alguna vez llegaron a ser. El inicio de esa decadencia comenzó a darse hace exactamente cinco décadas en que fue estrenada The Sound of Music. Este tipo de producciones hoy nos parecen remotas, un abierto contraste con el Hollywood actual cada vez más alejado de su público; La Novicia Rebelde nos habla de cuando ahí soplaban aires mucho más optimistas y fascinantes.

No todo es perfección en esta película --como ejemplo, muchos espectadores se quedaron con la idea errónea de que "Edelweiss" (Flor de las Nieves) es una canción tradicional austriaca, o peor aún, el himno de ese país, cuando se trata de un tema escrito para el musical que primero se exhibió en Broadway-- pero entretiene una barbaridad al punto que pocos perciben que se trata de una producción cercana a las tres horas. Los cineastas que han dirigido las cintas de superhéroes o las de Harry Potter tienen mucho que aprender de Robert Wise.

Y ahora, con motivo que este año se cumple medio siglo de haber sido filmada, mencionamos algunas razones por las cuales nos gusta tanto La Novicia Rebelde y no nos aburre, desde las asombrosas tomas aéreas con las que empieza y las tomas finales, realizadas de igual forma, cuando la familia Von Trapp abandona Austria para refugiarse en Suiza, y de ahí a Estados Unidos (por cierto, la María de la vida real, única sobreviviente de esta familia, falleció el pasado octubre, ya casi centenaria).

Es una historia sencilla magníficamente contada - Una mujer que canta desde niña decide convertirse en monja pero al no verle los requisitos, la Madre Superiora, quizá esperando que se dé un romance, la envía como institutriz de siete niños, los hijos del capitán Von Trapp. Y en efecto, los dos se enamoran casi al mismo tiempo que los nazis se anexan Austria. El capitán rehúsa una invitación para irse a Berlín y opta por escapar a Suiza con su familia. Hacer que una historia tan sencilla se prolongue por tres horas sin agobiar al espectador fue la gran proeza del director Robert Wise quien logra una historia dinámica que nunca pierde el ritmo ni cae en huecos argumentales o en lagunas donde el público siente que está perdiendo su tiempo.

Sí, es cursi... y qué - "¿Por qué no me lo dijiste? Habría traído mi armónica", le espeta irónicamente la baronesa al Tío Max en una escena. Los productores, el director y el elenco de La Novicia Rebelde sabían perfectamente que el argumento era cursi, como lo aceptó hace años Christopher Plummer, quien encarnó al Capitán Von Trapp: "Cuando mi agente me pasó el guión, lo rechacé, era una historia cursi, como me habían parecido todos los musicales hasta entonces. Entonces Robert (Wise) me llama por teléfono y dice 'Chris, parte de la magia de esta película es que es cursi, pero también es magnífica, si aceptas, serás parte de la historia del cine', y acepté. Nunca me he arrepentido de haberlo hecho".

Una historia "cursi" tan exitosa que se calcula que hacia 1970 casi tres cuartas partes de los norteamericanos habían ido a verla. Tan "cursi" que hasta antes de la llegada del videocasette era reestrenada frecuentemente en los cines y lograba llenar las salas. Tan "cursi" que para millones de amantes del cine, los Von Trapp son parte de su familia directa.

Es el último gran musical de Hollywood - Apenas un año antes de La Novicia, Julie Andrews se había adjudicado un triunfo enorme con Mary Poppins de modo que al encarnar a María ya estaba totalmente lista para el papel. Para cuando La Novicia Rebelde gana el Óscar como Mejor Película los musicales habían alcanzado su punto máximo. El único camino iba hacia el declive. Hubo otras megaproducciones, entre ellas My Fair Lady y Oliver! pero tuvieron una taquilla muy baja en comparación. Luego el género se transformaría en ópera-rock con cintas como Hair, Jesus Christ Superstar y Gospel. Sin embargo ningún musical posterior alcanzó el éxito de las las andanzas de la novicia de Julie Andrews.

Eso hace que esta película sea doblemente irresistible, el estar frente a una película que cerraba una de las mejores etapas de Hollywood, tanto así que para 1970 el ambiente de La Novicia Rebelde parecía haber ocurrido muchos años atrás cuando apenas se había rodado un lustro antes.

Sus canciones jamás abandonarán tu memoria - Imagine la escena donde Maria baila en círculos en los Alpes y de inmediato la melodía llegará a su mente, lo mismo cuando las monjas dentro del convento cantan cómo se puede detener a María. O bien la escena donde Liesl canta que tiene 16 años, casi 17 y más adelante cuando ya como institutriz, María enseña a los hijos del capitán las notas musicales. Quizá hayan pasado décadas de haberla visto pero las canciones jamás son olvidadas por los espectadores., incluso cuando hay exhibiciones actuales los asistentes suelen corear las letras.

Hasta antes de la llegada de los nazis, es un mundo maravilloso- El único que se da cuenta del peligro que se avecina sobre Europa es el capitán Von Trapp: la baronesa Schrader lleva su existencia social como si aún los Hapsburgo fueran la familia real más poderosa de Europa, el Tío Max ve a los nazis como una mera coyuntura mientras él desea ganar dinero en los negocios... nadie percibe que en la ilustrada capitán de Alemania un loco se prepara para una guerra que costaría 60 millones de vidas.

"La política lo arruina todo", escribió el español Enrique Jardiel Poncela. Y esto es precisamente lo que ocurre en La Novicia Rebelde: el joven cartero que está enamorando a Liesl, la hija del capitán Von Trapp, se fanatiza y termina convertido en un nazi bobalicón. "Siento que mi mundo desaparece ante mis ojos", dice el capitán. Ciertamente el mundo musical y fabuloso de la familia Von Trapp estaba muy lejos de existir en la realidad, aunque el mensaje de la cinta va por otro rumbo: al final, el amor saldrá triunfante ante el fanatismo y los absurdos odios raciales. En cuanto entra a la política al asunto aquel universo idílico comienza a derrumbarse.

Es política y maravillosamente incorrecta - El Hollywood actual difícilmente se atrevería a tocar una película donde su protagonista sea una monja, aparezcan escenas interiores de un convento, la madre superiora aparezca dando consejos o donde se asuma que todo un pueblo, en este caso el austriaco, profesa la fe católica. Por ello es difícil que veamos pronto una nueva versión de La Novicia Rebelde. Y eso es bueno dado que la cinta original es simplemente insuperable.

¿Se imagina el lector escuchar en una película actual frases como "para Dios el amor entre un hombre y una mujer también es segrado", "el que ames a ese hombre no significa que ames menos a Dios" o "Deja que la voz de Dios llegue a ti?" De hecho, el mismo nombre original de la película traducido como El Sonido de la Música alude a una inspiración divina.

En su calidad de película políticamente incorrecta hace de La Novicia Rebelde otra razón para atesorarla, de recordar que hubo un momento en que las películas realmente hablaban a los espectadores sin temor de recibir acusaciones ridículas de "racismo", "discriminación", "difamación" y demás vainas que han arruinado al cine contemporáneo.

En suma: estas son algunas de nuestras cosas favoritas sobre La Novicia Rebelde.

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2 opiniones

andres_malestra escribe 03.02.15

Cuando era niño en los setenta mis padres me llevaron varias veces a ver La novicia rebelde y nunca me aburrió, eran tiempos en que las películas eran reestrenadas luego de varios años y todos íbamos a verlas (aun no había videocaseteras ni DVDs), es una película familiar que te pone de buenas verla. Ahora que tengo esta película en mi videoteca personal y la comparto con mi familia nos queda clarísimo que el Hollywood de antes era mucho mejor que el actual.

maria_bonet_frias escribe 02.02.15

Cuando a un alto ejecutivo de los estudios Universal la preguntaron porqué Hollywood ya no hacía películas familiares como L Novicia Rebelde y Mi Bella Dama respondió que eso no era lo que pedía ver el público. Falso: eos es lo que ya no quieren hacer los estudios ¿Entonces porque películas familiares como Toy Story y Mi Boda Griega fueron grande éxitos en taquilla? La Novicia Rebelde es recordada pese a que fue estrenada hace 50 años, me preguntó si en el 2065 pasará lo mismo con las películas de Quentin Tarantino