fasenlínea.com

Análisis, comentario Y Demás

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

Otros textos de Y Demás

Steve Miller, al vaquero espacial aún le resta larga cabalgata

Antes de Lady Gaga: manifestaciones gay en la cultura popular

Walt Disney su batalla contra el totalitarismo sindical

Cómo eliminar a su empresa

Glen Campbell, el ocaso de un vaquero reluciente

Archivo

 

Y DEMÁS/Música

George Harrison, lo seguimos extrañando

El paso por un grupo legendario ya le tenía garantizada la inmortalidad, pero George Harrison siempre luchó por quedarse encasillado como el tercer mejor beatle. A casi 15 años de su partida, recordamos a este músico introspectivo que nos asombró con sus composiciones

Versión impresión

OCTUBRE, 2016. El año 2001 no solo será recordado por los atentados en Nueva York y Washington sino por la muerte, apenas unos meses más tarde, de George Harrison, el "Beatle callado" quien, según palabras de Ravi Shankar, "era un mito más que otra cosa... era imposible mantener a George con la boca cerrada". En ocasiones parece increíble que el autor de composiciones que sin exagerar reciben el adjetivo de majestuosas como "Something", "Here Comes the Sun" y "My Sweet Lord" nos haya abandonado hace casi 15 años (para los fans de Lennon es aún más dramática la distancia: este próximo diciembre habrán sido 36 años de la partida del beatle de las gafas).

Cuando se habla de George Harrison queda también la sensación de que, en cierta forma, el desarrollo de todo su talento quedó incompleto. Es cierto, lo primero que hizo al abandonar al cuarteto fue lanzar un disco triple, y que siguió grabando discos incluso cuando ya se encontraba bastante enfermo. Pero la duda es si de su mente habrían salido más obras maestras en colaboración con Lennon o con McCartney con quienes nunca compuso formalmente. "Mientras grabábamos 'Free as a Bird' recuerdo que Paul le dice a George, 'nunca hemos escrito canciones juntos '¿tienes tiempo de intentarlo?'", recordó Jeff Lynne, productor de ese "nuevo" tema de los Beatles. "Ambos toman sus guitarras y sale un delicioso rockabilly que aún no tiene letra. En eso George se detiene, dice 'tengo hambre, Paul, vamos a comer algo, más tarde seguimos' y se retiran a la cocina pero ya no reinician esa sesión. Créanme, esa composición prometía muchísimo, cosa que a nadie extraña tratándose de George y de Paul".

Cuando George crecía en una familia clasemediera de Liverpool difícilmente habría imaginado lo que el destino le había deparado. Hijo de un chofer de autobús y una ama de casa que en los años de la guerra había sido maestra sustituta, George encontró en el ukulele, esa guitarra parte del sonido hawaiiano --y que se escucha claramente al final de "Free as a Bird"-- una forma tempranera de descubrir su talento. Escuchaba con fruición a sus ídolos Gene Vincent, Chuck Berry y los Everly Brothers. "Gene siempre ha sido un tanto ignorado en comparación con Chuck Berry y Buddy Holly", dijo Harrison hace años, "quizá por ello siempre me sentí tan identificado con él". También admiraba mucho a Carl Perkins. "Todos hemos escuchado la versión de 'Blue Suede Shoes' de Elvis pero la de Carl es insuperable Es él a quien quise imitar desde mi adolescencia".

Apenas un púber George hizo migas con John Lennon, el bad boy del barrio. "Yo siempre crecí en una familia, entre hermanos, y John era huérfano, vivía solo y tenía una tía que le daba dinero para todos sus gastos... ¡claro que quería ser como él", refirió Harrison en esa misma entrevista.

Luego seguiría el inicio de su relación con McCartney y el viaje a Hamburgo donde lo deportaron por presentarse en sitios para adultos siendo menor de edad y, un par de años después, el salto a ser parte del grupo de rock más importante de la historia. "Desde que era parte del grupo odiaba la idea de pensar 'oh, soy George Harrison y pertenezco a los Beatles'... de hecho el sentimiento de que ya no quería pertenecer más al grupo comenzó a apoderarse desde 1966, creo, cuando dejamos de dar conciertos...", dijo Harrison a Rolling Stone hace décadas.

El desplazamiento consecuencia de sus sugerencias ignoradas y la preferencia del productor George Martin por John y Paul marcaron el continuo resentimiento de George. "En verdad sigo alimentando haber subestimado el talento de George", dijo el ya fallecido productor, "lo cierto es que no lo ví venir. Cuando escuché 'Something' por primera vez pensé 'Dios, cómo es posible que al autor de esta maravilla le hubiéramos dicho 'lo siento, George, tendrás que esperar..."

Harrison fue el primer beatle en lanzar su disco solista, esto cuando aún pertenecía al grupo. Sin embargo el salto independiente se dio con el ya referido All Things Must Pass donde colaboraron desde Peter Frampton hasta Billy Preston. Cuando ese disco salió, dijo Harrison años después, "fue como haberme liberado de una constipación". El disco fue en su momento el más vendido de los cuatro Beatles. Sin embargo no todo fueron buenas noticias: su esposa Patty, exasperada porque "George ya no me prestaba ninguna atención", aceptó el flirteo de Eric Clapton, uno de los mejores amigos del ex beatle y se fue a vivir con él. También se le acusó de plagio con el tema "My Sweet Lord". Luego vendría una gira de conciertos donde la asistencia comenzó a bajar dada la tosudez de Harrison por incluir sobre el escenario largas y tediosas sesiones de su "gurú" Ravi Shankar. "Me importa una mierda lo que piense la gente sobre invitar a Ravi, nadie los obliga a venir a mis conciertos", replicó Harrison y lo que fue una gira prometedora comenzó por desplomarse.

Donde el éxito de Harrison fue total se dio con la organización del concierto para Bangladesh, que en ese momento pasba por una espantosa hambruna. Sin embargo el destino de buena parte de esos recursos nunca fue debidamente comprobado. "Los primeros años solistas de George Harrison se caracterizaron por haberse rodeado de buitres, gente inescrupulosa que solo buscaba aprovecharse de su fama y de su dinero", escribió Giuffrey Giuliano, autor de una de las mejores biografías (no autorizadas, por cierto) del ex beatle.

Todas las cosas siguieron pasando...

Contra lo que se esperaba, solo el primer lustro de los sesenta fueron productivos para George Harrison. En eso contó un gradual desinterés en la música y sus incursiones como productor de cine, donde destaca The Life of Brian, como parte del elenco Monthy Python. Asimismo y molesto por el rechazo a la inclusión de Shankar en sus concertos, el músico se hizo más reclusivo y colocó avisos como NO SE ACERQUE o NO ENTREVISTAS a las afueras de su mansión cercana a Londres. "Confieso que en aquellos años llegué a odiar a la gente, a los fans", dijo Harrison en 1987. Cuando el reportero le recordó que gracias al dinero de esos fans él había podido comprar su mansión, el músico reconoció que era cierto, "pero al final este es un trabajo como cualquier otro. Si el jefe en tu oficina paga tu salario eso no le da derecho a plantarse afuera de tu casa o a fisgonear por las ventanas".

En 1978 Harrison se convirtió en el primer ex beatle en escribir su biografía la cual se enfocaba más en su carrera solista que en sus años como miembro de la legendaria banda. Peor aún, en ella John Lennon es mencionado apenas un par de ocasiones, algo que dolió profundamente al compositor de las gafas: "Apenas dos referencias mías... es increíble cómo George puede tener una memoria tan corta", ironizó.

Sin embargo la muerte de Lennon un par de años más tarde reunió a los Beatles sobrevivientes. El rencor aún persistía entre ellos pero finalmente en 1981 se juntaron en la ceremonia nupcial de Rigo Starr con Barbara Bach e improvisaron algunas cosas. También ese año apareció su disco Somewhere in England donde colaboran McCarntey y Starr, si bien en forma separada.

Tuvieron que pasar cinco años para que Harrison regresara a las listas, primero con The Traveling Willburys, un grupo donde también participaron Roy Orbison, Bob Dylan, Tom Petty y Jeff Lynne. "Lo mejor de esa experiencia es que en ningún momento pensamos cosas como 'Oh, él es Bob Dylan, me aterroriza que no le guste mi trabajo' o '¿se retirará Roy Orbison si no se siente cómodo?' o 'Demonios, George es un beatle'. Eso contribuyó a que todos nos la pasáramos muy bien", recordó Harrison años después.

De hecho fue Lynne quien le sugirió grabar un nuevo disco. "Recuerdo que George respondió algo así como '¿pero a quién le van a interesar las cosas que grabe ahora?', pero creo que él necesitaba un aliciente para hacerlo", dijo Jeff Lynne, quien produjo el disco, llamado Cloud Nine. "Naturalmente, a todos nos va a interesar cualquier cosa que grabe George..." Del disco se desprendieron "Got My Mind Set On You" y "When We Was Fab", cuyo video hace alusión al misticismo de Harrison. Cloud Nine sería su último disco exitoso.

Como solía ocurrir en cada entrevista, alguien inquirió a George si tras el hitazo del Cloud Nine, llegaría a considerar una reunión de los Beatles. George respondió con acidez: "Los Beatles no pueden reunirse, y creo que así será mientras John Lennon permanezca muerto".

Lo que vendría después fue una reconciliación con sus otros dos compañeros, sobre todo McCartney, una vez que la batalla legal "y toda esa mierda", como dijo Harrison, había quedado atrás. Lo primero fue escribir entre todos su biografía, la cual llevaría el nombre de The Long and Winding Road, a lo que George objetó al decir medio en broma que "porqué debe tener el título de una canción de Paul". Al final se convino que la biografía y un documental llevarían el nombre de Anthology, que incluía una plática informal entre los tres sobrevivientes y algunos jams excesivamente sencillos pero radiantes en calidad, muy lejos de la orquestación que llegaron a tener sus últimos trabajos en los años sesenta.

Pero cuando Paul y Ringo hablaban de futuras colaboraciones, George volvió a escabullirse y a evitar contestar el teléfono a sus ex compañeros. "Simplemente un día estaba aquí con nosotros departiendo y al siguiente era como si de nuevo fuéramos unos extraños", recordó McCartney. La razón tenía que ver con una serie de sesiones en Suiza luego que a George se le detectó cáncer en la laringe, el cual logró retroceder aunque meses más tarde reapareció, esta vez en el cerebro. "Después de saber esa noticia todo quedó claro: él no quería levantar falsas esperanzas a los fans de una reunión de los Beatles", dijo McCartney, quien junto con Starr se comprometieron a no hablar en público sobre la lucha de George contra el cáncer.

Una mañana en que Harrison meditaba en su mansión un hombre se abalanzó súbitamente sobre él y le clavó un cuchillo. La intervención de su esposa evitó que ese día el músico se convirtiera en el segundo beatle en morir violentamente.

Sin embargo en el 2001 el productor George Martin cometió un desliz cuando aparentemente dijo durante una entrevista que "George sabe que va a morir y lo está tomando con filosofía", declaración que fue tomadas fuera de contexto. Martin pidió disculpas pero el daño ya estaba hecho.

A mediados del 2001 la salud del ex beatle se agravó y éste pasó varias semanas hospitalizado en Suiza en una clínica ontológica. En septiembre, unas semanas después de los atentados, McCartney fue a visitarlo. "Cuando me junto con George o Ringo la gente piensa que todo el tiempo lo pasamos hablando de los Beatles o de aquellos tiempos, y no siempre es así", recordó McCartney. "Platicamos de muchas cosas pero al final George dice 'Paul, los dos tuvimos grandes momentos juntos pero también otros momentos complicados. Son parte del vivir, de estar de paso en este mundo...' Nunca olvidaré esas palabras..."

A principios de noviembre Harrison viajó a Beverly Hills. Los últimos meses de su vida los pasó preparando un disco producido por Jeff Lynne y donde su hijo Dani colaboró en guitarras. El 19 de noviembre se anunció que al ex beatle le quedaba una semana de vida dado lo avanzado de su enfermedad y falleció el 29 de noviembre del 2011. Una parte de sus cenizas fue esparcida en el río Ganges, en la India.

"Lejos de esa imagen de místico, de introspectivo, George era un tipo con un gran sentido del humor", dijo McCartney. "Era mi hermano... lo voy a extrañar profundamente".

 

Textos relacionados

Los Cuatro: George Harrison

 

¿Desea opinar sobre este texto?

[email protected]

[email protected]  

 

 

1 opiniones

ronnie_gonzalez escribe 09.10.16

Aunque el artículo sobre George Harrison no incluye nada que no hayamos leído antes, siempre es un placer repasar la historia sobre los Beatles y sus carreras solistas sobre todod e George Harrison quien efectivamente sentimos que nos quedó a deber con el talento que todavía tenía dentro. Sus canciones no pasarán de modo mientras haya gente que valore el talento humano

 

 

Inicio

Nacional

Internacional

Cibernética

 

Literatura

Cine

Medios

Y demás