MEDIOS: Esto era... CNN

Alguna vez fue el canal informativo estrella en el mundo pero hoy de hunde entre la mediocridad, la nota tendenciosa y el desinterés de los espectadores, tanto así que su máximo de televidentes se encuentra en las salas de espera de los aeropuertos internacionales

SEPTIEMBRE, 2012. Corrían los primeros meses de la década cuando al televisión por cable probaba que podía ser financiable cuando el 16 de junio de 1980 un empresario de Atlanta llamado Ted Turner lanzó al aire Cable News Network, más conocido por sus siglas CNN. El concepto era arriesgado, un canal de noticias las 24 horas con enfoque en la información mundial que hasta entonces se manejaba escasamente en los medios norteamericanos. Con un plantilla original de seis anunciadores (newscasters) y 12 corresponsales, 8 de ellos en Estado Unidos, la empresa era sumamente modesta y provocó reacciones de burla apenas contendida entre los colegas de Turner: "¿24 horas de noticias en televisión? Su éxito dependerá de 23 horas agregadas al desayuno", ironizó la revista Newseek mientras TV Guide aseguró: "La apuesta por las noticias como entretenimiento es arriesgada.. hay mucho en juego y es dudoso que funcione exitosamente".

Menos de seis meses después, CNN había probado a todos que sí era costeable, que sí entretenía y que sí podía tener influencia; tan exitosa fue la jugada que mes y medio después apareció MTV, con un concepto similar aunque en torno a la música. Año y medio después CNN tenía una paltnilla de 23 comentaristas, 90 empleados y 83 corresponsables en Estados Unidos y en el mundo, incluido Moscú, entonces capital de la Unión Soviética. Más aún, en 1990 probó suerte como CNN Internacional, con sede en Londres, y lanzó al aire CNN Headline News, con noticias al momento, todo mientras el canal matriz se convertía en una revista visual con textos y reportajes sobre política, moda, showbizz y tecnología sin caer en la chabacanería; eran momentos en que CNN estaba a unos puntos de MTV como el canal de cable más sintonizado en la Unión Americana.

Sin embargo el momento de gloria de CNN llegó con la primera Guerra del Pérsico en 1991 cuando tres de sus corresponsales, Bernard Shaw, John Holliman y Peter Arnett, transmitieron en vivo el bombardeo aliado sobre Bagdad debido a que la autoridad local "olvidó" cortar su línea desde el hotel Al-Rashid. Holliman aseguró luego que ese "descuido" había sido "protegido hasta con nuestras vidas" aunque luego se permitió a Arnett seguir transmitiendo cuando era el único corresponsal extranjero que cubría la guerra. Se acusó a Ted Turner de haber negociado esta "exclusiva" que, de pasó hundió el rating de las demás televisoras en Estados Unidos. CNN era sintonizado igualmente por Hussein y als fuerzas aliadas en busca de información. "Nuestro éxito se debe a nuestra cobertura equitativa", presumió Turner.

Bueno, hasta cierto punto. Turner nunca escondió sus simpatías de izquierda, no solo por estar casado con la actriz "progresista" Jane Fonda sino de ser amigo de Fidel Castro al punto que tras una visita a La Habana consiguió los derechos exclusivos como única agencia extranjera autorizada a transmitir desde la isla, situación que jamás incluyó algún reportaje sobre activistas como el recientemente fallecido Osvaldo Payá o las cárceles clandestinas retacadas de disidentes. En 1996 Turner vendió la mayoría de las acciones de su emporio a Time-Warner, que se hizo cargo de CNN y de su línea editorial. Uno de los primeros proyectos de los nuevos dueños fue liquidar a más de 400 empleados y de abrir CNN en español... y de estrechar el vínculo con el Partido Demócrata.

Cuando George W. Bush conquistó la presidencia en el 2001, CNN volcó a su equipo de reporteros hacia la Florida para verificar el "fraude" que se había dado en ese estado y que le estaba costando el triunfo, según ellos, al demócrata Al Gore. Ahi inició una relación de odio mutuo entre CNN y la Casa Blanca, el cual aumentó tras los atentados del 11 de septiembre del 2001 y creció inusitadamente tras la invasión a Irak y el huracán Katrina que golpeó a Nueva Orleans.. Pero a diferencia de lo ocurrido una década atrás, el rating de CNN empezó a declinar notablemente. Había dos claros culpables, la aparición del Internet, que hizo que mucha gente recibiera la información sin tener que esperar sentada frente al televisor, y la competencia: en el último lustro habían surgido cadenas como Bloomberg, MSNBC y, Fox News, de tendencia conservadora y propiedad del magnate Rupert Murdoch. Fue esta última la que empezó a atacar directamente el rating de CNN, y si no lo alcanzaban se debía al programa de Larry King, la corona del canal e imbatible desde fines de los ochenta.

CNN había dado algunas exclusivas, entre ellas el maltrato a los prisioneros en Guantánamo y los problemas de alcoholismo que el entonces presidente George W. Bush padeció en su juventud. Pero la percepción, sobre todo en ésta última, era que se había desatado una compaña personal contra el mandatario más que ser una mera cobertura informativa. Una posterior encuesta de Rasmussen mostró que los televidentes percibían que CCN imitaba el "New York Times Method", esto es, editorializar lo que se supone es una noticia. Para el 2010, con Bush fuera de la Casa Blanca y Barack Obama en la presidencia, se pensaba que una CNN más "liberal" lograría levantar el rating. Sucedió lo contrario.

Para colmo, Larry King anunció su salida del canal a mediados del 2010, y no tanto por orgullo sino porque su legendario programa también comenzaba a hundirse en preferencias. King, los directivos del canal, los asesores del conductor, no se sabe exactamente, pensaron que sería buena opción que se entrevistara a personajes de izquierda radical, entre ellas Jeremiah Wright, el "tío chiflado" de Obama. la "gurú antiglobalización" Naomi Klein, el cineasta Michael Moore, el actor "progre" George Clooney, el infaltable Jese Jackson y hasta el presidente iraní Mahmoud Ahmadineyad. Lo que empezó como un ameno programa de entrevistas a celebridades terminó convertido en plataforma de vituperios, y King pagó el precio. de Cualquier modo, su salida terminó por desplomar el rating.

El pasado julio The Economist público en su sitio que CNN tenía una audiencia por hora de 450 mil espectadores, que en contraste con canales como Sony o MTV, que llegan a tener 3 millones en ese mismo lapso, son cifras ridículas. El hecho es que actualmente la credibilidad de CNN se encuentra bastante golpeada y no parece haber forma de remediarlo. En contraste, CNN Internacional mantiene su rating relativamente saludable, lo mismo que CNN en español, aunque en esa cadena también se ha percibido un lento descenso. Pero a la larga se piensa que será capaz de sobrevivir.

¿Dejará TIME Warner dejar hundirse a CNN o cambiará la estrategia? La respuesta quizá la sabremos transcurria la elección presidencial de noviembre en Estados Unidos, daod que desde hace rato CNN e ha manejado con criterios políticos, más que periodísticos.

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