MENSAJE DE LA SANTÍSIMA VIRGEN, RECIBIDO A TRAVÉS
DE JOSÉ LUÍS MANZANO GARCÍA, EN
TALAVERA (Toledo).
EL DIA 12 DE JUNIO DE 1988.
La Madre: La Paz de Dios-Padre Todopoderoso esté con todos
vosotros.
PUBLICO: Y con tu Espíritu Madre.
La Madre: Ave María Purísima.
PUBLICO: Sin pecado concebida.
La Madre:
Una vez más, hijos míos, he vuelto hasta vosotros, y he llegado
para
seguir con vosotros, hijos míos, hablándoos, porque sé que mi
Palabra
fortalece los corazones, y aquí estoy hijos míos.
El mundo hijo mío, como bien te dije ayer,
se está dando cuenta de sus
errores, siempre hay un alma que aunque nunca ha sentido su
corazón, ese
corazón es grande hijo mío. Todo llega hijo mío, y el
mundo empieza a darse
cuenta. Hijo mío, escucha mi palabra:
«Jesús vino al mundo a salvar del
pecado a sus hijos, y por eso
murió en la Cruz, para salvaros hijos míos.»
Y ahora escucha hijo mío:
«Un alma que está en peligro, en cualquier peligro, hijo mío,
y otra
alma que lo ve, va y lanza a salvarlo hijo mío, y lo salva, esa
alma que
ha estado en peligro siempre dará gracias a su salvador.»
¿Porqué no hacerlo vosotros así? Dad gracias a mi Hijo, vuestro
Salvador,
que por vosotros así murió en la Cruz, con sufrimiento y con dolor.
Sólo
un Padre, como es mi Hijo, haría eso por sus hijos: Vosotros.
Hijo mío, todo empieza y todo llega, las señales se acaban hijo
mío,
y todo llega:
«Cuando veáis esa cruz tan grande en
el cielo, empezad ya, hijos míos,
a rezar, como bien dijo mi
Hijo, delante de un crucifijo,
o delante de una
Imagen mía, hijos míos, y arrepentíos de todos vuestros pecados.»
(1)
Todo llega hijo mío, las señales se acaban, y Yo ya lo he dicho
todo,
hijo mío. Mira hijo mío, viendo las señales las almas.
Tú sé fuerte y camina
hacia adelante, por donde Dios te ha señalado hijo mío, que Dios
siempre
estará contigo, como siempre ha estado hijo mío.
¡Sé fuerte!, las señales se acaban, todo está dicho.Tú camina
hacia
adelante, pronto te tocará a tí, hijo mío. ¡Pedidme, hijos míos!
PUBLICO: ¡Madre!
La Madre: ¡Dime!
PUBLICO: La Imagen que nos dices..., ¿es igual que sea una imagen
en
estatua, o que sea un cuadro?
La Madre: Da igual, hijos míos,
lo importante es que lleve mi Bendición;
nunca la olvidéis. ¡Nunca! Seguid pidiendo.
PUBLICO:
Madre, como nos dices que nos arrodillemos y pidamos perdón, pues
no hará
falta estar los tres días, ¿verdad, Madre mía? Porque no lo
aguantaríamos, o
aguantaríamos con tu ayuda a estar los tres días, que nos dices que
vendrán
de castigo. (1)
La Madre:
Yo os daré las fuerzas necesarias, porque Yo estaré con
vosotros, así
dije y lo vuelvo a decir:
«Una Madre nunca abandona a sus hijos, ni en lo bueno ni
aún
en lo malo, siempre está al lado de sus hijos.»
Y Yo os bendigo, como el Padre así os bendice:
Padre Eterno: En Mi Nombre.
El Maestro: En el Mío.
La Madre:
Y con la Luz de Mi Amado Esposo El Espíritu Santo..., ya estáis
bendecidos.
PUBLICO: Gracias Madre.
La Madre:
Bien, hijos míos, llegó la hora de marcharme, pero Yo volveré
contigo,
hijo mío, y con todos ellos. Ya sabéis que vendré más a menudo a
visitaros.
Adiós hijos.
PUBLICO: Adiós Madre.
Padre Eterno: Adiós hijos.
PUBLICO: Adiós Padre.
El Maestro: Adiós hijos.
PUBLICO: Adiós Maestro.
El Hermano: Adiós hermanos.
PUBLICO: Adiós Hermano.
El Hermano: Adiós hermanos.
PUBLICO: Adiós Hermano. ____
______
(1) Ver Mensaje
27.5.1988, anuncia su Segunda Venida