MEDIOS: Para reír o lamentarse? TV Azteca cumple 20 años

El salinismo transfirió dos de sus frecuencias televisivas a los particulares en espera que con ello se incrementaría la calidad de sus contenidos. Dos décadas después el saldo es triste. TV Azteca copió, y de ribete rebasó, a la mediocridad de su principal competidora. Ello no evitó, claro, que los nuevos concesionarios recuperaran rápido su inversión

AGOSTO, 2013. Cuando el salinismo se aproximaba a la mitad de la presidencia, la serie de privatizaciones de armatostes del sector público se encontraba a marcha de toda vela. En mayo de 1992 el Diario Oficial de la Federación anunciaba la licitación de las frecuencias de los canales 7 y 13, entonces llamada Imevisión, para ser transferidas "a la sociedad civil", es decir, a los particulares. "Ello garantizará una saludable competencia", llegó a manifestar el entonces mandatario Carlos Salinas. Y aunque Imevisión había tenido un buen desempeño durante la administración del ingeniero Pablo Marentes, un veterano del canal 11 del IPN, la cadena, que incluso recibía publicidad privada, seguía arrojando números rojos.

Como se esperaba, la competencia entre los aspirantes a concesionarios fue feroz. Finalmente fue el empresario Ricardo Salinas Pliego quien ganó la licitación de los dos canales. Salinas pertenecía a una familia de empresarios muebleros que por años habían tenido negocios con la familia Azcárraga, de Televisa. Según Andrew Paxman y Claudia Fernández refieren en El Tigre, Azcárraga saludo al nuevo concesionario con un "bienvenido, cabrón". Un eufórico Salinas Pliego declaró luego a la prensa; "Mi compromiso es realizar una TV de calidad" para más adelante agregar "soy un convencido de que se puede educar entreteniendo".

A dos décadas de aquellos polvos, queda claro que Salinas Pliego nos vio la cara o, sencillamente, su concepto de "educar entreteniendo" es muy diferente al resto de nosotros. En vez de buscar una alternativa a lo la programación de Televisa, el también magnate de los electrodomésticos se puso a copiar a su competidor, una carrera hacia la puerilidad donde lo malo solía imitar a lo peor. Hay que darle mérito a los primeros años cuando TV Azteca se asoció con Argos, productora que lanzó telenovelas tipo thriller político como Nada Personal, realizada con actores que procedían en especial del teatro y el cine.

Parte del problema es que Salinas Pliego carecía en lo absoluto del concepto de cómo manejar un medio como la TV y optó por mantenerse como el gerente de una empresa. Sus pleitos y sus corajes hoy son ya legendarios, primero con su ex socio, el ya fallecido Andrés Saba, su principal socio accionista y luego, sin tener pruebas concretas en la mano, culpó al entonces jefe de gobierno del D.F., Cuauhtémoc Cárdenas, por el asesinato del locutor y animador Paco Stanley, quien por muchos años fuera empleado de Televisa. Su spot, que apareció cada hora en las horas previas al atentado, mostró a un Salinas Pliego fúrico e indignado, algo que se reflejó cuando soltó la caballería en sus noticieros, y aun programetes como Ventaneando, para golpear al GDF.

Uno de los activos más poderosos que TV Azteca heredó de Imevisión fue su barra de deportes. Por lo menos desde 1977, cuando Televisa sacó al aire Acción, un programa que competía con DeporTV, éste le daba frecuentes palizas en el rating gracias a la dirección de José Ramón Fernández, un tipo que ha dicho que no le interesa participar en concursos de simpatía. El análisis de programas como DeporTV hicieron que por muchos años Azteca tuviera más teleaudiencia que Televisa, sobre todo en los mundiales y los juegos olímpicos. Pero en el 2008 Fernández emigró a ESPN y la barra deportiva de TV Azteca cayó en lo chabacano, con narradores de partidos de futbol con complejo de payasos del pastelazo.

Veinte años después, aquellas promesas parecen mal chiste. TV Azteca está hoy saturada de esos programas matutinos "de variedad" donde los únicos que se ríen y divierten son los conductores. Ventaneando, por su parte, sorprende por la capacidad que pueden tener tres o cuatro personas en un set para hablar intrascendencias ininterrumpidas durante sesenta minutos. Hechos es la versión electrónica de un pasquín tipo Alarma! Pocas cosas son rescatables: si mucho esos programas sabatinos de concurso (¡Y ya basta de Te Caché, por Dios...!)

Con todo, a Salinas Pliego no le ha ido mal: en estas dos décadas Salinas y Rocha pasó a ser la cadena de tiendas Elektra, y también es propietario de Banco Azteca. Lamentablemente, desde hace rato los contenidos de su televisora huelen a agua estancada. (Para darnos una idea de hacia dónde iba la tirada de TV Azteca hacia mediados de los 90, la Cadena Tres es vendría a ser una buena referencia)

El anunció de la creación de dos nuevas cadenas comerciales debiera ser un aliciente para mejorar la calidad de la televisión abierta mexicana. Pero este hecho nunca superado por otra noticia que suena imposible en el México actual: que una familia optara, en vez de adquirir un televisor, por un un mueble lleno de libros.

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3 Comentarios

ronnie_gonzalez escribe 11.07.13

Recuerdo que al principio hubo intentos interesantes para hacer de TV Azteca una cadena seria como el análisis de revistas internacionales y hasta hace poco un programa los domingos por la mañana que era una ensalada cultural, pero al final ganaron la academia y otras babosadas, pero sin exculpar totalmente a Salinas Pliego pues el solo trata de llenar una demanda, la culpa la tiene la SEP que en estos años ha enviado a la basura los niveles de educación en México, puede haber un canal cultural comercial de primerísima calidad pero si el público prefiere los programas gruperos o las telenovelas nada hay por hacer

bolton_situs escribe 10.07.13

TV AZTECA HA SIDO UNA DESGRACIA EN SUS 20 AÑOS, CUANDO ERA IMEVISION O CANAL 13 HABÍA SERIES DE GRAN INTERÉS COMO LOS SÁBADOS CON SALDAÑA Y SOPA DE LETRAS, CINE EUROPEO DE ALTA CALIDAD, SERIES MAGNÍFICAS DE LA BBC. HOY SE HA CONVERTIDO EN UNA PORQUERIA QUE LO MISMO PASA VENTANEANDO, CHISMES DE CELEBRIDADES Y TELENOVELAS IGUAL O PEORES QUE LAS DE TELEVISA. NO HAY NADA QUE CELEBRAR

juan_moreno 09.07.13

La programación de Imevisión con la de TV azteca nos da una idea de cuanto han bajado los niveles de educación en México, pobre de nuestro México que está en manos de gente como Ricardo Salinas Pliego