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Y
DEMÁS/Música
El rock de alto
vuelo de Tom Petty
Su trayectoria ha sido de mediano perfil, pero tremendamente
efectiva. Después de un accidente que por poco y pone fin a
su virtuosismo, Tom Petty and the Heartbreakers nos dieron
una lección de lo que es excelente rock el pasado Superbowl
Versión impresa
SEPTIEMBRE, 2008. La
frustración del guitarrista era incontrolable, tanto así que
golpeó con fuerza una pared con su puño derecho. Por el
coraje no sintió el dolor pero más tarde Tom Petty se
encontraba en el hospital donde fue intervenido tras haberse
fracturado dos dedos de la mano además de requerir una
sutura en los nudillos. Para alguien que vivía de tocar
guitarra, ese incidente equivalía a que un piloto de avión
perdiera un motor en pleno vuelo. Por ello lo primero que
preguntó al cirujano que operó su mano fue si sería capaz de
tocar. "Es probable, pero le sugiero que vaya viendo otras
alternativas", le respondió. "La única alternativa era
volver a pasar mis dedos por las cuerdas", dijo Petty.
El año era 1980 y la razón de la furia del rubio compositor
era el desmesurado aumento en el precio de los entonces
populares LPs. Tras discutir fuertemente con los ejecutivos
de su sello MCA para bajar el precio exigiéndoles sacrificar
su margen de ganancias, el guitarrista se fracturó la mano
en un acceso de rabia.
Es una actitud poco frecuente en Tom Petty, por lo regular
un tipo tranquilo, de sardónica sonrisa. Pero su integridad
artística era más importante que las utilidades; hasta hoy,
Petty se ha opuesto al alto costo de los boletos de sus
conciertos; vive bien pero muy lejos de esas mansiones que
cuestan millones de dólares ni tampoco tiene avión propio;
"la ostentación y los lujos desmedidos son también una
manera de faltarle el respeto a nuestros fans", acota el
cantante, quien el el pasado Superbowl recibió 150 mil
dólares por la presentación, muy por debajo de quienes
cobraron casi un millón, como Janet Jackson y Britney Spears
(con actuaciones decepcionantes, agregamos).
Petty proviene de una estirpe acostumbrada a luchar contra
un ambiente adverso. Su bisabuelo, emigrado de Irlanda, fue
reclutado para luchar en la Guerra Civil al lado de los
Confederados mientras que su abuelo tuvo que emigrar de
Georgia tras contraer matrimonio con una india cherokee,
algo que en su comunidad era visto como menos que un
sacrilegio, de modo que por las venas de Petty corre sangre
"de dos grupos étnicos desplazados por defender sus ideales,
Posiblemente de ahí viene la inspiración de muchas de mis
canciones, las cuales hablan de huir en busca de un nuevo
comienzo", expresa.
En ocasiones ese ideal lo ha llevado a situaciones
desalentadoras, no sólo cuando se fracturó su mano; en el
2000 y en el 2004 apoyó con todo a los candidatos
presidenciales demócratas y vio cómo perdían en las
elecciones, algo que, agrega, "te deja tirado en el piso,
sin expectativas, pero que a los pocos días te regenera para
seguir adelante con mayor ahínco". Respecto a Barack Obama
lo ve como una esperanza con más posibilidades, "dicen que
no tiene mucha experiencia pero que alguien me cuente lo
costoso que nos está costando la supuesta experiencia de
George W. Bush. Nos urge intentar algo nuevo, algo
diferente... los norteamericanos estamos hartos de las
mismas caras viejas de quienes sólo han mostrado experiencia
para arruinarnos".
Con todo Petty está consciente que muchos de sus fans son de
tendencia conservadora: "Jamás los ofendería ni les faltaría
el respeto, estamos en un país libre. Pero no es requisito
ser demócrata ni republicano para concluir que hemos tenido
un presidente inepto e imprudente".
Hippismo sureño
Nacido en Gainesville, Florida, el mismo lugar de donde
surgió Lynyrd Skynyrd, Petty ya vivía el sueño hippie desde
aún antes que llegara a San Francisco. Le gustaban los
Beatles y los Stones pero mostraba especial admiración hacia
The Byrds, influencia que sería decisiva en su carrera. Poco
después de empezar a dominar la guitarra se unió a The Epics,
un grupo local de corta vida. "Me di cuenta que cuando
empiezas y deseas ser grande desde el principio deberás
enfrentar una guerra interna de egos", refirió. La
separación fuera amistosa, aunque los otros integrantes ya
sabían que el destinado a cosas grandes sería Petty.
El suyo trató desde el principio desmarcarse del rock
sureño, no por tener nada en contra sino por el temor de que
fuera juzgado "como esas dos familias de montañeses que se
odían entre sí y viven en una colina". Así pues, tras su
salida de The Epics, Petty se hizo acompañar de Mike
Campbell, otro ex miembro con quien fundó The Heartbreakers,
grupo que pasó la mitad de los setenta en pequeños centros
nocturnos de Florida y Georgia hasta que el sello MCA los
firmó en 1975. Su primer disco epónimo fue un éxito absoluto
con los temas "American Girl" y "Breakdown", ejemplos del
mejor rock norteamericano de los setenta.
Respecto a "American Girl", Petty recordó cómo en los 80
Roger McGuinn, líder de los legendarios Byrds, lo invitó a
platicar. Al llegar le entregó una guitarra y la exigió que
interpretara ese tema. "Estaba temblando, parecía que se me
iba a salir el estómago", apuntó Petty. Al terminar McGuinn
comentó, abiertamente impresionado, "hubiera jurado que era
yo quien estaba tocando". "American Girl" ha sido
seleccionada por varios especialistas como una de las
canciones representativas del rock del siglo XX. En los 90
fue presentada a una nueva generación cuando Jonathan Demme
la incluyó en la cinta Silence of the Lambs, aunque
ha aparecido en otras películas, con sus consiguientes
regalías para el rubio cantante.
Damn the Torpedoes, su tercera producción, terminó
por dar a Petty estatus de consagrado, pues hasta hoy es su
disco más importante en términos comerciales. De éste
salieron "Refugee", "Don't Do me Like That" y "Even the
Losers". A éste le siguieron "The Waiting" y "You Got Lucky",
que también fueron ampliamente difundidas por MTV, y también
cantó junto a Stevie Nicks en el hit "Stop Draggin' Me Heart
Around". Fue en esos días cuando un frustrado Petty estuvo a
punto de arruinar su carrera con el puñetazo ya referido.
Por dos años se mantuvo en rehabilitación y recibiendo
amigos, entre ellos Dave Stewart, creador de los hoy
desaparecidos Eurythmics y también excelente productor, así
como Bob Dylan. Fueron éstos quienes ayudaron a salir de la
depresión a Petty, tanto así que Dylan lo invitó a
participar con él en un segmento de su gira mundial.
El resultado fue una de las giras más exitosas de los 80, no
tanto así el disco Jammin' Me --producido,
naturalmente, por Stewart-- donde Petty quiso emular las
letras del cantautor de Minnesota y el resultado fue un
material entre mediocre y presuntuoso, algo que el mismo
guitarrista reconocería años después. (Southern Accents,
el otro disco producido por Stewart, incluía el hit
sicodélico "Don Come Around Here No More").
El Willbury entra a escena
A lo largo de su trayectoria, Petty ha tenido oportunidad de
conocer en persona a la mayoría de sus héroes musicales, y
no sólo eso, trabajar con ellos en una cabina de grabación.
"Tu podías ser un fan de Mickey Mantley pero era poco
probable que te invitara a jugar beisbol con él. Esa es la
diferencia cuando compartes el escenario con otro músico",
dijo Petty.
Y amigos que no eran en lo absoluto ordinarios: George
Harrison, quien no precisa de mayor presentación y al que
conoció gracias a Jeff Lynne, el ex líder de ELO y productor
además de Cloud Nine, el exitoso disco que el
exbeatle lanzó en 1987. Lynne presentó al grupo a Roy
Orbison, al que admiraba profundamente y se consideraba ser
"su fan número uno en todos los territorios de la Corona
inglesa". Harrison y Dylan se conocían desde años atrás de
modo que esos cuatro monstruos de la creatividad invitaron a
Petty a unírseles al clan, primero para tomar algunas
cervezas los fines de semana y compartir anécdotas.
Inevitablemente Petty se sintió intimidado, no sólo por ser
el más joven sino por el impresionante curriculum musical de
todos. "Recuerdo que veía a Harrison enfrente de mí y
pensaba ¡él escribió 'Here Comes the Sun'! y luego volteaba
hacia Orbison ¡el mismo que cantó 'Pretty Woman'!, y luego a
Dylan, el autor de 'Like a Rolling Stone', todo mientras
estaba sentado al lado de Jeff, quien compuso 'Don't Let Me
Down', todas ellas canciones que eran parte de mi vida". Sin
embargo Lynne le confesó algo meses después. "Jeff me dijo
'cuando te vi sentado frente a mí recordé que eras el mismo
que había escrito 'American Girl' y me intimidé'".
Mejor,
imposible: Bob Dylan, Jeff Lynne, Petty, Roy Orbison y
George Harrison, the Traveling Willburys
La idea de grabar un disco juntos no tardó en aparecer.
Aunque todos estaban firmados para sellos diferentes no hubo
mayor problema en arreglar el asunto dadas las potenciales
ventas que había de por medio. Los cinco miembros de The
Travelling Wilburys habían lanzado material recientemente de
manera que, como dijo Lynne, "los músculos aún estaban en
condición para hacer más ejercicio". Era prácticamente
imposible que ese disco no fuera un hit, de modo que
decidieron grabar una segunda parte, pero poco después de
concluir las sesiones Orbison falleció de un ataque
cardiaco. Eso marcó el fin de The Travelling Wilburys y el
inicio de una estupenda colaboración de Petty con Lynne como
productor de Full Moon Fever, un material solista que
puso en la cima temas como "Free Fallin'" y "Running Down a
Dream". En varios de los tracks colaboraron no sólo el ex
líder de ELO sino el mismo Harrison. Into the Great Wide
Open, aparecido en 1991, también contó con la
colaboración de ambos.
En medio del Tazón
Al llegar los 90 Tom Petty ya era considerado un icono del
rock norteamericano; buena parte de los grupos de grunge lo
consideraban influencia indispensable dada su integridad
artística. Hasta hoy se ha rehusado a que su música sea
utilizada en comerciales pues explica que con ello se pierde
su esencia original. También fue de los primeros en oponerse
al intercambio de MP3s suyos en la red aunque también puso
en línea una canción semanas antes que apareciera el
sencillo hasta que su sello discográfico lo obligó a
retirarlo. Con ello su viejo pleito con su firma disquera
resurgió aunque esta vez Petty no estaba dispuesto a golpear
otra vez la pared en señal de frustración. Abandonó MCA y se
hizo freelance años antes que otros artistas
siguieran la misma ruta.
Para su Greatest Hits, aparecido en 1994, Petty contó
con la participación de Rick Rubin, productor lo mismo de
hip hop que de rock tradicional, para la grabación del
cover de "Something in the Air".
En el 2002 la NFL lo invitó a participar en el medio tiempo
del Superbowl. Petty declinó la oferta pero luego del
tremendo fiasco en las presentaciones de Birtney Spears y
Janet Jackson --y la idea de ofrecer un producto
norteamericano menos plastificado-- Petty aceptó la oferta,
y lo hizo con The Heartbreakers, con quienes no se había
presentado en vivo por más de un lustro. Hasta hoy ese
miniconcierto es considerado entre los mejores que habido en
las 42 ediciones del Superbowl.
¿Qué queda para Tom Petty en el futuro? "Cuando amas en lo
que trabajas nunca quieres detenerte. Supongo que seguiré
escribiendo música hasta que mis capacidades lo permitan. Me
siento afortunado por haber encontrado mi misión en esta
vida".
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