MEDIOS: Adiós, Winamp, diré que alguna vez te conocí

Conforme la tecnología del Internet se va trasladando a los gádgets móviles, lo que parecían programas sólidos en la red paulatinamente van saliendo de escena. Winamp fue un magnífico programa multimedia, pero le ha llegado la hora de despedirse de sus admiradores

DICIEMBRE, 2013. Increíble, pero verídico: lo que alguna vez pensamos era un software neurálgico de la red, en menos que brinca una pulga pasa a ser obsoleto. ¿Quién ha olvidado cómo dejábamos la computadora encendida toda la noche mientras se bajaban nuestras canciones o videos preferidos? ¿Gnutella, Limewire, Napster --el primero-- y Audiogalaxy ya nos suenan ya jurásicos? Todo ello ha ocurrido en un plazo menor al decenio; poca gente recuerda, por ejemplo, que Yahoo tuvo su propio reproductor de audio que competía con el Windows Media Player. Real Player, por otro lado, parecía ser imbatible pero hoy se necesita ser un fan de los Indios de Cleveland --o en su defecto, del Necaxa-- para seguirle siendo fiel.

La palabra "sofisticación" aplicada al Internet pierde vigencia aun antes de terminar de pronunciarla.

Toca el turno a Winamp, que en su momento, se dijo, habría enterrado en efectividad al WMP, algo muy factible pues si algo ha causado corajes a millones de usuarios de Windows es su artilugio multimedia. Winamp hizo su aparición en momentos que las mentadas hacia el WMP eran abundantes pues no permitían el copiado de CDs para escucharlos en reproductores portátiles. En muchos sentidos, el Winamp era una maravilla, con buscador de estaciones de radio, ajuste de sonido al gusto del usuario y muy fácil de utilizar (con el WMP esos ajustes estaban más ocultos que el cuerpo de Jimmy Hoffa), no se trababan tanto los archivos MP3s que, por insólita razón, se niegan a se reproducidos. Y también ofrecía salones de chat para echarse platicadas con otros winampheads.

El Winamp tenía un inconveniente, los anuncios publicitarios que podían evitarse al adquirir la versión premium, muy parecida pero cuya calidad de grabación era superior. Sin embargo la mayoría conservamos la opción gratuita.

No debemos olvidar que el Winamp nació como respuesta contestataria a los programas corporativos que, a principios de la década pasada, estaban adueñándose de la red; Winamp fue el equivalente a esos navegadores alternos, como Linux, temerosos que Microsoft se comiera toda la tarta (curiosamente, pasaron años para que el Winamp estuviera disponible en Apple). Por esa razón fue el preferido de los geeks, los hackers y todo aquél que ni de chiste quería abrir el Windows Media Player.

Pero en el mundo de la red no necesariamente el ser el más popular significa tener los mejores ingresos y si no pregúntenle al Napster de aquellos años. Para el 2002 Winamp sufría serios problemas económicos pese a que entonces unas 80 mil personas descargaban diariamente el software de modo que fue adquirida por America On Line que ya para entonces comenzaba a anegarse.

AOL, a su vez propiedad de Warner, poco a poco se convenció que había hecho un mal negocio al comprar a un buscador que ya estaba en decadencia. Con el auge de la telefonía en Internet y los gádgets móviles, Winamp intentó adaptarse, sin éxito, a las nuevas tecnologías.

Ya desde el 2012 se especulaba sobre la desaparición del Winamp e incluso se confió en que los usuarios se "pondrían guapos" con sus donativos para mantener con vida al software.

Ello no ocurrió y Winamp anunció que a partir del 21 de diciembre, inicio del invierno en el hemisferio norte, dejará de estar disponible y ya no ofrecerá actualizaciones de modo que a sus usuarios les queda la opción de eliminarlo o de esperar a que un día el programa desaparezca junto con el resto de su equipo de cómputo.

Ni hablar, las reglas del negocio en la red cambian con las horas, Gnutella, Yahoo Media Player, Altavista, entre decenas más, lo esperan en el valhalla cibernético.

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