A diferencia de la observación nocturna, el Sol no plantea ningún problema por falta de luz, ya que la cantidad que recibimos de él es tan grande que en todos los casos es necesario algún tipo de filtraje. Por otra parte si tomaramos toda la luz recogida por el objetivo, sería casi imposible obtener tiempos de exposición o integración tan cortos, sumándole el deterioro por calentamiento de las superficies situadas en las zonas donde la luz estaría concentrada. 
Es necesario advertir aqui que el Sol nunca debe observarse directamente a través del telescopio o cualquier otro sistema de ayuda óptica, ni tampoco a simple vista ya que los daños en la retina pueden ser irreparables. 
Los filtros que normalmente se venden para colocar en el ocular no son nada aconsejables ni seguros, no solo por la mala calidad de las imágenes debido a la turbulencia engendrada sino porque suele producirse la rotura brusca de éstos por calentamiento de los rayos concentrados, con las consiguientes consecuencias. 
   

La construcción de este tipo de filtro-tapa persigue las siguientes ventajas: 
   
El filtro (Protane DIN 12 o 14) en sí, no sufre un calentamiento importante ya que al ser situado en un lugar donde la luz no ha sido aún concentrada, se comporta normalmente como un objeto expuesto al sol, minimizando la posibilidad de rotura, por otro lado las características de este filtro lo hacen especial para altas temperaturas. 
   
Su precio es bajo 2 $ o dólares y puede ser adquirido en cualquier ferretería, ya que se utiliza normalmente para las máscaras de protección para soldadura eléctrica. 
   
Las características de este filtro lo hacen especialmente adecuado ya que filtra las longitudes de onda del ultravioleta y el infrarrojo (no visibles), particularmente daninos para la visión. 
   
Debido a las características de construcción del dispositivo, la mayoría de la luz no penetra en el tubo del telescopio donde, por el calentamiento provocado en la proximidades del foco, crearía inevitablemente una turbulencia nefasta. 
   
Por tratarse de un filtro-tapa para telescopio reflector abierto, el filtro juega además el rol de lámina de cierre, con lo que se elimina buena parte de la turbulencia en el tubo. 
   
Diagrama de acople al telescopio 
 

La construcción del filtro es sencilla y se basa en una tapa que cierra el tubo del telescopio (diseñado para reflector con espejo de 200 mm) con un orificio calculado para dejar pasar un 0.78% de la luz normal que incidiría en el espejo, al que se le interpone un filtro para soldadura eléctrica DIN 12 o 14 Protane. 
   

  

La construcción de la tapa puede hacerse de cartón o plástico reforzado pero ha de tenerse especial cuidado en su estanqueidad a la luz y una perfecta fijación del filtro para evitar que se desprenda por el calor incidente. 
El orificio de entrada de luz es un medio círculo de 3 cm de diámetro y ha de practicarse cuidando que su base se encuentre a 5 cm del centro de la tapa 
   

Con este dispositivo acoplando un reductor de focal puede fotografiarse el disco solar completo, con la fotografía a foco primario se podran distinguir las manchas solares que son zonas que contrastan por su oscuridad con el resto de la fotósfera solar. 
   

Estas manchas tienen una temperatura inferior a la de su entorno y dentro de ellas se distinguen zonas de sombra y de penumbra. Las manchas surgen cuando el campo magnético del Sol está concentrado e impide el flujo de energía. 
Uno de los hechos más llamativos, constatados desde hace siglos, es que la actividad solar relativa a las manchas solares se concreta en períodos característicos cada 11 años, en los que primero se alcanza un máximo con un gran número de manchas y posteriormente baja lentamente su presencia hasta alcanzar un mínimo, en el cual no se observa prácticamente ninguna de ellas. 
   
Ultimas consideraciones 
     

Como ya hemos dicho, la observación del sol reviste cuidados especiales y particularmente debe protegerse la salud de nuestra vista, es por ello que se recomienda para casos de pura observación visual, utilizar el filtro Protane DIN 14 y no prolongar las observaciones por mas de 30 segundos. En caso de deslumbramiento puede incorporarse en el ocular un filtro para observación lunar. 
Para centrar el Sol en el campo del ocular nunca debe usarse el buscador, éste debe permanecer con sus tapas y en lo posible protegido del calentamiento para que no se deformen sus ópicas. 
El proceso de centrado del Sol en el ocular debe hacerse a partir de la sombra proyectada del tubo del telescopio en el piso, buscando alinear hasta encontrar una sombra lo mas redonda posible, de esta forma se consigue un centrado que luego puede corregirse con la visión normal por el ocular.