LÍMITES CRONOLÓGICOS
Etapa que corresponde al periodo llamado Neoclasicismo en el resto de las artes.
Como referencia de inicio del clasicismo musical se toma el año de la muerte de J. S. Bach en 1750, aunque el clasicismo pleno se identifica con la llamada Primera Escuela de Viena, hacia 1760, finalizando con el triunfo del espíritu romántico a principios del s. XIX.
LOS ANTECEDENTES EN DIFERENTES PAÍSES
En las primeras décadas del s. XVIII comienza a desarrollarse un nuevo estilo que considera el contrapunto barroco demasiado rígido y que prefiere mayor espontaneidad musical y reniega de un único estado de ánimo presente en la obra.
Esta reacción fue diferente en diversos países:
En Francia la nueva corriente, llamada rococó
o estilo galante, y ejemplificada por François
Couperin, se caracterizaba por tener una textura homofónica, esto
es, una melodía acompañada con acordes en vez del discurrir
ininterrumpido, como en la fuga barroca.
La composición típica era corta y programática, con imágenes extramusicales como las de pájaros o molinos de viento. En ocasiones se hacía una yuxtaposición de frases musicales, como en la música para danza.
El clavicémbalo era el instrumento más popular.
En el norte de Alemania el estilo anterior al clasicismo se llamó
empfindsamer Stil o estilo
sentimental, más amplio en los contrastes emocionales que el
estilo galante, que tendía a ser sólo elegante o agradable.
Las obras eran generalmente más largas que las franceses y se servían de varias técnicas puramente musicales para darles unidad.
No confiaron en referencias extramusicales como hicieron los franceses, y por ello los alemanes ocupan un importante lugar en el desarrollo de las formas abstractas, como la forma sonata, y en el de los grandes géneros instrumentales, como el concierto, la sonata y la sinfonía.
En Italia, a pesar de no contar con un nombre específico para el estilo anterior al clasicismo, se contribuyó también al desarrollo de los nuevos géneros, especialmente de la sinfonía.
La obertura de la ópera italiana, llamada con frecuencia sinfonía, y sin conexión temática con la obra a la que introducía, progresó hacia la forma sonata, basada en un movimiento de acercamiento y distanciamiento con un tono principal.
Los alemanes tomaron la idea de escribir una sinfonía instrumental independiente e hicieron surgir de ella diferentes géneros y formas musicales.
Se empezó a distinguir entre música
de cámara, con un instrumento tocando cada parte, y música
sinfónica, con varios instrumentos para cada una de las partes.
EL CLASICISMO PLENO
El apogeo de la música del s. XVIII conocida como estilo
clásico o clasicismo se produjo
verdaderamente a finales del siglo con la música de un grupo de compositores
que formaron la «escuela de Viena».
Los más importantes fueron Joseph Haydn, Wolfgang Amadeus Mozart y Ludwig van Beethoven.
En la ópera, el gran género
de la época, se produjeron grandes cambios.
En Italia había perdido mucho de su carácter originario de «drama
con música», llegando a ser un conjunto de arias escritas para
el lucimiento de los cantantes.
Varios compositores europeos reintrodujeron los interludios instrumentales
y los acompañamientos y las intervenciones corales, y dieron variedad
a las formas y estilos de las arias. También trataron de combinar grupos
de recitativos, arias, dúos, coros y secciones instrumentales dentro
de las mismas escenas.
El reformador más importante fue Christoph
Willibald Gluck, mientras que con Mozart
la ópera de este periodo alcanzó su grado más alto de
perfección, caracterizando a los personajes tanto con los aspectos
vocales como con los instrumentales.