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¿Quecomesqueadivinas?

De sobra es conocido que The Iron Lady le dio a Meryl Streep su tercera estatuilla como Mejor Actriz. Lo que no se ha difundido tanto es que la película es tan mala que solo será recordada por su protagonista quien, sin embargo, realizó aquí un papel flojo comparado con sus filmes anteriores

The Iron Lady DVD Edition
Meryl Streep, Jim Broadbent, Susan Brown 
Dirigida por Phyllida Lloyd


OCTUBRE, 2012. Durante su discurso de aceptación del Óscar por The Iron Lady, Meryl Streep dijo, con clara falsa modestia y en referencia a ella misma, "seguramente en casa todos dirán ¡oh no, ahí está otra vez nominada!", y es cierto, buena parte de los televidentes exclamamos ¿quecomesqueadivinas?: ¿en realidad había que darle su tercera estatuilla a la señora Streep por una película esencialmente mediocre e insípida? Simplemente pedimos al lector que vuelva a ver Sophie's Choice y comprobará que este tercer Óscar es el más inmerecido para una actriz desde que lo ganó Marissa Tomei por Mi Primo Vinny en 1993. ¿Entonces por qué se lo otorgaron? Déjame decirte las razones, Willis:

a) La deliciosa ironía para el Hollywood progre de que alguien conocida como la Dama de Hierro, que quitó absurdas prebendas a los sindicatos oficiales, que no se agachó ante la llegada de un nuevo dictador soviético y que le quitó lo fanfarrón a la gorilocracia argentina, aparezca aquí como un ser vulnerable, al punto de la demencia total que, según la película, es atormentada por el fantasma de Dennis, su esposo.

b) Auinque lo niegue, a Hollywood le siguen encantando los personajes que sufren padecimientos físicos. Ya premió a actores que caracterizaron a un autista, a un enfermo de sida, a un idiot-savant, el año pasado a un tartamudo y ahora a alguien que padece demencia senil.

c) Meryl Streep aún no realizaba un papel de esa catadura.

The Iron Lady es tan mala que la presencia de Streep es lo único que salva a esta película, aunque su acento británico con frecuencia sobresale por lo fingido. Las distorsiones históricas en torno a Margaret Thatcher son tantas que podríamos catalogarla como obra de ficción y, en fin, pareciera que lo que vemos en este DVD es no una película de la Dama de Hierro caracterizada por Meryl Streep sino a Meryl Streep caracterizando a la Dama de Hierro; es obvio que desde el inicio la película tenía como fin darle todo el lucimiento posible a la actriz. La táctica les funcionó, pos supuesto, por las razones arriba expuestas.

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Tiempos muy rápidos, la verdad: ya son tres décadas

Fast Times at Ridgemont High
Sean Penn, Phoebe Cates, Jennifer Jason Leigh
Dirigida por Amy Heckerling
Columbia Video/1982


OCTUBRE, 2012. Quienes fuimos adolescentes en los 80 recordamos que hubo una enorme marejada de películas donde los protagonistas eran adolescentes calenturientos. ¿Qué título les gusta? Porky's, La última virgen americana, Ferris Bueller, Valley Girl, Hot Dog, Risky Business, Despedida de soltero... Bueno, pues con esta película empezó todo. Lo extraño es que Fast Times at Ridgemont High, que acaba de cumplir el 30 aniversario de su estreno, tuvo baja recaudación cuando abrió en las salas de Estados Unidos y Canadá. Lo que la salvó fueron dos factores, uno, la explosión de canales de TV por cable donde podían presentarse películas sin cortes ni censura y, segundo, la llegada de los videoclubes.

Con frecuencia se cree que la película fue dirigida por Cameron Crowe --fue Amy Heckerling quien estuvo tras de las cámaras-- cuando lo cierto es que se basó en una novela suya. Crowe, como se sabe, empezó su carrera como reportero de Rolling Stone y, efectivamente, tras el estreno de esta película decidió convertirse en director. Sin embargo Fast Times at Ridgemont High ya incluye todos los elementos que han caracterizado sus películas, desde Vanilla Ice hasta Almost Famous, esto es, un mundo donde las cosas suceden alrededor de la música. Fue Crowe quien resucitó "Tiny Dancer", una canción semiolvidada de Elton John, al incluirla en Almost Famous al punto que ya no hay recopilaciones del cantante que la omitan. Los soundtracks de sus películas, por tanto, están completísimos y por sí mismos son obras coleccionables. Ah ¿y olvidamos mencionar que hasta el 2010 Crowe estuvo casado con Ann Wilson, la vocalista del grupo Heart?

Las cintas de adolescentes calenturientos también despegaron la carrera de muchas figuras hoy consolidadas. En ese género empezaron Tom Hanks (!), Tom Cruise --la escena donde baila en calzoncillos una canción de Bob Seger-- Jon Cryer, Charlie Sheen, Judge Reinhold, el güero que aparece como detective en Beverly Hills Cop, Patrick Swayze y Ralph Karate Kid Macchio, entre los más conocidos. Pues bien, Fast Times lanzó a Sean Penn en su papel de Jeff Spicoli, un dude bueno para nada que asiste a la escuela porque no encuentra otro sitio en la vida. Otra actriz que debutó ahí fue la (entonces) soberbia Phoebe Cates; su escena al lado de la alberca es considerada una de las más candentes en la historia del cine. Pero a diferencia de Penn, Cates no pudo despegar y lo más que logró posteriormente fue un papel en la primera Gremlins (luego se casó con Kevin Kline).

El argumento de la película hoy suena a lugar común pero en su momento era algo inusitado para tratar en el cine, el despertar sexual de varios adolescentes y la forma de lidiar con éste, algo nada fácil. Stacey (Jason Leigh) busca entregarse por primera vez a un hombre idealizado. Su amiga Linda (Cates) ya dio ese paso y no solo eso, cualquiera puede buscar intimar con ella con un mensaje sutil, el dejarle una zanahoria en su mesa. Pero hay otros, como Jeff Spicoli (Penn) cuyo mayor placer es fumar la yerba, incluso dentro del campus. Según algunos críticos del momento, lo que buscaba Fast Times era advertir sobre la sociedad hedonista que comenzaba a desarrollarse en los Estados Unidos a inicios de los 80, así como evidenciar el choque generacional entre maestros y alumnos --los primeros son en su mayoría sexagenarios-- y cómo, al final, nadie consigue alcanzar la felicidad, ni Stacey, ni Linda, ni Spicoli. La cinta es lo que llamaríamos dramedy, una combinación de drama y comedia donde la primera es la que termina imponiéndose.

La edición en DVD contiene algunas escenas editadas, aunque no las más explícitas que tuvieron que ser suprimidas para evitar que fuera clasificada solo para adultos, lo cual la habría afectado en taquilla (según Leigh, en una escena recortada el contacto con su coestelar fue "más que íntimo"). Lo que sí incluye son entrevistas con Cates, Reinhold y la directora Ackerman y, por supuesto, Crowe, quien revela en quién se inspiró para crear a Jeff Spicoli.

 

 

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