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The Big Lebowski, la magnum opus de los hermanos Coen

Como  la mayoría de las películas de los hermanos Coen, éste fue un fracaso en taquilla. Sin embargo pasó a ser material de culto e inclusive un modo de ver la vida para muchos fans. La edición de lujo viene presentada como bola de boliche junto con material adicional y entrevistas con director y protagonistas. 

The Big Lebowski 10th Anniveesary Edition
Jeff Bridges, John Goodman, Steve Buscemi
Dirigida por los hermanos Coen
Warner Video/2008


AGOSTO, 2012. Algunos fans consideran que The Big Lebowski fue la primera obra maestra de los hermanos Ethan y Joel Coen, pues se trata quizá de la cinta que mejor representa lo que han sido sus trabajos, generalmente basados en el humor negro corrosivo, varias tramas servidas como emparedado y una historia donde el espectador se ríe porque a él no le ocurre lo que a los protagonistas. Tales intrínguilis, como se ve, no son tan fácilmente digeribles, y muy seguramente eso se comprobará con Burn After Reading la cinta que los Coen acaban de estrenar en cartelera, de ahí que la mayoría de sus películas tengan recaudación muy baja en el cine pero elogios desmedidos de la crítica y ventas-rentas un poco mejores cuando aparece la versión en DVD.

Ese es el caso de The Big Lebowski. En término comercial ya recuperó la inversión en DVD. En otros aspectos, como el cultural, la historia del Dude --a quien los subtituladores han dado nombres vaciadísimos, desde "El Fino", "El Pareja", "El Compa" y "El Carca"-- constituye un auténtico fenómeno. Así como hay quienes tejen su vida alrededor de La Fuerza y Star Wars, legiones de fans tienen como centro de su universo a este protagonista.

Para el efecto, y aunque The Big Lebowski ya había aparecido en video hace varios años, esta edición con motivo del décimo aniversario de la cinta viene acompañada, primero, de una presentación en forma de bola de boliche y, luego, con entrevistas, datos e información para todos aquellos que no pueden llenarse del Dude personificado por Jeff Bridges (inspirado, se nos dice, por un tal Jeff Dowd, amigo de los directores oriundos de Minnesota. 

El Dude es un tipo que vive en Los Ángeles y empedernido fumador de carrujo. Su vida cambia cuando dos tipos lo confunden con un millonario apellidado Lebowski, como él. Todo este proceso lo llevará a un mundo que gira en torno a esas ciudad. Asimismo, en sus --abundantes-- ratos libres El Dude va a jugar boliche con un tal Walter Sobchak (John Goodman), un veterano de Vietnam con severos problemas mentales mientras la peor memoria que le queda al Dude de toda esta aventura es que se hayan orinado sobre su amada alfombra. Es una comedia negra pero, debemos aceptarlo, bastante divertida: ¿cómo olvidar esa escena donde el encargado de entregar los zapatos de boliche no es otro que Saddam Hussein?

La advertencia final sería recordar que el cine de los hermanos Coen no es fácil de digerir, pero una vez que se le encuentra el tono resulta, la mayoría de las veces, entretenido. Burn After Reading, su producción más reciente, pierde mucho de este importante elemento. Como sea, valga este décimo aniversario para revisar las andanzas del Dude --el DVD incluye una bibliografía suya-- para ver cómo fue que The Big Leboswki llegó a la cumbre de las rarezas, sí, pero muy bien hechas.


Pasada la ira, concluimos que fue un bodrio

Anger Management
Jack Nicholson, Adam Sandler, Marisa Tomei, John Turturro
Dirigida por Peter Segal
Miramax/2003


En ocasiones nos vamos con la finta de quien ha ganado un Óscar nos garantiza posteriores películas de gran calidad, creencia totalmente falsa si recordamos que, por ejemplo, Robert De Niro participó en la infumable Bullwinkle. Más aún, si hablamos de un actor nominado 11 veces a la estatuilla y ganador de ésta en dos ocasiones como es el caso de Jack Nicholson. Anger Management, donde aparece con el comediante Adam Sandler, es una comedia simplona, desgastante para toda paciencia y llena de abrumantes clichés.

Todo empieza cuando Sandler interpreta a un sujeto que acaba de romper con su novia y, con el estrés a full, estalla a bordo de un avión por lo cual se le envía con un siquiatra deschavetado --naturalmente, el papel de Nicholson-- quien lo ayudará a superar sus accesos de ira. Pero no sólo será su terapista, pues se va a vivir con él y no sólo eso, le arroja a la pared unos huevos fritos porque no están preparados como él los quería. Cuando el paciente se harta, Nicholson le responde que, adelante, entonces no firmará el documento que lo evitará de pasar una temporada en prisión por "conducta agresiva".

La pregunta aquí para el personaje de Sandler es ¿qué acaso no había en todo Los Angeles más siquiatras? Nicholson, con todo y lo excelente actor que es, aquí vuelve a representarse a sí mismo mientras que Sandler, bueno, ídem. A esta "comedia" se le acaba el aire poco después de la mitad de manera que el director Segal decide incluirnos varios clichés, entre ellos un viejo amigo de Sandler convertido en monje tibetano, así como los infaltables aplausos cuando nuestro protagonista logra "graduarse".

¿Pero por qué es tan mala Anger Management? Tal vez porque es el descarado refrito de Loca Academia de Policía III donde varios conductores imprudentes deben pasar varios días de lecciones de manejo a cargo de un policía pedante (Jeffrey Jones, el Emperador en Amadeus). El otro fusil es aquella legendaria caricatura donde Bugs Bunny le va descontando el dinero de una herencia a Sam, Bigotes quien, en consecuencia, debe controlar su ira. No hay nada nuevo, pues, bajo el astro hollywoodense. Y por lo visto, tampoco dentro de los cráneos de muchos de sus guionistas.



 

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