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Abba, desde Suecia

Muy pronto tendrán su propio museo en su país de origen. Pero aparte de ello, durante ocho años este grupo vocal se adueño del pop europeo hasta la llegada de su inevitable declive

DICIEMBRE, 2006. Después de Gran Bretaña, Suecia es el país que más música pop en inglés consume en toda Europa. Enumerar razones sería muy largo aunque conviene recalcar dos: la carencia de una cultura anglofóbica similar a la de Francia. Otra es el clima. El encerrarse a escuchar música en un país que tiene apenas tres meses donde el sol se pone después de las seis de la tarde y cuyas bajas temperaturas son poco idóneas para otras actividades. Otra razón, quizá la más importante: a los suecos les encanta el pop cantado en inglés, algo que se remonta a los primeros años del rock and roll.

Por ello no deja de ser irónico que Abba haya tenido un éxito fenomenal en casi todo el mundo y que en Estados Unidos apenas y se hayan asomado al Top 100 de Billboard. Sus únicos dos hits los hacen aparecer en ese país como one hit wonders (1) cuando en realidad tuvieron una decena de hits en lugares tan disímbolos como Líbano y Australia; inclusive la entonces URSS llegó a presentar su música en emisiones "para jóvenes" de Radio Moscú. El gobierno sueco también estaba contento: durante el reinado de Abba --a saber, de 1974 a 1981-- les representó en pago de impuestos una importante tajada en coronas, esto hasta que los representantes del grupo cambiaron su centro de operaciones a Londres, donde, de todos modos, las tasas impositivas para los artistas eran bastante altas. Pero también fueron una inversión segura en el mercado de valores de Estocolmo.

Como se ve, el estar juntos casi una década representa una hazaña para cualquier grupo pop vocal. Los Osmond duraron apenas un lustro, lo mismo que los Jackson Five pero, bueno, las Spice Girls duraron seis. La diferencia es que el pop de Abba no era tan superficial, por lo menos en sus primeros años. Las dos cantantes tenían grandes voces y su armonización era absoluta, eso por no mencionar su atractivo físico; una de ellas rubia escandinava y la otra de cabellera oscura, ambas con fantásticas piernas. Si a ello añadimos las melodías perfectas nos explicaríamos el porqué del éxito de Abba en buena parte del globo.

Waterloo y la reina que baila

Pocos fans podían memorizar nombres tan complicados, por ello a Agnetha Fältskog se le conocía como Anna, a Anni-Frid Lyngstad-Fredriksson era Frida; Björn Ulvaeus ayudó a practicar la pronunciación de un tenista sueco del mismo nombre que poco después sería igualmente famoso. Solamente con Benny Andersson no era necesario fijarse tanto en el deletreo. Lo mejor. entonces, que se les pudo ocurrir fue poner la primera de sus iniciales al grupo que los inmortalizaría.

"Con frecuencia la gente se formaba una idea muy distinta a la que teníamos en mente al componer aquellas canciones", dijo Benny Andersson. "Mucha de nuestra inspiración provenía de artistas desconocidos y de discos que nuestros fans seguramente no compraban"

Contrario a lo que pudiera pensarse, los cuatro ya eran celebridades en su país natal desde antes. Cercanos a los 30 años, ya no estaban precisamente en la edad de convertirse en ídolos juveniles de modo que cuando se les juntó para actuar en el Europop Festival de 1974 era la última oportunidad para permanecer vigentes. El tema que ahí presentaron, llamado "Waterloo", resultó el ganador, lo cual les valió un contrato con la disquera Atlantic, la cual distribuyó su material en Estados Unidos, donde se convirtió en un hit menor.

Sin embargo en el resto del mundo "Waterloo" fue un hit monumental. Su sonido y estilo no era tan superficial como el de otras canciones bubblegum que abundaban en la radio. Ese fue apenas el inicio pues llegaron otros éxitos, entre ellos "Fernando", dedicado a un combatiente ficticio de la Guerra Civil española y la sarcástica "Money, Money Money", la cual, por cierto, les valió críticas de hipocresía hacia un grupo que criticaba la avaricia mientras se enriquecía a borbotones. Pero en otras partes donde el único mensaje esa la música, se veía a Abba como el grupo comercial más exitoso de Europa después de los Beatles.

"Knowing Me Knowing You" fue el siguiente gran hit de Abba. Era una clara alusión a la revolución sexual escandinava. Sin embargo lo que imperaba era su estilo pop, aparentemente ligero pero con raíces en el R&B norteamericano y el soul de Motown dentro de una interpretación muy europea. "Con frecuencia la gente se formaba una idea muy distinta a la que teníamos en mente al componer aquellas canciones", dijo hace años Benny Andersson, el de la barba. "Mucha de nuestra inspiración provenía de artistas desconocidos y de discos que nuestros fans seguramente no compraban".

Si bien los ex miembros de Abba han dado poquísimas entrevistas tras su separación, se sabe que uno de esos "artistas oscuros" era el trinitario George McRae, quien había tenido un solo hit mundial con "Rock Your Baby" en 1974. Insospechadamente, refiere Michael Tretow, quien fuera productor del cuarteto sueco, el ritmo de esa composición dio lugar al único número uno que Abba tuvo en Estados Unidos. Más todavía: la parte rítmica de "Rock Your Baby" sirvió de base sobre la cual la canción de Abba fue grabada. ¿El nombre de ese megahit? "Dancing Queen".

Algunos críticos sugerían que "Dancing Queen" era la denominación de una droga alucinógena popular en las calles de Estocolmo pero la realidad es que fue compuesta en honor de Silvia Sommerlath, quien se casó con el Rey Carlos Gustavo de Suecia en 1976. Su disquera le vio potencial para que Abba entrara en definitiva al mercado norteamericano de modo que la lanzó allá el primer día de 1977. No se equivocaban: "Dancing Queen" llegó al primer sitio del Billboard, primera vez que ello le sucedía a un grupo escandinavo. No por nada el título de su álbum, denominado Arrival (Llegada) y en cuya portada se ven los cuatro miembros descendiendo de un helicóptero. A fines de ese año fue estrenado un documental que narraba la gira mundial de Abba por todo el mundo.

Esa canción se había abierto insospechado camino dentro de unas listas copadas por la música disco y las baladas hiperligeras como "Evergreen" de Barbra Streisand y "You Light Up My Life" de Debbie Boone. 1977 había sido, por tanto, el mejor año para Abba. Para comienzos del 78 Benny y Anni Frid se casaron casi al mismo tiempo en que finalizaban las grabaciones del sencillo "Take a Chance On Me", que también llegó al Top Ten. Y ya encarrerados cometieron el pecado de brincar en definitiva al género disco con Voulez Vouz, inmensamente popular en Europa pero que también evidenciaba ser bastante convencional. Abba ya nunca más regresó a las listas norteamericanas.

Y aunque todavía lograron composiciones bastante buenas como "The Name of the Game", menos de dos años después de su "Dancing Queen", la decadencia del grupo se agudizó, aunado todo a que las tendencias musicales estaban cambiando inesperadamente; todo lo que sonara a disco fue abiertamente despreciado al terminar 1979 mientras que el europop de Abba parecía haber terminado. Al empezar los años 80 era evidente que le quedaba poco tiempo de vida a Abba de modo que músicos y productores se dedicaron a ganar tiempo dentro de un proyecto ambicioso que incluiría la traducción de sus hits al español, mercado al que veían como fuente de supervivencia.

El resultado fue Super Trouper que incluía "Voulez Vouz" y "Chiquitita", canción cuya versión al español fue lanzada simultáneamente. Las difusoras locales de música pop en ese idioma la transmitieron más como curiosidad y nada más. Para colmo, cuando algunos empresarios se interesaron en traer a Abba a América latina se toparon con la noticia de que el grupo se encontraba en "un proceso de reflexión que hacía imposibles las giras en ese momento". Dicho de otro modo, el cuarteto ya se había disuelto.

Una de las razones era la necesidad que Frida tenía de lanzar su primer disco solista pues sentía que Abba ya había terminado su ciclo y que prolongarlo afectaría irremediablemente la reputación de sus cuatro miembros. El resultado fue el álbum Something's Going On, el cual le daba a la cantante una imagen totalmente distinta. Y aunque el disco fue producido por Phil Collins, su éxito fue mediano, si bien fue la única miembro del grupo en aparecer en MTV. Menos de un año después también se retiró profesionalmente.

Pasados y presentes

En 1992 Atlantic lanzó The Abba Gold Collection el cual sorpresivamente se vendió bastante bien. Predeciblemente luego se lanzó Abba Oro, con las canciones traducidas al español que, predeciblemente también, se vendió mucho menos. Era el momento ideal para llamar a una reunión, y aunque hubo negociaciones positivas al principio. Ann Frid y Andersson terminaron por retractarse; "son páginas ya escritas (...) no tiene sentido volver a un escenario a recrear en vez de innovar", fue el terso comunicado de Andersson.

Había otra razón: Anni Frid Lyngstad ere la única de los cuatro que había nacido en Noruega y emigrado a Suecia durante la niñez. Durante décadas mantuvo en secreto el motivo, el cual comenzó como rumor en la prensa hasta que fue confirmado por la misma cantante. Su padre había sido un oficial del Partido Nazi enviado a Oslo para engendrar descendencia con mujeres que robustecieran a la raza "aria" fuera de las fronteras alemanas, todo como parte de un proyecto desesperado de Joseph Goebbels, el jefe de propaganda de Adolfo Hitler, en los últimos días del conflicto. La cantante nació como fruto de esa unión, en 1945, tres meses después de finalizada la Segunda Guerra Mundial. Por ello, y harta de los ataques y los insultos, la madre y la futura cantante huyeron a Suecia donde encontraron tranquilidad. "Siempre me he considerado y me consideraré sueca", dijo Lyngstad en el 2002, cuando se hizo público el escándalo.

Sin embargo hay quienes están decididos a explotar la veta de Abba hasta que se agote. En el 2002 unos productores lanzaron A-Teens, que interpreta los principales éxitos del grupo con una imitación rayana en el insulto, algo que tal vez explique su trascendencia casi nula.

Por supuesto que el camino abierto por Abba nos ha permitido conocer opciones del rock y el pop sueco como Yngwie Malmsteen, Europe The Cardigans y los efímeros Ace of Base que evidencian una boyante actividad musical. Sin duda ello se debe a esos cuatro participantes en el Europop Festival 74 y que resultan hoy indisolubles de los años setenta cada vez que nos referimos a ellos.

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(1) En México se les conoce como "hits de un día", esto es, cantantes que tienen un éxito enorme para luego volver al anonimato.

 

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