Descartadas como fechas de eventual realización el lunes 19
de abril y el domingo 2 de mayo, finalmente el referéndum constituyente
decretado por Chávez y organizado por el Consejo Nacional Electoral se llevó a
efecto en la fecha intermedia del domingo 25 de abril de 1999.
Con un margen de abstención del orden de 60 por ciento, un
voto favorable al "sí" próximo al 90 por ciento y una negativa cercana al 10 por
ciento de los sufragios válidos, la mayoría de la población se pronunció de
acuerdo con la realización de una asamblea constituyente, ofrecida por Chávez
desde 1992.
El próximo paso consistió en elegir a los 131
constituyentistas por nombre y apellido bajo las circunscripciones nacional
(24), regional (104) e indígena (3), por nominación propia, de partidos o grupos
de la sociedad civil.
Ello ocurrió, como se sabe, el domingo 25 de julio siguiente
con el mandato de elaborar una nueva constitución en un tiempo no superior a los
180 días (6 meses) a partir del día de la instalación. Bajo la presidencia de
Luis Miquilena, las vicepresidencias de Isaías Rodríguez y Aristóbulo Istúriz y
las secretarías de Elvis Amoroso y Alejandro Andrade, el martes 3 de agosto se
instaló la Asamblea, en el Aula Magna de la UCV.
"Iniciamos un proceso que no tiene retroceso. Nadie podrá
disminuir el carácter soberano de esta Asamblea. Estamos presenciando no el
cambio de un equipo de gobierno por otro, estamos en presencia de un cambio de
un sistema por otro sistema. La Asamblea no será de abuso de su poder sino de un
diálogo que produzca una transición sin traumas dañinos" (CNN, 03/08/1999),
afirmó Luis Miquilena, quien también declaró el carácter originario de la misma.
El funcionario venía de desempeñarse por primera vez como ministro de Interior y
Justicia del gobierno entrante de Chávez. "En el invierno de mi vida yo quiero
soñar con la primavera", expresó.
En la palabra le había precedido el constituyente y militante
del PCV Pedro Ortega Díaz, el de mayor edad, quien expresó que "el propósito de
esta gigantesca empresa es enfrentar la miseria, castigar la corrupción, la
inseguridad personal y el caos moral", (El Universal, 04/08/1999).