La misma inquietud se le planteó al actual contralor, Clodosbaldo Russián.

— Enfocar la corrupción —respondió- exclusivamente en el sector público es una tradición. Cuando se hace un análisis más minucioso y se investiga con profundidad, nos encontramos con que la corrupción pública es posible y solo posible en tanto que esté vinculada con la corrupción en el sector privado. La corrupción de mucho mayor volumen viene dada por la contratación de obras y servicios o la venta de equipos sofisticados. Y la construcción de obras es con el sector privado y las comisiones son con el sector privado. Si hay corrupción en la construcción de una autopista, la de Oriente digamos, allí hay un reparto entre el sector público y el privado.

Por su parte, el antecesor de Russián al frente de la Contraloría, Eduardo Roche Lander, nos reveló que "la situación de malestar en el manejo de los recursos públicos se ha venido incrementando, muy particularmente, en esta V República" (12/02/2001).

— Cuando el Estado es débil —nos señaló-, es decir, difuso y no puede controlar, eso es caldo para la corrupción. Cuando el Poder Judicial no sanciona, cuando el Poder Ejecutivo no toma medidas para que las cosas funcionen adecuadamente, cuando los órganos de control no ejercen adecuadamente su función en forma independiente y autónoma, pues estamos en una condición donde hay cultivo para la corrupción.

Para Roche Lander, "un Estado tiene sentido cuando los poderes se controlan unos a otros, cuando el Legislativo controla al Ejecutivo, cuando el Judicial sanciona adecuadamente los casos que se van presentando en la otras actividades del Poder Público. Cuando el Fiscal y el Contralor son elegidos en forma independiente y no complaciente".

— La experiencia nos ha dicho —resaltó Roche Lander- con relación a la Contraloría, que en los tiempos de dictadura se escogían contralores complacientes. En este momento no estamos en una situación de dictadura, pero se ha elegido a un Contralor que no ejerce su función. Si se eliminara la Contraloría hoy, el pueblo no sentiría ninguna diferencia entre la presencia de ella o no, porque no se están realizando las acciones de control que deberían ejercerse en este momento.

A juicio del ex Contralor, Chávez ha utilizado con éxito el tema de la corrupción en las campañas electorales y "lo sigue utilizando, definitivamente, para tomar cualquier decisión sobre aquellas personas que puedan ser contrarias a su posición", independientemente de que en cualquier organización puedan existir personas corruptas, "pero es claro que todas no lo son. Creo que la Confederación de Trabajadores de Venezuela, CTV, es un organismo importante y necesario, y también creo que hay líderes sindicales honestos y también los hay corruptos".