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Steve Nicks, una diosa del rock que ya siente el cansancio humano

Cuando se integró junto con su entonces pareja a un grupo de rock que iba en caída libre, esta cantante menudita de Arizona no solo revitalizó a esa organización sino que se labró por sí misma una imagen que hechizaba los escenarios. Sin embargo parece que el declive ya está afectando sus facultades físcas. Un repaso a la carrera de Stevie Nicks

NOVIEMBRE, 2018. A algunos les produce admiración y otros pena ajena el ver cómo muchas leyendas del rock de los 60, 70 y 80 aún se mantienen sobre el escenario aunque hace mucho tiempo haya pasado desde sus años gloriosos pues se trata de cantantes y músicos cuya edad promedio ronda los 70 años.

Paradójicamente, no se suponía que las cosas fueran a ocurrir de esa manera: como lo dijo hace muchos años Paul McCartney cuando él se acercaba a los 40 años de edad y su mayor temor era termina convertido en una "fruta vieja", afirmó entonces que, "en los años sesenta teníamos la idea de dejar la música y a tomar un trabajo formal al llegar a los 30 años", algo ejemplificado en modo más nítido por la frase de Pete Townshend (y que hoy es causa de enorme sarcasmo): "Prefiero morir antes que llegar a viejo".

Hay una razón poderosa que estos músicos sigan en activo, por supuesto. El circuito de grupos clásicos, de oldies y en general la explotación de la nostalgia produce tan solo en Estados Unidos 4 mil millones de dólaresal año y en él circulan desde artistas sobrevivientes de los años 50 como The Platters hasta gente que tuvo mucho éxito en los 90, como Spin Doctors. Sin embargo la mayoría de estos actos experimentaron su cénit en los 70; como dijo alguna vez Peter Frampton, veterano de aquellas luchas setenteras: "Esta modalidad es parte de la ley de oferta y demanda. Estaremos haciendo esto mientras haya gente que quiera comprar boletos para vernos sobre un escenario, o bien hasta que el tiempo y nuestro cuerpo nos lo permitan..."

Uno de los grupos más requeridos en el circuito es Fleetwood Mac, y ello debe en gran medida a Stevie Nicks, su vocalista principal, quien llegó este año a las siete décadas de vida. Sin embargo durante las presentaciones del grupo varios fans han detectado que Stevie olvida la letra de las canciones, las cambia o simplemente canta murmullos. De acuerdo al sitio Pagesix, "Nicks parece comenzar a tener lagunas mentales", pero los promotores de la gira de conciertos "han decidido continuar pues la ausencia de Nicks representaría millones de dólares en pérdidas y en reembolsos".

Es un temor justificado: a principios de año el guitarrista Lindsey Buckingham, durante muchos años pareja de Nicks, fue echado del grupo por su "comportamiento errático", siendo sustituido por los también guitarras Mike Campbell (Tom Petty) y Neil Finn (Crowded House). En respuesta, Buckingham tomó acción legal contra el grupo. "Por más talentosos que sean Campbell y Finn no formaron parte de la alineación que conformó al Fleetwood Mac de los 70 y parte de los 80 y que muchos fans consideran fue la más exitosa", señala Pagesix. "Si Stevie Nicks llega a salir del grupo, los demás miembros tendrían enormes dificultades para, en primer lugar, sustituirla y, segundo, lograr que el público acepte el reemplazo. Se ve muy difícil, si no es que prácticamente imposible".

(Por su parte, Buckingham afirmó que fue Nicks quien dijo que "ya no quería verlo" luego de una presentación donde, aparentemente, Buckingham hizo algunos comentarios de mal gusto. En consecuencia, la cantante dio un ultimátum a los otros miembros del grupo: o se iba su ex pareja o se iba ella").

Muchos años antes de eso, la menudita Nicks creció en Phoenix, Arizona, donde nació en 1948. En una entrevista Nicks recordó cómo su padre le leía cuentos de hadas y cómo ella se sentía la protagonista de aquellas historias. "Viví mi infancia pensando en castillos, dragones, príncipes azules que me rescataban y brujas malvadas", dijo Nicks, "quizá por ello desde entonces me atrajo la idea de ser una brujita buena". En ocasiones Nicks daba vueltas frente a un espejo y se tapaba con un abrigo negro", un paso de baile que luego la identificaría en los conciertos de Fleetwood Mac.

En 1967 Nicks conoció a Buckingham para luego formar un grupo musical de tendencias neohippies que no fue a ningún lado, como tampoco ocurrió con su primer disco. En ese tiempo Nicks y Buckingham se fueron a vivir a la casa que un amigo común les ofreció en renta en Laurel Canyon, un sector de Los Ángeles famoso por su espíritu bohemio y por ser refugio de las comunas hippies a fines de los 60. Nicks encontró un trabajo ordinario pero Buckingham, quien alegaba estar esperando que "le llegara la inspiración", permanecía en la casa donde tocaba un rato la guitarra, dormitaba un rato, se despertaba, consumía alcohol y mariguana, se volvía a dormir y así sucesivamente.

Sin embargo cuando Nicks regresaba del trabajo, Buckingham le exigía el dinero para repartirlo entre ambos. Nicks recuerda que "todo eso hoy lo veríamos como explotación, pero en aquel entonces aquello era juzgado como un acto de camaradería y compañerismo de pareja. Es una situación muy difícil de comprender hoy".

Nicks ya pensaba seriamente dejar a Buckingham a su suerte hasta que fines de 1973 su disquera, exasperada ante la falta de resultados del dúo, les comunicó que Mick Fleetwood, el líder fundador de Fleetwod Mac, buscaba desesperadamente tapar el agujero que le había dejado la salida de Peter Green. Hasta entonces Fleetwood Mac había navegado en las aguas del blues con escaso éxito, pero la entrada del dúo revitalizó al grupo a niveles impensables, sobre todo con la aparición de Rumours, un disco que desde su aparición en 1976 ha vendido casi 30 millones de copias, el tercero más vendido de la historia.

La tensión al interior del grupo (Buckingham y Nicks se estaban separando, lo mismo que los otros miembros John y Christine McVie) fue esencial en el éxito de Rumours, sobre todo en canciones como "Go Your Own Way", donde la letra intercambia insultos personales. Sin embargo el grupo siguió adelante hasta 1985, cuando se dio la primera separación importante. Desde entonces la relación amor-odio-amor ha continuado entre sus miembros, un momento que Nicks aprovechó para dar batería a su carrera solista.

Su contrato con Warner Records daba libertad a Nicks de grabar sus discos en el intervalo que Fleetwood Mac estuviera inactivo, aunque en algunos de ellos participó Buckingham. Durante todo ese tiempo Nicks reconoció que "estaba consumiendo cocaína a granel" al punto que su manager le exigió negarse a dar entrevistas ante el temor que pudiera decir incoherencias. La prensa especializada sugería que la fama "se le había subido" aunque con otros periodistas, aceptó la cantante, "todos consumíamos la droga y nos olvidábamos completamente que iba a a ver una entrevista". Por fin, en 1992, y con una nueva reunión de Fleetwood Mac, Nick pudo desintoxicarse.

De hecho y con la vida de excesos que llevan a cuestas los miembros de Fleetwood Mac, sorprende que aún sigan vivos, ya no digamos con capacidad de subir al escenario a interpretar los viejos hits. Pero quizá el tiempo está demostrando no ser tan condescendiente con algunas figuras del rock.

Lo que se supo años después era que desde mediados de los 70 Nicks había sufrido de fuerte adicción a la cocaína al punto que, ella misma lo ha reconocido, "en determinado momento tenía un enorme boquete donde deberían estar las fosas nasales". A principios de los 80 Nicks mantuvo una relación sentimental con el ex Eagle Don Henley, quien por años había sido pretendiente suyo (incluso grabaron el dueto "Leather and Lace", que llegó a las listas). Sin embargo la relación, por lo demás breve, terminó ante la imposibilidad de Nicks por dejar la droga.

La carrera solista de Nick en los 80 alcanzó cotos muy altos gracias a los álbumes Bella Donna --el que incluye el single con Henley-- The Wild Heart y Rock a Little, así como los sencillos "I Can't Wait" y "Talk to Me", entre otros. Pero la idea de abandonar Fleetwood Mac realmente nunca le pasó por la cabeza pese a que en casa reunión las chispas con Buckighman brotaban con frecuencia, "pero siempre hemos encontrado la manera de salir adelante", dijo Nicks en el 2011. Aparentemente las maneras, y la paciencia de Nicks, finalmente se han agotado.

Pero muchos fans sienten que algo similar ha ocurrido no con el talento sino con el aguante físico de la hechicera más célebre del rock, quien ya ha mostrado su agotamiento sobre el escenario. Quizá la salida tempranera de Buckingham haya sido antes que el barco de Fleetwood Mac, una de las glorias del rock británico, comience a hacer agua por todos lados, como un viejo barco... igual de quienes van a bordo.

 

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