Led Zeppelin, a martillazos

Auténticas leyendas del rock británico, a mediados de los 80 un periodista puso sobre el tapete lo que ocurría fuera del escenario y el comportamiento de estos cuatro músicos que, lo menos, era licencioso. Sin embargo Hammer of the Gods es libro considerado indispensable por los fans. Aclaremos la razón

MAYO, 2010. El segundo grupo británico más importante después de los Beatles se separó tácitamente menos de tres meses tras de la muerte de su batería John Bonzo Bonham, "un hombre encantador, carismático y siempre con una sonrisa", escribe el autor. "Pero nunca deberías acercarte a él cuando bebía pues se convertía en alguien violento, impredecible", y cita la ocasión en que se encontraba solo en un bar cuando una bella chica lo reconoció y lo saludó desde la barra. Sin decir palabra, Bonham se levantó, se acercó a la chica y la noqueó de un golpe. Bonham jamás se disculpó, "pues si no lo recuerdo es que jamás ocurrió", dijo días después. Petulancia, arrogancia y muchas orgías es lo que abunda en este libro de Stephen Davies, ex reportero de Rolling Stone.

La conducta de Bonham empeoró conforme crecía la fama e importancia de Led Zeppelin y, más aún, cuando supo que era un miembro imprescindible del grupo. "Tengo más dinero del que nunca imaginé pero me siento más vacío que cuando no tenía un peso en en el bolsillo, ¿por qué?", se preguntaba varias veces. Rara vez veía a su familia, la cual había sido sustituida por el mánager Peter Grant  y sus tres compañeros. "Las giras y la presión lo hicieron un sujeto irascible", escribe Davies, pero asienta que Jimmy Page, Robert Plant y John Paul Jones, las dos terceras partes de Zeppelin, enfrentaron la situación a su manera y que no siempre fue efectiva. Por ello la muerte de Bonham, en 1980, fue el pretexto para decir adiós al grupo, el cual, escribe su autor, ya estaba encaminado a su autodestrucción; "Led Zeppelin fue un grupo para los setenta, era imposible que trascendieran a la década siguiente".

Como es previsible, Hammer of the Gods, originalmente publicado en 1985, no fue bien recibido por los sobrevivientes miembros del cuarteto. "Lo hojee y terminé por arrojarlo al fondo de un río", dijo Page en una fra ya legendaria mientras que para Plant "sólo vi las últimas páginas para ver si incluía algo de mi carrera solista... posteriormente lo arrojé a la basura". Paul Jones ha sido menos diplomático: "Es una mierda ¿qué más puedo decir?"

Parte del enojo es que Davies compartió con el grupo tan sólo dos años, los que van del 74 al 76 --"los años de hedonismo", refiere Plant--, enviado por Rolling Stone, revista que lo sustituyó por Cameron Crowe como acompañante en una de sus giras. Fue en ese periodo cuando Zeppelin realizó, bueno, ciertos actos que no hablan muy bien de la flema inglesa, entre ellos la desfloración por parte de Page de una groupie californiana cuando apenas tenía 16 años y a quien a todos presentaba como "su novia", o el comentadísimo incidente en un hotel de Seattle del que nos limitamos a decir tenía que ver con pescado crudo y ciertas partes íntimas femeninas. Hasta la aparición del libro se especulaba que todo aquello habían sido algo así como leyendas urbanas del rock. Davies terminó por confirmarlas, así como la afición del guitarrista por lo oculto, de Plant con las jovencitas, siempre con cierto grado de paranoia temeroso que su esposa llegara de improviso de Inglaterra y lo descubriera in fajanti, o el bajista Jones, el genio silencioso de Zeppelin quien, según Davies, "poseía una capacidad amatoria que muchas admiradores decían que él era la verdadera 'escalera al cielo' por sus habilidades en ese campo". 

El más pasivo en tales lides era Bonham, y no tanto por ganas sino porque, dijo a Davies una groupie que departió con el grupo, "ebrio apestaba a alcohol y sobrio emanaba de él un hedor insoportable, como si disfrutara de su suciedad", mientras que otra chica refiere "después de la relación gustaba de soltar golpes... era un hombre realmente desagradable..."

Entonces, y si este libro es cualquier cosa menos una apología de Led Zeppelin, ¿por qué los fans lo consideran indispensable en sus anaqueles? Simplemente, porque Davies incluye aquí una soberbia discografía tanto legal como pirata, análisis exhaustivos de muchas letras de canciones y quiénes son en realidad esos personajes y situaciones que tienen más que ver con las andanzas de los zeppelines que con manifestaciones con la magia negra aunque "Stairway to Heaven" "sí tiene mucho que ver con esa obsesión que a Page producía el satanista Aleister Crowley". Pero, contrario a lo que se cree, la letra fue escrita por Plant y "perfeccionada" en ciertos puntos por Page. La máxima virtud de Hammer of the Gods es que Stephen Davies fue el primero en escribir un libro que dejaba al descubierto al Led Zeppelin que muchos seguidores quizá no imaginaban; de hecho hay quienes sostienen que fue la inspiración de Rob Reiner para escribir y dirigir This is Spinal Tap, película que abiertamente se mofa de la vida de los rock stars de los setenta.

Hammer of the Gods es lectura recomendable siempre y cuando se tengan a la mano un par de alka-seltzer debido a ciertos episodios nocivos para el estómago. Pero si nos limitamos a lo que es periodismo incisivo e informativo, este libro es un banquete que nos permite asomarnos a cuatro magníficos constructores del rock inglés y que siguen sonando tan necesarios hoy como hace 30 años, cuando Bonham optó por abandonar la organización sin oportunidad alguna de reincorporarse a ella..

Hammer of The Gods
Steephen Davies
Perfect Books/1985