Alejandro Topete del Valle. Biografía

3era. y última parte

 

Bertha María Topete Ceballos

Lic. en Historia, 3er. semestre

Secretario particular del gobernador Alberto del Valle

Regresó a Aguascalientes proveniente de la ciudad de México, invitado por su tío el Dr. Alberto del Valle - quien había sido electo Gobernador del Estado - para que colaborara con él como su Secretario Particular, cargo que aceptó con mucho agrado, ya que el volver a su tierra fue uno de sus más grandes anhelos. Lo desempeñó del 16 de diciembre de 1942 hasta el 1° de diciembre de 1944.

Organizador de la feria de San Marcos

Aproximadamente desde el año de 1942 a 1957 estuvo al cargo de lo que hoy se le nombra el Presidente del Patronato de la Feria de San Marcos. Este nombramiento no estaba instituido oficialmente como lo es ahora, sino que al estar con su tío Alberto como Secretario Particular, se desempeñaba al mismo tiempo en este otro, pero con los mismos atributos.

El día 24 de abril, como es día de San Alejandro, la feria prácticamente estaba en la casa de mis padres, donde se reunían toda clase de personajes: literatos, artistas, músicos, escritores, amigos, familiares, etc; mi mamá en buenas se las veía para ofrecer toda clase de comidas y aperitivos. Había cantantes, quienes amenizaban la tertulia y no faltaba algún poeta que recitara sus versos o que los compusiera en esos momentos. Al grupo de personajes que venían se le llamaba “la caravana lírica” y seguramente invitados por el Gobernador para darle más lucimiento a las fiestas. Entre ellos se recuerda a Pituka de Foronda, al Doctor I.Q., a Mauricio Magdaleno, Antonio Acevedo Escobedo, Agustín Yañez, Jesús Reyes Ruiz, etc., todos ellos amigos entrañables.

Don Pedro de Alba, persona de gran cultura y prestigio, servía de enlace entre el jurado y los trabajos literarios recibidos para concursar en los Juegos Florales. Como jurado del evento fungieron entre otros: Antonio Castro Leal y José Luis Martínez, quien premió a José Arteaga Pedroza. Podríamos mencionar a algunos destacados escritores como: Carlos Pellicer, José Rubén Romero (autor de Pito Pérez), etc., como mantenedores del mismo certamen que venían ex profeso a Aguascalientes.

Un detalle muy curioso acerca de esto, es que un día, cuando regresaban de la feria, más o menos por un 25 de abril entre los años de 1945 y 50 fueron a casa de mi tío Fernando Topete, mis padres y otros amigos, entre quienes se encontraba el compositor chileno Juan S. Garrido; él y otra persona que no se recuerda quién fue, se apartaron un momento del grupo y se dirigieron al piano donde comenzaron a tararear una melodía que después fue la famosa “Pelea de Gallos”, de esta manera nació esta canción tan popular que ha recorrido el país y traspasado nuestras fronteras; seguro que el ambiente bohemio y de feria, propició que este personaje se inspirara para tal composición.

Miembro de la Academia de genealogía y heráldica

Desde el 17 de julio de 1943, mi papá fue uno de los 24 académicos de la Academia Mexicana de Genealogía y Heráldica, fundada en la ciudad de México el 15 de mayo del mismo año. La heráldica es el arte de conocer los emblemas de la hidalguía de las personas y para dominarla se requiere haber leído mucho, de conocer el significado de los colores, las formas, las divisas, los esmaltes, las proporciones, etc.

Para ingresar a esta sociedad, mi papá tuvo que presentar un trabajo genealógico muy extenso e interesante sobre una de las ramas de la familia “Romo de Vivar”; éste es uno de los apellidos más antiguos y de mucha tradición en Aguascalientes y la región.2

Miembro fundador del Seminario de Cultura Mexicana

En Agosto de 1943, el Seminario de Cultura Mexicana - creado un año anterior en la ciudad de México por la Secretaría de Educación Pública - acordó organizar en Aguascalientes una de las que fueron las primeras Corresponsalías en los estados y Topete del Valle ingresó como miembro fundador y presidente. Entre otras personas que fueron miembros fundadores, estaban el profesor Francisco Antúnez Madrigal y el doctor Salvador Gallardo Dávalos.

También perteneció a la sociedad de Historia y Geografía, a la Sociedad Mexicana de Filosofía, a la Academia de Historia de Occidente y a la Sociedad de Estudios Astronómicos y Geofísicos.

Cronista de la ciudad y del estado

En el año de 1944, el Congreso del Estado lanzó la convocatoria para elegir al Cronista de la ciudad; cargo que recayó en la persona de Alejandro Topete del Valle3; nombramiento honorífico y de carácter vitalicio, que desempeñó desde el 12 de junio hasta la fecha de su fallecimiento (1999); labor desinteresada y cumplida de manera altruista hecha con un gran cariño por el enorme amor que siempre le tuvo a su tierra al recolectar tantas fotografías, papeles, periódicos, revistas etc.; el gobernador Otto Granados Roldán, gran amigo de la cultura y de las artes, al cumplir mi papá 50 años como cronista (1994) le reconoce su labor tan desinteresada y lo nombra además como asesor del Archivo Histórico.

Yo recuerdo que diariamente alguien le llamaba o se iba a tomar una taza de café a la casa para preguntarle algún dato, fecha, nombre o sucedido. Él con la misma amabilidad recibía a personas de cualquier condición. Muchas veces, a la hora de la comida sonaba el teléfono para solicitarle una entrevista o simplemente hacer una pregunta, nosotros le decíamos que no se levantara, que dijera que llamaran más tarde, pero nunca se quiso negar; solamente cuando estaba enfermo en cama,  se excusaba con un sinnúmero de explicaciones, que tanto a mi mamá como a cualquiera de nosotros sus hijos, nos hacía dar. Era un hombre que siempre estaba solícito cuando le requerían. ¡Además, le encantaba platicar de cuestiones históricas!era para él su mundo, su pasión.

Siempre que nos sentábamos a la mesa, había algo nuevo que comentar. Nos platicaba los sucedidos, como si hubiera sido testigo presencial, tenía una memoria excelente, por lo que yo le decía (en son de broma) lo egoísta que había sido, al preguntarme por qué, yo le contestaba que se había quedado con toda la memoria... él sólo sonreía.

Fue Síndico primero del M. I. Ayuntamiento de la Capital del 1° de enero de 1943 al 1° de enero de 1945. Él comentaba que había sido un verdadero “comodín” en todos los empleos que tuvo, ya que le llamaban de aquí y de allá, y les atendía con la mejor disposición.

Los escudos de la ciudad y del estado

En 1946 salió la convocatoria para adoptar el escudo tanto de la Ciudad como del Estado el cual fue adoptado oficialmente por acuerdo del M. I. Ayuntamiento de la Ciudad en sesión efectuada el 24 de mayo del mismo año.4 El autor del escudo de la ciudad fue el pintor y grabador don Francisco Díaz de León. El lema o divisa o empresa es original de Alejandro Topete del Valle, el cual reza así: Virtus in Aquis, Fidelitas in pectóribus. (Virtud en las aguas, fidelidad en los corazones).

El escudo del estado, adoptado oficialmente por decreto número 157 de la H. Legislatura del Estado fechado el 24 de mayo de 1946 y promulgado el 3 de junio siguiente por el Gobernador del Estado.5 El autor del escudo fue el señor don Bernabé Ballesteros; y de la inscripción del mote o empresa o divisa, Alejandro Topete del Valle. Y dice así: Bona Terra, Bona Gens, Aqua Clara, Clarum Coelum. ( Buena Tierra, Buena Gente, Agua Clara, Claro Cielo).

Contaba mi papá, al respecto, que un día un amigo le dijo que había sido un acaparador, a lo cual él le contestó que no era así, que si había participado en el concurso de los escudos, lo había hecho por miedo de que el certamen quedara desierto, lo que hubiera sido una vergüenza para Aguascalientes.

El gobierno francés le otorga la medalla de plata

En 1947, el gobierno de Francia le entregó la medalla de Plata como reconocimiento por la labor realizada durante la Segunda Guerra Mundial, al haber sido representante y fundador de las Naciones Unidas en esta ciudad.

Durante la guerra mis padres vivían en el Pasaje Ortega # 42 en una casa de altos; a un lado se rentó un local ex profeso y en la puerta se exhibían en un aparador los recortes de los periódicos, fotografías de los aviones y de los frentes de guerra de los aliados donde se daba la información de cuáles eran los avances que se tenían y de cómo estaba la situación. Mi papá era el encargado de trasmitirla, ya que en esta ciudad vivían algunos extranjeros, algunos de nacionalidad francesa; recordamos a los señores: don Emilio Berlié, (quien desempeñaba el cargo de cónsul de Francia) don Enrique Castaings, don Desiderio Cottié, don Pablo Brun, don León Signoret, don Julio Esmenjaud, don Honorato Imbert, don Juan Comte, don Juan Leautaud y algunos más que desde luego estaban muy interesados de lo que sucedía en su tierra natal y de los avances de los aliados.

Retomó las Cátedras en la Escuela Normal y de Bachillerato del Estado en los ciclos secundario y profesional de diversas materias, desde el año de 1944 al 27 de Noviembre de 1962, conjuntándolo también como Secretario de la Presidencia Municipal y del H. Ayuntamiento de la Capital del 1° de enero de 1946 al 7 de julio de 1950.

La Academia de Bellas Artes

Fundó la Academia de Bellas Artes del Estado (hoy Instituto Cultural de Aguascalientes) auspiciada por el Gobernador del Estado Jesús María Rodríguez Flores (El Chapo), y fue nombrado Secretario General de dicha institución, cargo que ocupó del 3 de Febrero de 1947 al 5 de Julio de 1950. Allí se comenzaron a impartir las clases de danza, de solfeo, pintura, orfeón, dibujo, francés, etc.

Por el año de 1951 fue invitado a trabajar por el Dr. Jesús Lozoya Solís y el Dr. Bretón, directores de los laboratorios de medicinas INFAN y UMESA y del laboratorio LUSA propiedad del doctor De Luna. Mi papá fue el distribuidor de estos medicamentos en los estados de Querétaro, Guanajuato, Zacatecas y Aguascalientes. Durante esta época con motivo de su trabajo tuvo que viajar mucho, fue un tiempo en que sus ingresos aumentaron y esto le permitió comprar su casa en la calle de General Barragán. La historia en aquel tiempo, no daba para vivir. Hoy en día existen diferencias, ya que las plazas de investigador en instituciones permiten que las personas se puedan dedicar a esta labor tan hermosa, como es el cultivo de nuestro pasado y a la vez puedan publicar los libros de sus investigaciones. La mayoría de las veces mi papá desembolsaba para publicar sus textos o en su defecto buscaba patrocinadores para la edición. Ejemplo de esto último fue la Guía para visitar la Ciudad y el Estado, libro muy consultado que fue auspiciado por don Nazario Ortiz Garza. Mi papá comentaba de ese libro: “que era mucho para ser su amante y poco para ser su esposa”. Con lo cual daba a entender que era muy breve para ser un libro de Historia, pero contenía mucho para ser una Guía del la Ciudad.

Primer delegado federal de turismo en el estado

El 25 de junio de 1954 se instituye por primera vez la Delegación Federal de Turismo y mi papá pasa a ser su primer delegado en el Estado de esta dependencia. Estando en esta actividad vio la necesidad de hacer un libro para los turistas y   los habitantes de Aguascalientes que estaban interesados por el origen de nuestra ciudad y sus monumentos arquitectónicos; de allí nació le idea de hacer un libro que fue la Guía para visitar la Ciudad y el Estado.

Miembro de la Academia Mexicana de la Lengua

El año de 1955, fue nombrado miembro de número 6 de la Academia Mexicana de la Lengua, correspondiente de la Española, cuya promoción fue, como ya dijimos, de don Artemio del Valle Arizpe, insigne escritor, poeta y dramaturgo. Esta Academia tiene la particularidad de que sólo se puede ingresar a ella siendo propuesto por alguno de sus miembros y con los reconocidos merecimientos. Así, pertenecieron también don Ezequiel A. Chávez y el Sr. Dr. Jesús Díaz de León.

El día 5 de marzo de 1956, mi hermano Alejandro falleció a causa de una enfermedad llamada mal de Banting, a los 22 años de edad, dejando una tristeza y una huella muy profunda. Él estaba estudiando el 4° año de Medicina en la Ciudad de México, de donde se tuvo que regresar por causa de la misma enfermedad. Este doloroso acontecimiento, fue para mis padres y sobre todo para mi papá una pena muy grande; él se dedicó a recolectar entre los amigos de “Chopi” (como le llamaban cariñosamente) todas las fotografías que pudo, queriendo así perpetuar su imagen.

Por tercera ocasión es Secretario Particular del gobernador, y diputado

El Ingeniero Luis Ortega Douglas al ser electo gobernador del Estado, lo invitó de nuevo para trabajar como su Secretario Particular, cargo que desempeñó del 1° de Diciembre de 1956 al 15 de Septiembre de 1959, cuando su partido Revolucionario Institucional, lo propone como Diputado propietario por el VII Distrito Electoral a la XLIV legislatura, ocupando este cargo del 16 de Septiembre de 1959 al 15 de Septiembre de 1962. El distrito comprendía los municipios de San José de Gracia, Pabellón y Rincón de Romos.

En un principio los habitantes no lo aceptaban totalmente ya que decían: “ él qué tiene de campesino”; pero que se arriesgaban al apoyarlo. Al salir electo, le dijo al Ing. Ortega que al aceptar el cargo, lo tenía que ayudar para hacer un buen desempeño. En efecto, el Ingeniero lo respaldó y así les construyó escuelas y hospitales. Al término de su labor, los pobladores quedaron complacidos, y además conservó muchas amistades entre ellos por muchos años.

Al terminar su encomienda como Diputado, siguió como catedrático de diversas materias en las Escuelas Normal y de Bachillerato del Estado del 16 de Septiembre de 1962 hasta el 24 de Julio de 1979.

Impartió también clases de Antropología en el Instituto de Ciencias, materia de la cual no era especialista; al aceptar dijo: “en la medida que yo vaya enseñando, voy a ir aprendiendo”.

Los murales de Palacio de Gobierno

En el año de 1961 el Ing. Luis Ortega Douglas convocó a un concurso para pintar los murales de Palacio de Gobierno, resultando ganador el pintor chileno Oswaldo Barra Cunningham. Él pidió asesoría a muchas personas para la realización del mural, entre ellas a mi papá por las cuestiones históricas regionales. Recuerdo las varias ocasiones que fue a comer a la casa y allí comentaban los avances y las cuestiones referentes a su trabajo así como las costumbres de la localidad ya que él, por ser extranjero, ignoraba muchos aspectos de la vida de Aguascalientes, aunque después fue su hijo adoptivo, por las muchas amistades que él dejó en esta tierra.

Presidente del club y gobernador del distrito rotario

Fue Presidente del club Rotario de la ciudad de Aguascalientes durante el ejercicio 1960-1961. En ese mismo año al terminar su gestión como presidente, fue electo Gobernador del Distrito 411 de Rotary International para el ejercicio 1961-62. El Distrito comprendía los estados de Chihuahua, Coahuila, Durango, Zacatecas, San Luis Potosí, Aguascalientes, Guanajuato y Querétaro. Cuando terminó su gestión como gobernador, ya había sido electo su sucesor, el doctor José Julián Franco, de Guanajuato, pero un día antes de entregarle el cargo falleció el doctor Franco; así que en vez de ir a su toma de posesión, le tocó asistir a su funeral.

Sus homenajes

El 18 de octubre de 1973, se le hizo un homenaje por el Instituto Autónomo de Ciencias (hoy U.A.A.). El discurso fue pronunciado por el Lic. Salvador Azuela, maestro, político de su tiempo y además un gran orador. Su mensaje, más que un homenaje, es una verdadera pieza de oratoria y de la cual entresacamos lo siguiente:

"Cuando uno pisa una Institución como ésta, siente que un grave pasado sostiene nuestra transitoria individualidad; sentimos la sombra remota de don Jesús Terán, prócer de la Reforma; sentimos la sombra próxima de don Pedro de Alba, paternal amigo de la juventud beligerante y andariega. (...) El homenaje a Topete del Valle, nos vincula a los recuerdos del Maderismo, a la Revolución que abrió horizontes hacia el pasado y abrió brechas hacia el porvenir. Hacia el pasado que determinó en Topete, la vocación de historiador(...) la historia no es nada más coleccionar fechas y nombres; no es desfile mudo ante los edificios del pasado, las reliquias de la Arqueología. La historia, como decía un maestro para nosotros tan querido como don Antonio Caso, es simpatía y libre examen; serena dilucidación de las ideas y de las acciones humanas y caridad para los merecimientos de la gente de escepticismo y bondad. El amor, contaba Paul Sabatier de la vida de San Francisco de Asís, es hablar de la historia, y es por el camino del amor, que Topete ha descubierto el camino de la Historia(...) historiador que no podía dejar de ser maestro; la vocación más difícil, el oculto dolor de entregar al parecer en forma indiferente, pero que luego se torna viva y cálida, lo más íntimo de la personalidad; (...) ligado por la historia al pasado; al futuro por la cátedra y al presente por el encanto incomparable de la conversación; si alguno la mantiene es Topete. Cómo sentimos el espíritu de los archivos, él que ha recolectado jugos de bibliotecas, de documentos y de noticias dispersas...”

En una ocasión el Lic. Azuela le dijo a mi papá: Alejandro, ya estamos en la “peligrosa edad de los homenajes”, refiriéndose a su edad madura.

Sus premios

Recibió las Palmas Académicas por el Gobierno del Estado; la Medalla Ignacio Manuel Altamirano por 50 años de servicio en la educación; varios premios por haber participado en los Juegos Florales; asimismo las Palmas Académicas de la Academia Nacional de Historia y Geografía.

Muchísimos diplomas más que están colgados en las paredes de su casa son reconocimientos de instituciones, clubes, gobernadores, asociaciones y de ciudades vecinas donde lo nombran hijo predilecto, porque él no sólo hizo la historia de Aguascalientes, sino que se interesó por la historia regional y pudo así proporcionar muchos datos a personas que quisieron escribir la historia de su ciudad.

Sus amigos

Tenían mis papás un grupo de matrimonios que se reunían los sábados por la noche durante 40 años, entre quienes se encontraban: el Dr. Guillermo Ramírez Valdez, Dr. Jorge Jirash, don Agustín Martín, Joaquín y Darío Cruz Ramírez, Joaquín Obregón, don Noel Ibarra, don Ramón C. Pérez, Dr. Alberto Guerrero, y el Dr. Salvador Martínez Morones, todos acompañados de sus respectivas esposas.

Posteriormente se reunieron los domingos por la tarde a jugar el “paco” o “escalerillado”, mi papá, su hermano Fernando, el Lic. Darío Cruz y el Sr. Alfredo Medina.

Se visitaba frecuentemente con sus hermanas María Teresa y Clara y sus respectivos esposos, el Dr. Salvador Gallardo Dávalos y Lic. Benito Palomino Dena.

Subdirector de la Escuela Normal del estado

Del 7 de Septiembre de 1966 al 24 de Julio de 1979, ocupó el cargo de Subdirector Administrativo de la Escuela Normal del Estado. Le ofrecieron la dirección de la Institución más él se negó,consideraba que lo conveniente era que una mujer ocupara ese cargo ya que en la Institución ingresaban personas del sexo femenino. Este nombramiento recayó en manos de la Profra. Carmen Ibarra de Briseño.

Descubridor de la tumba de Juan de Montoro y del general francés Luis G. Ghilardi

Por el testamento del yerno de don Juan de Montoro, quien había dejado encargado que lo sepultaran junto a su suegro, mi papá intuyó el sitio donde había sido enterrado éste primer poblador de la comarca, y auxiliado por un albañil, se dieron a la tarea de búsqueda, terminado con éxito. Hasta la fecha se encuentra la placa en la Catedral, conmemorando tal hallazgo. Está del lado izquierdo viendo de frente al altar y aproximadamente en la tercera columna.

Encontró en 1925 la tumba del General Ghilardi en el Panteón de los Ángeles, volviéndola a encontrar en 1994, cuando nació el interés por estudiar la vida de éste personaje de origen italiano que combatió junto a los liberales durante el gobierno de Benito Juárez.

Director del Museo de Aguascalientes

El edificio tan amado de estilo Neoclásico que ocupaba la Escuela Normal del Estado, a un costado del Templo de San Antonio y por tantos años casa de muchas generaciones de maestras (entre ellas la mía, ya que soy egresada de dicha institución), fue remodelado y adaptado por el Gobernador J. Refugio Esparza Reyes para establecer allí el Museo de Aguascalientes, del que mi papá fuera el primer Director, cargo que desempeñó del 22 de Octubre de 1975 (400 aniversario de la fundación de la ciudad) hasta el 15 de Marzo de 1980. A la “escuela Normal”, nombre con el que se le conocía, se le construyó un nuevo edificio que estuviera más acorde con los tiempos y con más amplitud dada la demanda de ingresos que tenía cada año.

Director del Archivo Histórico del Estado

En el período de gobierno del Sr. Rodolfo Landeros Gallegos, la Dirección General de Documentación y Registro se transformó en el Archivo de la Ciudad, del cual fue Director desde el 16 de Diciembre de 1980 hasta el 21 de Mayo de 1982.

El elenco se componía primeramente, de mi papá y Cuquita su secretaria; luego ingresó la Lic. Elizabeth Buchanan y más tarde el Lic. Jesús Gómez Serrano, ocupando las direcciones Administrativa y de Investigación respectivamente. Después se fueron integrando otras personas como la Lic. Yolanda Padilla Rangel, el Lic. Helio de Jesús Velasco, Pilar González, Rosalba Muñoz, y otras personas más como archivistas.

Entre todos fueron ordenando aquellos montones de papeles, los cuales estaban unos en cajas y otros atados y sin el debido trato para ser documentos de tanta importancia y el legado de nuestra historia.

El Gobernador del Estado Sr. Rodolfo Landeros Gallegos, con esa forma tan visionaria que él tuvo para muchas cosas, destinó una vieja casona en la calle de Juan de Montoro, la cual se remodeló y embelleció para establecer allí el Archivo Histórico del Estado. Mi papá fue nombrado como Director a partir del 21 de Mayo de 1982. El gobierno acordó ponerle el nombre de “Alejandro Topete del Valle” al Archivo, como reconocimiento a su labor como cronista e historiador, además de que gran parte de su biblioteca, hemeroteca y documentos que estaban en su poder y que tan celosamente guardó toda su vida, fueron legados a esa institución. El día 24 de octubre de 1986, en una ceremonia especial, fue inaugurado estando presente el Presidente de la República, Lic. Miguel de la Madrid Hurtado y el señor Gobernador.

El 28 de Febrero de 1987 por motivos de salud tras de sufrir un infarto, se ve obligado a dejar la dirección, mas sin embargo, sus últimos años siguió trabajando como asesor en dicha institución.

Una calle que lleva su nombre

El 30 de diciembre de 1983, por acuerdo del H. Ayuntamiento y estando en funciones como Presidente Municipal el Sr. Pedro Rivas Cuellar, se le cambió el nombre a la antigua calle de Olivos por la de Alejandro Topete del Valle.

Recuerdo que le llamaron del Ayuntamiento para que él mismo escogiera la calle. Él les dijo que en primer lugar era un honor el que hubieran pensado en darle tal distinción y en segundo lugar que la elección la dejaba a juicio de la Presidencia Municipal; le propusieron la mencionada calle y él se sintió muy complacido ya que su nombre iba a estar cerca de los que fueron sus amigos como: Arturo Pani, Eduardo J. Correa, Manuel M. Ponce.

Decía que él había tenido tres niños en brazos: la Academia de Bellas Artes, el Museo de la Ciudad y el Archivo Histórico, porque los había visto nacer y crecer.

Mi papá decía, que en la tarea de historiar hay dos máximas: UNA, NO DECIR FALSEDADES; LA OTRA, NO CALLAR LAS VERDADES.

En los últimos años de su vida, repetía mucho este pensamiento: “Dios mío, no me quites mis recuerdos, aunque me prives de toda esperanza.” Otra de sus máximas preferidas fue: “Sed de infinito y ansias de eternidad.”

Muchos de sus amigos le escribieron versos, como Jesús Reyes Ruiz, en su Romance a toda Sordina, del que sacamos el siguiente extracto:

Oye, Alejandro Topete

Del Valle, tú traes escrita

La historia de Aguascalientes

Y su albor de poesía,

Con siglos, con mariposas,

Con palabras honoríficas.

Edmundo Gámez Orozco, gran poeta, ex-gobernador de Aguascalientes, le escribió lo siguiente:

Hablar pausado que de desgrana

En añoranzas de cosas idas

Y en circunspectas frases pulidas;

Tal un hidalgo de Nueva España...

 

Por la partida de defunción

De aquel insigne Juan de Montoro,

Una escarcela preñada de oro

Diera con grande satisfacción...

 

O bien con grandes contentamientos

Su afán exhuma de los archivos

Viejos papeles explicativos

Sobre el origen del Real de Asientos...

Raúl Cardiel Reyes, presidente del Seminario de Cultura en uno de sus homenajes dijo:

“Todas las grandes glorias de Aguascalientes han tenido en Alejandro Topete del Valle, un resonador, un vehículo que ha llevado al país la conciencia de lo que vale el Estado de Aguascalientes. Eso es lo que debe Aguascalientes a Alejandro Topete del Valle, haber dedicado toda su vida a encontrar las excelencias que este estado ha dado para enriquecer la Patria Nacional, nuestro espíritu y nuestra herencia cultural. Ha estado atento a la vida de Aguascalientes para hacerla valer...”

Un 25 de marzo de 1999, salió junto con mi mamá, muy temprano, aproximadamente a las 8:15 de la mañana. La dejó pagando el servicio telefónico y él se dirigió, a cobrar su pensión a un banco que está a un costado de la Plaza. Como aún no abrían la institución, pasó a saludar a su Virgen de la Asunción y salió de la Catedral platicando con un conocido. A unos pasos de la Catedral, en medio de su plaza, con su corazón ya cansado, dejó de existir a la edad de 90 años, con una vida plena, llena de satisfacciones, de vivencias y con la tranquilidad del haber cumplido.

El Gobierno del Estado, con el Sr. Felipe González al frente, acordó hacerle un homenaje en Palacio de Gobierno antes de ser trasladado para su misa en Catedral, como muestra del reconocimiento por su labor como “el guardián de nuestra historia”. Fue incinerado conforme a sus deseos, ya que él decía que “era más limpio” esta forma de ser sepultado. Sus restos descansan en la Rotonda de los Hombres Ilustres en el Panteón de la Salud.

Sus publicaciones:

§  Boletín de la Sociedad Mexicana de Geografía y Estadística (14 folletos) en 1934-35

§  El Real y Minas de Asientos de Ibarra, La minería en Aguascalientes, Imprenta de José Segovia, 1945

§  Notas para la Historia de la Medicina en Aguascalientes, Tipografía de Francisco Antúnez, 1953

§  El General José María Arteaga, Soldado de la República, Aguascalientes, Talleres Gráficos del Estado, 1957

§  Precursores. Notas para la Historia del Pensamiento Agrario zacateco- aguascalentense durante el siglo XIX, Edición del Autor, Tipografía Méndez Acuña, 1962

§  Plaza Mayor;Notas para la Historia de la Medicina; Feria de San Marcos; y José Guadalupe Posada, en: Antonio Acevedo Escobedo, Letras sobre Aguascalientes, 1963

§  Fe de Bautismo de José María Chávez y Disertación que Alejandro Topete del Valle leyó en homenaje al mismo, en la Escuela Normal del Estado el 5 de Abril de 1964, en: Agustín Velázquez Chávez, José Maria Chávez y Alonso: Semblanza, Iconografía y documentos

§  La Feria de San Marcos. Estampas y Recuerdos, Ed del Autor, Tipografía Antúnez, 1970; 5° Edición, Gobierno del Estado, 1982

§  Guía para visitar la Ciudad y el Estado, 2° Edición: 1968, (tiraje, 3000) 3° Edición: 1973, (tiraje, 5000), Tipografía Méndez Acuña.

§  Méritos y Servicios de Juan de Tolosa, Universidad Autónoma de Zacatecas, 1978.

§  José Guadalupe Posada, Prócer de la Gráfica Popular Mexicana, México, Seminario de Cultura Mexicana, 1957; Reedición: Universidad Autónoma de Aguascalientes, 1980.

§  Estampas de Aguascalientes, Edición FONAPAS, Tipografía de Francisco Antúnez, 1980.

§  Palacio de Gobierno, Gobierno del Estado, 1983.

§  El Teatro Morelos, Gobierno del Estado, 1985.

§  Más de 200 artículos en la Revista Aries.

§  Páginas Sueltas, (post Mortem), Universidad Autónoma de Aguascalientes, marzo del 2000.

 

Nota:

Muchos de los datos que están en este escrito fueron tomados de periódicos en entrevistas hechas por: el Lic. Enrique Rodríguez Varela, Carolina Castro Padilla, Jorge Galván y Heriberto Bonilla Barrón.

Por supuesto tengo la valiosa colaboración de mi madre que después de compartir toda una vida junto a mi padre, lo hemos recordado.

También los hermanos de mi papá, Maria Teresa, Clara y Fernando, han contribuido con sus recuerdos para acrecentar esta pequeña obra

Mis hermanos Adriana, Fernando y Ana Luisa, cada uno con sus vivencias, en diferentes épocas, me han ayudado enormemente.

Mi padre también dejó muchas cosas escritas sobre su vida, que aún sigo recolectando, pero algunas que he encontrado, han sido clave y muy valiosas para poder hacer esta semblanza.

Notas:

1 Platicado por el Dr. Fernando Topete del Valle.

2 Publicado en Memorias de la Academia Mexicana de Genealogía y Heráldica, núms. 8 y 9 de 1949.

3 Ver Periódico Oficial.

4 Este acuerdo fue publicado en el núm. 23 del Periódico Oficial del Estado correspondiente al 9 de junio de ése año.

5 Publicado en el mismo número que el anterior.

6 Así se les nombra a los miembros de la Academia que fuera de la Ciudad de México

 

 

 

 

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