Capítulo 42º

Sueño 9:

Sueño de Tierra y Luna

Originalmente aparecido en Nakayoshi, Marzo 1996.

Usagi está de pie en su traje nuevo, la diadema se ha ido. Una luna creciente es unida a la forma de corazón en su pecho, abrochada a un lazo formado como un par de alas.

Empuja su brazo, y un cetro resplandeciente aparece en su mano.

"¡Nuestros protectores, luz de los planetas!" grita. "¡Poder del Sailor Cristal del sistema solar! ¡Reúne ese poder en esta Lágrima Eterna! ¡Silver Moon Crystal Power!" El Cristal Místico de Plata aparece ante ella, extendiéndose abierto como una flor y revela una luna creciente de luz.

Las otras nueve soldados en vestidos observan.

"¿¡El cristal de plata de Sailor Moon se transformó!?" piensa Chibi-Usa.

"¡Venus Crystal Power!"

"¡Jupiter Crystal Power!"

"¡Mars Crystal Power!"

"¡Mercury Crystal Power!"

"¡Uranus Crystal Power!"

"¡Neptune Crystal Power!"

"¡Pluto Crystal Power!"

"¡Saturn Crystal Power!"

"¡Yo también!" dice Chibi-Usa. "¡Mi poder del cristal de plata para Sailor Moon! ¡Moon Crystal Power!"

"Si en verdad," piensa Mamoru, "el Cristal Dorado está dentro de mí..." Sostiene sus brazos en su pecho, y otro cristal resplandeciente aparece. "¡Dar su poder a Eternal Sailor Moon!"

"¿¡Príncipe!?" llaman los gatos humanos.

Todo su poder fluye hacia Usagi, una bola de luz la rodea.

"¡Todo nuestro poder! ¡Aquí, ahora!"

Mamoru envía el poder de su cristal.

Usagi apunta su cetro fuera.

"¡¡¡Starlight Honeymoon Therapy Kiss!!!"

Luz explota hacia Nephrenia. Grita mientras se encoge de su tamaño gigante. Su cuerpo se deforma, derramando su forma de mujer y cambiando a un pequeño cuerpo arrugado.

"Ohhh..." dice. "Yo... Seré siempre la bella Reina Nephrenia."

Estira su mano hacia Mamoru mientras es succionada.

"Príncipe," dice. "Príncipe de la Tierra, protegido por el sol. Tomaré tu mano... Como la reina verdadera de la luna... Como el gobernante del poder sin igual de este planeta del sistema solar..."

El espíritu de Nephrenia es succionado en el espejo grande, y sellado dentro.

La jaula que retenía al Pegaso desaparece.

La gigantesca luna oscura sobre Tokio desaparece.

La luna empieza a moverse pasando el sol.

El cristal formado alrededor de la ciudad se desvanece, dejando las calles limpias.

Las personas de la ciudad se despiertan.

"Uhh..."

"¿Huh? ¿Que he estado haciendo...?"

"Me siento como si estuviera durmiendo..."

Miran en el cielo a la luna moviéndose fuera del camino del sol.

"Eso es..."

"¿Un eclipse?"

Michiru mira lo ocurrido por su espejo.

"¡La superficie vuelve a la normalidad...!" dice. "La larga pesadilla del eclipse total solar... ¡Ahora, finalmente, ¡Ha pasado...!"

"La larga pesadilla..." piensa Usagi. "Ahora está finalmente fuera."

~La joven Princesa llora mientras pasea en el cuarto de su madre.~

~"¿Qué ocurre, Selenity?" pregunta la Reina.~

~"No puedo dormir," dice. "Cuando cierro mis ojos, un monstruo negro viene detrás de mí. Venus y las otras me contaron un cuento de miedo. Ese en el que en el interior del espejo, allí vive un horrible monstruo negro, que come bebés que lloran. ¿Es verdad?"~

~"Selenity. Nosotros, todos, llevamos una estrella en nuestros corazones."~

~"¿Una estrella?"~

~"Luz y oscuridad están siempre acompañados el uno del otro. Si estás asustada incluso por un poco de oscuridad, y se muestra en tus lágrimas, la oscuridad se volverá grande y vendrá detrás de ti, y se tragará la luz. Selenity, para resistir al espíritu de la oscuridad, haz siempre que la estrella en tu corazón brille. Esa es tu misión más preciosa."~

El Pegaso se desvanece, dejando el cuerpo de un hombre yaciendo solo en el suelo.

"¿¡Elios!?" dice Chibi-Usa.

Va hacia el cuerpo.

"¿Elios?"

Se arrodilla y se apoya en él.

"Elios... Despierta... Por favor, por favor..."

Una lágrima cae de su ojo mientras se inclina y le besa.

"Despierta..."

El Cristal Místico de Plata de su broche se abre como una flor, radiando luz.

Elios abre sus ojos, y ve a la mujer con dos moños puntiagudos mirándole.

"¿Princesa Dama Selenity...?" dice. "Porqué... ¿estás llorando? Pequeña Doncella."

"Soy feliz," dice Chibi-Usa, Sujetando su mano a su cara. "Te despertaste, soy tan feliz, y las lágrimas están saliendo."

"Ese cristal..." dice.

"Tu cristal de plata ha sido renacido, Pequeña Dama," dice Diana. "Todas las sailor soldados tienen Sailor Cristales, con el poder de sus planetas escondido dentro de ellas. Ese es tu Cristal de Luna Rosa, Sailor Chibi-Moon."

"Mi... ¡Cristal de Luna Rosa...!"

"Y ese poder llevó al Sacerdote Elios a despertar."

"La pequeña doncella..." piensa Elios. "Ella..."

"¡Vamos, Elios!" dice Chibi-Usa.

"Por mí, la doncella..."

"¡Deprisa, deprisa!"

"Sailor Chibi-Moon... Eras tú..."

Sigue a Chibi-Usa, corriendo fuera del santuario, y ve la tierra verde de Elysion viva una vez más. El lago chispea en la luz del sol, y flores florecen alrededor.

"¡¡Elios!!" dice Usagi.

"¡Príncipe...!" dice. "Gracias a Sailor Moon, el Cristal Dorado fue liberado."

Mamoru alarga el cristal resplandeciente hacia Elios.

Elios lo toma y lo arregla poniéndolo en lo alto de un bastón regio, y da el bastón a Mamoru.

Usagi aparece en su vestido blanco, Mamoru en su esmoquin de lavanda.

"¿¡Rey!? ¿¡Reina!?"

Usagi alarga su cetro hacia el espejo grande, y Mamoru alarga su bastón.

Extraen al demonio del espejo, y lo alzan al cielo, donde es destruido por la luz.

Las cuatro soldados guardianas de la Princesa y las tres soldados exteriores aparecen en sus vestidos reales.

Todas ellas están de pie detrás de Usagi y Mamoru, los cuales sostienen sus cetros.

"Como una ceremonia de coronación," dice el Artemis humano.

"Lo es, Artemis," dice la Luna humana.

Hotaru se arrodilla en la tierra, y alarga las cuatro piedras en su mano.

"Saturno," dice Usagi. "Estos..."

"Por favor," dice Hotaru. "Usa tu Poder del Cristal de la Luna de Plata en ellas..."

Usagi alarga su cetro, y las piedras brillan.

Las piedras suben en el aire, y las cuatro chicas entrampadas dentro son soltadas.

"¿¡El Cuarteto de Amazonas!?"

Diademas aparecen en sus frente, y son vestidas en trajes de marinero mientras descienden a la tierra.

"Llevamos la protección de los cuatro asteroides del sistema solar," dicen ellas.

"Sailor Ceres."

"Sailor Pallas."

"Sailor Juno."

"Sailor Vesta."

Las otras se quedan boquiabiertas. "¿¡Sailor soldados!?"

"En verdad," dice Ceres, "estábamos todavía en medio de nuestro sueño, profundo en las Amazonas. Fuimos forzadas a despertar por la maldición. En una pesadilla fuimos hechas para actuar como sirvientes de la Luna Muerta. Pero hemos sido liberadas finalmente de esa pesadilla. Gracias a todas vosotras. Entraremos en nuestro sueño de nuevo, nuestro verdadero despertar está todavía adelante. Sailor Chibi-Moon. Desde nuestros corazones estamos esperando el momento en que, algún día, permaneceremos en tu protección como una soldado. Ese momento es el momento de nuestro despertar verdadero. Si nos necesitas, daremos nuestra vida para protegerte."

"No puede ser..." piensa Chibi-Usa. "Estas cuatro son mis..."

"Está bien," dice Hotaru. "Hasta entonces, protegeremos a la Princesa."

Las cuatro soldados de los asteroides sonríen mientras se vuelven puntos de luz, volando en el cielo y desapareciendo.

"¡Sailor Ceres, Pallas, Juno, Vesta...!" piensa Chibi-Usa. "El momento vendrá cuando estéis a mi protección como una sailor soldado. Cuando os vea de nuevo será el momento en que pueda ser una soldado real... Una dama real..."

"Ahora," dice Elios. "Debéis volver a la superficie. Os llevaré. ¡Con mi caballo favorito! ¡Pegaso!"

Un Pegaso aparece, y Elios brinca en su espalda.

"¡Ahora! ¡Seguid detrás de mí!"

"¡Elios!"

Ella mira mientras él monta el Pegaso en el aire.

"Como un príncipe en un corcel blanco..."

Todo el mundo se reúne en el Ichinohashi Park.

"Por favor, cuidaos," dice Elios. "Continuaré mis oraciones para vuestra seguridad en Elysion. Y por ti, Príncipe."

"Elios," dice Chibi-Usa. "te veré de nuevo, ¿verdad?"

"Sí, doncella. Esperaré ávidamente el día en que pueda encontrarte de nuevo. Avidamente."

"¡¡Elios!! ¡Iré a verte de nuevo!"

Elios monta en su Pegaso y vuelve a su patria.

"Algún día en el futuro." piensa Chibi-Usa. "Cuando me haya vuelto una dama real... Así Elios puede ser mi príncipe."

Lágrimas salen de sus ojos.

"¡Bien, vamos!"

"Veremos a Elios de nuevo seguro."

"Hasta entonces, puedes afilar tu habilidad como una mujer, ¿verdad, Chibi-Usa?"

"Si," piensa, sonriente. "Así mis muchos sueños se harán realidad, por ahora, aunque soy pequeña, tengo que trabajar por ello!"

"Asombroso," dice Mamoru. "Aunque la batalla ha terminado, siento un calor en mi corazón. Como si una estrella hubiera nacido en mi corazón. Así que este es el poder del Cristal Dorado..."

"Mamo-chan," dice Usagi. "Todos nosotros, todo el mundo, tenemos estrellas en nuestros corazones."

"¿Estrellas?"

"Sí. Y ese calor en tu corazón es una señal de que tu estrella brilla."

Las otras la miran.

"De esa manera mis sueños pueden hacerse realidad, así que puedo proteger a los que amo, así que puedo luchar, por favor, estrella de mi corazón. ¡Haz brillar tu luz, y dame fuerza!"

Original manga copyright (C) 1996 Takeuchi Naoko.