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ANÁLISIS, COMENTARIO Y DEMÁS

 

 

Medios/Televisión

 

Las delicias de la radio por Internet

 

Hace algunos años parecía que loas regulaciones por derechos de autor eliminarían a la radio por Internet. Pero el campo es aún vasto e inexplorado; cuando llegue el software que perfecciones su calidad presenciaremos grandes sorpresas.

 

Cada vez que viajaba a Estados Unidos allá a mediados de los ochenta compraba varios cassettes para grabar las canciones que transmitían las estaciones de radio. Era una forma de escapar de la programación local cuya calidad dejaba todo que desear. Así, al volver a México pasaba horas escuchando los cassettes y pensando en la posibilidad de sintonizar aquellas difusoras en vivo pues al cabo de varias semanas se perdía el efecto tras escuchar las mismas canciones. ¿No sería posible --pensaba-- alguna vez poder tener en casa, directo y con sonido estéreo aquellas estaciones, y no sólo de Estados Unidos sino de todo el mundo?

 

Cierta vez que platicaba sobre el tema con un amigo allá por 1989, éste me dijo que una posibilidad sería mediante un enlace telefónico "pero saldría como una llamada de larga distancia y con calidad muy baja". Pero a lo mejor si se conectaran dos computadoras sería posible. El chiste sería cómo".

 

Menos de cuatro años después el mundo comenzaba a empaparse de la revolución tecnológica más sorprendente del siglo XX. Desde entonces se hizo factible enviar textos de un sitio a otro en cuestión de segundos, de consultar periódicos de todo el mundo, de chatear con gente que jamás hemos conocido físicamente y, lo mejor, de escuchar difusoras de radio en tiempo real. Por lo visto no había sido el único en haber tenido la misma inquietud de modo que la radio por Internet era la respuesta a nuestras peticiones.

 

Una vez que tuve acceso a Internet lo primero que hice fue ver si las estaciones de radio de las que había grabado tantos cassettes difundían su señal por Internet. Y efectivamente, ahí estaban, la KLAQ y la Fox de El Paso, Texas, la KSAN de San Francisco, California y la WRNO de Nueva Orleáns la cual llevaba tiempo escuchndo a través de la onda corta. Era increíble y aunque no podía grabar esas transmisiones pues se trataba de streaming audio, no podía guardarla en el disco duro. Pero qué importaba, aquello era la realización de un sueño que muchos de nosotros tuvimos durante los años ochenta.

 

El Internet empezó a crecer en los campus universitarios de modo que la radio en línea tuvo en las llamadas estaciones colegiales a sus primeros pupilos. Más tarde llegaron las estaciones personales a cargo de amantes de la música y de quienes transmitían sus canciones favoritas durante sus ratos libres. Para 1999 la radio por Internet registraba un crecimiento del 125 por ciento, y en ello contribuía el bajo costo para transmitir en línea: sólo se necesitaba de una computadora, un servidor y una línea telefónica, es decir, unos 800 dólares, en comparación con los miles y aun millones de dólares necesarios para poner una estación en AM o FM, eso sin contar los permisos y toda la tramitería que en Internet no hacían falta.

 

Todo ello ocurría por el vació legal en torno al Internet. Sin embargo y por lo menos en Estados Unidos, se aprobó una ley que exigía el pago por derechos de autor a quien transmitiera música grabada por la red, incluidas las estaciones que ya operaban en AM y en FM. Esta medida detuvo lo que parecía un avance incontenible de modo que muchas difusoras retiraron su señal de la red, entre ellas la KLAQ, la Fox y la WRNO.

 

Otra parte de la nueva ley prohibía la transmisión de anuncios comerciales por Internet que no fueran pagados por los anunciantes para transmitirse por ese medio, algo ciertamente ridículo pues nadie que pueda sintonizar una estación en el dial de su ciudad va a querer escucharla por la red. Así, lo que parecía ser un modo baratísimo de comunicación se convirtió en uno de los más onerosos aunque la nueva ley benefició, eso sí, a los gigantes de la comunicación para los cuales el pago por derechos representaba una bicoca en comparación con un operador que tiene una estación de radio en línea como pasatiempo.

 

Pero la radio por Internet aún tiene ventajas: su amplísimo espectro permite la transmisión de todo tipo de música y a la cual el usuario puede acceder sin que nadie más escoja lo que él desea escuchar, como sucede en la radio convencional, sujeta a los sondeos de preferencias y al infierno de los promotores y, claro, a los sobornos, más conocidos como payola. Uno de los sitios que más ha promovido la radio underground es live365.com donde es posible escuchar a grupos radicales y otros que no han tenido la suerte de conseguir contrato discográfico.

 

Los formatos también son interesantes: hay estaciones que presentan "música que jamás ha aparecido en un Top 40, o especializadas en los Beatles, Pink Floyd e incluso una que transmite 24 horas continuas de ronquidos, ésta seguramente manejada por alguien que no tiene otra cosa mejor que hacer con su vida. También Live365.com ofrece los formatos tradicionales --rock clásico, rockabilly, 70´s, alternativo, muchas veces programadas con alto profesionalismo.

 

Pero estas leyes que han inhibido el desarrollo de la red en Estados Unidos han calado muy poco en otras latitudes donde la radio por Internet ha gozado de más libertad. Pero detrás de todo esto puede avizorarse un nuevo interés hacia la radio por Internet.

 

Aún faltan muchas cosas por descubrir dado el carácter de retos constantes que presenta la red. Esta, junto con la radio vía satélite, conformarán la nueva forma de "ver" la radio que ya se está configurando para el presente siglo.

 

 

 

 

Algunas difusoras que sintonizamos mientras elaboramos fasenlinea:

 

wmoj.com Cincinnati, Ohio. Con su formato denominado jammin' oldies, la Mojo 94.9 nos presenta lo mejor del género con Donna Summer, Barry White, Earth Wind and Fire y otros representantes de un género hasta hace poco satanizado: la música disco. Disponible también en el menú de preferencias del sitio streamaudio.com (donde también es posible escoger más de 50 estaciones de todos los géneros)

 

wmms.com  Estación legendaria que combina su formato con lo mejor del rock alternativo, el clásico y con un estilo que ha sido copiado muchísimas veces. Stone Temple Pilots. Weezer, Doors, Led Zeppelin y Oasis son parte de la enorme discografía de WMMS.

 

futuro.cl  Una agradable sorpresa fue encontrar esta señal originada en Santiago de Chile. Especializada en rock clásico, progresivo y aun de Jean Michel Jarre, está diseñada para conocedores. Presenta especiales musicales de gran calidad.

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

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