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ANÁLISIS,
COMENTARIO Y DEMÁS
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Cine
Humor
cálido en tundras animadas
La
Era del Hielo 2 marca una secuela divertida llena de puntadas y con
un mensaje ecológico light. La historia es floja pero está
llena de divertidísimos gags. Si piensa ir pronto al cine, vaya
a verla
The Ice Age 2
The Meltdown
Voces en inglés de Ray Romano, John Leguizamo, Queen Latifah
Dirigida por Carlos Saldanha
20th Century Fox/2006
ABRIL, 2006. Una de las escenas memorables de la primera cinta de
The Ice Age la tuvimos con la ardilla que trataba de guardar una enorme bellota entre la tundra y finalmente lo consigue de un modo hilarante. La ardilla reaparece en esta secuela, y pese a no tener diálogos es uno de los personajes más divertidos de
La Era del Hielo 2, la cual llegó a su segunda parte con un retraso que, en términos financieros,
indudablemente repercute en taquilla dada la enorme competencia que hoy existe en el cine animado.
Para quienes vieron la primera parte y rieron --reímos-- abiertamente, esta cinta los dejará satisfechos: hay momentos en que las carcajadas provocan dolor de estómago aunque luego veamos que gran parte de la estructura argumental es derivativa: ante el inminente deshielo, el mamut Manfred (Romano) y la zarigüeya Zid (Latifah) deciden emigrar hacia otras tierras en busca de sus familias. En el camino se les pega el tigre dientes de sable (Leguizamo) quien tiene una razón adicional para unirse a ellos: el niño que el mamut y la zarigüeya desean llevar con sus padres.
Así pues, como ocurría con Shrek y su burro (y luego la princesa Fiona) estos tres personajes enfrentarán, durante su recorrido, toda clase de situaciones y desaveniencias. Ya es una condición derivativa: ¿que acaso en
Madagascar y Finding Nemo era necesario trasladarse de un sitio a otro? Sin embargo ello parece ser intencional por parte del guión: es verdad que el mensaje ecológico lo tenemos nuevamente aquí pero también fue importante dar a Sid, a Manfred, al León y a todos los demás la posibilidad de portarse simples, aunque el humorismo también
pierda, como consecuencia, cierta calidad.
Así pues, ¿La Era del Hielo 2 vale un desembolso? Sin duda. Dentro de esta tundra cada vez más monolítica en que se ha convertido el cine norteamericano, las carcajadas nunca sobran.
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