MANIFIESTO

Al Pueblo de México
A los Trabajadores Sindicalizados del País
A los Sindicatos y Centrales Obreras de México
A los Diputados y Senadores de la República
Al Secretario de Hacienda
Al Presidente de la República

“El gobierno del cambio”, no ha cumplido sus compromisos de campaña, de modificar el sistema corporativo, de cambiar la política económica –no ha generado empleos-. Por el contrario ha fortalecido los mecanismos de control patronal en el intento de disminuir el costo del trabajo y ha vulnerado la autonomía sindical. Su política es continuación directa de anteriores gobiernos neoliberales, quienes haciendo a un lado los intereses de la sociedad, concentran su actividad para favorecer a una nueva oligarquía subordinada al sector financiero trasnacional que busca apropiarse de los servicios e instituciones públicas y sociales.

Una situación social es muy grave, los pobres crecen más en número y su condición apremia cada día más. Empleo de mala calidad: precario, eventual, marginal o autoempleo es el único que crece, sin derechos ni garantías sociales. Ello está generando una enorme disgregación social, una brecha creciente entre ricos y pobres, en la cual la ausencia de expectativas y esperanzas ciertas, lo único a lo que nos esta conduciendo es a niveles antes desconocidos de violencia, en donde se impone la ley de la selva dictada por los poderes extralegales: narcotráfico, medios de comunicación, delincuencia organizada, etc. El estado de derecho, extraordinariamente débil en México, está siendo sustituido en amplios espacios del país y la ingobernabilidad cada día es mayor.

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El país necesita recursos para su crecimiento, y los tiene, el problema radica en que una buena parte de estos recursos son enviados al extranjero como remesas extraordinarias por inversiones altamente productivas: bancos foráneos, empresas automotrices, servicios o para el pago de los créditos fraudulentos del Fobaproa-IPAB. La Secretaría de Hacienda ha renunciado a cobrar impuestos a las empresas, prefiere obtener ingresos mediante la sobreexplotación de Pemex y la aplicación del ISR a las prestaciones de los trabajadores; en Pemex acelera el agotamiento de las reservas petroleras, pone en riesgo el futuro de los mexicanos. La sobreexplotación de los trabajadores nos pone en pie de lucha.

Para esquilmar los ingresos de los trabajadores, el gobierno incluyó en la Ley del Impuesto sobre la Renta para el año 2005, los Artículos Transitorios, Quinto y Sexto, con vigencia a partir del 1º de enero de 2006. Con ellos, el gobierno foxista pretende agregar las prestaciones sociales de los trabajadores al monto gravable, lo cual disminuiría aún más sus ya de por sí raquíticos ingresos.

Independientemente de que derogar esos Artículos Transitorios es una obligación de los diputados, las Organizaciones de los trabajadores nos disponemos a dar una dura batalla contra esos ilegítimos gravámenes, nos los quitaremos de encima porque nuestra fuerza unida no podrá ser derrotada. Marcharemos en las calles de todo el país, llenaremos las plazas, apareceremos en los actos políticos, acudiremos a los medios, a las cámaras legislativas y a donde sea necesario, pero esos impuestos confiscatorios no los pagaremos.

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Estamos siendo despojados de los servicios de seguridad social que debe proveer el Estado. Limitándoles el presupuesto, provoca la ineficacia de las instituciones encargadas de proveer estos servicios. Se siguen los lineamientos del Banco Mundial y del Fondo Monetario Internacional, eliminar estas instituciones a favor de empresas transnacionales del ramo, que vendrían a vendernos la salud.

El IMSS y el ISSSTE carecen de las medicinas más indispensables, de materiales de curación, de aparatos, las operaciones no se realizan cuando son necesarias sino cuando son urgentes, las plazas vacantes no se cubren y hay un déficit de médicos, enfermeras, afanadoras y otros. En el Instituto Mexicano del Seguro Social, el Director General mantiene congeladas 17,000 plazas ya presupuestadas, con el objetivo de desatar una crisis mayor y confrontar al Sindicato hasta derrotarlo.

Para el gobierno nuestra salud es una mercancía muy cara que debemos comprar a las empresas privadas y transnacionales especializadas en seguros médicos.

Con la creación del SAR, las Afores, Siefores y la modificación al Régimen de Jubilaciones y Pensiones en el IMSS, se entregaron los fondos de ahorro para el retiro a los bancos, 94% extranjeros y paulatinamente las aportaciones patronales y del gobierno saldrán de dichos fondos, hasta que las pensiones y jubilaciones solo sean financiadas con aportaciones de los trabajadores. El ISSSTE está en la mira de correr la misma suerte en el próximo periodo de sesiones del Congreso.

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El Sistema Nacional de educación pública también está siendo abandonado por el gobierno. Uno de sus objetivos es entregar las franjas de más altos ingresos al capital privado, preferentemente transnacional. Desde el jardín de niños hasta la universidad, las instituciones funcionan en la más dolorosa precariedad. Los presupuestos que reciben no garantizan el satisfactorio cumplimiento de sus funciones. Los indicadores nacionales e internacionales destacan el bajo nivel de aprendizaje muy por debajo de países de menor desarrollo relativo que el nuestro.

Pero lo más grave es que suprime la educación basada en las disciplinas del conocimiento, reduce y reorienta los contenidos de los programas de ciencias naturales, historias universal y nacional, tecnologías, artes y educación física, con el fin de imponer un modelo educativo basado en las llamadas “competencias básicas laborales”, que sirve para adiestrar a millones de niños y jóvenes en las nuevas formas de explotación llamadas “toyotistas”. El ejemplo más destacado de esta iniciativa lo constituye la Reforma Integral a la Educación Secundaria (RIES).

Cada año miles de jóvenes no encuentran un lugar en las instituciones públicas de educación media y superior, y tienen que acudir a instituciones privadas a recibir una educación cara y mediocre, que tampoco alcanza los niveles de formación requeridos.

Cuando la mayoría de los estudiantes logra terminar sus estudios universitarios, y en ocasiones estudios de postgrado, se encuentra con la terrible realidad de que el país no puede ofrecerle un puesto de trabajo acorde con su especialidad.

La investigación científica se reduce a los esfuerzos que se hacen en sólo algunas de las universidades públicas. Los científicos ven con angustia como cada año se reducen los presupuestos para investigación científica y tecnológica, y con ellos sus actividades, proyectos y resultados. Tampoco hay participación de los trabajadores del conocimiento en la definición de políticas públicas en educación, ciencia y tecnología.

Y cuando el año pasado se logra un aumento adicional al presupuesto para las instituciones de educación media superior (CECyTEs y COBACH) y superior, fue vetado por el presidente, bloqueando programas fundamentales de las instituciones. Por tanto, exigimos a la Secretaría de Hacienda destrabe los presupuestos que tiene retenidos.

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El día 5 de agosto el presidente Fox declaró que “sería tonto privatizar Pemex o pensar en hacerlo”. Tiene razón. Contra lo que establece nuestra Constitución, tanto Pemex como Comisión Federal de Electricidad y Luz y Fuerza del Centro son cada día menos propiedad de los mexicanos y más de empresas extranjeras. Es el resultado de Contratos de Servicios Múltiples, permisos de generación de energía eléctrica, concesiones, Pidiregas, Bonos de deuda, con los que el gobierno ha ido dando posesión de la industria energética al capital privado.

Sabiendo que lo que ha hecho hasta ahora es ilegal, el señor presidente no desperdicia oportunidad para reclamar la aprobación de las reformas estructurales del Banco Mundial, en especial la llamada reforma energética, que pondría a esa industria directa y definitivamente en manos del capital privado transnacional.

Las empresas públicas del sector energético, Pemex, CFE y LFC son altamente productivas, razón por la que la ambición capital las reclama como botín. Para el gobierno son una fuente de recursos para el presupuesto y una caja chica inagotable.

Una política energética nacionalista debe mantener en propiedad de la Nación las industrias energéticas y buscar su independencia tecnológica.

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Viene el debate del Presupuesto Federal y su perfil es ya conocido. El gobierno federal, este año, recortó 24,000 millones de pesos para programas sociales. Lo hemos estado viviendo en carne viva. Las instituciones públicas y sociales verán mermados sus presupuestos: la educación pública y especialmente las universidades, la seguridad y salud sociales, medio ambiente y desarrollo rural, hasta el servicio público de agua para el campo y la ciudad y, claro, las inversiones para la energía, en los casos de la ciencia y la tecnología, del petróleo y la electricidad.

Tendremos que luchar por un Presupuesto Federal que promueva e invierta en estos servicios públicos y en las instituciones sociales pues con ellas es posible el desarrollo social y la consolidación de los mexicanos para lograr una vida en equidad, justicia, con trabajo y, con ello pulsar la democracia y la soberanía nacionales.

El país arde y por todas sus regiones surge la lucha de los mexicanos. Por un lado están los problemas de los campesinos, en general, el de los cañeros en lo particular. Los trabajadores de Sicartsa agraviados por un fallo adverso, de la Junta Federal de Conciliación y Arbitraje, que lograron superar, mantienen su Huelga. Los trabajadores de Mexicana de Aviación y Aeroméxico amenazados por el desempleo, cuya empresa está a punto de ser vendida al capital extranjero junto con el espacio aéreo nacional. La privatización de los servicios públicos en los municipios del país. La privatización de los derechos constitucionales de vivienda y el agua. La simulación laboral por medio de contratos de protección y contratos por honorarios. El inevitable estallamiento de la huelga en el Colegio de Bachilleres. La falta de resultados constitucionales a los derechos y la cultura de los Pueblos Indígenas. Las ofensas a la sociedad de la operación México Seguro, diseñada en Estados Unidos y de interés suyo, pero acatada dócilmente por el gobierno mexicano. Junto con éstos hay muchos problemas en el campo y las ciudades para los que el gobierno federal no busca solución, al contrario los agrava.

Tomaremos la iniciativa para rescatar el país y nuestra soberanía. El país ya arde, convocamos a todos los mexicanos a una gran movilización y los trabajadores haremos llegar el fuego de nuestras protestas a todos los niveles del poder político.

¡Por Derogar la Tasa Impositiva de las Prestaciones Sociales!

¡Por la Defensa de la Seguridad Social!

¡Por la Defensa de la Educación Pública, Laica, Gratuita y Obligatoria!

¡Alto a la Privatización de los Recursos Naturales y Energéticos!

¡Por un Presupuesto Federal para consolidar las Empresas Públicas!

¡Por un Presupuesto Creciente y Multianual,
que cumpla con el Acuerdo Nacional para el Campo!

¡Alto al Proyecto Abascal de Reforma Laboral!

México, D. F., 1° de Septiembre de 2005

Frente Sindical, Campesino, Indígena, Social y Popular; Unión Nacional de Trabajadores; Frente Sindical Mexicano; Federación de Sindicatos de Empresas de Bienes y Servicios; Frente Auténtico del Trabajo; Frente Nacional de Resistencia Contra la Privatización de la Industria Eléctrica; Frente Nacional de Organizaciones Campesinas; Sindicato Mexicano de Electricistas; Alianza de Tranviarios de México; Confederación Obrera Revolucionaria; Sindicato de Telefonistas de la República Mexicana; Sindicato Nacional de Trabajadores Mineros, Metalúrgicos y Similares de la República Mexicana; Sindicato de Trabajadores Académicos de la Universidad Autónoma de Chapingo; Sindicato de Trabajadores al Servicio de los Poderes del Estado de Querétaro; Sindicato de Trabajadores de la Industria del Hierro, el Acero, el Metal Conexos y Similares; Sindicato de Trabajadores de la Universidad Nacional Autónoma de México; Sindicato de Trabajadores de Met-Life; Sindicato Nacional de Trabajadores de la Secretaría de Energía; Sindicato Único de Trabajadores del Gobierno del Distrito Federal; Sindicato de Trabajadores de Transporte de Pasajeros del Distrito Federal; Sindicato Independencia; Sindicato Independiente de Trabajadores de la Universidad Autónoma Metropolitana; Sindicato Independiente Nacional de Trabajadores del Colegio de Bachilleres; Sindicato Nacional de Trabajadores de la Industria de la Costura, la Confección, Vestido, Similares y Conexos 19 de Septiembre; Sindicato Industrial de Trabajadores Textiles y Similares Belisario Domínguez; Sindicato Nacional de la Industria del Hierro y el Acero; Sindicato Nacional de Trabajadores de Nacional Financiera; Sindicato Nacional de Trabajadores de Salubridad y Asistencia; Sindicato Nacional de Trabajadores del Instituto Mexicano del Petróleo; Sindicato Nacional de Trabajadores del Seguro Social; Sindicato Nacional Monte de Piedad; Sindicato Nacional Único y Democrático del Bancomext; Sindicato Único de Trabajadores de la Industria Nuclear; Sindicato Lázaro Cárdenas; Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación; Unión Nacional de Organizaciones Regionales Campesinas Autónomas; Asociación de Jubilados Bancomext; Asociación de Jubilados de Banobras; Asociación de Jubilados Rodrigo Gómez del Banco Central; Barzón; Centro Nacional de Promoción Social A. C.; Central Unitaria de Trabajadores de México; Centro de Investigación y Asesoría Sindical; Coordinadora Nacional del Politécnico; Federación de Sindicatos Auténticos de Guanajuato; Federación Mexicana de Trabajadores; Federación Nacional de Agrupaciones Sindicales; Federación de Sindicatos Universitarios; Federación Sindical Revolucionaria; Federación de Trabajadores del Liberalismo Sindical; Consejo Mexicano de Organizaciones Pro Naciones Unidas; Panificadores del Estado de México.

Responsable de su publicación: Fernando Amezcua Castillo,
Secretario del Exterior del Sindicato Mexicano de Electricistas