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AULA VIRTUAL
PARA EL CONTINENTE AULA VIRTUAL
es buena noticia para la Iglesia peruana, al recibir CONAMCOS una felicitación
de Mons. John Foley Presidente del Pontificio Consejo de las Comunicaciones Sociales
del VATICANO y quien también lo ofrece como Servicio RIIAL desde el Perú a todo
el continente. |
| | NOVEDADES La
Pasión de Cristo Una notable realización
cinematográfica Antes de la exhibición de "La
Pasión de Cristo", programada para el Miércoles de Ceniza,
el 25 de febrero 2004, ha habido durante un año bastante discusión
y controversia por todas partes sobre la película. Esto basado en temores
acerca de cómo se realizó la película, así como también
en la susceptibilidad en torno a la historia entre cristianos y judíos,
y el diálogo actual entre el judaísmo y las iglesias, especialmente
en Estados Unidos. Parte de la discusión, sobre todo en un alto nivel,
entre teólogos, biblistas y líderes religiosos, se basaba en reportes
sobre borradores iniciales de la película. "La Pasión
de Cristo" ha sido un proyecto largamente acariciado por Mel Gibson, el director-actor.
La afiliación católica de Gibson y su apoyo al catolicismo tradicional
fue otro factor de controversia en las discusiones sobre la cinta. Las
exhibiciones de "La Pasión" en su versión aún no
definitiva ofrecieron la oportunidad a líderes religiosos y cristianos
relacionados con los medios de comunicación de ver el filme, ofrecer su
opinión y dialogar con Mel Gibson. Parecía haber un consenso general
de que la película no era antisemita. Algunos líderes y críticos
judíos, como Michael Medved, hablaron positivamente de la película.
Varios presidentes de organismos del Vaticano vieron un avance del filme y opinaron
a favor, incluidos Mons. John Foley, Presidente del Pontificio Consejo para las
Comunicaciones Sociales, y el Cardenal Darío Castrillón, Prefecto
de la Congregación del Clero, que urgió a todos los sacerdotes a
ver la película. El Cardenal Walter Kasper recibió comentarios de
líderes judíos y publicó una declaración en que afirmaba
que el Vaticano no estaba recomendando la película y que las recomendaciones
vendrían de la gente que viera la película completa. Esta fue la
postura de muchas autoridades religiosas de los Estados Unidos incluyendo la Conferencia
de los Obispos Católicos. Con
respecto al asunto de las relaciones entre judaísmo y cristianismo y al
lenguaje explícito sobre los judíos en los evangelios, especialmente
en san Juan, es importante caer en la cuenta de que el antagonismo más
formal u oficial entre judíos y cristianos apareció en las primeras
décadas del Siglo II. Los evangelios de Mateo, Marcos y Lucas salieron
de comunidades judías. El Evangelio según san Lucas subraya fuertemente
las escrituras judías intercalando referencias y temas bíblicos
a lo largo de todo el texto. El conflicto entre Jesús y los líderes
religiosos de su tiempo fue un conflicto dentro del judaísmo, una controversia
religiosa acerca del Mesías y de las pretensiones de Jesús. Los
discípulos que se hicieron cristianos aceptaron sus argumentos, pero muchos
jefes de los sacerdotes y de los fariseos no lo hicieron. Hubo otros conversos
como Pablo, que estaba orgulloso de su pasado judío pero que tomó
una enérgica postura acerca del discipulado de Jesús como no atado
a los detalles de la ley judaica. Dados los siglos de antagonismo y la experiencia
de represión y persecución de judíos por parte de cristianos
y de comunidades católicas, ha sido muy difícil entrar al contexto
histórico del tiempo de Jesús y a la mentalidad de la época.
La larga tradición
de los cristianos de acusar a los judíos de ser los ‘asesinos’ de Jesús
también influye en este debate. Mientras la Iglesia Católica pedía
perdón en un documento del Concilio Vaticano II (en 1965) por las persecuciones
y el frecuente antisemitismo del pasado, y el Papa Juan Pablo II visitaba, el
año 2000, el Muro de los Lamentos e introducía su oración
personal en una hendidura, seguían debatiéndose asuntos acerca de
la muerte de Jesús como parte del plan de Dios y de cómo los jefes
de los judíos de aquel tiempo y los romanos, con Poncio Pilato, encajaban
en este plan. Recibí
una invitación para ver la película en las oficinas de Icon Films,
la productora de Mel Gibson, en Santa Mónica, California, el 24 de octubre
2003. La versión que vimos estaba entonces aún en posproducción.
Todavía había que trabajar en los efectos especiales y en la banda
sonora. Pude encontrarme brevemente con Mel Gibson después de la exhibición
y comentar con él sobre la película. Mi actitud hacia el filme fue
muy positiva. EL
CONTEXTO BÍBLICO
"La
Pasión" bosqueja su relato desde cada uno de los cuatro evangelios,
por ejemplo, el temblor y la rasgadura del velo del templo de Mateo, el joven
huyendo en el momento que detienen a Jesús de Marcos, las mujeres de Jerusalén
(aquí, Verónica y su hija) de Lucas y el diálogo con Pilato
sobre verdad de Juan. Esta vinculación de acontecimientos en un relato
único es el modo en que las historias del Evangelio se recuerdan. Hay algún
material que se dedujo de las tardías historias legendarias y de los evangelios
apócrifos (la Verónica y su paño, y Dimas el ladrón
'malo'). Una de las dificultades
con las se que enfrentan las películas sobre la vida de Jesús, sobre
todo de parte de estudiosos y teólogos no versados en las técnicas
y convenciones de la narración cinematográfica, es que los filmes
a veces tienden a ser criticados y juzgados como si fueran el Evangelio. Sus expectativas
se ubican en ese nivel por lo que están más cerca de la condena
que de la comprensión del filme. Éste es un peligro con el que también
se encuentra "La Pasión". Es necesario repetir que ésta
es una película y que por tanto el guión es una 'versión'
de las historias del Evangelio sin exigir que el filme sea el Evangelio. Este
uso de los cuatro evangelios significa que hay perspectivas diferentes en cada
uno sobre los judíos de ese tiempo. El Evangelio de san Mateo presupone
un conocimiento detallado de las escrituras judías y ve en Jesús
a quien viene a cumplir la profecía. De este evangelio provienen las escenas
más 'apocalípticas' de su muerte. Marcos y Lucas, en cambio, miran
más desde fuera de la cultura judía. Lucas escribe para los lectores
conocedores del griego y las maneras romanas de narración. El Evangelio
de san Juan, escrito al final del Siglo I, se hace eco de las raíces de
la Cristiandad en el Judaísmo pero reconoce la brecha que comienza a insinuarse.
El guión puede
combinar los episodios del Evangelio en un relato coherente de la pasión
con flashbacks seleccionados de la infancia de Jesús y de su vida en Nazaret
(una caída cuando niño, haciendo una mesa en el taller del carpintero,
su relación con su madre y su salpicadura de agua juguetona hacia ella
cuando se lava sus manos) que son invenciones en el espíritu de los evangelios,
el pasado de María Magdalena dónde su persona se funde con la mujer
descubierta en adulterio de Juan 8, Pedro y sus promesas de lealtad en la Última
Cena. Se inserta un flashback de la llegada triunfal de Jesús a Jerusalén
cuando la muchedumbre lo fastidia con preguntas molestas en el camino al Calvario.
Hay un desarrollo dramático de personajes como Pilato y su esposa, Simón
de Cirene, el centurión, el buen ladrón y el ladrón que insulta
a Jesús (bajo la forma de un cuervo que lo ataca). Es interesante el retrato
de Satanás, como el Tentador, que aparece inicialmente como un personaje
andrógino, con rasgos de mujer pero con voz de varón, tornándose
más obviamente femenina conforme la película avanza y apareciendo
finalmente en la crucifixión (con una técnica visual que recuerda
cuando William Wallace ve a su amada en su ejecución en Corazón
Valiente) llevando a un niño en brazos. Una vez más, ésta
es una forma imaginativa de mostrar a Jesús siendo tentado y puesto a prueba.
Como en la mayoría
de las películas sobre Jesús, se presta mucha atención a
Judas. Sus motivaciones no se explicitan en la película. Se confía
en el conocimiento que el público tiene sobre Judas. La película
retrata su acción en Getsemaní y su desmayo subsiguiente y la devolución
de las treinta monedas de plata. Incorpora una secuencia de un grupo de niños
encontrándose con Judas y mofándose de él cuando va a su
muerte. EL
CONTEXTO TEOLÓGICO
Los
temas teológicos principales que le interesan a los espectadores de películas
sobre Jesús son: La humanidad y divinidad de Jesús, y la resurrección
de Jesús. La
humanidad y divinidad de Jesús "La Pasión de Cristo"
sigue generalmente el acercamiento que a la persona de Jesús hacen los
evangelios sinópticos (Mateo, Marcos y Lucas), una Cristología 'baja',
un enfoque inicial en la humanidad de Jesús y un acercamiento hacia el
descubrimiento de su divinidad. Cuando la película usa el Evangelio de
san Juan como fuente, refleja la 'alta' Cristología de ese evangelio, la
presuposición en el relato de que Jesús es divino y expresa esta
divinidad en palabra y acción. El acercamiento sinóptico es visto
en los flashbacks anteriores a la Pasión así como en los momentos
principales de ésta: la agonía en Getsemaní, Jesús
ante el Sanedrín y Herodes, la flagelación y la coronación
de espinas, el Vía Crucis y la Crucifixión. El acercamiento de Juan
se encuentra en la declaración de Jesús de ser el Hijo de Hombre
en su juicio (presente también en los sinópticos) y las discusiones
con Pilato sobre la verdad y sobre su reino. Esto
significa que, teológicamente, la película presenta la enseñanza
perenne que Jesús, en su persona, era de naturaleza humana y divina. La
humanidad de Jesús se presenta a menudo de una manera llamativa: trabajando
en Nazaret, la experiencia del dolor humano profundo en su agonía, azotado,
cayéndose en el camino al Calvario, cuando es clavado y su experiencia
en la cruz. Se expresa en la dignidad con que enfrenta su juicio, su serenidad
con Pilatos y Herodes. La película también resalta la angustia del
Jesús humano y el sentido de abandono en su agonía en la cruz, junto
con su entrega profunda a la voluntad del Padre. Mientras
que el Jesús del cine es normalmente de figura ligera y delgada, Jim Caviezel
es un hombre grande y fuerte, algo robusto, un carpintero creíble y un
hombre sólido. Esto hace que el Jesús de la película sea
más real que lo usual. La
Resurrección Algunos comentaristas critican una película
que trata la Pasión por su tratamiento exiguo de la resurrección
de Jesús. (Ésta era la crítica en los años 60 y 70
a "Jesucristo Superstar"). Ya que teológicamente, la Pasión
tiene sentido sólo a la luz de la Resurrección. Si
bien la película de Mel Gibson quiere sumergir a su público en la
experiencia de la Pasión, la secuencia final es la de la piedra sobre el
sepulcro. La piedra rueda y la tumba queda abierta, se ve como caen las telas
que cubren las heridas del cuerpo de Jesús y la cámara lo toma de
perfil, sentando en la tumba como un preludio a su naciente vida. Éstas
son las imágenes con que el público deja la sala. La resurrección,
presentada brevemente, es el clímax de la Pasión. La
Eucaristía Hay flashbacks de la Última Cena durante la Pasión,
sobre todo de Pedro afirmando que no negaría a Jesús y de Jesús
lavando los pies de los discípulos. Las
escenas de la Eucaristía en la Última Cena insertadas en la crucifixión
son una de las fortalezas teológicas de la película. Mientras Jesús
ofrece el pan que es su cuerpo, nosotros vemos el cuerpo dolorosamente quebrado
y dado por nosotros. Cuando él ofrece el vino como su sangre, nosotros
estamos demasiado conscientes del desangramiento, la sangre que vertió
por nosotros. Jesús les dice a sus discípulos que no hay mayor amor
que dar la vida por los amigos, y vemos eso en plenitud. Él les dice que
celebren la Eucaristía para que su pasión y muerte esté presente
en medio de ellos. De
esta manera, el guión destaca ambos aspectos de la Eucaristía, la
celebración de la comida, la comunión, y el sacrificio de Jesús.
María María
tiene una presencia fuerte en "La Pasión". Ella aparece como
una mujer de 40 años, curtida más que bonita. Ella aparece en dos
flashbacks. Su porte es serio. Habla muy poco. Con María Magdalena y Juan,
acompaña la pasión y el Vía Crucis sin ninguno de los histrionismos
con que se caracterizó su personaje en otros filmes, especialmente en "El
Evangelio según San Mateo" de Pasolini. Se ve cuando ella limpia la
sangre de Jesús en el suelo del pretorio después de la flagelación.
Ella besa los pies sangrientos. El vínculo entre madre e hijo es sugerido
en varias oportunidades más por el contacto visual que por las palabras.
Se incluye la petición hecha a Juan para que cuide de María. Después
de que Jesús es bajado de la cruz, ella lo sostiene como en el motivo de
la Piedad. La mayoría
del público estará satisfecho con el retrato que se ofrece de María.
Para aquéllos que encuentran algunas de las representaciones cinematográficas
del pasado como postales sagradas o estatuas de yeso apreciarán una María
más bíblica. EL
CONTEXTO CINEMATOGRÁFICO
"La
Pasión de Cristo" viene tras un siglo de películas sobre Jesús.
El cine mudo produjo películas cortas, con sentido instructivo, como "Del
Pesebre a la Cruz", el Cristo italiano y la sección del Evangelio
de "Intolerancia" de D.W.Griffith. Las películas de los estudios
realizadas en los años veinte fueron "Ben Hur" y "El Rey
de Reyes", películas épicas de Cecil B. Mille. Durante
treinta y cinco años, de 1927 a 1961, el rostro de Jesús no se vio
en las películas de los grandes estudios de Estados Unidos. Sí se
lo vio en numerosos filmes producidos por compañías protestantes
norteamericanas. Se lo mostró por partes (una mano, un brazo, sus piernas
en la cruz o visto a distancia) en películas como "El Manto Sagrado"
y "Ben Hur" en los años cincuenta. Después
de ese intervalo, Jeffrey Hunter aparecía como "Rey de Reyes",
Max Von Sydow en "La más Grande Historia jamás contada".
Cuando Jeffrey Hunter habló en "Rey de Reyes", era la primera
vez que el público había oído que un actor dijera las palabras
de Jesús. Pasolini hizo una impactante versión en blanco y negro
en los años sesenta, "El Evangelio según San Mateo", y
Rosselini hizo "El Mesías" en los tempranos 70. Brian Deacon
interpretaba al nazareno en un acercamiento más evangélico en la
película "Jesús" (que era distribuida en una versión
editada para los peregrinos que visitaban Roma para el Jubileo 2000). Esta tendencia
alcanzó su punto más alto con "Jesús de Nazaret"
de Zeffirelli en la segunda mitad de los 70. Los
movimientos de música popular de finales del 60 produjeron "Jesucristo
Superstar" y "Godspell", ambos filmados en 1973. La
mayoría de las películas buscaron presentar un Jesús 'realista'
pero muchos de ellos (incluso Pasolini) tomaron los textos directamente del Evangelio
como una parte substancial de sus guiones, un uso excesivamente literal de los
Evangelios. Zeffirelli, en cambio, empleó el mismo método usado
en la construcción de los evangelios, tomando episodios de la vida de Jesús
y combinándolos de un modo dramático para lograr una reacción
del público. No obstante, debido al uso de actores occidentales, locaciones
europeas o americanas, estas películas no conseguían ser tan realistas
como pretendían. Los
musicales pusieron en evidencia como la narración en imágenes del
Evangelio es más 'estilizada' que 'realista'. Desde
1988, ha habido numerosos retratos de Jesús: "La Última Tentación
de Cristo" (1988) que era una versión ‘novelada’ de los evangelios,
"Jesús de Montreal" (1988) y "Man Dancin'" (2003) que
eran historias sobre la preparación de una representación teatral
sobre la pasión en una ciudad moderna, el Jesús animado en "The
Miracle Maker" (2000) y la película de Jeremy Sisto como mezcla comprometida
de lo humano y divino en el telefilme estadounidense, "Jesús"
(1999). Más recientemente, se ha producido la imagen de Jesús más
norteamericana de que se tenga registro en el telefilme de Producciones Cinematográficas
Paulinas, "Jesús" (2001, que se estrenará en el 2004)
y un Jesús más tradicional en "El Evangelio de san Juan",
de Philip Saville Con
esta tradición "La Pasión" llega a las pantallas. Mel
Gibson había mostrado ya sus habilidades en la dirección con "El
Hombre sin rostro" (1993) y la ganadora del Oscar, "Corazón Valiente"
(1995). Una de las intenciones
principales del director y su co-guionista, Ben Fitzgerald, es sumergir al público
en el realismo de la pasión de Jesús. El actor Jim Caviezel fue
escogido para interpretar a Jesús (el único otro intérprete
de renombre es la italiana Mónica Bellucci, que personifica a María
Magdalena). Caviezel tenía la misma edad de Jesús cuando se rodó
la película. Como se mencionó anteriormente, él es un Jesús
humano creíble, grande, un obrero fuerte que pudo enfrentar los sufrimientos
terribles de la pasión antes de morir. Entre
los aspectos polémicos de la película se encontraba la decisión
original de hacer los diálogos en arameo y latín pero sin subtítulos.
La decisión del idioma se resolvió y funciona bien. Necesitamos
los subtítulos, muchos de ellos son citas de la escritura. No hay distracción
en escuchar un anacrónico inglés norteamericano o británico
con distintos acentos. En cambio, el público escucha la conversación
como era en esos días. ¡Vale la pena recordar que Jesús habló
arameo y no inglés! Una
distinción útil para hacer es la diferencia entre 'realismo' y 'naturalismo'.
Este último se refiere a hacer que la película retrate la acción
como es, las películas caseras son un ejemplo popular. El 'Realismo', por
su parte, es hacer una película que ayude al público a tener una
percepción genuina de qué está pasando en la pantalla, como
si fuera real. Un número de técnicas cinematográficas, como
el estilo de las diferentes composiciones para la pantalla, los tamaños
de plano y el ritmo de la edición pueden usarse para dar esta impresión
de realismo. Mel Gibson
ha elegido que gran parte de su filme sea 'naturalista'. Él tiene suficiente
tiempo disponible y no tiene prisa en quitarnos la imagen de Jesús sufriendo.
Quizás varias personas del público encontrarán la flagelación
(particularmente en dos partes) como algo difícil de mirar. Con la mayoría
de personajes siendo retratados de una manera naturalista, la acción parece
auténtica. Sin embargo, Gibson puede usar recursos del cine que alteran
la percepción, ayudándonos a comprender que estamos viendo una versión
particular de la Pasión, como todos cuando escuchamos los relatos de este
pasaje y usamos nuestra imaginación. Él usa la cámara lenta
frecuentemente para subrayarnos un momento particular. Este
naturalismo se ve en la confrontación en Getsemaní, en el juicio
de Jesús, con la flagelación y la coronación de espinas y,
especialmente en el Vía Crucis mostrando como Jesús se esfuerza
con la cruz, cae haciendo un ruido sordo por el impacto, es clavado y levantado
en la cruz. La estilización se usa en los primeros planos, con diferencias
en la iluminación: el azul para Getsemaní, la pálida luz
del espacio asfixiante de la corte del Sumo Sacerdote, la amplia luz del día
en el Vía Crucis), la presentación de los personajes de acuerdo
a la tradición de pinturas cristianas, la iluminación y la composición,
el paso de tiempo cuando Jesús cuelga de la cruz, su muerte y la consecuencia
apocalíptica, los avisos de la resurrección. Esto
consigue una imagen creíble y una mejor comprensión de la persona
de Jesús. Gibson ha utilizado algunos elementos eficaces para reforzar
esto. Por ejemplo, en Getsemaní, Jesús es golpeado en el ojo y desde
aquel momento y durante el juicio, él usa solo un ojo; pero cuando él
puede abrir su ojo herido, Gibson le otorga mucho poder al contacto visual que
él establece con Pilato, con su madre y con Juan al pie de la cruz, cuando
éste asiente y acepta cuidar a María. Ya
he comentado sobre el uso e inserción de flashbacks. Dramáticamente,
los personajes más familiares del Evangelio son desarrollados brevemente
lo que facilita el relato: Pedro, Judas, Pilato, la esposa de Pilato, Simón
de Cirene, Herodes y los dos ladrones crucificados junto a Jesús. A Verónica
se la presenta cuando ve pasar a Jesús y limpia su cara con su paño.
Pero Gibson no nos permite ver el interior del paño, sólo si miramos
muy de cerca se pueden vislumbrar los rasgos de la cara de Jesús. Los soldados
romanos son crudamente retratados: un comandante sádico dirige el brutal
azotamiento, la tropa ebria se mofa e insulta a Jesús por el camino y en
el Calvario, y el centurión más compasivo. En toda película
de Jesús la figura Judas siempre tiene un impacto dramático poderoso.
Las secuencias de la burla frente a un Judas atormentado y la persecución
de los niños hasta su muerte están dramáticamente bien logradas.
"La Pasión
de Cristo" ofrece un Jesús naturalista, creíble, cuyos sufrimientos
de cuerpo y espíritu son reales. Es muy difícil de predecir el impacto
que tendrá el filme en aquéllos que no son creyentes. Para aquéllos
que creen, se les presenta el desafío de ver en forma descarnada el dolor
y la tortura sobre los que tantas veces hemos leído, pero existe también
la satisfacción de experimentar de una manera diferente las conocidas historias
del Evangelio. (Traducción
de Maritza Asencios, r.p. Luis García Orso, S.J. y Ricardo Yáñez)
Peter Malone Le 2004-02-24 Articulo leido 77 vez(ces)
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