¿Qué decir de tu existencia?...
Eres bella y delicada,
el entorno donde te hallas
lo enriqueces y engalanas.

Yo te recuerdo en mi infancia
revoloteando las plantas
inquieta y juguetona,
con colores que adornan.

Te alimentas de las flores,
¡qué bella estampa!
¿Qué sería un jardín sin vosotras 
rosas y mariposas?

De colores azules, amarillos,
naranjas, negros,
verdes, blancos,
rojos y morados...

La flor espera vuestro vuelo,
el sol contemplaros,
en la noche la luna suspira
porque no puede tocaros.

Los luceros enamorados,
allá en el cielo subyugados,
contemplan vuestro encanto.

Todas las flores, un deseo…
vuestro tacto de sedoso
y suave terciopelo.

Jardines ¡qué bellos!
allí están esperando
las flores de todos ellos.

Violetas, rosas, gladiolos,
jazmines, geranios,
azucenas, crisantemos,
dalias, claveles, nardos 
y lirios, ¡los mas bellos!,
que erguidos miran al cielo
esperando el rocío
que venga a besarlos.

¡Oh flores y mariposas
vuestra vida es efímera,
pero tan hermosa!.

Sois fuente de poesía,
del pincel la musa,
de la música la nota,
y de la danza la belleza.

Lujo para nuestros ojos,
para el alma luz y gozo;
aquí estáis para eso
para alegrar nuestra vida
a veces triste, otras amarga…

... FLORES Y MARIPOSAS...
¡GRACIAS!

Celia García ©
21 de noviembre de 2002