Tengo Derecho a Proyectarme en la Política

En el año de 1953, le fue concedida a la mujer mexicana la nuestra Constitución recientemente reformada consagra la igualdad jurídica del hombre y de la mujer Constitucionalmente la mujer mexicana tiene el derecho y él deber de entrar de lleno en la vida política de su país y este derecho debe significar para toda mujer un compromiso como ciudadana, con los demás seres humanos, como cristiana, es una exigencia de su fe contribuir al bien común: el perfecto cristiano es el perfecto ciudadano.

Es un decir del común de las personas que la política es un campo ajeno a las inquietudes femeninas; se le ha considerado tradicionalmente una actividad propia del hombre. Pero hay que hacer notar que la mujer es ciudadana al igual que el hombre con los mismos derechos y obligaciones. El abstencionismo es una forma de hacer poliica y a que ésta se hace por abstención firme o por participación; todos nuestros actos tienen una dimensión politca en cuanto contribuyen al bien común o lo impiden.

Política es el arte y la ciencia del bien común

El cristiano, como exigencia de su fe, debe tener conciencia de que a su alrededor hay personas que padecen hambre, opresión, injusticia, marginación, y como cristianos debemos vivir la caridad misma de Cristo que nos pide amar al prójimo como a nosotros mismos, y esa caridad, ese amor, debe traducirse en actos que nos sitúen en nuestra realidad. Como ciudadanos de un lugar determinado hemos de tomar conciencia de nuestros problemas concretos, tanto personales como comunitarios; conocer nuestras leyes a fondo, y buscar a través de este conocimiento la solución de nuestros problemas; conocer los derechos y obligaciones de los gobernantes y de los gobernados, para exigir los primeros y cumplir las segundas; formarnos una conciencia critica frente a todos los acontecimientos, que nos sirva para conocer el origen y consecuencias de los mismos. Como cristianos debemos confrontar nuestra realidad social con el Evangelio y dirigir nuestra acción política a la búsqueda constante y apasionada del bien común, haciendo realidad nuestro compromiso con los pobres, los oprimidos, los marginados y todos los hombres de buena voluntad; buscando la verdad en la justicia ("EN EFECTO LA COLERA DE DIOS SE REBELA DESDE EL CIELO CONTRA LA IMPIEDAD Y LA INJUSTICIA DE LOS HOMBRES QUE APRISIONAN LA VERDAD INJUSTAMENTE") (Romanos 1-18), la libertad ("SI OS MANTENEIS FIELES A MI PALABRA SEREIS VERDADERAMENTE MIS DISCIPULOS Y CONOCEREIS LA VERDAD Y LA VERDAD OS HARA LIBRES") (Juan 8-82), la solidaridad, la paz y el amor.

Para lograr la justicia en el mundo, que es el mínimo de amor insaciablemente exigible, es necesaria la práctica de la caridad, entendiendo la caridad como el amor a Dios por Si mismo y al prójimo por amor a Dios; y el cumplimiento de nuestros deberes y derechos ciudadanos y de nuestro compromiso cristiano es la forma de practicarla, de vivir la caridad que es el fruto de la acción del Espíritu Santo y nos pone en disponibilidad dé servicio, de hacer la donación de nosotras mismas.

"Si nosotros los cristianos hubiéramos comprendido el Evangelio del amor, su ley, su necesidad, su fecundidad, su actualidad, no nos dejaríamos coger por la duda de que el cristianismo fuera incapaz de resolver en el ámbito de la justicia y de la paz las cuestiones sociales sin tener; que buscar esta capacidad en el materialismo económico, en el odio de clases y en la lucha civil, con el peligro de ahogar nuestra profesión cristiana en las ideologías de quien combate nuestra religión y dar a las cuestiones humanas soluciones amargas, ilusorias y a la postre antisociales y antihumanas" (Paulo VI: alocución del 20 de septiembre de 1972).

Para que la acción política pueda cambiar las estructuras sociales hay que pasar de la acción individual a una acción organizada que logre cambiar estas por otras más justas y más conformes al plan de Dios. Es necesario entrar en un proceso en que nosotros tomemos conciencia, y es urgente que participemos, que no seamos sólo espectadoras; los destinos de México no pueden estar en la ambición de unos cuantos ni en las buenas intenciones de una minoría, debe ser el resultado de la acción política de todos nosotros.’

En el corazón del hombre tienen su origen todos los males que afectan a nuestra sociedad: el afán de lucro. El deseo de satisfacer desordenadamente los sentidos, el abuso de la propiedad privada, la ambición de dominio, abuso del poder, falta de cumplimiento del deber, la pereza, la destrucción de los bienes públicos, la corrupción,... Si es allí donde están los males, Cristo pide la conversión de ese estado de pecado en una actitud solidaria de servicio, de austeridad, de justicia, de respeto a la libertad, a la autenticidad, de caridad y de respuesta sincera y amorosa a Dios, éstas serán las bases de una nueva sociedad. Tal cambio requiere una acción comunitaria, implica renuncias, esfuerzos por el bien de la sociedad.

El voto es una obligación y un derecho establecido en nuestra Constitución, es el medio de expresar nuestra voluntad soberana, por eso debe ser libre y secreto. En las próximas elecciones ejerce este acto, que es la máxima expresión democrática, consciente, libre e informadamente. Recuerda que las mujeres representamos el 50% de la población.

No olvides tu compromiso, es un compromiso de amor con tus hermanos.

Reflexiones:

1.-¿En tu comunidad se trabaja por el bien común? Haz una lista de los hechos que beneficien a la comunidad y de los que la perjudiquen.

2.-¿ Hay personas en tu comunidad que se distingan por su interés en trabajar en beneficio de tu pueblo, ciudad, Estado? ¿En qué forma?

3.-¿ Por qué los cristianos debemos actuar en la política?

4.-¿Qué plan van a seguir para formarse una conciencia política?

5.-¿ Qué importancia tiene la caridad en el campo de la política, como donación de si mismo a la comunidad?

6.-¿Cuál es tu respuesta a Cristo y a tus hermanos?

7.-Enumera actos que tú puedas realizar en beneficio de tu comunidad, individualmente y en equipo.

NOTA: Les recomendamos leer de la Conferencia del Episcopado Mexicano, "EL COMPROMISO CRISTIANO ANTE LAS OPCIONES SOCIALES Y LA POLITICA".