Esa Edad Maravillosa llamada Juventud

"Y me acercaré al altar de Dios, al Dios que es la alegría de mi juventud'.

La juventud es la tercera etapa de crecimiento o desarrollo hacia la madurez.

El joven o la joven han pasado ya por la infancia y la adolescencia, han venido las épocas de crisis, naturales y esenciales, y se encuentran en la plenitud de su desarrollo, camino hacia la etapa de afirmación de su personalidad y de equilibrio en la vida, que es la edad adulta.

No es posible determinarle una edad precisa ni al principio ni al fin de la juventud, ya que tratándose de seres individuales y únicos, cada cual está sujeto a sus especiales circunstancias de salud, cultura, educación y ambiente, que influyen en él, pero puede situarse entre los 18 y los 30 años.

Al referirse al pleno desarrollo, éste abarca los aspectos: corporal, mental, sobrenatural y social.

Si sólo se ha crecido en uno de estos aspectos con detrimento de los otros, no se puede considerar como la plenitud a que debe aspirar el ser humano.

En esta época, como consecuencia de la. Etapa final de desarrollo, se está haciendo la conciencia de la necesidad de alcanzar la autonomía y de obrar con responsabilidad.

Esto abarca varios aspectos:

Como un primer paso hacia esa autonomía, los jóvenes sienten la urgencia de encontrar la satisfacción de sus necesidade8 personales mediante una liberación económica de la tutela paterna, o como aportación necesaria y consciente al presupuesto familiar

Esto los lleva a elidir o buscar un trabajo con este fin.

Pero encuentran que para ello deben prepararse, deben aprender, pero este aprendizaje ya no será escolar, sino en la realidad de la vida y en el lugar del trabajo.

Según su ambiente, pueden estar encaminados hacia una profesión universitaria, para la cual han sido preparados; pero los propios jóvenes deberán optar por una carrera de acuerdo a sus actitudes e intereses.

Podrán elegir un oficio, un trabajo mecánico o artesanal, el comercio o el arte, en la ciudad o en el campo, teniendo en cuenta las posibilidades y limitaciones que se les presenten.

La realidad de la vida les hace comprender que de este nuevo aprendizaje depende su futuro económico, pero además, se abre ante ellos un campo de relaciones humanas nuevas y difíciles.

Aquí empieza, en este campo de trabajo, más quizás que en ningún otro, su encuentro con situaciones de justicia e injusticia y de desigualdad social, que les harán formarse un criterio que puede ser acertado o equivocado, y este criterio influirá de manera positiva o negativa en su búsqueda del equilibrio posterior.

Otro aspecto:

Según nuestras leyes, el joven es mayor de edad a los 18 años, es decir, entra en la posesión de todos sus derechos y deberes con responsabilidad ciudadana de adulto.

Es apropiada la edad, dado que precisamente los jóvenes empiezan a preocuparse por el beneficio Colectivo, a comprender las situaciones de opresión o de injusticia, a querer cambios sociales ante la realidad que van descubriendo.

En su participación en la vida política del país, los jóvenes encuentran situaciones que comprenden que deben cambiar, pero ante este hecho pueden tomar actitudes adecuadas o inadecuadas.

Puede su conducta ser activa y de entusiasmo, de reflexión ante situaciones diversas, con disposición inteligente y consciente ante los problemas encontrados, con tendencia creadora hacia una mejor situación del hombre y del mundo, según su ideal que se han forjado y luchando por conseguir.

Algunos se unen analizando las situaciones de opresión, protestando contra ellas, denunciándolas y participando en movimientos nacionalistas e incluso en grupos revolucionarios o guerrilleros.

También pueden tomar una actitud pasiva, de parásitos sociales, cuya inconformidad ante un estado de cosas que no les pasa inadvertido, se manifiesta por una indiferencia y conformidad con algo que se les antoja irremediable.

Otra actitud, la de los jóvenes que imitan costumbres extranjeras y viven en la ociosidad y el consumo de drogas. Eso, el alcoholismo y la agresividad, mantienen a una parte de la generación joven marginada de toda labor social, necesaria al cambio favorable.

En el grupo social que encuentra pocas oportunidades de trabajo y de cultura, la conducta se torna antisocial, y se manifiesta con acto de pandillerismo, robo, asaltó, prostitución, o sea, delincuencia juvenil.

Así, la juventud presenta actitudes muy diversas según la realidad social que vive en lo económico, en lo cultural y en lo religioso, y según las regiones desarrolladas, subdesarrolladas, urbanas o rurales.

Jurídicamente los jóvenes son ciudadanos adultos, pero muchos de ellos tienen aún problemas de desorientación o inadaptación que habrán de superar

Y la adaptación para el joven es descubrir o crear un orden de valores. Al niño estos valores se le dan hechos, el joven ha de encontrarlos por sí mismo.

Otro aspecto de la vida que también se presenta a los jóvenes: elegir un estado de vida, para el cual habrán de sentirse atraídos o inclinados.

Generalmente se aplica la palabra "vocación" al estado de vida que se elige; ya sea la vida sacerdotal o religiosa, la soltería o el matrimonio (que trae como consecuencia la paternidad).

El sacramento del matrimonio es ese encuentro de la pareja para complementarse, para la realización mutua, la creatividad y la trascendencia; es la fuerza de la vida abierta a la generación, es una oportunidad de riqueza extraordinaria.

Para poder elegir atinadamente, el joven y la joven tienen necesidad de reflexionar y prepararse, en esto como en todo y más quizás que en todo lo demás. Efectuar una búsqueda para encontrarse a sí mismo y poder encontrar su vocación.

La vocación implica que se haga una elección; también incluye una completa aceptación de esa elección. Deben aceptar el hecho de que su vocación les puede presentar deberes que no sospechaban cuando iniciaron la jornada.

Una vez hecha la elección, tener la determinación de realizarse en ella con plenitud.

Imposible comentar todo lo que corresponde a la juventud en la brevedad de unos renglones. Sólo hemos mencionado algunos aspectos.

Ante todo el joven debe dar un sentido a la vida, seguir una dirección propia, que encontrará guiándose por la razón, mediante el dominio de sí mismo.

Ese dominio le llevará a comprender que el placer y el instinto no son principios de vida, que la vida es un esfuerzo de superación constante en el que intervienen su inteligencia, su corazón, su voluntad, su conciencia (que es la razón guiando su libertad) y la Gracia.

También debe encontrar un sentido a la muerte, no obstante que la vea tan lejana, pues la vida tendrá el sentido que se dé a la muerte. ¿Es el fin o es el principio?

Para el joven y la joven cristianos, los valores religiosos expresan el supremo sentido de su vida personal y de su vida con relación al universo de la Creación de la que forman parte.

Como hijos de Dios se saben con un destino tan alto que no pueden alcanzarlo por sus propias fuerzas, porque su destino es el mismo Dios. Son "un proyecto de Dios en ejecución".

Pero viven y realizan Su destino en su identificación con Cristo.

Como miembros de Su Cuerpo místico, la Iglesia, son sus testigos ante los demás jóvenes.

Al exclamar: "Y me acercaré al altar de Dios, al Dios que es la alegría de mi juventud" como el Salmista, también dicen como el Apóstol (Fipp. 1-22). "La vida para mí es Cristo y vivir en Cristo es poseerse a sí mismo, es poseer el universo, es poseer a Dios, es plenitud, es alegría de vivir, es juventud.

SER MUJER es alcanzar un armonioso desarrollo corporal, intelectual, moral y social, en plenitud de femineidad.

SER MUJER ES COMPROMETERSE, EN IGUALDAD CON EL HOMBRE, en la resolución de los problemas sociales del pequeño mundo familiar y del comunitario, que son parte de la patria.

SER MUJER es comprender y hacer comprender al varón todas las posibilidades que tiene la juventud como fuerza animadora de un mundo mejor.
 
 

Reflexiona:

¿Qué personas influyen en el joven o la joven en esta etapa de su vida?

¿Cuales son las consecuencias de los matrimonios precoces?

¿ Cómo podemos los adultos tratar de comprender a los jóvenes que se encuentran con problemas de personas adultas?

¿ Hay interés en los padres por conocer el ambiente de sus hijos?

¿Tú, en tu medio, estás interesada por los problemas que se presentan a los jóvenes?

¿Qué crees que puedes hacer?