Explorando nuestro entorno

Principal ] Presentación ] Investigaciones ] Guía para investigar ] Participa ] Enlaces ] Revistas en la red ] Manual de metodología ]

 

 

Conductas agresivas por parte de profesores de la Universidad de Occidente

Cinthya Del Ángel Salinas

Nidia Ivette Martínez Saucedo

  Anabel Cruz Márquez

  Cindy Gabriela Torres Zatarain 

María Guadalupe Torres Magaña

Estudiantes de primer  año de Psicología, 

Universidad de Occidente, Mazatlán

Mayo-julio, 2001

Introducción

 

El presente trabajo pretende describir la violencia dada en la relación maestro-alumno dentro de las instalaciones de la Universidad de Occidente, campus Mazatlán.

Encuestar y entrevistar a una pequeña muestra de alumnos del tronco común de las carreras de psicología y del área de administración,  tuvo como objetivo mostrar la violencia que se sigue presentando aún a nivel licenciatura.

Esperamos que los datos aquí presentados sirvan para que los profesores que imparten las clases dentro de esta institución y de otras, reflexionen respecto a su actitud hacia los alumnos, ya que esto puede repercutir psicológica y moralmente en el rendimiento académico de los alumnos.

 

Método

 

La metodología que se utilizó en el proceso de investigación que realizamos fue de tipo cuantitativa y cualitativa.

Con el fin de conocer si en la Universidad de Occidente, Campus Mazatlán, existe algún tipo de agresión, se aplicó un cuestionario a 50 estudiantes del tronco común  (tercer trimestre) de psicología y del tronco común de administración.

El 56% de la muestra estudiada fueron mujeres, mientras que el  44% fueron hombres.

En el siguiente cuadro se indica la distribución por edades de los sujetos de la muestra, y se aprecia  que el 82% se concentra entre los 18 y los 20 años de edad y el 18% restante en edades de 21 a 23 años. 

Cuadro 1

Distribución por edad  

 

Edad

Absoluto

Porcentaje

18

12

24.0

19

17

34.0

20

12

24.0

21

6

12.0

22

2

4.0

23

1

2.0

Total

50

100.0

        

 

En la Universidad de Occidente es posible identificar a los alumnos de la carrera de Psicología, puesto que desde el primer trimestre se concentran todos aquellos que se inscribieron a esta licenciatura. No es el caso de los estudiantes de las otras carreras, pues alumnos de administración turística, finanzas y sistemas computacionales comparten hasta el tercer trimestre las mismas materias en el denominado tronco común de administración.

Debido a lo anterior, el 50% de la muestra estuvo representado por alumnos del tronco común de la carrera de psicología y el otro 50% por alumnos del tronco común de administración, distribuidos, según la carrera a la que aspiran, de la siguiente manera: el 26% son de la carrera de sistemas computacionales, el 16% son de administración turística  y el 8%  son alumnos  que esperan ingresar a la fase especializada de finanzas.

En la encuesta aplicada se les hizo dos preguntas: una acerca de si habían sido objeto de alguna agresión por parte de algún profesor de la Universidad y otra, en relación a los tipos de agresión vividos.

La segunda pregunta presentada como de opción múltiple, la resolvimos con un sondeo previo entre nuestros mismos compañeros para darles como opción de respuesta  a los estudiantes de la muestra, las agresiones que consideramos más comunes, las cuales son:

  • Me dio un manazo

  • Me aventó un objeto

  • Me gritó

  • Me insultó

  • Me ridiculizó frente al grupo

  • Me ignoró        

 

Además del trabajo de encuesta y para conocer con mayor detalle  las situaciones de agresión vividas en la universidad, entrevistamos a cuatro alumnos (dos del sexo femenino y dos del masculino).

 

  Resultados

 

De acuerdo a los resultados obtenidos, sólo el 50% de los encuestados dijo  haber sufrido algún tipo de agresión por parte de los profesores de la Universidad de Occidente.

Por otro lado,  son los del área de psicología en mayor medida quienes dicen haber sido agredidos, pues el 72% respondió en este sentido, mientras que  de los estudiantes del tronco común de administración, esto mismo se da en un 28%.

 

Cuadro 2

 

Estudiantes agredidos y no agredidos por  área profesional

     

Área profesional

Agredidos

No agredidios

Abs

%

Abs

%

T.C. de Psicología

18

72.0

7

28.0

T. C. de Administración

4

28.0

18

72.0

 

 

En el Cuadro 3 se observa que la agresión que predomina es de tipo emocional, pues los estudiantes se quejan más de que los profesores les gritan (30%) y los insultan (10%); los ridiculizan frente al grupo (24%) y los ignoran (18%). Viéndose que la agresión física es  casi nula, pues sólo uno (el 2%) respondió que uno de sus profesores le dio un manazo y ninguno eligió la opción de “Me aventó un objeto”.

 

Cuadro 3

 

Distribución de la muestra por tipo de agresión

 

Tipo de agresión

Absoluto

Porcentaje

Me dio un manazo

1

2.0

Me aventó un objeto

0

0.0

Me gritó

15

30.0

Me insultó

5

10.0

Me ridiculizó frente al grupo

12

24.0

Me ignoró

9

18.0

 

 

De acuerdo a las entrevistas  aplicadas a cuatro personas  que fueron agredidas  por algún profesor de la Universidad de Occidente, campus Mazatlán, se observa también que del tipo de agresión que experimentaron predominan los gritos, insultos, ponerlos en ridículo frente al grupo y el sentirse ignorados.

En el primer caso observamos a un alumno que se sintió agredido por una profesora cuando ésta le gritó y trató de sacarlo del salón de clases sin que desde su perspectiva hubiera razón suficiente:  

La profesora me gritó frente al grupo y me quiso sacar de la clase, yo le respondí alteradamente y le dije que no tenía la razón porque yo le estaba explicando a una compañera un problema y me picaron la espalda con un lápiz y mi reacción fue un leve grito y esa fue la razón del porqué creyó lo que creyó.

Creo que lo que motivó a la profesora a actuar así fue por que el grupo estaba haciendo relajo y parecía ser que la profesora ya venía de mal humor, Yo me enoje y me puse eufórico, porque ni se fijo en lo que pasó y se puso a gritarme y a querer sacarme del salon sin razón alguna.

 

En otro caso, el estudiante  se sintió agredido porque el profesor  lo ridiculizó frente al grupo diciéndole que sufría "daño cerebral":

   

... me ridiculizó frente al grupo por no saber pronunciar la palabra varias veces frente al grupo y se justificó diciendo que todos sufríamos un daño cerebral y por lo cual no podía pronunciar yo esa palabra; yo me sentí avergonzado y el ya me traía a carrilla; después de eso ya no quise volver a exponer en ninguna clase.  

Los estudiantes también se sienten agredidos cuando sus profesores los ignoran; cuando en clase levantan la mano frecuentemente y el docente  no los toma en cuenta, pues, dicen, le preguntan a otro alumno. También se sienten ignorados cuando se les niega atención, como en el siguiente caso:

 

Si he sido agredida; la profesora me ignora cuando le hago alguna pregunta acerca de la clase, me dice que ya no tiene tiempo, pero a los demás compañeros sí los atiende.

Después de ver esta actitud yo le pregunté el porqué a mi no me atendía y a los demás sí; me dijo que después me contestaba porque no tenía tiempo de quedarse. Después de 5 minutos la vi en la cafetería fumándose un cigarro.  

 

De acuerdo al  Centro de Cooperación Regional para la Educación de Adultos en América Latina y el Caribe (CREFAL),  la violencia emocional “no se percibe tan fácilmente como la física, pero también lastima” y se manifiesta cuando “la intención es humillar, avergonzar, hacer sentir insegura y mal a una persona”[i]. 

En este sentido, la violencia emocional, que es la que más se da en la muestra estudiada, puede afectar el desarrollo académico de los alumnos involucrados, ya que este tipo de violencia, agrega CREFAL,  tiene como efectos el deterioro de la autoestima, el daño de la imagen de la persona y su propio valor;  asimismo,  se daña su estado de ánimo y puede disminuir su capacidad para tomar decisiones y “vivir su vida con gusto y desempeñar sus quehaceres diarios”[ii].

Según los mismos entrevistado, la agresión que sufrieron sí les ha afectado su vida académica. Por las experiencias que tuvieron han tenido conductas como el dejar de poner atención a la clase, no participar en exposiciones ante el grupo o disminuir las preguntas hechas al profesor en clase.

Así por ejemplo, en el caso de la alumna ignorada, ella comentó:

   

Sentí mucho coraje, indignación, rechazo; pienso que esto me ha afectado académicamente porque ya no aclaro mis dudas por miedo a que me vuelva a ignorar. Después de este incidente siempre está tratando de hacerme menos en el aspecto de que cuando pide participaciones yo soy la única que levanta la mano y ni siquiera me presta atención; es autoritaria en la forma de que las cosas tienen que hacerse como ella diga aunque no tenga la razón.

Lo único que hace es ignorarme, no tomarme en cuenta, y por esta razón cuando ella pide participación en el grupo para subir puntos yo nunca puedo obtenerlos.

Yo pienso que la profesora actúa de esa forma por que le caigo mal.

   

         Otro de los entrevistados explica:  

Creo que esto sí ha afectado mi desarrollo académico, porque me sacó mucho coraje y cada que se enoja pienso que se enoja sin razón alguna y eso no me agrada y no me dan ganas de ponerle atención a su clase porque luego va a estar viendo a quién gritarle y no me siento a gusto.  

        

Un caso de los entrevistados se trató de agresión física, pues el profesor la golpeó en la cabeza al aventar un borrador:

Si, he sido agredida por el maestro porque una vez me aventó con el borrador y me dio en la cabeza y se justificó diciéndome que no era para mí el golpe; pero yo era la única que estaba en esa esquina, así que era obvio que el golpe era para mí.

 

A la conducta violenta manifestada en una agresión física por parte del maestro, se aunó la violencia verbal lo que tuvo efectos de tipo emocional, según cuenta:  

La reacción que tuve después fue de dolor, temor, angustia y un sentimiento de culpa, porque después de haberme golpeado me comenzó a insultar de una forma muy grosera.

Pienso que por esa razón me dan miedo los maestros, siento que todos van a actuar de la misma forma, así que evito todo contacto con ellos; desde ese día no entro casi a su clase, por eso bajan mis calificaciones.

He tenido más problemas con ese maestro en la forma en que él me regaña injustamente y me grita; él sólo se comporta así conmigo y me baja mis calificaciones.

   

Conclusiones

 

Llegamos a la conclusión  que hay violencia en la Universidad de Occidente, campus Mazatlán .

Según los resultados obtenidos de las encuestas se puede observar que se ejerce con mayor intensidad en el tronco común de psicología  que en el de administración.

El tipo de agresión que se más se da en la institución corresponde a la violencia emocional, siendo los de mayor frecuencia los gritos y ridiculización frente al grupo.  

Este tipo de agresiones repercute en las actividades académicas  de los estudiantes pues se sienten dañados emocionalmente, dando como resultado la pérdida de interés en el estudio.

 

 

 


NOTAS  

[i] CREFAL, Violencia en la familia, ILCE,  obtenido en la red en mayo del año 2001, http://omega.ilce.edu.mx:3000/sites/maypa/violencia/htm/violen.htm

 

[ii]  Ibídem

 
 
1