Carlos von der Becke - Biolog�a 28
MODULO II UNIDAD 1 CAPITULO 3
3 EVIDENCIAS SOBRE TENDENCIAS EVOLUTIVAS
La vida muy simple reci�n considerada la tendr�amos que encontrar
en los registros f�siles, pero la intenci�n se autoderrota. Los seres
demasiado primitivos no tienen v�rtebras, ni caparazones. Sus huellas
dactilares no se ven. Mientras tanto la ciencia paleontol�gica no
perdi� tiempo y construy� una explicaci�n importante de la vida hist�rica,
basada en caparazones, conchillas y v�rtebras, superadas las etapas
iniciales (lectura 3).
A continuaci�n consideramos dos lecturas que
marcan la situaci�n de la interpretaci�n de los registros f�siles,
junto con otras evidencias biol�gicas de otro origen.
Un buen ejemplo es el de comprender la evoluci�n de las plantas una
vez que el alga primordial se adapt� a medrar sobre el continente.
En el �rbol geneal�gico siguiente se muestra, a grandes l�neas, la
evoluci�n de las plantas sobre el continente a partir de la invasi�n
del mismo por una alga primordial
monocotiled�neas
angiospermas dicotiled�neas con�feras
gimnospermas primitivas.......................... helechos
con semilla, gingko
helechos modernos
pteropsida ............... helechos primitivos cola de caballo
psilopsida
briofitas ........................... plantas vasculares primitivas
algas verdes
BA fig 21.12
KARL J. NIKLAS, Evoluci�n simulada por ordenador, Investigaci�n
y Ciencia, n�mero 116, mayo 1986, p. 56.
CONCLUSIONES RAZONADAS
No podemos pretender encontrar de entrada
una evoluci�n
convergente como la de los cactos amargos, la mariposa monarca con
sus brillantes colores y sus mimetos. Toda esa evoluci�n convergente
necesit� sus centenares de millones de a�os. Esperamos encontrar
m�s bien ciclos de evoluci�n
divergente y radiaci�n adaptivas cuando el planeta mostraba condiciones
favorables, seguidos de ciclos de involuci�n cuando surg�an cat�strofes
o grandes cambios.
Para reconocer el buen o mal �xito
de una forma biol�gica que deja "huellas dactilares" de su presencia,
basta observar en los
registros paleontol�gicos si ella estuvo asociada o no, con una extensa
radiaci�n adaptiva,
fig19-12 BA
Al poblar con buen �xito muchos nichos, afirmamos que el "filo"
desempe�� un papel notable
en su �poca. Las condiciones cambiantes del planeta tambien afectan
a algunos buenos desempe�os, como un factor adicional. Los ge�logos
encuentran evidencias de grandes variaciones en la composici�n de la
atm�sfera, en la salinidad
de las aguas, en la temperatura ambiental, en la
formaci�n de sistemas orogr�ficos, de continentes
y de islas, etc., que coincidieron con la presencia de vida que
ten�a un cierto nivel de complejidad imposible de incentivar a corto plazo.
La valoraci�n de un filo exitoso tiene todas estas componentes.
de tensiones mec�nicas resultantes cuando hay un l�mite
al di�metro. Otro conflicto a considerar guarda relaci�n con las sombras
proyectadas sobre plantas vecinas y sobre s� misma. Hacer sombra
sobre una planta vecina es ventajoso. Quitarse su propia luz no lo
es. Debido a la proyecci�n de sombra de la planta sobre s� misma, cualquier
incremento de la talla reduce la eficacia de la captura de la luz. La
planta captura globalmente m�s luz, pero capta menos luz por rama. Sin embargo
la planta grande proyecta sombra sobre las plantas y las esporas vecinas,
de modo que la tendencia al desarrollo de ejemplares
mayores, si bien perjudica a los ejemplares individuales, confiere
ventajas a la especie. La mera presencia de muchos individuos de la
misma especie puede favorecer tendencias evolutivas que ayuden a la
especie a competir con otras.