Una noche, Mario, desde su cuartucho, escucha como Th�rnardier alias Jondrette, escribe cartas firmadas con diversos nombres, a gente rica, pidi�ndoles de dinero. Su hija mayor, Eponina, se encarga de llevar las cartas a su destino. Eponina, secretamente enamorada de Mario; lo visita en su cuarto, y para mostrarle que sabe escribir, le deja una nota que dice "Ah� est�n los polizontes".
Entre las cartas que Th�rnardier escribi�, va una dirigida a un tal Ultimio Fauchelevant, que no es otro que Jean Valjean, mismo que junto con Cosette, visitan el cuartucho de los Th�rnardier, llev�ndoles ropa y comida. Mario, desde su habitaci�n, observa todo y queda sorprendido de ver a su amada. La "U" del pa�uelo es de "Ultimio". Th�rnardier ha reconocido a Jean Valjean y a Cosette y as� se lo dice a su esposa. Deciden sacarle m�s dinero. Jean Valjean dice que regresar� esa noche a llevarles dinero, comida y ropa. Cuando �l y Cosette salen, Th�rnardier planea tenderle una trampa, en donde, con sus compinches delincuentes, lo robar�n. Mario, que escucha todo acude a la polic�a para dar aviso de los planes de Th�rnardier. Quien lo atiende es Javert. El inspector da a Mario una pistola para que en caso de que algo suceda dispare y le de aviso. �l y sus hombres estar�n rondando la casa.
Todo est� listo. Para fingir m�s miseria ante Jean Valjean, la Th�rnardier se finge enferma. Th�rnardier obliga a su hija Azelma a romper un vidrio con la mano y a cortarse. Ordena a Eponina que vigile desde afuera. Sus compinches se esconden en el cuartucho.