Manuel C. Martínez M.
Sadelas
Sociedad Amigos de la Salud
Motivos para celebrar, reír y vivir en paz
El mundo, con sus cosas que nos rodean, propias o ajenas, no deja de ilusionarnos: Es así cómo se dispone de múltiples bienes, un cafecito negro, por ejemplo. Para que éste se dé, es necesario el concurso oportuno y concomitante de múltiples variables en calidad y cantidad, en determinado espaciotiempo.
No se diga de fenómenos más complejos, digamos, un libro, avión, satélite, computadora, o una institución pública universitaria, independientemente de su calidad alcanzada.
Una sana conversación entre amigos, entre colegas, es motivo suficiente para sentirnos vivos, apreciar nuestra existencia y dar gracias anónimamente a nosotros mismos como equipo; y para disponernos a reír, cantar, celebrar y vivir para hacerlo en paz.
En fin, que es tan difícil disponer de amigos, de otras personas y de las variadas cosas que nos permiten y facilitan la vida, que su presencia misma debería alegrarnos, sin importar, dije, a quién pertenezcan, porque que el avaro, incapaz de compartir, niega la vida , la suya y la nuestra, sin darse cuenta de que tiene doble motivo para estar gozoso: las cosas mismas y su propiedad sobre ellas.
Sonriamos, pues, celebremos y vivamos en paz, porque es tanto lo que tenemos; es tanto lo que nos rodea, que ha terminado por ilusionarnos y hacernos considerar que son una hechura mágica o divina. Pero, si lo fueran, no importa: riamos y celebremos, porque son harto difíciles de producir artificialmente, de disponerlas, de coexistir motivadamente con ellas.
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28-1_04_KK3(539-06-02-1994 año XIII)