Juventud Nacional Comprometida, Inc.

 

JUNCO, en nombre de todos sus miembros, se siente muy honrada de reconocer públicamente al Ayuntamiento del Distrito Nacional por el paso de avance dado hacia la humanización de nuestra sociedad, mediante las disposiciones en beneficio de los animales de carga que circulan por las calles de Santo Domingo y el Distrito Nacional, prohibiendo el uso de vehículos de tracción animal en la ciudad y ordenando la recogida y entrega a centros de cuidado de los caballos en esas labores.

 

La República Dominicana es signataria de diversas convenciones internacionales que la comprometen a iniciativas en favor de la protección de la vida animal.  La Liga Internacional de los Derechos del Animal adoptó en 1977 y proclamó en 1978 la Declaración Universal de los Derechos del Animal, posteriormente aprobada por la UNESCO y por la ONU, en la cual  se consagra que el hombre, en tanto que especie animal, no puede atribuirse el derecho de exterminar a otros animales o de explotarlos violando este derecho; que todos los animales tienen derecho a la atención, a los cuidados y a la protección del hombre; y que ningún animal será sometido a malos tratos ni actos de crueldad.

 

Pero, en nuestro país, ciertas actitudes humanas retrógradas, violatorias de los más elementales principios de compasión consagrados en acuerdos internacionales, han venido afectando en forma muy particular a los animales de carga y tiro, los cuales han sido las víctimas más indefensas de estas actitudes, por la explotación abusiva que de ellos se ha hecho en las zonas urbanas. 

 

Ha sido un anhelo de JUNCO, desde su nacimiento como organización, lograr liberar del abuso y los malos tratamientos a los animales, particularmente aquellos utilizados como animales de carga en las ciudades.  El trato cruel a que han sido sometidos repugna los más nobles sentimientos humanos, hiriendo la sensibilidad de los ciudadanos más preocupados y afianzando, frente a los visitantes, la imagen de un país primitivo.

 

Con esta resolución, ha escalado el Ayuntamiento un importante peldaño en la necesidad social de reglamentar la preservación del derecho a un trato digno de los animales, encaminando los primeros pasos hacia una metrópolis moderna, libre de brutalidad contra los demás seres vivos.

 

Ojala este adelanto no sea único ni solitario; que sea sólo el principio de un cambio hacia una mentalidad progresista y evolucionada en la colectividad dominicana.  Es nuestro sueño y deseo como organización.

 

Gracias al Ayuntamiento y a todas las personas involucradas en estas acciones de vida.  

Hosted by www.Geocities.ws

1

Página principal  *  Contenido  *   Directiva  *  Estatutos  *

1