La
anemia en el embarazo
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¿Qué es la anemia? |
La hemoglobina es el pigmento rojo de la sangre que
transporta oxígeno a los tejidos del cuerpo. Si la de su organismo
desciende por debajo de un nivel adecuado, usted se vuelve
anémica.
La causa más
común de ello es la deficiencia de hierro en el organismo. Otra es a
menudo la cantidad inadecuada de ácido fólico.
Aún cuando tome una cantidad normal de hierro y ácido
fólico en su dieta, puede volverse anémica cuando espera un
hijo.
Durante el
embarazo, la sangre se diluye al aumentar su volumen y
posteriormente, el feto necesita una proporción cada vez mayor
de hierro y ácido fólico.
Síntomas
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Tal vez no advierta un grado leve de
anemia.
Si el grado es
pronunciado, los síntomas serán, quizá, debilidad, cansancio,
dificultad respiratoria, desmayo y palpitaciones.
Problemas |
En líneas generales, la anemia en el embarazo
disminuye la capacidad de enfrentarse con una gran pérdida de
sangre, como ocurre en la hemorragia pospártum.
También la expone más a la infección después del parto.
Si se vuelve
gravemente anémica, existe el riesgo de que el niño sufra de falta
de oxígeno en el útero y no tenga bastantes reservas de hierro para
combatir la posible ictericia de las primeras semanas de vida.
¿Cómo actuar? |
Es conveniente seguir una dieta rica en hierro, que
se encuentra en los siguientes alimentos:
- hígado,
- buey,
- pan integral,
- huevos y
- frutos secos.
Coma frutas
cítricas: la vitamina C que contienen ayuda a una absorción más
sencilla del hierro.
Asegúrese de que consume muchas verduras frescas:
son la mejor fuente de ácido fólico.
Su GINECÓLOGO comprobará si está anémica con una
prueba de sangre muy sencilla.
Aun cuando ésta
pruebe que no lo está, le recetará tabletas de hierro y ácido fólico
para completar la ingestión normal.
En el
caso raro de que sufra anemia grave, el tratamiento será el que se
describe para la anemia por deficiencia de hierro.
Ver Anemia
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