JUBILEO DEL AÑO 2000

Es una invitación extraordinaria a comprender mejor el misterio de la Encarnación: Recuerda que Dios te ama y que por amor tuyo Jesucristo, hace 2000 anos, se hizo hombre; recuerda por eso que has de amar a todas las personas como Cristo nos amó: "Todo cuanto queráis que Os hagan los hombres, hacédselo también vosotros ellos; porque esta es la Ley y los Profetas (Mt 7,12)".

 

Toda persona -con ocasión del Jubileo, aniversario del nacimiento de Cristo- esta invitada a meditar en este Dios que es Amor El amor te conduce a El y a la serenidad contigo mismo.

Tu, que eres cristiano

-es decir, seguidor de Jesucristo­ - ¿has sabido encontrar un momento de silencio interior para preguntarte el porqué de este gran acontecimiento?

"Ahora es el momento favorable; ahora el día de salvación (2 Cor. 6,2)".

El jubileo o Año Santo es:

·        el año del renacimiento espiritual;

·        el año del encuentro personal con Jesucristo

·        el año del amor generoso de Dios y a Dios,

  del amor generoso de los hermanos y a los hermanos.

¿PORQUE EL JUBILEO DEL 2000?

Es significativo que el cómputo del transcurso de los años se haga casi en todas partes a partir de la venida de Cristo al mundo". "A las puertas del nuevo Milenio los cristianos deben ponerse humildemente ante el Señor para interrogarse sobre las responsabilidades que tienen también en relaci6n a los males de nuestro tiempo".

¿qué juicio merece la sociedad humana, a escala mundial, en la era electr6nica?

Y ¿cuál es hoy el testimonio de los cristianos en el mundo? "El jubileo deberá confirmar en los cristianos de hoy la fe en el Dios revelado en Cristo, sostener la esperanza prolongada en la espera de la vida eterna, vivificar la caridad comprometida activamente en el servicio a los hermanos".

Es fácil lamentarse de los males que afligen al mundo; pero tú, personalmente, ¿qué haces para que el bien prevalezca? El jubileo es una ocasi6n

que el Señor te ofrece para renovar tu vida y para dar el testimonio de tu fe.

EL SIGNIFICADO DEL SÍMBOLO DEL JUBILEO

El símbolo representa muy bien el mensaje cristiano en su totalidad: la parte central, de color azul, indica el globo terrestre sobre el que domina la Cruz, como queriendo abrazarlo. Las  cinco palomas, cada una de color diverso, representan los cinco continentes. Del centro de la cruz se irradia una luz, símbolo de Cristo "verdadera luz del mundo", lo que indican también las palabras:

“Cristo ayer, hoy y siempre”.

El trenzado de las palomas significa el espíritu de unidad de los hijos de Dios y la reconciliaci6n entre los pueblos.

La Cruz recuerda que Cristo ha muerto para salvar a todos y las tres líneas multicolores que la componen aluden al misterio de la Trinidad.

COMO CELEBRA UN CRISTIANO EL JUBILEO

 

“En el año jubilar los cristianos se pondrán  con un nuevo asombro de fe frente al amor del Padre, que ha entregado su Hijo, "para que todo el crea en el no perezca, sino que tenga vida eterna (Jn 3,16)".

 

Es necesario:

1.                 Un examen profundo sobre la propia vida de bautizado

¿Que' estoy haciendo con mi vida?

¿Para que vivo?

¿Me digo Cristiano?

¿Lo soy de hecho?

¿Esta viva mi fe?

¿Quiénes son los demás para mí?

¿Pienso en las palabras del Evangelio:

"¿de qué le sirve al hombre haber ganado el mundo entero,

si él mismo se pierde o se arruina?" (Lc. 9,25)?

 

2.                 Un arrepentimiento sincero

Nadie puede fingir ante el Señor;

Cada uno tiene algo de que arrepentirse:

"El gozo de un jubileo es siempre, de un modo particular,

el gozo por la remisión de las culpas,

 la alegría de la conversión".

 "Se produce alegría ante los ángeles de Dios por un solo pecador que se convierte (Lc 15,10)".

 

3.                 Un propósito firme

 

"Me levantare', iré a mi Padre...(Lc 15,18)", como respuesta a las invitaciones:

"Convertios y creed en el Evangelio (Mc 1,15)". "Venid a mi todos

los que estáis fatigados y sobrecargados, y yo Os daré descanso (Mt 11,28)".

 

PRACTICA PARA GANAR LA INDULGENCIA  JUBILAR

 

La indulgencia es la remisi6n ante Dios de la pena temporal merecida por los pecados, ya perdonados respecto a la culpa.

 El jubileo es un año de "gracia", que tiene como fin la renovación interior. Las condiciones para adquirir las indulgencias, indicadas por la reciente Bula para el Año Santo, son:

 

1.         La Confesión sacramental que lleve a una verdadera conversi6n del coraz6n.

2.       La Comunión eucarística:

       "El ano 2000 será Un año intensamente eucarístico".

 

3.       La peregrinación para recordar que:

"Toda la vida cristiana es como una gran peregrinaci6n hacia a casa del Padre".

 

4.       Las oraciones Credo, Padre Nuestro, Ave Maria, Gloria, según la intención del Papa

5.       La visita a una Iglesia indicada por la Autoridad Eclesiástica.

 

6.       Las obras de caridad

en favor de los enfermos, encarcelados, ancianos que viven en soledad, inválidos, niños abandonados, juventud en dificultad y todos los hermanos necesitados, pues Cristo esta presente en ellos (Mt 25, 34-46).

LA HISTORIA DE LOS JUBILEOS

 

La Iglesia vive desde hace 2000 años”. El Jubileo o Año Santo  se celebra en la Iglesia desde hace siglos. Actualmente tiene  

lugar cada 25 años.

 Por motivos particulares se proclaman también  algunos Jubileos

"extraordinarios".

 

El termino 'jubileo', que viene del hebraico yobel, se refiere al cuerno de carnero usado  como trompeta para tocar a fiesta(Levítico, 25).

 

 

 

Los Anos Santos ordinarios

 

1300. Bonifacio VIII                1650.Inocencio X

1350.Clemente VI               1675.Clemente X

1390. Urbano VI y Bonifacio IX 1700. Inocencio XII y Clemente XI

1400.Bonifacio IX                    1725. Benedicto XIII

1425.Martín V                1750.Benedicto XIV

1450.Nicolás V                  1775.Clemente XIV y Pio VI

1475. Pablo II y Sixto IV   1825.León XII

1500.Alejandro VI              1875.Pio IX

1525.Clemente VII              1900.León XIII

1550. Pablo III Julio III      1925.Pio XI

1575.Gregorio XIII              1950.Pio XII

1600.Clemente VIII            1975.Pablo VI

1625.Urbano VIII               2000.Juan Pablo II

 

Jesús ha dicho: "Yo soy la puerta" (Jn 10,7). El es la

PUERTA SANTA "por la que entran los justos" (Sal 118,20).

El es el "paso" que conduce a la Vida, abriendo las

"puertas del corazón".

EL JUBILEO del 2000, proclamado con la Bula "Incarnationis Mysterium", se iniciara el 24 de diciembre de 1999 con la apertura de la puerta Santa por mano del Sumo Pontífice en San Pedro en el Vaticano; y sucesivamente en las otras tres Basílicas patriarcales de Roma.

Se celebrara también una liturgia de inicio del Jubileo en todas las Catedrales del mundo, y de un modo particular en Jerusalén.

EL MENSAJE DEL GRAN JUBILEO DEL 2000

 

El Jubileo persigue Un fin bien determinado:

Objetivo prioritario del Jubileo es el fortalecimiento de la fe y del testimonio de los cristianos"

Es para todos un gran desafió que nos compromete a:

1. Conocer mas a Padre, a Hijo y al Espíritu Santo, juntamente con Maria Madre del Redentor.

No  se puede amar a quien no se conoce

Esto requiere un compromiso personal para:

a)   leer la Sagrada Escritura:

Los cristianos vuelvan con renovado interés a la Sagrada Escritura";

b)    profundizar la doctrina cat6lica con "el estudio del Catecismo de la Iglesia Cat6lica";

c)    participar en la Liturgia,

de modo particular en la Santa Misa.

2.      Testimoniar la fe.

a) con coherencia cristiana en la vida personal, familiar, social, laboral y eclesial;

b) con las obras de caridad:

la fe sin obras es una fe muerta;

c)    con el ofrecimiento a Dios de los propios sufrimientos, uniéndose a la Cruz salvadora de Cristo.

"Maria, Madre del Redentor... Que hace dos mil anos ofreci6 al mundo el Verbo encarnado, oriente a la humanidad del nuevo milenio hacia Aquel que es "La luz verdadera, que ilumina a todo hombre" (Jn 1,9)".

 

LA INDULGENCIA: UN REGALO DE LA IGLESIA

 

“La Indulgencia es la remisión ante Dios de la pena temporal por los pecados, ya perdonados, en cuanto a la culpa, que un fiel dispuesto y cumpliendo determinadas condiciones consigue por mediación de la Iglesia, la cual, como administradora de la redención, distribuye y aplica con autoridad el tesoro de las satisfacciones de Cristo y de los Santos” (Catecismo de la Iglesia católica Nº  1461)

 

Estas indulgencias se dividen en dos grupos: indulgencia plenaria (perdón de toda la deuda debida por los pecados) e indulgencia parcial (con la cual se perdona parte de esa deuda, según lo establezca la misma Iglesia).

 

En este Año Jubilar tenemos los católicos la oportunidad de ganar la indulgencia plenaria, ya que se trata de un año especial en el cual, cumplidas las condiciones establecidas, los fieles podemos obtener el perdón de toda la deuda. 

 

Para ganar la indulgencia debemos cumplir ciertas condiciones que estableceremos en seguida:

 

·        Que el fiel se halle en estado de gracia.  Es decir, que no tenga pecados, perdonados éstos en el Sacramento de la Penitencia.

·        Tener una disposición interior de desapego a todo pecado, incluso el  venial.

·        Confesión sacramental.

·        Recibir la Sagrada Eucaristía.

·        Orar por las intenciones del Romano Pontífice. Esto queda a elección de los fieles, pero se sugiere un Padrenuestro y un Avemaría.

·        Visitar un Santuario de los señalados por el Señor Obispo y ojalá en ellos cumplir las condiciones señaladas.

 

Las indulgencias siempre son aplicables o a sí mismos o a las almas de los difuntos, pero no son aplicables a otras personas vivas en la tierra.

 

Según las instrucciones, la visita al Santuario puede ser suplida por una obra de caridad: visitar a hermanos necesitados –enfermos, detenidos, ancianos solos, discapacitados, etc.-  como realizando una peregrinación hacia Cristo, presente en ellos.

 

También se puede hacer un donativo significativo para obras de carácter religioso o social, o dedicar una parte del tiempo libre a actividades útiles para la comunidad.

 

Como obras de penitencias se pueden señalar las siguientes: Abstenerse de consumos superfluos (no tomar, no fumar, etc.),  ayunar,  hacer abstinencia, entregando una suma proporcional a los pobres.

 

               

Hosted by www.Geocities.ws

1