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                LENTES MULTIFOCALES
   
                                                         ( ANECDOTA N. 2 )

Una de las cosas de las cuales estaba orgulloso en mis años juveniles era tener una vista muy buena. Podía ver sin dificultad la estrella doble épsilon Lirae ( separación 210") , y les dejo imaginar mi alegría cuando pude comprobar con un telescopio que era realmente doble!

Pero los años pasan...y la vista va lamentablemente menguando. Llegado a los 40, me dí cuenta de que necesitaba un par de gafas, y tuve que encargar unas. Enseguida me dí cuenta de que eran una esclavitud, pues me resultaban incómodas y solucionaban solo en parte mi problema: a la distancia del plano del escritorio veía bien, pero mas allá y mas acá veía mal; la conclusión fue entonces inmediata: necesitaba un par de lentes bifocales !!

Pero hubieran quedado feas, y además solucionaban mi problema sólo en parte, pues me hubieran permitido ver bien a dos distancias diferentes, y no a todas.

¿Qué hacer entonces?
Otra obvia solución: un par de lentes trifocales !!!

Más feas aún, y todavía inadecuadas !

Ya estaba pensando en un par de lentes pentafocales...
pero, ¿quien me las haría,  y cual sería el resultado?

Ahí se prendió la lucecita!
¿No sería posible hacer un par de lentes con infinitas distancias focales?

Enseguida dibujé un lente y me convencí de que la cosa debía ser posible.

El teléfono estaba sobre el escritorio, en la oficina, y llamar a mi señora fue más una cosa automática que voluntaria:
- "Mirella "- le dije - "acabo de inventar algo extraordinario, un invento de cien mil dólares"!

Visiblemente contento, me olvidé del estrés, y  ya estaba saboreando los resultados de la brillante idea. 

Ahí es donde aparece en la oficina la esposa de un colega, recién llegado de Alemania (nosotros estábamos en ese entonces en Argentina). Me mira y me dice:

-  "¿Que pasa Dante, que te veo tan contento? 
-  "Acabo de hacer un invento de cien mil dólares",  contesté.
-  "¿Que has inventado?", replicó ella
.

Mientras le describía el invento, escuchaba complacida, y, puesta la mano en la bolsita, sacó un estuche diciendo:

                    -  "pero... me parece que mis anteojos son así !"

Lo que sigue se lo pueden imaginar: acababa de inventar, otra vez, algo que ya existía !!

Lástima por los cien mil dólares; Pero la idea, ¿quien me la puede sacar?

Para ver la anécdota # 1 hacer clic acá.

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