COCHES ARGENTINOS
© 2008 • ClubE-MailInicio • Libro de visitas: FirmarLeer
La Industria Automotriz Argentina en los Años Sesenta

Siam Di Tella 1500

>>>>El Siam Di Tella 1500 fue fabricado por la empresa Siam Di tella Automotores SA (y luego por la empresa CIDASA, subsidiaria de IKA) entre 1960 y 1967, con 69.000 unidades producidas (considerando todas las marcas, modelos y versiones). El auto era fabricado bajo licencia BMC de Inglaterra. "Creemos que, en general, el Di Tella es un coche sumamente adecuado para el hombre de familia", dijeron los testers de la revista Parabrisas.

El Origen Inglés del Siam Di Tella

 

El primer Riley (tal el nombre del auto británico del cual el Di Tella era su versión argentina), un triciclo, se fabricó en Coventry en 1898, y el último coche de esta marca salió de la planta de ensamblaje en 1969. En esos setenta años, Riley produjo algunos de los más deliciosos automóviles, la mayoría muy conservadores, pero también unos pocos y extraordinarios deportivos. Desgraciadamente, en 1938, problemas financieros dejaron a la compañía en una situación de debilidad que la obligó a incorporarse al Grupo Nuffield, dirigido por Lord Nuffield (William Morris).
Aunque como parte del Grupo, Riley tuvo el honor de ser la primera marca británica en introducir un coche completamente nuevo una vez terminada la II Guerra Mundial, en 1946: el One-Point-Five, un coche de avanzada para su tiempo, dotado de frenos hidráulicos y suspensión delantera independiente, además de cámaras de combustión hemisféricas.
El modelo, cuya producción se conservó casi hasta el fin de la marca (con actualizaciones, por supuesto), le dio a la marca un prestigio de eficiencia que la acompañaría siempre. Sin embargo, esto no impidió que, como el resto de las integrantes de la BMC, comenzara a compartir diseños y mecánicas. En 1961, debutó el Riley que correspondía al auto que nos ocupa, aunque ya con el motor de 1.622 cm³ y 70 HP a 5.000 rev/min: El Riley 4/72. Como en el resto de las compañías, la principal diferencia entre unos y otros, radicaba principalmente en la parrilla y en los arreglos, más o menos lujosos, de sus interiores. El Riley 4/72 se fabricó hasta 1969, con 14.191 unidades.

 

Historia de Siam Di Tella Automotores y CIDASA

 
Planta de ensamblaje de Monte Chingolo, 1961
 

Siam Di Tella Automotores fue producto de la decisión de la compañía Siam, hasta entonces dedicada a la fabricación de electrodomésticos, a incursionar en la producción automotriz. Tal decisión pretendía aprovechar el nuevo Régimen de Promoción de la Industria Automotriz, lanzado por el gobierno que presidía el Dr. Arturo Frondizi en 1959.
Para llevar a cabo el proyecto, Siam Di Tella Automotores firmó un convenio con la British Motor Corporation (BMC) para producir localmente el Riley 4/72, aunque bajo la marca Di Tella. Obtenida la licencia, se inició la instalación de una planta en la localidad de Monte Chingolo, Lanús, en octubre de 1959. En ese momento, la planta (de 341.443 metros cuadrados, de los que 57.194 eran cubiertos) disponía solamente de los edificios; no existía una sola máquina, instalación ni equipo. Apenas 126 días más tarde, el 15 de marzo de 1960, la planta estaba lista para iniciar la fabricación del nuevoautomóvil.
Previamente, el 9 de diciembre de 1959, Siam Di Tella Automotores hizo un ofrecimiento público de acciones por valor de 400 millones de pesos. Sin embargo, la suscripción debió cerrarse a las pocas horas, cuando las ofertas superaban ya los 3.500 millones, lo que obligó a su prorrateo. Más de 40.000 personas se convirtieron, así, en accionistas de la nueva compañía.
El 2 de abril de 1960, dieciseis días hábiles después de la terminación de la planta de producción, salió de la línea de montaje el primer Di Tella 1500. Cinco meses más tarde, el 2 de septiembre de 1960, abandonó la línea de montaje el Di tella 1500 número 1000 (foto de arriba), siendo esta una cifra insospechada hasta por los más optimistas. Hacia mediados de 1961, más de 7000 unidades del Di Tella 1500 habían sido fabricadas y entregadas a sus nuevos dueños. en gran medida, esta elevada cifra se debía a la extraordinaria penetración en las flotas de taxis del país. De hecho, el Di tella 1500 se convirtió en el auto preferido por los taxistas a lo largo de toda la década. Nunca un eslogan fue tan acertado como el del Di Tella: "El Coche Ideal para la Argentina."
Por otra parte, el éxito de auto fue impulsado por la excelente asistencia posventa impuesta por la fábrica. Además de contar con concesionarios a lo largo y ancho de todo el país, la compañía tenía a disposición de los usuarios una moderna estación de servicio integral, ubicada en la calle Oro 1744, de la Capital Federal (posteriormente abrió una oficina comercial en Florida 602 de la Capital Federal). En ella funcionaba, además, una Escuela de Capacitación Técnica dirigida por el ingeniero Arnoldo Lucius, quien dictaba cursos completos al personal técnico de los conce
sionarios. Mientras tanto, Siam Di Tella continuaba apostando al país, logrando, hacia 1962, una incorporación de partes fabricadas localmente del 85 por ciento.
A principios de 1961 debutaron dos nuevos vehículos producidos por Siam Di Tella. El primero era una versión familiar del Di Tella 1500, denominado Traveler. El segundo, por su parte, era una pick up bautizada Argenta. Sin embargo, en este último caso, no se trataba de una versión con caja del Di Tella, sino de una camioneta de origen Austin, y con las características de estilo de esta marca. La versión pick up del Di Tella, que conservó el nombre Argenta, apareció recién en 1963, con las mismas características mecánicas del coche, aunque con una suspensión reforzada.
También en 1963, apareció una versión de dos carburadores, denominada "Di Tella Special", cuya potencia era de aproximadamente 63 HP. Este modelo no tuvo gran difusión, salvo por la publicidad que hacían algunos representantes, entre ellos Roberto Mieres. Cuando en 1964 apareció la versión de lujo del Di Tella, el Magnette (un modelo que en Gran Bretaña correspondía a la marca MG, también integrante de la BMC), se decidió trasladar la opción de dos carburadores a este coche.
Hacia mediados de la década Siam Di Tella se hallaba muy endeudada; por su parte, IKA-Renault venía buscando un coche que le permitiera llenar el lugar de los autos medianos de concepción europea en su gama, libre desde el fracaso del Bergantín. Inicialmente había intentado hacerse del control de I.A.F.A., que fabricaba la línea Peugeot, pero su acuerdo con Renault hizo imposible el proyecto. Por lo tanto los directivos de IKA decidieron hacer el intento con Siam Di Tella. El Dr. Jorge Roberto Hayzus —el mismo que había estado a cargo inicialmente del proyecto Bergantín— fue encargado por IKA para llevar adelante las negociaciones para quedarse con la mayoría del paquete accionario de Siam Di Tella Automotores, proceso en el cual fue nombrado presidente de la compañía, ahora denominada Compañía Industrial de Automotores S.A. (C.I.D.A.S.A.). En marzo de 1965, finalmente, fue firmado el acuerdo entre ambos directorios: James Mc Cloud por IKA y Guido Di Tella, Guy Clutterbuck y Torcuato Sozio por Siam Di Tella. El traspaso, claro está, sólo incluyó la división automotores, ya que el holding Siam estaba integrado por 34 empresas y 14 fábricas. Bajo la presidencia del Dr. Hayzus, CIDASA tomó el control de la planta de Monte Chingolo y se puso a trabajar en la recuperación de la marca. Mas para establecer una diferencia, CIDASA, decidió recurrir a los nombres originales de los autos que producía, con lo que el Di Tella 1500 pasó a denominarse Riley Fordor BM 611, o simplemente Riley 1500y el Magnette pasó a denominarse MG Fordor BM 613. Asimismo, se introdujo otro modelo intermedio de la línea: el Morris Fordor BM 612. La pick up Argenta, por su parte, pasó a llamarse Riley Pick Up BM 631, mientras que el modelo Traveller dejo de pertenecer a la línea original Riley y pasó a formar parte de la línea intermedia de CIDASA, como Morris Traveller BM 622. Todos los modelos respetaban la línea original obra de Pininfarina iniciada por el Di Tella 1500, aunque adoptando las parrillas tradicionales de cada una de las marcas en Inglaterra. En cuanto a las mecánicas, sólo el Riley conservaba el viejo motor de litro y medio, mientras que tanto el Morris como el Magnette empleaban el más nuevo de 1622 centímetros cúbicos. El orden de precios hacia mediados de 1966 era el siguiente (cifras en pesos moneda nacional):

Riley Pick Up BM 631
931.900
Riley Fordor BM 611
1.052.900
Morris Fordor BM 612
1.150.800
Morris Traveller BM 622
1.180.000
MG Fordor BM 613
1.266.300

Desgraciadamente, a pesar de tratarse de autos fiables y económicos (motivo por los cuales fueron preferidos por los taxistas), la situación de endeudamiento y de problemas con el abastecimiento de partes hizo que la compañía se convirtiera en inviable, razón por la cual IKA-Renault decidió el cese de las actividades de CIDASA. La planta de Monte Chingolo fue posteriormente vendida a Chrysler. Se habían producido una 69.000 ejemplares, en todos los modelos y versiones, según el siguiente detalle:

Producción total Siam Di Tella Automotores
62.049
Producción Di Tella 1500
45.785
Producción Di Tella Special
562
Producción Di Tella Magnette
2.654
Producción Di Tella Traveller
1.915
Producción Di Tella Argenta
11.133
Producción total CIDASA
7.699
Producción Riley 1500
235
Producción MG 1650
235
Producción Morris 1650
3.027
Producción Morris Traveller
847
Producción Riley Pick Up
1.053

 

Aquí Está el Di Tella 1500
©PARABRISAS, Diciembre 1960

 

El coche que presentamos hoy, el Di Tella 1500, es fabricado en la Argentina por Siam Di tella Automotores S.A., bajo licencia de la BMC (The British Motor Corporation Ltd.). En su país de origen se lo conoció como Riley. Es un sedán de cuatro puertas abisagradas adelante, con capacidad para cinco o seis pasajeros; con motor colocado sobre el eje delantero. La tradición actúa a través de las ruedas traseras. Sus dimensiones y potencia autorizan a ubicarlo en la categoría conocida entre nosotros como “término medio” o “mediano” y sus características generales y costo de mantenimiento lo señalan como un automóvil “utilitario”.
El diseño general es del conocido estilista italiano Pinin Farina y cae dentro de ese estilo europeo-americanizado en el que se contempla primordialmente la posibilidad de exportación y en el que han privado las líneas formales del trazado de Detroit del año 1958, aunque fuera de las proporciones originales por el tamaño del automóvil. Su altura lo coloca más arriba que el término medio de los automóviles de su tipo, debido probablemente a la necesidad de guardar una relación estética entre las dimensiones del techo y del capó, que debe alojar un motor alto como es el BMC de 1.489 cm³ que lo impulsa.
La carrocería es una unidad autoportante o monocasco, sistema de construcción desarrollado por primera vez en el año 1938 por BMC. El fundamento de esta estructura es hacerla lo suficientemente rígida para prescindir del clásico chasis. Con esto se logra una disminución apreciable en el peso total del vehículo, detalle que debe ser cuidado al máximo en un automóvil de mediana potencia como es el Di Tella litro y medio. Este tipo de construcción actúa a veces como una caja de resonancias, y en caminos de empedrado no muy regular, los ruidos naturales de las cubiertas contra el suelo repercuten en el interior de la cabina. Las dimensiones del Di Tella 1500 son las siguientes:

Largo máximo
4.520 mm
Ancho máximo
1.610 mm
Alto máximo
1.520 mm
Distancia entre ejes
2.520 mm
Trocha delantera
1.241 mm
Trocha trasera
1.267 mm
Distancia mínima al suelo
160 mm
Peso vacío
1.090 kg
Peso máximo
1.500 kg

La distribución general de los elementos accesorios de la carrocería, tales como manijas de puertas y levantavidrios, aletas de ventilación, etc., es razonablemente cómoda, y su accionamiento se realiza sin dificultad. Una circunstancia que se debe mencionar es que el Di tella tiene un ventilete en cada puerta, lo que garantiza una corriente de aire constante en el interior del automóvil. Las puertas y asientos son amplios y las medidas interiores, muy generosas para un automóvil de su tamaño. El mecanismo de regulación de distancia de los asientos delanteros es suave y corre sin mayor esfuerzo. Su recorrido total es aproximadamente de quince centímetros, lo que permite manejar con la misma comodidad a conductores de estaturas muy diferentes.
El freno de mano está colocado bajo el nivel del asiento, entre éste y la puerta, a la izquierda del conductor. Su movimiento se realiza sin dificultad en forma muy natural, y la palanca no sobrepasa el nivel anteriormente citado, aun en los momentos en que está completamente tirada. Las manijas de las cerraduras y de los levantavidrios funcionan eficazmente. Las primeras tienen un dispositivo que conectado impide la apertura de las puertas desde el interior del automóvil. Las segundas, elevan totalmente los vidrios con una vuelta completa. La misma llave del contacto abre el tanque de nafta, la tapa del cual está unida o es solidaria con una solapa abisagrada a la carrocería. Esta solapa, al nivel de la carrocería cuando está cerrada, es la que tiene en realidad la cerradura y descubre la boca propiamente dicha del tanque de combustible que se encuentra bajo nivel. Además de no romper en absoluto con la línea, este conjunto es imperdible y a prueba de olvidos. El baúl que es amplio, se abre con otra llave.
El sistema de pedales colgantes tiene la ventaja de dejar cómodo espacio de descanso para los pies. Sin embargo, tiene la particularidad de que para apretarlos es necesario un movimiento de arriba hacia abajo, que no puede realizarse naturalmente, porque la tendencia de las piernas del conductor es de empuje más hacia adelante que hacia abajo.
El espacio aprovechable en el interior del automóvil es grande, en comparación con otros de la misma categoría. La separación entre los asientos delantero y trasero, es aproximadamente de 28 centímetros, medida suficiente para un verdadero confort. La medida de anchura de los asientos delanteros, tomada de puerta a puerta, es de 1.333 mm aproximadamente. Esta dimensión permite la ubicación de tres pasajeros adelante, con una comodidad muy aceptable. Lo mismo puede decirse del asiento trasero, también aprovechado al máximo.
Un detalle de importancia que contribuye en gran manera a la comodidad interior del Di tella 1500 es que las manijas de las puertas y de los levantavidrios están fuera de la zona de contacto de los hombros, codos y rodillas, pudiendo el pasajero apoyarse contra las puertas, sobre todo en el caso de las delanteras, sin sufrir golpes o rozamientos incómodos. La luz interior funciona con la apertura de las puertas delanteras. La salida y entrada del conductor es cómoda y sencilla y no encuentra obstáculos en el movimiento de sus pies en la zona de la puerta.
Los instrumentos del tablero están bien distribuidos. En ningún caso los rayos del volante o la palanca del cambio de velocidades, que se acciona con la mano derecha, impiden la visión de los mismos. La distribución del instrumental es la siguiente: un dial a cada lado de la columna de dirección, conteniendo el de la izquierda el manómetro de aceite, el termómetro indicador de la temperatura del agua y el indicador del nivel del combustible, y el de la derecha, el velocímetro y dos botones luminosos que indican el funcionamiento de las luces altas y la recepción de carga de la batería. El velocímetro lleva incluido un cuentakilómetros de “vuelta a 0”, para controlar recorridos parciales.
La llave de encendido-arranque está colocada en el tablero sobre la columna de dirección, posición que la hace un tanto incómoda en su manejo. Varias perillas distribuidas en el tablero accionan el sistema de luces reglamentarias de ciudad, limpiaparabrisas, luz del tablero, etc. Carece de encendedor eléctrico. En la columna de dirección, del lado izquierdo, se encuentra ubicada la palanca del sistema de luces indicadoras de viraje. En el lado derecho está la del cambio de marchas.
Hacia adelante, la línea de visión de un automovilista de regular estatura, cortada por las formas de los guardabarros delanteros y el capó, encuentra el suelo a una distancia que oscila entre los cuatro y cinco metros, dejando todo ese espacio fuera de la vista del mismo. Hacia atrás, mirando por el espejo retrovisor, esta distancia es mayor, entre los seis y siete metros. Estas zonas de sombra se agrandan a medida que disminuye la estatura del conductor y se contraen al aumentar la misma. La visibilidad es buena y la deformación causada por el parabrisas envolvente es la mínima. Con el asiento trasero ocupado por tres personas, la eficiencia del espejo retrovisor disminuye en gran proporción. Los pasajeros del asiento posterior hacen aumentar la zona de sombras hasta el punto en que objetos cercanos al automóvil, que no levantan mucho del suelo, no se ven prácticamente. Lo mismo en el caso de baches, pozos, montículos, etc. Un espejo retrovisor del tipo exterior podría llegar a solucionar este inconveniente.
La potencia motriz es transmitida a las ruedas traseras a través del embrague, la caja de velocidades, el árbol de transmisión y el diferencial. El embrague es del tipo disco seco y se comanda hidráulicamente desde el pedal. La caja de velocidades tiene cuatro marchas hacia adelante, con la 2º, 3º y 4º sincronizadas. El comando de esta caja está a cargo de una palanca colocada a la derecha de la columna de dirección. El diferencial, de engranajes hipoidales, tiene una desmultiplicación final de 4,55 a 1. La relación entre los engranajes de la caja de velocidades y las ruedas traseras, a través de la reducción final del diferencial es la siguiente:

1ra
16,55 a 1
2da
10,08 a 1
3ra
6,25 a 1
4ta
4,55 a 1
Marcha atrás
21,64 a 1

El diseño de suspensión del Di tella litro y medio es ortodoxo. El movimiento de las ruedas delanteras es independiente en cada una, y las traseras están unidas por un eje rígido flotante. Los movimientos de las ruedas directoras son controladas por un sistema de suspensión del tipo de paralelogramo deformable transversal y el elemento suspensor propiamente dicho es un resorte helicoidal solidario en su parte superior con la carrocería y en su parte baja con el brazo triangular inferior del conjunto articulado de sostén.
La suspensión trasera consiste en un eje rígido que une las dos ruedas y dentro del cual se sistematiza la parte de transmisión compuesta por el diferencial y los palieres que van a cada rueda. Este eje está situado y mantenido en su lugar por los mismos elementos que hacen a la suspensión, es decir, por dos elásticos de ballesta semielípticos colocados longitudinalmente.
Los frenos son hidráulicos en las cuatro ruedas, del tipo de doble cilindro en las delanteras, comandados todos por una sola bomba principal accionada por el pedal de freno. El de mano, mecánico y de transmisión a cable, trabaja sobre las ruedas traseras.
El grupo propulsor es el clásico BMC de cuatro cilindros dispuestos en línea y refrigerados por agua, con válvulas en la cabeza y un solo árbol de levas. El diámetro y carrera de los cilindros es de 72,025 mm y 88,9 mm, respectivamente. Estas dimensiones dan una cilindrada total de 1.489 cm³, que con 7,2 a 1 (índice de compresión no muy alto), entregan, a 4.500 revoluciones por minuto, una potencia de 55 HP. La versión de este motor para Inglaterra disponía de 68 HP a 5.400 rev/min, con una compresión de 8,3 a 1.
El block es de fundición de hierro sin camisas de cilindros. Los pistones son de aleación de aluminio con cuatro aros cada uno. Estos pistones transmiten su potencia motriz a un cigüeñal que se apoya en tres bancadas. La carburación se realiza por intermedio de un carburador SU de tiro semidescendente de 38 mm que recibe el combustible por intermedio de una bomba eléctrica a diafragma, también SU, colocada directamente sobre el tanque de nafta.
La lubricación es forzada por bomba de aceite, que es extraído de un cárter de 4½ litros de capacidad. Esta bomba trabaja a una presión normal de 3,52 kilogramos por centímetro cuadrado. La tolerancia de este sistema va de 2,1 a 3,52 kilogramos por centímetro cuadrado.
El precalentamiento de los gases de admisión es efectuado por el calor de los de escape. El encendido es realizado por un distribuidor con avance automático. La instalación o circuito eléctrico es de 12 voltios y la batería tiene una capacidad de 57 amperes/hora. Esta batería por una dínamo comandada por correa, ubicada en la parte superior delantera derecha del block del motor. Tiene regulador de voltaje y circuitos independientes por secciones con enchufes de tipo bayoneta. El orden de encendido es de 1-3-4-2.

 

Hoy Probamos el Di Tella 1500
©PARABRISAS, Julio 1962

Fue con mucho interés que acogimos la noticia del test del Di Tella 1500. desde su aparición en la turbulenta escena de nuestra pujante motorización, este coche ha sido motivo de los más encontrados comentarios, generalmente alabatorios, en algunos casos peyorativos. Posiblemente los primeros hayan tenido algunos problemas, poco menos que inevitables, de regulación; hubo quien se quejó de dificultades en colocar algunos cambios. En general, sin embargo, el coche era poco menos que una incógnita para nosotros.
Podemos decir ahora que esta incógnita ha sido develada en forma, en general, satisfactoria. Con algunas reservas, el coche nos dio un resultado verdaderamente excelente. Los directivos de Di Tella hacen hincapié en que es un auto esencialmente “familiar”. A lo que nosotros contestamos que PARABRISAS es también una revista familiar. Cada coche debe testearse en función de su precio y de sus aspiraciones, o, más correctamente, las aspiraciones de quienes lo diseñaron y quienes lo compran. El Di Tella 1500 es sustancialmente más barato que otros vehículos de similares características, y además está apoyado por un “service” realmente bien organizado, con modernas concesionarias en todo el país; este detalle tiene una importancia fundamental para quien usa el coche para viajar, sea habitualmente u ocasionalmente.
En este coche se deja atrás la conducción rápida, nerviosa, para encontrar su verdadera razón de ser en el suave y confortable transporte de cuatro personas, o cinco también, a adecuada velocidad y con un silencio y refinamiento dignos de su metier como automóvil de familia. No hallaremos, entonces, un pique sobresaliente, pero sí una aceleración adecuada al andar en el tránsito ciudadano. Se orienta más para el lado del refinamiento burgués que el aristocrático corcoveo del purasangre de carrera. Por supuesto, esto es precisamente lo que necesita la mayoría de nuestros compradores de automóviles.
No por esto, sin embargo, debemos considerarlo un obstáculo en el tránsito; el Di Tella se mueve cuando el dueño está apurado, pero una de las grandes virtudes del Di Tella 1500 es la elasticidad de su motor, realmente notable tratándose de un coche de carrocería relativamente pesada y apenas 55 caballos. El Di Tella que nosotros probamos, que estaba muy bien carburado, podía andar a 25
Km/h en 4º, y acelerar suavemente y sin trepidaciones a partir de esa velocidad.
Al sentarse al volante del Di Tella —el Austin A 55 en Inglaterra, aunque la parrilla del radiador corresponda al Riley— la primera impresión es de comodidad y refinamiento. El volante es elegante y sobrio, y de excepcional comodidad. Tiene aro de bocina que acciona la guiñada con un inversor. La guiñada se hace con la luz alta, detalle acerca del cual se halla dividida la opinión de nuestros testers; hay quien prefiere el imperativo destello de la luz larga, hay quien sostiene que la luz media implica mayor consideración hacia los otros usuarios de la calle. El cambio de luz se hace con un interruptor de pie.
El tablero es sencillo y muy sobrio, con instrumentos claros y bien marcados, y prolijas llaves y perillas de control. Los futuros Di Tella tendrán la llave de arranque en el centro del tablero, detalle que eliminará la molestia de tener que insertar el brazo a través del volante para la puesta en marcha. El arranque siempre fue instantáneo. De mañana convenía darle un tirón al cebador (que en nuestro coche tenía un resorte de retorno para evitar marchar con el cebador accionado). Medio minuto de ralentí y, siempre atento a las indicaciones de la casa, salíamos despacio, con mucha segunda y tercera, hasta que el indicador de temperatura marcara “N” para Normal. El Di Tella también está provisto de manómetro de presión de aceite, e indicador de nivel de nafta; le falta únicamente el amperímetro, reemplazado por una luz testigo, de las que, según la huraña opinión de nuestros testers “avisa cuando ya se rompió”. De todos modos, los fabricantes de autos tienen razón cuando dicen que son pocos los conductores que saben interpretar una lectura de amperímetro ... y el amperímetro desapareció en la mayoría de los coches que se fabrican hoy día.
Suponiendo que todo se encuentra normal, apretamos el pedal de embrague y colocamos en primera la palanca de cambios. Ésta es de recorrido largo; el embrague, en cambio, tiene muy poco recorrido de trabajo, siendo bastante “celoso”; creemos que este detalle condice poco con la suavidad que caracteriza toda la tesitura del automóvil. Los pedales son del tipo colgante, de accionamiento blando. El mando del embrague es hidráulico. El acelerador es del tipo “cucharita”. Al costado izquierdo del asiento del conductor se encuentra la palanca del freno de mano, robusta y bien terminada. A pesar de su ubicación, no obstruye el acceso al automóvil
La primera velocidad es corta, y no bien el coche entra en movimiento es conveniente enganchar la segunda; ésta también es algo corta, en cambio la tercera es muy larga, existiendo un apreciable salto entre la 2º y la 3º. Un conductor acostumbrado al manejo rápido usará bastante acelerador en 2º y 3º, para mantenerse a tono con la vorágine porteña. Más arriba de 40 kilómetros por hora, la diferencia de aceleración entre 3º y 4º escasamente justifica el rebaje, pudiendo aprovecharse la elasticidad del motor.
El Di Tella frena suavemente y sin esfuerzo de pedal excesivo. En “paradas de pánico”, de 100 a 0, hay que estar atento para corregir cualquier eventual cruzada. Nuestras pruebas, en el Autódromo y en las Sierras de Córdoba (Pampa de Achala) no provocaron nunca fading.
Las luces son muy potentes, quizá lo sean demasiado en luz media. El comando es una llavecita de tres posiciones a la izquierda del tablero. También hay un interruptor separado para la luz de instrumentos.
El velocímetro, claro y de agradable lectura, incorpora un interesante detalle, poco visto en la actualidad: un “giornaliero” o cuentakilómetros parcial con retorno a cero, y que alcanza a 999,9 kilómetros. (Muy útil para las pruebas de consumo de PARABRISAS). La luz de cabina se enciende al abrir las puertas delanteras, teniendo además un interruptor individual. El capot no tiene luz, y tampoco el baúl, aunque disfruta de algunos pálidos rayos que arroja en su camino la luz que ilumina la chapa patente.
Tiene tres ceniceros (en el tablero más uno en cada respaldo delantero), pero no posee encendedor (aunque hay quien se lo pone). La gaveta es de tamaño mediano (creemos que podría ser más grande), pero hay dos amplias bandejas, utilísimas y muy inglesas, debajo del panel de instrumentos, una a cada lado. Las puertas delanteras no tienen posabrazos.
La comodidad es una característica de este automóvil. Los asientos son firmes, con tapizado de primera calidad, y son individuales. Tienen un amplio recorrido longitudinal. Sin embargo, siendo bastante altos los dos asientos, el espacio vertical es reducido, especialmente en cuanto a los asientos traseros. Una persona que pase de 1,75 metros tendrá poca luz entre el techo y su cabeza.
La dirección es suave, no demasiado rápida, y de fuerte acción de retorno. Si se vira demasiado fuerte, chillan las cuatro cubiertas, aunque no en forma que induzca al odio de la población pedestre.
En cierta forma, el Di Tella es el auto de las cosas raras. Está el detalle, próximo a solucionarse, de la llave de arranque, que exige el brazo de un contorsionista para accionarla.
La perilla de destrabar el capot está ubicada a la derecha, siendo necesario recostarse sobre el asiento para accionarla. Este detalle probablemente sea oriundo de Inglaterra, donde los volantes se usan a la derecha.
El Di Tella tiene dos llaves, pero por algún inescrutable proceso de raciocinio anglosajón, una de ella abre encendido, puertas y tapa de tanque de nafta, mientras que la otra abre solamente el baúl. En nuestro coche, las primeras operaciones de abrir el baúl fueron del tipo “yo era un alfeñique de 97 libras” hasta que finalmente descubrimos que estaba torcida la traba. Una vez enderezada en un concesionario Di Tella no hubo más problemas.
Hablando del baúl, debemos decir que es amplísimo y muy cómodo; la rueda de auxilio está ubicada en un receptáculo cuya tapa integra el piso del baúl. Para sacar la rueda de auxilio es necesario embocar la manija de puesta en marcha manual en un zócalo ex profeso y, mediante una rotación de “destornillar” ir bajando la rueda. Es un detalle que no roba espacio al baúl (aunque por otro lado creemos que la maniobra no sería demasiado cómoda para una mujer o un señor de edad).
Andando en ruta, el Di Tella se muestra como una muy cómoda forma de llegar a cualquier lado sin problemas... y a 100 kilómetros por hora de fácil y suave crucero. Es amplio, silencioso, y de mullido andar. Su estabilidad alcanza perfectamente para cualquier solicitación normal, y los frenos también. Los faros de cola son también fuertes; en el tránsito, cuando el Di Tella frena, el resplandor de las luces de stop puede ser tal que moleste a los automovilistas que vienen detrás.
Sintéticamente, el Di Tella se presenta como un vehículo casi ideal para turismo, permitiendo mantener interesantes promedios sin fatigar para nada a los ocupantes del coche. En cuanto al consumo, éste es levemente menos de 10 kilómetros por litro, andando a 100
Km/h; si se reduce la velocidad a 80, el consumo disminuye a 12 Km/l.
Es característica de los coches ingleses tener ventanillas que suben y bajan muy rápidamente, es decir, su mecanismo está muy multiplicado en relación a la manijilla de accionamiento. Esto se debe a que en ese país se usan mucho las señales de mano, pero como no se puede andar siempre con la ventanilla abierta, por el frío, se hace imperativo un mecanismo que permita bajarlas y subirlas con mucha rapidez. Este detalle se mantiene en el Di Tella. Es muy cómodo, porque evita tener que hacer muchas maniobras. Creemos que será necesario mantener adecuadamente lubricados los mecanismos para que no se endurezcan excesivamente con el tiempo.
El Di Tella tiene ventiletes en cada una de las cuatro puertas, permitiendo un adecuado control de la ventilación. Nuestro coche carecía de calefacción, pero tenía una entrada de aire fresco, que nosotros no utilizamos porque el tiempo no era caluroso.
La visibilidad del Di Tella es buena; el espacio retroscópico deja, sin embargo, un punto ciego a la izquierda, cuyo defecto es su poca ostensibilidad, vale decir, el conductor no habituado no se da cuenta de ese punto ciego hasta que repentinamente percibe que lo superan por escasos centímetros por el lado izquierdo. Desde el puesto de conducción, se ve el camino a 4,30 metros hacia la derecha y a 1,12 metros a la izquierda.
La marcha atrás exige, para su colocación, una maniobra de curioso trámite: hay que tirar la palanca hacia afuera, levantarla un poco, describiendo un arco, y luego bajarla acercándola al pecho del conductor.
Tiene indicador de viraje con retorno automático; la señal testigo es una luz montada en la punta de la misma palanca de accionamiento, poco fácil de ver.
La amortiguación es excelente. A pesar de una dura prueba, no sufrió lo más mínimo.
La tenida de agua es muy buena; sólo comprobamos filtraciones en la parte de abajo de las puertas, detalle del cual no se ha exceptuado ningún coche de los que testeamos hasta ahora. Los limpiaparabrisas son eléctricos, de accionamiento algo lento (44 barridas por minuto). Barren una adecuada superficie.
Debemos señalar, finalmente, que nuestro coche tenía la puesta a punto para nafta especial, que usamos durante todo el test, sin notar pistoneo. Hubo un pequeño consumo de aceite (nuestro coche tenía más de 15.000 kilómetros recorridos cuando iniciamos el test).
Creemos que, en general, el Di Tella es un coche sumamente adecuado para el hombre de familia, casualmente la mayoría entre los lectores de PARABRISAS.

Datos Técnicos del Road Test

Rendimiento es una palabra muy pronunciada hoy día, a la que se le asignan una serie de poderes mágicos que sirven para salir del paso en cualquier momento, y para determinar cualquier característica del automóvil. Sin embargo, en mecánica, el concepto tiene aplicaciones muy particulares, y en ningún momento puede referirse al automóvil en conjunto. El rendimiento total de un auto sólo es una función de su dueño, que se interesa por ciertas características y deja de lado otras. Por eso es que las pruebas y resultados deben ser específicos, para que cada persona pueda decidir cuáles son los datos que más le interesan.
Esta prueba fue realizada íntegramente por los testers de Parabrisas, Sres. Ronald Hansen. Emilio R. del Valle (n) y Guillermo Mártire, excepto en las pruebas de frenado y aceleración realizadas en el Autódromo, durante las cuales el coche fue conducido por el Sr. Goliardo Dondero, de Di Tella Automotores.
x
Error del Velocímetro
Datos Reales (en Km/h)
20
40
60
80
100
Velocímetro (en Km/h)
25
42
63
84
108
x
Prueba de Velocidad Máxima
Se toma sobre un kilómetro lanzado en sentidos opuestos, para anular la posible influencia del viento. La medición se realiza con un velocímetro perfectamente calibrado.
En el caso del Di Tella 1500, la velocidad máxima alcanzada fue de 116,9 kilómetros por hora, la que se alcanzó en 30,8 segundos.
x
Prueba de Aceleración.
Con el mismo velocímetro anterior, se controla el tiempo que el automóvil emplea en alcanzar velocidades crecientes de 20 en 20 kilómetros por hora. Se obtiene de este modo una idea exacta de la mejor aceleración del automóvil.
De 0 a 20 Km/h
1 s 1/5
De 0 a 40 Km/h
5 s 3/5
De 0 a 60 Km/h
11 s 1/5
De 0 a 80 Km/h
20 s 2/5
De 0 a 100 Km/h
37 s 2/5
De 0 a 500 m
27 s a 87 Km/h
x
Prueba de Empuje
Se comprueba aquí el empuje máximo que recibe el automóvil en cada marcha, por medio de un instrumento de precisión llamado Performance Meter marca Tapley, tipo R. Las mediciones resultan en kilogramos de empuje por tonelada de automóvil.
En 1ra
260 kg/ton a 18 Km/h
En 2da
125 kg/ton a 48 Km/h
En 3ra
73 kg/ton a 60 Km/h
En 4ta
57 kg/ton a 78 Km/h
x
Prueba de Arrastre
Esta es la más interesante de las pruebas realizadas con el Tapley, dado que con ella se obtiene una clara idea del arrastre o frenaje que efectúan sobre el automóvil sus rodamientos, engranajes y condiciones aerodinámicas. Se realiza con el aparato en posición, llevando el automóvil hasta una velocidad de 100 km/h, y apretando el pedal de embrague, para desconectar el motor de las ruedas motrices, pero dejando que éstas sufran el frenado producido por el arrastre de los engranajes de la caja de velocidades. Cuanto menor sea el arrastre, mayor es la cantidad de HP del motor que llegan a las ruedas motrices. Esta medición es independiente del peso del auto.
En el caso del Di Tella 1500, el arrastre total a 100 kilómetros por hora fue de 70 kilogramos por tonelada.
x
Prueba de Frenado
La prueba se refiere al aguante y la capacidad de recuperación de los elementos frenantes, y se realiza deteniendo el automóvil a 0 desde los 80 km/h, diez veces consecutivas sin dejar que las campanas y demás elementos se enfríen y recuperen su eficacia original. De este modo, se obtienen diez mediciones de distancia de frenado, que irán creciendo a medida que aumente el número de mediciones.
De 20 a 0 Km/h
3,10 metros
De 40 a 0 Km/h
8,00 metros
De 60 a 0 Km/h
18,00 metros
De 80 a 0 Km/h
28,60 metros
De 100 a 0 Km/h
45,70 metros
x
Pruebas de Estanqueidad para el Agua
Consiste en verificar filtraciones de agua hacia el interior de la carrocería (cabina, baúl, motor). En las pruebas de agua, se somete al coche a una lluvia de presión durante diez minutos.
El Di Tella evidenció una impermeabilidad excelente. Se produjeron filtraciones mínimas debajo de las puertas y en el baúl (en el último caso probablemente atribuibles a la falta de burletes de goma). Las colizas de puertas, de paño, quedaron completamente secas después de la prueba.
x
Pruebas de Intensidad de las Luces
Se determina con un fotómetro, estableciendo la intensidad en lúmenes por metro cuadrado, tanto de las luces de ruta como de las de ciudad.
En el caso del Di Tella 1500 la luminosidad fue (medida a un metro) de 2,9 lúmenes/m² los faros altos, y de 1 lumen/m².
x
Pruebas de Consumo
Realizadas sobre ruta y ciudad, estableciendo consumos a distintas velocidades.
En ciudad
10,3 Km/l
En ruta a 80 Km/h
11,8 Km/l
En ruta a alta velocidad
9,5 Km/l
x
Un par de meses después de aparecido el Road Test del Di Tella 1500, llego a la redacción de Parabrisas la siguiente carta de un propietario de San Luís:
«La velocidad máxima del Di Tella es de 125-130... según la afinación del motor. Para viajes largos, de 90 a 95
Km/h, aunque estimo el régimen ideal a los 85... a esta velocidad, rinde 240 kilómetros con 20 litros, no pasándose jamás de la temperatura normal. La elasticidad en cuarta es notable...; anda a 15-20 sin tironeo alguno...; creo que es característica de los Austin. No tiene un pique espectacular, pero sabiendo manejar bien los cambios, se obtiene una aceleración buena... Después de 75.000 kilómetros bajo condiciones muy diversas, mi Di Tella no tiene consumo de accidente o pérdida de compresión alguna. Los cambios entran fácilmente, pudiendo hacer 4º / 3º a 90 km/h... Las dificultades son por deficiente regulación del varillaje de caja. La 1º y la MA no son sincronizadas. El autoencendido que ocasionalmente se presenta es consecuencia de bujías sucias o gastadas. Esta anormalidad aparece matemáticamente cada 5.000 kilómetros, debiendo limpiarse las bujías, o reponerlas en caso necesario. En general, no tiene problemas este coche, que creo idealmente adaptado a las necesidades del automovilista argentino.» —La carta del señor de San Luis, escrita antes de que se publicara nuestro Road Test, coincide tan exactamente con él en la mayoría de sus detalles, que podría haber sido escrita por uno de nuestros “testers”. Lo que prueba que el Di Tella que nos prestó la fábrica para testear estaba perfectamente “standard” (aunque muy bien puesto a punto...)
Más adelante, en el mismo número en que se publicó la carta del señor de San Luís, apareció otra, de autor anónimo, que decía lo siguiente: «Dicen ustedes que los coches de Road Test son estrictamente de serie, sin preparación previa, pero ha llamado mi atención que el Di Tella 1500 que ustedes testearon tenga la misma patente que la unidad probada por otra publicación... ¿El auto no habrá sido “especial”?
La respuesta de Parabrisas fue la siguiente: —El hecho de que el Di Tella testeado por nosotros haya sido la misma unidad que oportunamente tuvo la publicación a que Ud. alude solamente significa que la empresa destinó un único coche a Road Test. El auto estaba muy bien puesto a punto, como es lógico, pero no tenía ninguna preparación especial perceptible. No podía tenerla, porque, de haber aumentado la compresión, pistonearía hasta con nafta especial, y de haberse aumentado, por ejemplo, los gicleurs, se notaría un consumo desmedido que repercutiría en contra del coche mismo. Otra posibilidad sería un cruce de levas fuera de norma, pero como es sabido, esta modificación ataca directamente la elasticidad motriz en baja, y precisamente esa elasticidad fue uno de los detalles sobresalientes del Di Tella, como se dejó constancia en el test.

 

1000 Horas en la Ciudad
©PARABRISAS, Junio, Julio y Agosto 1963

En mayo de 1963, la revista Parabrisas llevó a cabo una prueba destinada a evaluar el Di Tella 1500 bajo condiciones reales de funcionamiento. Denominada “1000 Horas en la Ciudad”, la prueba consistió en circular por la Ciudad de Buenos Aires durante cuarenta y un días, deteniéndose sólo en la paradas previstas para recargar combustible, engrasar, cambiar el aceite y lavar el auto, además de cambiar de piloto. La idea era simular un año de uso normal del coche.
Según señaló la misma publicación, «Probar sobre el terreno es la mejor prueba, y realizarla en las circunstancias para las que el automóvil fue realizado es una verdadera garantía.» Un estudio realizado por especialistas, indicó que un conductor normal que utilizaba por entonces el coche para transporte personal recorría en un año una distancia que oscilaba entre 18 y 25 mil kilómetros. De acuerdo con el promedio establecido por Parabrisas de 23 kilómetros por hora, la cifra conseguida al final coincidía con el uso de un año. Ya en la prueba, el coche recorrió un promedio de 400 kilómetros por día.
El coche, provisto por Siam Di Tella Automotores a través de un convenio firmado con Parabrisas, fue sometido primero a una serie de pruebas de pista y laboratorio para determinar su estado y funcionamiento, según las pautas normales de la revista para los road test (prueba de distancia de frenado, medición de potencia según escala Clayton, compresión, desgaste de cubiertas, ruidos interiores en decibelios, ruidos de transmisión tomados a la altura de la caja de velocidades y del mecanismo diferencial, fatiga de la suspensión y alineación de ruedas).
El Di Tella 1500 de la prueba partió de Plaza Miserere el domingo 19 de mayo a las 00:00 horas y, tras algunos ajustes en cuanto a recorrido y horarios se estableció una regularidad que permitía predecir el paso del auto por distintos puntos de la ciudad. Estos puntos eran, en orden de paso, los siguientes: Bouchard y Paseo Colón, Retiro, Plaza Italia, Ugarte y Maipú, Perú y Av. Santa Fe, Ugarte y Libertador, Libertador y Monroe, Cabildo y Congreso, Dorrego y Córdoba, Córdoba y Cerrito, Corrientes y Juan B. Justo, Juan B. Justo y General Paz, Once, San Juan y Entre Ríos, San Juan y Boedo, Constitución, Bdo. de Irigoyen y San Juan, Plaza de Mayo, Azopardo y Garay, y Bouchard y Paseo Colón. Este recorrido se efectuaba en 3,50 horas, aproximadamente. De todas maneras, en varias oportunidades hubo que modificar la ruta debido a cortes e interrupciones. Por ejemplo, el 25 de mayo, el centro quedó virtualmente cerrado por los festejos patrios.
La prueba finalizó el 29 de junio a las 16 horas, tras recorrer 23.504 kilómetros. Todos los servicios del automóvil se realizaron de acuerdo al plan de services que aparece en el “Manual del Conductor” del Di Tella 1500, incluida la rotación de cubiertas. De un modo u otro, el promedio de detención del automóvil fue de 127 minutos cada 24 horas, lo cual da un tiempo total de 88:43 horas, esto es, el 8,81 por ciento de la prueba. Estos tiempos no son estimativos, sino que respondían a la información brindada por los discos del Tacógrafo instalado en el Di Tella por Parabrisas.
Durante la prueba no se registraron accidentes; ni siquiera rozaduras de importancia. Varios incidentes surgieron inevitablemente en las 1000 HORAS, aunque ninguno de importancia y algunos risueños, como la oportunidad en que se convirtió en vehículo policial, durante el paro general del 31 de mayo. De todas maneras, ninguno de estos inconvenientes obligó a una detención superior a las dos horas, y todas las detenciones no previstas fueron por problemas de tránsito.
Las detenciones programadas se detallan del siguiente modo: Cambio de choferes: 250 cambios a 10 minutos cada uno da un total de 2.500 minutos. Abastecimiento de nafta: 123 cargas de 5 minutos cada una, con un total de 615 minutos. Services generales de acuerdo con el manual: 20 services con un promedio de 30 minutos cada uno, con un total de 600 minutos. Detenciones por problemas de tránsito: Un promedio de 38 minutos por día, lo que hace un total de 1.608 minutos.
Durante la prueba, el Di Tella 1500 fue conducido por doce choferes, siempre en forma profesional, respetándose los tiempos y velocidades de los cambios de marchas y cuidando la suspensión y otros elementos. En resumen, que los conductores no expusieron al coche a esfuerzos innecesarios. Así y todo, el automóvil sufrió algunos inconvenientes. Estos fueron: 1) Una filtración en la base del parabrisas que ablandó el material del que está hecha la bandeja inferior del tablero. 2) La descompostura del velocímetro. Ambas fueron arregladas. El Di Tella 1500 no tuvo ningún otro problema.
El consumo promedio registrado a lo largo de las 1000 HORAS fue de 10 kilómetros por litro, con el carburador regulado “económico”. Las bujías empleadas fueron las Champion UM2Y para la conducción en ciudad (colocadas por el service oficial de la marca por ser las ideales para uso exclusivo en la ciudad, al ser más calientes), y las Champion N5 para las pruebas en dinamómetro antes y después de las 1000 HORAS.
Los resultados de las comprobaciones de laboratorio mostraron poco desgaste general del automóvil. Cierres de puertas, levantavidrios, limpiaparabrisas, lavaparabrisas, radio, etc. Todos estos elementos demostraron un buen comportamiento y un escaso desgaste.

Pruebas de Laboratorio de las 1000 Horas

Dinamómetro Clayton
rev/min (Directa)
17-5-63
1-7-63
2500
26.6 HP
25,0 HP
3000
31,0 HP
27,5 HP
3500
35,0 HP
32,0 HP
4000
31,5 HP
30,0 HP
4500
29,5 HP
25,0 HP
x
Prueba de Emisión Sonora
Motor a una velocidad equivalente a los 60 km/h, en directa
Aspecto
17-5-63
1-7-63
Ruido ambiente
65 db
60 db
Caja de velocidades
76 db
85 db
Diferencial
81 db
87 db
Ventilador
75 db
90 db
Respaldo del asiento
70 db
71 db
x
Prueba del Compresómetro
Cilindro
17-5-63
1-7-63
Nº 1
140 lb/in²
145 lb/in²
Nº 2
145 lb/in²
128 lb/in²
Nº 3
145 lb/in²
136 lb/in²
Nº 4
140 lb/in²
138 lb/in²
x
Datos Generales
Kms reales por Tacógrafo
23.504
Consumo de combustible
10 Km/l
Combustible empleado
50/50 de Especial y Común YPF
Lubricante empleado
Supermóvil SAE 30
Consumo de lubricante
2½ litros, 6 cambios

 

Di Tella 1500
Riley 1500

Cuadro Clínico del Riley 1500
©PARABRISAS, Mayo 1967

Siempre fue muy británico. Ahora se llama Riley. Sin embargo, su línea es conocida y su mecánica, probada. Fabricado en nuestro país bajo licencia de la BMC, el Riley, ex Di Tella 1500, se ha convertido en una de las siluetas más populares que transitan por las calles de la República. Es el más tranquilo de los 1500 locales y gracias a un motor poco exigido y a componentes de una robustez y calidad poco comunes, ha logrado completar recorridos, antes de una reparación general, que provocan asombro. De hecho, tiene el mérito de haber demolido el mito de que los motores chicos y de más de 4.000 vueltas no pueden durar.
De su resultado hablan elocuentemente los miles de unidades en circulación y muy especialmente, la enorme cantidad de ellas destinadas al duro trabajo de taxímetros. Y es allí, paradójicamente, donde se han obtenido los kilometrajes más extensos sin abrir. Un ex-funcionario de Di Tella Automotores, nos comentaba el caso de un taxi (motor nº 118) que cambió aros a los 235.000 kilómetros. Volvió a cambiar a los 490.000, pasando a .010”, y ellos revisaron el coche a los 630.000 kilómetros sin haber sido tocado nuevamente (como norma, un conductor normal no supera los cien mil kilómetros y un conductor profesional los ciento cincuenta mil).
Desde su aparición, el automóvil ha sufrido muy pocas modificaciones, y las que hubo fueron de poca importancia. En 1962 se aumentaron las trochas en 45 mm adelante y 38 atrás. En 1964 hubo una innovación en los tapizados y se reubicó la llave de contacto y arranque, que antes ocupaba una posición incómoda y poco accesible. En ambos diales de instrumentos se incorporaron unas pequeñas viseras plásticas de color negro. En 1965 se reemplazó la bomba de combustible eléctrica por una mecánica (el block del motor estaba preparado para el cambio), se incorporó el asiento delantero enterizo (optándose por la comodidad en contra de la deportividad), nuevos tapizados y se cambiaron los amortiguadores traseros de brazo por otros telescópicos. Se cambiaron también las manijas de las puertas y de los levantavidrios.
En cuanto a los tapizados, los primeros no fueron del gusto de todos, por lo que el cambio se hacía necesario. En cambio, se mantuvo la gruesa alfombra de lana. El volante sólo cambio por el emblema en el centro. El medio aro sirve para bocina y guiñada. Es típica de los autos europeos y especialmente de los ingleses la bandeja abierta debajo del tablero, sólo interrumpida por el espacio para la radio. Un problema persistente fue el de las plaquetas del cierre de las puertas, sobre todo en la trasera derecha en los taxis.
Las reformas introducidas en la parte posterior han mejorado (a nuestro gusto) el aspecto de la cola, si bien, visto de perfil, la línea del guardabarros trasero origina un ángulo muerto con el nacimiento del mismo, estampado en la puerta posterior.
Es realmente motivo de orgullo para los fabricantes y concesionarios de la marca, el hecho de que sean ínfimos los problemas que ha dado el coche a través de sus casi seis años de vida. Habiendo consultado usuarios, mecánicos, agentes autorizados y funcionarios de la fábrica, llegamos a establecer en qué consisten las dolencias que más frecuentemente afectan al 1500.
Increíblemente resistentes, los elementos constituyentes de la suspensión y dirección no necesitan más cuidado que el de la alineación del tren delantero. Tampoco suelen registrarse fallas en el encendido o en la instalación eléctrica. Sólo se detectó un prematuro desgaste del interruptor de los faros, que en las primeras unidades era de tres posiciones. Asimismo, se observó un defecto en el interruptor de los limpiaparabrisas (eléctricos), que hacía que, luego de un rato de uso, seguían funcionando después de haberlos conectado.
El carburador no da ningún trabajo en absoluto, si se tiene cuidado en mantener el nivel de aceite en el pistón amortiguador (no hay bomba de pique). La bomba eléctrica sellada que equipaba a las primeras unidades fue suplantada (en 1961) por una unidad reparable a la que se le podían cambiar los platinos y el diafragma. Esta bomba ha dado bastantes problemas a más de un usuario y se estima que las que han llamado equivalen a un 11 o 12 por ciento del total.
Los frenos son en general estables y poco vulnerables en el uso continuado. No acusan “fading”, incluso al ser exigidos en condiciones severas (autódromo, montaña). La vida útil de las cintas está directamente en relación con la modalidad de manejo del conductor y por el tipo de terreno por el que circula.
La transmisión no registra ninguna falla crónica ni ocasional. El grafito del embrague es un verdadero “larga duración” y los órganos de la transmisión no requieren más que la lubricación periódica aconsejada por el manual. Debido a problemas con los retenes, se verificaron algunos casos de pérdida de lubricante en la directa y en la cadena de distribución. Hay que tener sumo cuidado al instalar el filtro de aceite cuando se reemplaza el elemento descartable, en especial con la posición de la junta en su alojamiento. La distribución no ofrece problemas más que el eventual desgaste de la cadena. Ésta debe ser reemplazada al cabo de un periodo que puede estimarse, como valor promedio, en unos 170.000 kilómetros.
Hubo problemas con la toma de la tripa del velocímetro en la caja. Las primeras tenían la tapa de plástico (donde van los tornillos que la fijan a la caja de velocidades) y se producían pérdidas de aceite; recordar que la caja del Riley lleva el mismo lubricante que el motor. Las tripas deben ser reemplazadas aproximadamente en unos 70 u 80 mil kilómetros. Se verificaron dificultades serias con el varillaje de la caja, especialmente en primera y segunda. El enganche de la marcha atrás supone una maniobra no apta para espaldas con problemas de columna, pero no es defecto ni falla sino problema inherente al diseño en sí.
Conviene descarbonizar durante el ablande y a los 20.000 kilómetros, y cuidar que se esmerilen las válvulas (los bordes de asiento a 45º son algo finos, y el esmerilado provee un sellado perfecto). Una afinada completa, platinos incluidos, es conveniente cada 9 o 10 mil kilómetros, aprovechando para regular válvulas cuando se afina el motor. La bomba de nafta mecánica requerirá una reparación entre los 90 y 100 mil kilómetros. El filtro de aceite debe reemplazarse cada 10.000 kilómetros, y el de aire debe limpiarse según el mismo periodo.
La caja de dirección requiere la verificación del nivel de aceite SAE 90 EP (al ras del borde inferior del orificio de llenado) cada 2.500 kilómetros. El distribuidor deberá lubricarse del siguiente modo: la leva con una fina capa de grasa; los contrapesos del avance automático y el tornillo en el centro del eje de la leva con unas gotas de aceite de motor, cada 5.000 km. Cada 2.500 lubrique el cable del freno de estacionamiento (alemite) con grasa de chasis; lo mismo para la suspensión delantera, cada 2.500 kilómetros.
Se verificará el nivel del lubricante de la caja de velocidades cada 2.500 km (la varilla de control se encuentra justo a la altura del acelerador, sobre el lado derecho del piso, pero hay que levantar la alfombra), y se cambiará el aceite (SAE 30 o 20 W 40) cada 10.000 kilómetros. El nivel de aceite del puente trasero seguirá idéntico proceso de control y cambio, usándose SAE 90 EP. Cada 5.000 km aplique dos gotas de aceite de motor al orificio central del cojinete posterior del generador. Evite lubricarlo en exceso. Cada 2.500 km debe agregarse aceite de motor en el alojamiento del pistón amortiguador del carburador, hasta que el nivel quede a unos 13 mm de la parte superior del vástago. Renovar el aceite cada 10.000 kilómetros. Di Tella Automotores aconsejaba el uso de un lubricante liviano (SAE 10) o aceite tipo máquina de coser para el carburador. La bomba de agua deberá lubricarse con algunas gotas de aceite SAE 40 cada 10.000 km. Evite lubricar con exceso.
Al ajustar la luz de válvulas (cada 10.000 km) la luz entre balancines y válvulas debe ser de 0,38 mm (.015”) con el motor caliente. Cada 5.000 km es necesario verificar la luz de electrodos de las bujías, luego de hacerlas limpiar (arenado con aire comprimido o con cepillo de alambre), la luz correcta debe ser de 0,64 mm (.025”). Corresponde reemplazar las bujías muy gastadas o con deterioros visibles. Use Champion N5 de 14 mm o las equivalentes de otras marcas. La luz de platinos (0,40 mm o .016”) deberá revisarse también cada 5.000 km.
El nivel del líquido de frenos necesita ser verificado cada 2.500 km. Los neumáticos serán rotados cada 5.000 km.
En resumen, para ser un motor relativamente chico, el Riley requiere los cuidados de una unidad grande, y en comparación con otros competidores de la categoría, el mantenimiento preventivo y de operación es razonablemente bajo. Evidentemente, esa es una de las razones que lo hicieron el auto más vendido para taxi, y no creemos que haya muchos taxistas arrepentidos de haberlo comprado. Como vehículo para uso familiar o particular, es más que rendidor.

Di Tella 1500
Riley 1500
Dimensiones Generales - Comparación
Di Tella 1500
Riley 1500
Largo máximo
4.520 mm
Ancho máximo
1.610 mm
Altura máxima
1.520 mm
Distancia entre ejes
2.546 mm
Trocha delantera
1.241 mm
1.286 mm
Trocha trasera
1.267 mm
1.305 mm
Despeje del suelo
170 mm
175 mm
Peso aproximado
1.090 kg
1.152 kg
Diámetro de giro
11,43 m
11,29 m

 

Consultas de Propietarios

Soy propietario de un Di Tella 1500 y deseo saber por qué, siendo un motor de 55 hp, patina en la arena al arrancar, de una forma tal que amenaza peligrosamente con encajarse. Además, algunas veces, se rebalsa el carburador; ¿a qué se debe? ¿Podría solucionarse con un filtro de nafta, y de qué tipo? (Propietario de Bolivar, Buenos Aires.)
Respuesta de Parabrisas (1961): Las ruedas de su Di Tella patinan en la arena, no porque el motor tenga 55 hp, sino porque usted larga el embrague muy abruptamente o acelera demasiado, o las dos cosas. Pruebe arrancarlo en segunda, si la primera es muy “corta”. El rebalse del carburador se debe seguramente a que se pega la aguja, o porque tiene una suciedad alojada en su asiento. El uso de un filtro de nafta no afectará la tendencia a rebalsar o no, pero puede evitar que las impurezas lleguen al asiento de la aguja).

Soy poseedor de un Di Tella 1500, en cuyas especificaciones se destaca un rendimiento de 240 kilómetros con 20 litros. Sé bien que esto resultaría posible en determinadas circunstancias. Desearía saber con qué rendimiento debería conformarme si realizo una actividad que requiere un uso del auto similar al de un taxímetro. (Propietario de Capital Federal.)
Respuesta de Parabrisas (1961): Evidentemente, en uso urbano, usted circulará continuamente en las marchas inferiores y no logrará cubrir 12 kilómetros con un litro de nafta. El consumo de un automóvil depende en enorme grado de cómo se lo maneje. Probablemente usted no logrará más de 120 a 140 kilómetros con 20 litros.

Soy poseedor de un Di Tella 1500. hasta el momento, su rendimiento es excelente, después de haber recorrido cuatro mil kilómetros, salvo una falla en las velocidades. ¿Podría decirme usted por qué a veces cuesta hacer entrar la primera y la marcha atrás? El mecánico del “service” me dijo que esto ocurriría hasta que el automóvil se haya asentado. Ya he andado el doble del asentamiento y no veo mejora alguna. Conversando con otro dueño de Di Tella, me dijo que el tenía el mismo problema. ¿Dio la casualidad de que los dos coches salieron con el mismo problema o todos los Di Tella tienen la misma falla? (Propietario de Necochea, Buenos Aires.)
Respuesta de Parabrisas (1961): Algunos Di Tella dan a veces problemas con la primera y la marcha atrás. El remedio es sencillo; antes de colocar uno de estos dos cambios, ponga la palanca momentáneamente en una de las marchas sincronizadas (2º, 3º, o 4º) y sáquela de nuevo sin soltar el embrague. Verá que el cambio entra fácilmente.

Tengo un Di Tella 1500 y debo andar mucho en tercera. ¿Sufre el motor en esa marcha? (Propietario de Felicia, Santa Fe).
Respuesta de Parabrisas (1962): No, no sufre. Lo que le hace mal es llevarlo demasiado despacio en cuarta.

Al cerrar el contacto de un Di Tella 1500 el motor sigue funcionando. Nos sugirieron usar nafta especial, pero la única diferencia es que ahora nos cuesta más que antes,,, ¿Es normal esto? (Propietario de Lincoln, Provincia de Buenos Aires).
Respuesta de Parabrisas (1962): El fenómeno se llama “autoencendido” y, por lo general, no suele ser peligroso para el motor. Pero es muy molesto. Si persiste va a tener que verificar si está a punto y, eventualmente, probar con bujías más frías.

Tengo un Di Tella 1500, modelo 61. La presión de las cubiertas aconsejada por el manual es de 23 adelante y 25 atrás, pero parece baja. (propietario de San Nicolás, Buenos Aires.)
Respuesta de Parabrisas (1963): Si usted anda muy rápido conviene aumentarle la presión a 28 y 32, más o menos. Si anda como la mayoría de los automovilistas, respete las indicaciones que proporciona la fábrica.

1) Tengo un Di Tella 1500 y le acoplé un escape directo ¿Perjudicará al motor? 2) Mucha gente cambia el filtro de aire original de fábrica. ¿Cuál es el motivo? ¿Conviene? 3) ¿Cuál es la velocidad crucero que puede llevarse constantemente sin afectar al motor? 4) ¿Es posible que Siam Di Tella presente un coche de más potencia? 5) ¿Por qué no interviene el Di Tella en los Grandes Premios de Turismo Mejorado? (Propietario de Capital Federal.)
Respuesta de Parabrisas (1963): 1) El escape directo es antirreglamentario. 2) No conocíamos esa circunstancia. Por el manual vemos que el Di Tella tiene un filtro del tipo seco. Su eficiencia es muy elevada, siempre que el elemento se cambie con la frecuencia que indica el manual. Por otra parte, la experiencia ha demostrado que el motor del Di Tella es uno de los más duraderos del momento. Así que el filtro original no puede ser tan malo. 3) Según nuestra experiencia con el Di Tella de Road Test, alrededor de 95. 4) Sí, creemos que sí, pero no tenemos aún seguridad. 5) Para que un automóvil pueda intervenir en competencias internacionales de Turismo Mejorado es menester que previamente haya sido “homologada” su fabricación por la Federación Internacional del Automóvil, París. Es decir, que esa entidad rectora del deporte internacional, lo acepte oficialmente como automóvil de producción en serie. Pero para que eso ocurra, es necesario que la fábrica efectúe la solicitud correspondiente. Hasta el momento, parece que Siam Di Tella Automotores no realizó dicho trámite. En algunas competencias menores de Turismo Mejorado han participado algunos Di Tella, aunque inscriptos como Riley 4/72.

Cuando un Di Tella se queda sin nafta, golpea ruidosamente la bomba instalada al al lado del codo del tanque de nafta... Alguien dijo que es usual. (Propietario de Capital Federal.)
Respuesta de Parabrisas (1964): Efectivamente, es una característica de la bomba de nafta eléctrica. Cuando se va quedando sin nafta, o cuando por ejemplo se tapa la cañería entre el tanque y la bomba, éste empieza a emitir un ruidito característico.

¿Qué velocidad máxima real desarrolla un Siam Di Tella 1500 de fábrica? ¿Y aplicando dos carburadores? ¿Esto último puede ser perjudicial? (Propietario de Guatimozin, Córdoba.)
Respuesta de Automundo (1965): La velocidad indicada por catálogo es de 125 km/h. La aplicación de dos carburadores puede significarle un aumento de reacción y de velocidad que no podemos estimar, ya que todo depende de las necesidades paralelas que surjan de su aplicación. Lo cierto es que dos carburadores bien colocados hacen a un mejor rendimiento, y no significan ningún perjuicio para el motor.

1) ¿Qué beneficios puede acarrearle a un motor Di Tella 1500 el cambiar su junta de tapa de cilindros por otra de mayor espesor? 2) ¿Construyó Siam Di tella algún Di Tella con dos carburadores que no fuera el Magnette? ¿Cuántos se hicieron? ¿A quiénes fueron vendidos? ¿Qué características distinguen a estos coches? 3) ¿Qué beneficios o perjuicios puede traer para un Di Tella el uso de dos carburadores? ¿Aumenta el consumo de nafta? ¿Y la potencia? ¿Cuál es la nafta más aconsejable para usar con dos carburadores? (Propietario de Vicente López, Provincia de Buenos Aires)
Respuesta de Parabrisas (1965): 1) Beneficios, pocos; podrá andar un poco más de tiempo sin pistonear, aun estando fuera de punto el motor. Los perjuicios son: mayor consumo de combustible y menos pique y velocidad. Nosotros creemos que no conviene para nada. El Di Tella no debe pistonear con nafta común si está bien a punto, y aunque pistoneara, resulta fácil obviar este problema usando más frecuentemente la caja de velocidades, que de todos modos es lo que corresponde hacer para aliviar el trabajo del motor y hacer que dure más. La compresión normal es de 7,2 a 1. 2) Di Tella construyó en 1963 una cantidad limitada de coches denominados “Di Tella Especial” con múltiple de dos carburadores. No hubo ninguna restricción a su venta, y algunas agencias, como la de Roberto Mieres, promocionaban ese modelo corrientemente en sus avisos. Cuando resolvieron hacer el Magnette, desistieron de la producción del Di Tella Especial. Su potencia era de 60-63 HP. 3) Nosotros probamos un Magnette de dos carburadores; anduvo muy bien, pero había un poco de demora en la aceleración, una vacilación inicial, característica de los motores alimentados por partida doble, especialmente los motores de cilindrada reducida. El consumo de combustible era bastante normal... en uso normal. En cuanto al tipo de nafta, no depende del número de carburadores, sino principalmente de la relación de compresión. Por lo tanto, si no se modifica la relación de compresión al adosarle dos carburadores, el coche puede usar la misma nafta que antes.

Deseo saber en cuánto le aumentaré la velocidad a mi Di tella 1500 efectuando las siguientes modificaciones: aumento de la relación de compresión de 7,2 a 8,2 a 1; colocación de dos carburadores; cambiar la desmultiplicación de 4,55 a 2,33 a 1; y aumentar el diámetro de las válvulas de admisión de 38,80 a 39,92 mm. (Propietario de Lanús, Buenos Aires.)
Respuesta de Automundo (1966): Es muy difícil predecir sobre los resultados de las modificaciones de que usted habla. Pueden incrementar la potencia, o no. Ello depende de una serie de factores que sería largo enumerar aquí. Por ejemplo, el aumento de la compresión, así, sin otras modificaciones, no garantiza mayor velocidad. Tal vez debería condicionar al mismo al cruce de levas. Más positivo es, eso sí, el uso de dos carburadores, aunque esto deberá estudiarse para que rindan. Lo que no creemos que de resultados es el cambio de “multiplica”, pues no parece factible que, aún aumentando la potencia, el auto tire con una relación de 2,33 a 1.

Tengo un Di Tella 1500 modelo 1960, que compré nuevo y estoy muy conforme con él, pero desearía saber cómo se originó el mito de que es un Riley. Entiendo que con excepción de la trompa es un Austin puro las letras estampadas en el block del motor así lo denuncian. El Austin-Di Tella es un excelente coche. ¿Por qué, entonces, llamarlo Riley? (Propietario de Capital Federal).
Respuesta de Parabrisas (1967): Los modelos de la BMC de una misma cilindrada comparten el casco de carrocería básico y cambian detalles como luces traseras y parrilla. Cuando se planeó la producción de los primeros Di Tella se ensayaron varias posibilidades de tratamiento frontal y se eligió el empleo de la carrocería completa del Riley 1500, tal como se fabricaba en Inglaterra. Como motor, se empleó el Austin, pues tiene diferencias con respecto del motor Riley original que lo adecuan al mercado local y a las facilidades de producción de la empresa en el país. En definitiva, se seleccionó la combinación motor-carrocería que, a juicio de los expertos, mejor se adecuaba a la plaza en la que habría de venderse. Nadie insinuó nunca que el Austin fuera un mal auto ni que convenía más llamarlo Riley.

Tengo un Di Tella ’60. Tiene bomba de nafta eléctrica. ¿Pueden asesorarme sobre su cuidado y/o conveniencia de reemplazarla por una bomba mecánica o dejarlo con dos bombas? (Propietario de Capital Federal)
Respuesta de Parabrisas (1966): El único mantenimiento accesible es quitar la tapa de bakelita y pasar un papel entre los platinos de la bomba para asegurar su limpieza. Entre las alternativas que cita, preferimos la de colocar dos bombas eléctricas, operación bastante sencilla (lógicamente, usted comprende que hay que instalar líneas de nafta duplicadas). Creemos que es factible también instalar una bomba de nafta mecánica usando la bomba que venía con la pick up Argenta de la 1ra Serie (carburador Zenith), para lo cual su block debe tener una plaqueta desmontable al costado, que al ser retirada descubre la excéntrica en el árbol de levas, utilizada para impulsar la bomba mecánica en la Argenta. Nosotros sabemos que en un Di Tella 1500 se efectuó esta modificación, pero seguimos prefiriendo dos bombas eléctricas.

Hosted by www.Geocities.ws

1