Meses antes de que empezara la Segunda Guerra Mundial, el joven Steve Rogers intentó alistarse en el ejército, pero fue rechazado debido a su cuerpo frágil. Su última oportunidad para ingresar en las fuerzas armadas era probar un misterioso suero que el gobierno estaba preparando, y que lo acabó convirtiendo en un súper soldado con una fuerza y una inteligencia superiores a la media. Aunque el experimento fue un éxito, el inventor de la fórmula resultó asesinado a manos de un agente nazi, por lo que Rogers se convirtió en un ser único y se lanzó a una lucha sin cuartel contra los espías enemigos.

Para proteger su identidad secreta, en la tradición de otros héroes enmascarados, Rogers adoptó el papel de un recluta patoso en el Campamento Militar Lehigh, donde acabó conociendo a Bucky Barnes, la mascota del regimiento. Por casualidad, Bucky descubrió su doble identidad y, desde aquel momento, lucharon juntos contra los enemigos del país. También encontró una aliada y un romance en la figura de Betty Ross, una agente especial del gobierno que le acompañaría en algunas de sus aventuras.

Aunque sus enemigos solían ser espías y saboteadores alemanes, Rogers no tardaría en cruzarse con su némesis, Cráneo Rojo, un villano enmascarado al servicio de los nazis que reaparecería con cierta frecuencia.

Aunque sus enemigos solían ser espías y saboteadores alemanes, Rogers no tardaría en cruzarse con su némesis, Cráneo Rojo, un villano enmascarado al servicio de los nazis que reaparecería con cierta frecuencia.

Durante los últimos meses de la guerra, sus aventuras dieron un giro y se fue alejando de los combates contra nazis y japoneses, centrándose más en diversos delincuentes, tanto comunes como con poderes. También comenzó a colaborar con otros héroes, como la Antorcha Humana, Namor, el Zumbador y Miss America dentro del grupo conocido como All-Winners Squad.  Al mismo tiempo, Rogers se licenció del ejército y encontró trabajo como maestro en la escuela Lee; Bucky se convirtió en uno de sus alumnos, pues los años de guerra no pasaron por el joven ayudante del Capitán América.49 Lo que sí afectó al joven ayudar fue la herida de bala que recibió durante uno de sus casos, y que le obligó a abandonar su carrera de aventurero enmascarado. Acostumbrado a trabajar con un compañero, el Capitán América reveló su identidad de Steve Rogers a Betty Ross y la entrenó como su nueva compañera, Golden Girl. Finalmente, Steve Rogers colgó el uniforme, se retiró y continuó con su vida como educador.