Mario Fissoni de Italia, Brooke
Stevens de USA, un representante de las fábricas automovilísticas,
otro de la
Asociación de Arquitectos y otro de los críticos de arte.El
jurado
tenía un
presidente de honor, el Señor Matarasso. El
premio
fue concedido por unanimidad al participante Carlos
E. Luciardi, entre 99 inscriptos,
de los cuales 98 eran
brasileños. Luciardi
se
presentó con un modelo al cual denominó CIDA,
en homenaje a una amiga llamada Maria Aparecida que fue quien lo
entusiasmó para concursar. El
proyecto
consistía en un vehículo utilitario que ofrecía 8 modelos,
a partir de una
configuración base.
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